Parte 12
Al acabar la clase, mire a mi costado al chico tímido que repasaba una y otra vez la hoja que se le entregó.
Como no había nada que hacer por mientras me acerqué a él asustando tomándolo yo como una acción tierna.
-¿Estás preparándote bien? -le pregunté
-¿Él no va a poder, no es obvio? -voltee detrás mio para ver quién lo dijo.
No me sorprendí mucho al ver que era el mismo tipo de no me había pagado lo que me debía.
-Si tienes c*jones Ray para decírselo ¿entonces ya me vas a pagar lo que me debes?
-No te metas estúpida.
Me empujo causando que me cayera, sin aviso Miriam lo sujetó del cuello de la camisa con una mano amenazadoramente mientras que con la otra estaba por clavar sus uñas afiladas de gato.
-Tienes valor para andar de creído con otros pero cuando te tengo al filo de la muerte me ves con miedo.
-¡DETENTE NO LE HAGAS NADA!
Miriam miró al chico tímido que se paró para gritar, pero al estar devuelta consciente de lo que hizo se volvió a encorvar saliendo del salón a toda prisa.
Ella lo soltó dejándolo caer siendo aquel chico que también sale corriendo.
Fui detrás del chico tímido, metiéndome al baño de chicos impactando a mis fosas nasales el olor nauseabundo que había.
¿Cómo es posible que los chicos soporten tal olor?
-Hey -lo llame tocando la puerta del único cubículo de baño que estaba cerrado. -no le des importancia a ese imbécil, él no sabe lo que dice.
La puerta se abrió dejándome pasar cerrando la puerta una vez que entre.
-Ese chico me dio miedo en un principio, pero cuando lo conoces... sientes piedad por él -dijo cabizbajo mientras jugaba con sus dedos.
No entendí mucho, pero deduje que ambos ya se conocían, sin embargo él siente miedo... o tal vez él está pensativo.
Se escuchó la puerta del baño abrir callándonos al escuchar como las pisadas de la persona que desconocemos iba directo al cubículo en donde estábamos.
-Hey, se que estás ahí...
El chico tímido se apoyó en la puerta dando pase al otro para hablar.
-Me quiero disculpar, pero como siempre hay que pretender como si nada hubiera pasado, no quiero hacer esto porque temo por mi vida. sin embargo tú hiciste ese trato conmigo y sin importar nada tienes que estar de acuerdo para ocultar el hecho de que soy gay.
Juro que me quería caer de trasero para volver a levantarme y después caerme otra vez.
¿Estaba en mis opciones?
Para qué digo que no, que sí.
Pero más esperaba a la inversa.
El chico tímido abrió la puerta del baño asustando al otro al ver que yo estaba junto al otro.
-Creo que es un buen inicio para llevarnos bien -me crucé de brazos mientras que el otro tragaba saliva. -pero primero, quiero que devuelvas el dinero que me debes por haber pagado por ti.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro