Jimin y Jungkook llegaron a la cabaña entre besos y abrazos.

El rubio terminó el beso para separarse del alfa, tiró la manta que había llevado para cubrirse del frío, para después quitar poco a poco su camisón, el cuál dejó caer al suelo, quedando así completamente desnudo frente al alfa, no era la primera vez que el pelinegro lo veía desnudo pero está era una ocasión importante.

Jungkook no podía ni parpadear... El omega le sonrió coqueto.

- ¿Te vas a quedar ahí sin hacer nada?

- Quiero admirarte otro poco...

Después de unos segundos el alfa entonces se abalanzó sobre él tomándolo por la mejillas para comenzar a besarlo con desesperación, metió su lengua en lo más profundo de la boca del pequeño omega rubio. Cuándo Jimin reaccionó con sus pequeñas manos comenzó a desvestirlo.

Cuándo al fin estuvieron completamente desnudos el pelinegro dejó de besarlo y poco a poco lo recostó en la cama, le dedicó un sonrisa y se acercó a besar su cuello, tomando por sorpresa al rubio pues él no esperaba que lo acostara en la cama, si no que lo volteara e ingresará en su interior ya.

Jungkook notó cómo su omega suspiraba de placer, las manos del alfa fueron descendiendo hasta alcanzar las piernitas de Jimin, acarició sus muslos con cariño hasta llegar a sus nalgas y amasarlas, mientras besaba su torso y llegaba a su vientre.

Jimin sólo podía suspirar y jadear pues todas las sensaciones que estaba experimentando eran nuevas para él, de un momento a otro sintió como Jungkook tomaba su miembro con sus manos y comenzaba a acariciarlo de arriba a abajo haciéndolo sentir miles de sensaciones nuevas, el alfa le dió un pequeño beso en el glande y después poco a poco se lo metió en la boca.

- ¡Jungkook! ¡Argh!

El omega estaba sonrojado hasta las orejas, no pensó que el alfa hiciera algo como eso, pero le gustó, vaya que si le gustó. Jimin comenzó a lubricar, algo que nunca le había pasado, así que se sintió completamente extraño, Jungkook detuvo la mamada para ensalivar dos de sus dedos, cuando estos estuvieron bien mojados los llevó a la entrada de su omega mientras que su boca continúo dándole placer en el miembro.

El rubio estaba completamente perdido en las sensaciones que le provacaba el alfa, su boca le hacía sentir un millón de cosas y cuando sintió uno de los dedos del pelinegro tratando de entrar en él se sintió algo extraño.

- Tranquilo precioso... Confía en mí

Jimin lo miró y asintió con la cabeza, entonces el alfa le dejó un pequeño beso en el glande y le abrió más las piernas para enterrar su cabeza ahí, comenzando a prepararlo con su lengua y enseguida ingresar un dedo mientras escuchaba los hermosos gemidos del rubio.

Cuándo Jungkook sintió a Jimin comenzar a mover sus caderas supo que era momento de avanzar así que se incorporó y fue directamente a sus labios para besarlo con pasión mientras ingresaba dos dedos más en su entrada.

El alfa notó entonces que Jimin estaba bien preparado para recibirlo, así que se separó de él y rápidamente tomó su miembro completamente erecto para guiarlo a la entrada de su omega, pero antes de ingresar en él, le dedicó una sonrisa y una mirada llena de amor, el rubio también le sonrió con cariño.

Jungkook guió entonces su miembro a la bien preparada entrada de su omega y comenzó a ingresar en él disfrutando de cada gesto en la cara de su rubio, se acercó a besarlo de forma muy apasionada después de ingresar por completo, se mantuvo quieto dejando besos por todo el rostro del rubio, al igual que en su cuello mientras esperaba a que Jimin se acostumbraba a la intromisión.

Después de unos minutos el omega comenzó a mover sus caderas en busca de más. Jungkook dió inicio entonces a las embestidas lentas y profundas quería llegar hasta el fondo pero sin lastimarlo, quería que Jimin disfrutara de cada momento.

- ¡Dios! ¡Kook! ¡Más!

- Te quiero bonito...

- ¡Quiero más! ¡Más rápido!

Después de varios minutos, salió de su omega para poder voltearlo y dejarlo con el pecho pegado a la cama, volvió a abrirle las piernas e ingresó de una sola estocada.

- ¡Mghm! ¡Kook!

El pelinegro comenzó a mover su pelvis de manera más rápida dedicándose a dar besos húmedos en la nuca y la espalda de Jimin.

- ¡Me gustas mucho bonito!

Le decía al oído mientras aumentaba el ritmo de sus embestidas, tomó sus manos y las entrelazó con las suyas. El miembro del omega al estar en contacto con las sábanas y hacer fricción con estás no tardó tanto tiempo en llegar a su orgasmo.

- ¡Mghm! ¡Ah!

El alfa se movió más rápido para poder llegar también a su ansiado orgasmo corriéndose dentro del onega. Colocó su frente en la nuca del rubio para poder controlar su respiración. Jimin entonces comenzó a sonreír, volteó su cabeza para poder ver al alfa que tenía los ojos cerrados mientras sonreía como un tonto. Jungkook abrió los ojos encontrándose la mirada divertida de Jimin, ambos completamente sudados y sonrojados pero muy satisfechos. Entonces se besaron.

Jungkook salió del omega, se acomodó a su lado en la cama y lo atrajó hacía él para poder abrazarlo, Jimin recostó su cabeza en el pecho del alfa mientras suspiraba y pensaba en lo que acababa de pasar, fue algo completamente diferente pero se sintió muy bien, como si fuera algo mágico, nunca se había sentido así después de hacerlo.

El omega sonrió y poco a poco se fue quedando dormido.

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Las cosas a partir de ese día fueron cambiando entre la pareja, Jimin dejó de lado aquella actitud infantil que siempre estaba a la defensiva, trató de ser más solidario y apoyar con los quehaceres de la granja, Jungkook lo había tratado como nadie y eso lo hizo sentir a él y a su lobo por primera vez fomo en casa.

Jungkook estaba feliz con aquella nueva etapa en su vida de casados, todo parecía ir mejorando, su omega era más abierto con él, le preguntaba sobre cualquier duda que existiera en esa pequeña cabecita sobre la granja o sobre cualquier cosa.

Todas las noches dormían juntos y algunas veces intimaban a mitad de estás sintiendo una gran conexión entre ambos.

Jungkook recibió una carta de Hoseok días después dónde le decía que pronto estarían de regreso, estaban realmente ilusionados por volver al campo y Taehyung esperaba con ansías ver a Kitten, lo extrañaba muchísimo quería abrazarlo y ponerse al corriente de sus nuevas vidas.

Jimin intentaba disfrutar de su nueva vida, la idea de quedarse con Jungkook apareció en su mente y se encontró a si mismo deseando eso, soñando con un futuro al lado del alfa pelinegro, siendo felices. Él se lo merecía después de tantas desgracias. Él quería tener esa vida tranquila con la que siempre había soñado y que mejor a lado del alfa que cada día le demostraba de muchas maneras que lo quería.

Ese tarde Jimin estaba dentro de casa preparando la comida, se había vuelto un experto gracias a los consejos y a la ayuda de Jungkook, ahora sabía cocinar diferentes platillos y se sentía muy orgulloso por eso.

Jungkook estaba fuera mientras arreglaba una de las ruedas de la carreta cuándo de pronto un fuerte aroma a pino llegó a sus fosas nasales, rápidamente levantó la vista y ahí frente a él vió a su mejor amigo.

- Mingyu...

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¿Quién será ese alfa? 🤭💕