Ingresado al colegio he saludado a algunos compañeros, pregunte como le fue y al entrar al salón me vi a Six concentrada en el celular esbozando una sonrisa.

Puse mi mochila en el asiento delantero de donde estaba sentada y ahí reaccionó cubriendo su celular para guardarlo en la mochila.

-Amiga, que debes tener cuidado no vaya a ser que un maestro venga de sorpresa y te arrebate el celular.

-Ya lo se, pero... -empezó por jugar con sus dedos mostrando nerviosismo. -anteayer que conocí a alguien y nos llevamos bien...

-Lamento interrumpir el espectáculo -Miriam interrumpió a Six. -no le tengas demasiada confianza al de la internet ¿No escuchaste esos casos de donde hay secuestro por fingir ser alguien menor?

-Pero ya soy mayor de edad.

-Igual eres lerda pero con verte gordita no creo que se fije ni el secuestrador cuando te vea en persona.

-Estoy haciendo dieta...

-Al contrario, no parece.

Six se enfureció un poco pero de igual forma no le dio importancia porque ya estaba muy metida en las nubes, pero eso no quería decir no le afectara para estar carcomiéndose la cabeza una y otra vez. De todas formas yo haría mi parte de estar atenta en cada momento en lo que ella me cuenta que va con él, de tal forma que si hay algo fuera de lugar tendría que meter medidas en caso de un engaño.

Six no es muy ingenua pero hay que cuidarla, esta chiquita.

-A pesar de que soy de las que arruino todo -continua Miriam. -Estoy aquí porque escuche que una alumna de otro colegio salió embarazada de su padre.

-No cuentes -dije de inmediato.

-Es el tema del momento Sharon, todos hablan de eso y estaría mal que fueras la única que no lo supieras.

-No me gusta saber del sufrimiento de otros, no es algo en el cual debo meterme.

-No tiene sentido que actúes como alguien que hace el bien si te paras drogando cada que tienes un ataque de tristeza.

No había forma de negarle a Miriam, de cualquier modo no existe coherencia alguna el meter un tema dentro de otro que hay relacion alguna.

-¿Vas a salir Sharon?

-Estoy dudando Six.

Miriam saltó de entre carpetas para posisionarse en el umbral de la puerta riéndose de nuestras caras.

-Muestran poca confianza cuando se trata de mi ¿Me creen capaz de hacer algo así?

-A lo largo del tiempo, por haber estado juntas desde inicial, por tu cambio de actitud en 5to de primaria o creo que fue por ahí a como estás ahora, a veces pienso que si.

-Pues sí ¿No? -se hizo la que recién se da cuenta.

Al ver la cara que puse apretó mi nariz alejando su mano tomándola con humor.

-De todas formas cambiare de tema por la señorita correcta -me miro. - escuche que Penny, en su carpeta recibe notas de odio por lo menos tres veces a la semana.

-¿Pero porque? ¿Nadie hizo algo al respecto? -dijo Six.

-Bueno, uno de los maestros les grito a todos del salón donde esta ella al enterarse, pero no hizo mas que empeorar la situación... paso de ser papel físico a ser mensajes de odio en internet, ya de ahí a los maestros no les importa. 

-¿No eres tú la que envía odio no? -señale a Miriam rodeando los ojos.

Miriam negó pero ya me lo esperaba, desde 5to o 6to de primaria ella odio desde que Penny ingreso a nuestra vidas, le metía sal en su pelaje, ponía un pie para que se cayera y jalaba la silla para que se cayera.

Es momentos como esto que aplicando los valores de la biblia, hay que amar a tus enemigos.