Al llegar a mi departamento Belcebú se recostó en la barra de la cocina.

—Estoy cansado y hambriento —camino hasta donde estaba la bolsa con sus dulces y comenzó a comer.

—Eso no es comida —lo regañe— si sigues así te morirás.

—Silencio ángel —se metió otro dulce a la boca- soy inmortal.

—Bien, entonces te dará diabetes. —Me dirigí al réferi para buscar algo que calentar y Bingo, encontré los burritos de sushi.

—Somos inmunes de cualquier enfermedad —lo mire retadora— ya sé que me tienes envidia.

—Eres un tonto —lo señale— te voy a echar de mi departamento.

—No puedes —me reto— ya hicimos un trato ¿Recuerdas? —me mostro su mano, y en su palma tenía un signo de dos velas atadas con cadenas.

Mire la palma de mi mano y por todos los cielos, yo también tenía una igual. Debo admitir que me asusté mucho, estaba marcada como vaca.

—¿Q...qué es? —pregunte sin despegar la vista de mi mano.

—Es un símbolo por nuestra unión— comenzó a explicar—cada uno cuando hace un trato tiene un símbolo diferente, y a nosotros nos tocó las velas atadas.

—¿Tiene algún significado? ¿Estos símbolos se pueden repetir en otras personas? —me contuve de seguir preguntando. Pase una mano por las velas y se sentían calientes, como si estuvieran recién hechas; cosa que no era así, ya habían pasado alrededor de quince minutos.

—Ángel cálmate. —paso una mano por mi espalda— No pasa nada, y respondiendo tus preguntas si tienen un significado: Como ves nuestras velas tienen una llama intensa, así es nuestra conexión y las cadenas son símbolo de unión, una unión tan fuerte que es difícil cortarla o separarla. Por último los símbolos no se repiten, son únicos en cada pacto, depende mucho de las características que tengamos.

Shock total.

O sea que nunca podría sepárame de Belcebú. Iba a llorar. ¿Cómo voy a estar atada a un demonio? y a parte que nuestra conexión es muy fuerte.

—Esto es una locura —chille.

—Alégrate ángel, no te va a pasar nada mientras estemos unidos —me extendió uno de sus dulces— siéntete afortunada, no comparto mis dulces con cualquiera.

Tomé el pequeño dulce y me lo metí a la boca para poder relajarme, estaba hundida en mis pensamientos cuando de repente un <<pin>> sonó indicando que el burrito estaba listo.

Camine hasta el microondas para sacarlo y ponerlo sobre la barra de la cocina. Me dirigí a buscar dos platos ya que no podía permitir seguir viendo la toda la chatarra que estaba consumiendo Belcebú.

Había pasado tres días comiendo dulces.

—¿Oh es para mí? —sonrió— Que considerada eres ángel.

Agarro su burrito y se metió un gran pedazo a la boca, no pude evitar reírme ya que parecía una ardilla de lo inflados que estaban sus mejillas.

—¿Qué? —apenas pudo gesticular.

—Te ves gracioso —respondí.

Le di una pequeña mordida a mi burrito para poder deleitarme con sus majestuosos sabores.

Luego de terminar de comer (cabe aclarar que belcebú comió en dos segundos) nos levantamos para dormir.

—¿Qué haces ahí parado? —interrogue ya que Belce no quería entrar al armario.

—Te dije que no iba a entrar más ahí— se cruzó de brazos.

Al parecer mi demonio guardián se había traumado con la pequeña broma que le hice.

—No fue una pequeña broma —se quejó.

Cuando escuche eso agarre una almohada de mi cama y le pegue con ella mientras le gritaba.

—¡Ya deja de leer mi mente! —Belcebú no paro de reír mientras cubría su demoniaca cara con sus manos.

—Dormiré debajo de tu cama —sentenció.

—Solo si dejas de leer mi mete —negocie.

—Trato hecho, ángel. —No tardo en nada en tratar de meterse bajo mi cama.

—Esta tapada —dijo con su ceño fruncido.

—No esta tapada tonto —me agache para jalar la otra cama.

—Por todos los demonios —tapo su boca con asombro— cuanta tecnología.

Lo mire con cara de ¿wtf?

—Tienes teléfonos de último modelo, pero no una cama doble, que rarito.

Me dirigí al baño para lavar mis dientes cuando escuche gritos aterradores, como pude lave mi boca y salí con el corazón en la boca de los nervios.

En cuanto salí Belcebú se trepo como un mono e hizo que los dos cayéramos al suelo.

—¿¡PERO QUÉ PASA!? —cuestione asustada.

—¡UN RATÓN! —señalo a un lado de mi cama.

Me quite de encima a Belcebú como pude, agarre el pequeño ratón de peluche.

—Es un ratón de peluche, es de la gatita de Maya —me acerque a Belce para levantarlo—Tranquilo.

—Uff, casi me da un infarto —se puse la mano en el pecho.

—Espera —me cruce de brazos— ¿Eres un demonio y le temes a un ratón?

—No porque sea un demonio significa que no le puedo temer a esas cosas feas —me miro y me di cuenta que sus ojos habían cambiado de rosado a azul.

De verdad estaba asustado.

Camine hasta la cocina para agarrar unas galletas, tal vez con eso se tranquilizaba.

Le extendí la galleta y no dudo en agarrarla.

—Gracias ángel —cuando probo el dulce sus ojos pasaron de azules a rosado drásticamente junto a sus pupilas dilatándose- Esto es como estar en la playa.

—¿Qué? —emití con incredulidad.

—O sea que esta delicioso —explico.

—Yo hubiera dicho que es como estar en el cielo —reí.

—Ni lo digas, ya he estado ahí y me echaron a patadas.

—¿Por qué hicieron eso?— pregunte sin parar de reír.

—Porque soy un demonio —limpio su boca con su antebrazo— parece que no eres muy lista ángel.

—Ey, más respeto, gracias a mi estas aquí.

—Sí, sí, ahora soy tu demonio guardián o demonio personal —sonrió— o como quieras llamarme.

—Demonio de la buena suerte. —sonreí.

—Soy lo que tú quieres que sea. —sentencio.

Me acosté en mi cama y Belcebú en la de abajo, estaba a punto de quedarme dormida cuando belcebú hablo.

—¿Puedes pasarme un peluche? —cuestiono en un susurro.

—¿Hablas en serio? —no podía creer esto, primero miedo a un ratón y ahora un peluche para dormir ¿Qué sigue?

Belcebú asintió y no me quedo de otra que darle mi unicornio rosado.

—Gracias ángel, sueña con los angelitos.

—¿Con que sueñan los demonios?

—Con dulces —pude escuchar como reía.

—Tiene que ser una broma —me queje.

—Bueno, tal vez los demás demonios no, pero yo sí.

—Sueña con dulces Belcebú.

Hoy sin duda fue un día de locos.

¡HI, aquí Ale!

Gracias por el apoyo que le están dando a esta historia.

Quiero agradecer en especial a Silladeruedas21 por el apoyo que me ha dado. Vayan a seguirla a su cuenta de tik tok: bksalexandrafans.

Los quiere
Ale🕯