Dos días pasaron después de que el doctor recordara la apariencia de aquella persona, aunque por mas que se esforzara no lograba recordar su nombre o el sonido de su voz

—¡Rayos! ¿Quién será ella... o el?—se pregunto así mismo el doctor mientras mantenía agachada su mirada

Pasando unos minutos el doctor volvió a levantar la mirada y vio el paisaje desolado por el cual Rhodas Island estaba viajando

—Me pregunto si esa persona sabrá mas de mi antiguo yo—susurro el doctor

En ese momento alguien abraza al doctor y este se sorprende al recibirlo

—¿Que hace tan solo aqui doctor?—le pregunto la persona que lo abrazo

El doctor enseguida reconoce la voz y sabia que quien lo estaba abrazando era Gravel, pero para asegurarse volteo ligeramente su cabeza a la derecha para ver de reojo si lo que pensó era verdad

Al voltear el doctor ve a Gravel y confirma lo que había pensado

—Ah eres tu Gravel— le dijo el doctor

—Si, soy yo... ¿O acaso esperabas a alguien mas?—le pregunto Gravel de forma coqueta

—No la verdad no, solo estaba aquí para despejar mi mente un rato—le respondió el doctor

—Oh entiendo, bueno entonces no lo molesto mas—le dice Gravel para después darle un beso en la mejilla del doctor

El doctor se sorprendió al recibir el beso, para después ver como Gravel se retiraba corriendo del lugar

—¿Qué fue todo eso?— se pregunto el doctor

En ese momento alguien cae desde los cielos y aterriza frente al doctor, el cual se queda paralizado del susto, pero se queda mas extrañado cuando ve que Ceobe era la que había caído del cielo

—¿Ceobe?—dijo el doctor

Tras unos cuantos segundos Ceobe saca un pañuelo blanco de uno de los bolsillo de su casaca  y le limpia la mejilla donde Gravel le había dado un beso, para luego decir

—¡Listo!—

—¿Listo?—dijo confundido el doctor

—¡Si!— dijo Ceobe emocionada

El doctor no entendía lo que pasaba así que solo decidió darle una galleta 

—Ten una galleta Ceobe—dijo el doctor mientras le extendía su mano derecha

Ceobe se emociono tanto que los ojos le brillaron y acepto gustosa la galleta que le estaba regalando el doctor

—¡Que deliciosa!—exclamo Ceobe de felicidad

El doctor sonrió al ver a Ceobe tan feliz

—Si que somos polos opuestos—dijo en voz baja el doctor

Después unos segundos Ceobe termino de comer su galleta y con una gran sonrisa le agradeció al doctor por tal delicia que le había dado

—En otra ocasión te daré mas galletas—le dijo el doctor

Ceobe iba a sonreír, pero al ver detalladamente el rostro del doctor decide acercarse un poco mas a el, al punto de casi estar nariz con nariz

El doctor se quedo inmóvil y no sabia como reaccionar frente a tal situación, por un momento miro los labios de Ceobe, pero luego se tranquilizo y le pregunto

—¿Qué sucede Ceobe?—

—Te ves triste mi doctor, ¿Te ha pasado algo malo?¿Kal'tsit te volvió a regañar por dormir en horarios de trabajo?—le pregunto Ceobe

—Ah, no es nada, solo son cosas que hace poco he recordado y las he estado analizando estos días—dijo el doctor intentando sonreír

—Oh, ¿te refieres a tu pasado?¿a tu antiguo yo?—le replico Ceobe

—Si... así es, poco a poco estoy recordando varias cosas, aunque me da algo de miedo recordarlas—

—Tu tranquilo doctor, pase lo que pase yo seguiré enamorada de ti—dijo Ceobe con una sonrisa en el rostro

El doctor se quedo sin palabras ante tal declaración de Ceobe