Capítulo 19
Por la mañana, Danilo se había quedado dormido, producto del trasnoche del día anterior, así que desayuna en su habitación rápidamente, ya que deseaba ver a Eleonora.
Al salir de su alcoba, Danilo busca por las habitaciones que siempre frecuentaba su prima, pero no estaba ahí, así que le pregunta a uno de sus hermanos pequeños y luego a una de las sirvientas, quien le indica que se encontraba en la sala de costuras.
Cuando Danilo llega, abre la puerta cuidadosamente, para ver de manera discreta lo que ella estaba haciendo. Eleonora se encontraba en compañía de su hermana, confeccionando pequeños vestidos para muñecas, sacando los patrones de la libreta de dibujos de Luciana.
Eleonora se veía tan hermosa con la luz de la mañana, que hacía brillar su cabello largo y ondulado de tintes rojo oscuro, con su piel blanca y labios carmesí. Ella, poseía una belleza perfecta que, hacía erizar la piel de Danilo, por la emoción de estar tan cerca de ella.
—¿Interrumpo? —se anuncia Danilo al ingresar en la habitación.
—Buenos días, ¿Cómo te fue ayer? —pregunta su hermana.
—Buenos días. Por favor, cuéntanos, ya que estábamos preguntándonos sobre ti —responde Eleonora con una sonrisa, apartando unas telas de una de las sillas para que su primo pueda sentarse en una de ellas.
—Fue una fiesta animada. Asistieron varios de nuestros compañeros.
—¿Te atrajo alguien? ¿Iras a casa de alguna señorita para presentar tus respetos a la familia? —pregunta Luciana.
—No.
Eleonora lanza un suspiro decepcionada.
—Pensábamos que, al llegar, nos contarías sobre tus intenciones con alguna dama, y que has venido a preguntarnos sobre qué obsequió poder llevarle.
—Creo que deberán esperar ambas, ya que mi atención no fue captada por ninguna señorita durante esa fiesta.
—Es una lástima, pero de cierta manera me alegra, porque aún serás nuestro por un tiempo más. —responde Eleonora.
Luciana mira a su hermano, que se había quedado observando a su prima con una ligera sonrisa en los labios.
—Danilo, ¿me puedes ayudar a traer una caja que tengo en mi alcoba?
—Claro, te acompaño.
Ambos hermanos se levantan, disculpándose con Eleonora, ya que no se tardarán demasiado.
Ambos caminan por el pasillo, hasta llegar a la habitación de Luciana, quien cierra la puerta y busca una caja en su armario.
—Así que ¿Ninguna dama llamó tu atención?
—Ya lo dije, ninguna.
—Pero si tienes interés en cortejar a una dama especial ¿Verdad?
—¿para qué insistes con eso? Ya dije que no tengo intenciones de cortejar a nadie.
—¿Ni siquiera a Ely?
El rostro de Danilo palidece, sintiendo que sus fuerzas fueron succionadas a través de los pies. Luciana mira por encima de su hombro, sacando la caja que estaba en su armario y regresando donde su hermano para entregársela, mordiendo sus labios para no reír.
—Así que si te gusta Ely —insiste Luciana.
—¿Quién te dijo eso? —pregunta aturdido Danilo, quizás sus padres hablaron algo durante el desayuno y lo habían dejado en evidencia ante sus hermanos.
—Nadie tiene porque decirme nada, es tan obvio que ya todos lo saben. Incluso he tenido que golpear a Carlota en la boca para que no diga nada.
—No... pero ¿cómo? Yo no he dicho, ni hecho nada —responde contrariado Danilo, dando un suspiro y sentándose sobre el borde de la cama con dosel de su hermana.
—Siempre te quedas con cara de bobo y estás suspirando cuando la vez. No es necesario ser un genio para notarlo.
—Ely ¿lo sabe?
—No
—Pero, ¿ella ha mencionado algo sobre mí?
—Nada. —Luciana se acerca a su hermano y se sienta al lado de él. —Quiero que te cases con Ely, así jamás regresará a Colombia y podremos estar siempre juntas.
—Me siento como un tonto, pensaba que ocultaba muy bien mis intenciones.
—Tienes el apoyo de todos y te ayudaré en lo que pueda, sin intervenir demasiado —Luciana toma nuevamente la caja que había dejado a un lado de la cama. —llevárselo a Ely, y dile que yo regresaré en un momento, así podrán estar a solas unos minutos.
Danilo toma la caja y sale de la habitación, con una serie de preguntas en su mente, ya que no sabía cómo coquetear correctamente, puesto que, si Eleonora no le correspondía, eso crearía una herida entre ellos, que difícilmente podría sanar.
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