UN AMOR INESPERADO
Eros Smith.
A las siete de la mañana, Juana me levanta y me saca de mi casa, literalmente me empuja y me cierra la puerta principal en mi cara, ya que no puedo ver a la novia y ella ya viene en camino.
Cómo ya se había planificado me voy a la casa de Victor, ahí yo me arreglaré para el gran día.
Cuando llegó Victor en la madrugada y me dijo que Jade no iba a cancelar la boda, pude respirar nuevamente, la verdad es que no veo mi vida sin esa mujer a mi lado.
Estoy en la iglesia esperando a mi prometida, la boda era a las cuatro de la tarde y ya son las cuatro y quince.
Camino de un lado a otro, paresco un león enjaulado, mis manos sudan y mis piernas tiemblan.
<< Y si se arrepintió y si no me perdonó por lo de anoche >> me preguntó mentalmente.
- Tranquilo hermano, vas a abrir un hoyo en el piso - me dice Leandro.
- Ella vendrá, tranquilo. Tu no conoces a las mujeres.
Siempre duran horas arreglándose - está vez habla Victor.
Veo que las personas que estaban afuera entran y se sientan, los murmullos se escuchan, luego veo entrar a Rosa a paso rápido, viene directo en mi dirección con una enorme sonrisa en sus labios.
- Ya está aquí, a sus puestos vamos - y me empuja para luego hacerle señas a mis padrinos para que salgan y ocupen sus lugares.
Leandro me da un apretón en el hombro derecho y luego dice - adiós a tu soltería.
Luego pasa Victor y me dice - Estás jodido, ya te esclavizaron.
Yo solo sonrió feliz, no me importa ser un esclavo si mi dueña es Jade...
Se escucha la música de fondo y veo entrar a unas pequeñas niñas lanzando pétalos de rosas blancas, veo que entra Leandro y Jeysi, ella me ven y sonríe, luego veo a Susana y Victor, Susana sonríe mientras se limpia de su mejilla una lágrima, ambas parejas se paran en sus lugares.
La música se escucha un poco más fuerte y veo a una diosa entrar a la iglesia, es la mujer más bella que he visto en mi vida.
En este momento me doy cuenta de lo afortunado que soy.
<< Madre, no sabes cuánto daría para que tú estuvieras aquí, en este momento tan especial, me haces mucha falta.
Pero te doy gracias porque aunque tú te fuiste, no me dejaste solo, tú me dejaste a dos personas extraordinarias, que me hicieron ver el mundo de color nuevamente >>
No puedo evitar dejar salir dos lágrimas, pero no de tristeza si no de felicidad al ver a mi futura esposa llegar hasta mí con una sonrisa en sus labios.
Jade.
- Jade hace cinco minutos teníamos que haber salido para la iglesia - dice mi madre mientras me entrega el labial rojo pasión y yo me retoco el labial.
Mis padres llegaron hoy en la mañana, no pudieron llegar antes ya que en el trabajo de mi papá le dieron permiso desde ayer, ellos llegaron hoy a primera hora y no se han separado de mi, ni un minuto, mi padre en cuanto llego, me pregunto si estoy segura y si es un buen hombre.
Yo le dije que sí estoy segura y que es el amor de mi vida.
- Jade que esperamos - pregunta Jeysi parándose a mi lado frente al espejo.
- Nada, solo quiero darle un pequeño susto de castigo por lo de anoche - y ella suelta una carcajada.
Mis padres que están al otro lado de la habitación nos miran y nosotras solo reímos.
Susana entra a la habitación con el ramo de rosas blancas y se queda mirándome.
- De verdad que ese vestido fue hecho para ti amiga, te ves hermosa - se acerca y me entrega el ramo de rosas.
Pasamos una semana buscando el vestido ideal, fuimos a más de siete tiendas pero ninguna tenía lo que yo quería.
Es muy difícil conseguir un vestido sencillo, elegante y sexy.
Yo no quería mucho encaje ni un vestido con mucha tela.
Cuando ví este vestido me enamoré, es blanco y sencillo, muy delicado y elegante. Tiene un toque en la parte del busto adornado con un encaje bellísimo, no sé cómo describirlo, solo una foto puede mostrar lo bello que es.
- Hija, ya nos vamos.
- Falta las fotos - Susana sabía que yo quería llegar un poco tarde y por eso me ayudó a inventar excusas.
Me tomo fotos por toda la casa, pero la que más me gustó fue una que me sacó en el jardín de la casa.
Cómo ya no tengo más excusas nos montamos en la limusina rumbo a la iglesia, llegamos doce minutos tarde, a la final no lo castigue mucho.
Cuando bajo de la limusina mis nervios nacen de repente y me quedo parada frente a las grandes puertas de la iglesia.
- ¿Qué pasa hija, estás bien?
- mami y si decide no casarse y se va cuando entre - le digo a mi madre y siento mis manos empezar a temblar.
Susana se acerca y me abraza.
- Amiga ese hombre se muere por ti, nada de eso pasará.
- Y si trata de escapar yo lo detendré - dice mi padre acercándose a nosotras.
- ¿Y si me tropiezo y caigo mientras entro? - pienso en voz alta.
- Jade eso no pasará, créeme, es solo nervios lo que tienes ahora - me dice Jeysi con una cálida sonrisa - cuando entres por esa puerta y veas a tu futuro esposo te olvidarás de todo y solo serán ustedes dos.
Mi madre entra juntos con Juana y Ángel.
Minutos después entramos cómo lo ensayamos anteriormente, primero unas sobrinas de Sofía, dos niñas hermosas con unas cestas en sus manos las cuales tienen pétalos de rosas.
Luego entran los padrinos Leandro y Jeysi seguidos de Victor y Susana.
Y por último, entramos mi padre y yo.
Al entrar me quedó impresionada al ver cómo se ve la iglesia, la decoraron tal cual pedí, con muchas flores blancas, todo delicado y elegante, caminamos lentamente por el pasillo y desde la distancia veo al hombre que me robó el corazón, conectamos nuestras miradas, sonrió y trato de no llorar para no dañar el maquillaje, él está parado al final del pasillo con vestido con un smoking negro que le queda perfecto, es el hombre más sexy que e conocido.
Aún no creo que nos vamos a casar.
Llegó al frente de él y mi padre me entregó diciendo las siguientes palabras.
- Te entrego lo más valioso que tengo, recuerda que es una mujer valiente, luchadora, trabajadora, inteligente. Tratarla bien, cuida cada día de su amor y no la hagas sufrir, porque si me entero que la lastimas te la verás conmigo.
- No se preocupe prometo que cada día de mi vida la dedicaré a hacerla feliz - y al escuchar esas palabras la primera lágrima corre por mi mejilla.
El toma mi mano y se acerca ablando a mi oído.
- Te ves hermosa.
- Tú también te ves muy bien.
El sacerdote empieza a hablar y si soy sincera yo no he escuchado nada, desde que Eros tomó mi mano cuando mi padre me entregó me perdí en su mirada.
Veo que Ángel se acerca a nosotros sosteniendo entre sus manos una almohadilla con los anillos.
Eros toma el mío y levanta mi mano coloca el anillo frente a mi dedo y empieza a hablar.
- Jade, yo pensé que no necesitaba a una mujer a mi lado, pensé que era feliz con la vida que llevaba, pero me equivoqué, tú llegaste a mi vida como un torbellino llenando todo de color, amo todo de tí, tu alegría, tu terquedad, tu impulsividad, tu inteligencia.
Te volviste mi droga - él sonríe - ya no puedo vivir sin ti a mi lado.
Prometo amarte, respetarte, cuidarte, hasta que la muerte nos separe y aún después de ella te seguiré amando - coloca el anillo en mi dedo, con mi mano libre limpio mis mejillas, la verdad intento no llorar pero las lágrimas se salen de mis ojos sin mi permiso.
Tomo de la almohadilla el anillo de Eros, me aclaro la garganta, sujeto su mano y empiezo a hablar.
- Eros, la verdad que se me olvidó mis votos por tanta emoción - todos ríen - pero voy a improvisar - suspiro para tratar de tranquilizarme.
- Eros, lo nuestro comenzó con una pequeña guerra entre nosotros, pero creo que fue lo que más nos unió, aún luchando para no sentir nada entre nosotros y nuestros corazones decidieron todo lo contrario y se enamoraron - sonrió - Creo que este amor inesperado que creció día a día, es muy grande y único, no me veo viviendo sin despertar a tu lado, sin escuchar tu risa cada día.
Prometo amarte, cuidarte, respetarte y aguantarte - todos ríen - desde hoy hasta el día de mi muerte y después de ella también - coloco el anillo en el dedo de Eros y al levantar mi mirada a su rostro lo veo... llorando,
- No lo puedo creer, el odioso, prepotente y engreído Eros Smith está llorando - hablo muy bajo solo para que él me escuche.
Él sonríe, me toma por la cintura y me jala hacia él, para luego unir nuestros labios, en un beso tan dulce, cargado de todos los sentimientos que sentimos.
Escucho al padre toser y luego decir.
- Ya puede besar a la novia.
Yo sonrió en medio del beso, mientras escucho como todos aplauden, nos separamos y siento a Susana abrazarme.
- Valla, no podías esperar solo un poco para besarla, no dejaste al padre terminar de hablar Eros - le dice Leandro mientras le da un abrazo a Eros.
Mi hijo corre entre las personas y llega hasta mí para luego abrazarme, Eros lo levanta y nos abrazamos los tres, uno a uno nos felicitan, salimos de la iglesia y los tres nos montamos en la limusina rumbo a la nuestra casa donde se realizará la recepción.
Al llegar a la casa nos recibe el fotógrafo quien nos empieza a sacar fotos, de nosotros solos, con Ángel, con mi familia, con los padrinos y luego con los amigos.
Luego de un rato ya exautos de posar para tantas fotos, camino a una mesa y me siento.
- Señora Smith quiere una copa de shampan - dice mi esposo mientras me entrega una copa con un líquido.
- Gracias esposo mío - Eros se sienta a mi lado y me roba un beso.
- Haa! Tanto dulce, me dará diabetes - dice Susana mientras se sienta a mi lado.
- Ya te veré a tí Susa, deja que te llegue el día - Dice Eros.
Platicamos entre risas, al cabo de unos minutos se une: Victor, Jeysi y Leandro.
Empezamos a hablar de la boda.
- Me encanto todo, la decoración estaba bellísima - dice Susana.
- Si, la organizadora se boto - dice Leandro.
- ¿Pero saben lo que más me gustó? - pregunta Jeysi muy seria.
- ¿Qué? - decimos Susa y yo al unisono.
- Ver a el hombre más fuerte de todos llorar - Eros se atraganta con su bebida, Victor lo mira con asombro, Susana y yo reímos a carcajadas y Leandro le pone una mano en el hombro y le dice.
- Te perdimos - Todos reímos.
- Mira quién habla el que casi se muere cuando a Jeysi la secuestraron, el que lloro como un bebé - Leandro lo mira con asombro.
- Si mi amigo, te vi llorar en aquel entonces, no soy el único llorón.
- Pero fue por algo distinto - argumenta Leandro.
- Mi amor, los dos son llorones - dice Jeysi para después todos explotar en carcajadas.
- Ya es la hora del baile - dice Leonel por un micrófono que está sobre la tarima en la cual hay música en vivo.
Eros extiende su mano, yo la tomo y caminamos al medio de la pista de baile.
- Está canción representa todo lo que tú me haces sentir, además de estar presente el día que te pedí matrimonio - y empieza a sonar la música en vivo, es la melodía de solamente tú.
Escucho la voz de Pablo alboran y volteo a la tarima, donde lo veo cantando.
- ¿Trajiste a Pablo Alborán para que cante en mi boda?
- Pues no lo ves - me aprieta más a él y habla en mi oído.
- Se lo mucho que te gusta esa canción, y se que es muy especial para nosotros.
Empieza a cantar muy suave a mi oído
- haces que mi cielo vuelva a tener ese azul.
Pintas de colores mi mañana solo tú.
Navegó entre las olas de tú voz
Y tú y tú y tú y sola mente tú.
Hace que mi alma se despierte con tu luz.
Y tú y tú y tú - me toma de la cintura eliminando cualquier espacio que quedará entre nosotros.
- Gracias Jade, Garcías por llegar a mi vida - lágrimas corren por mis mejillas.
- Gracias por darme una oportunidad después de lo mal que me porte contigo, yo a veces pienso, que no te merezco yo... - Coloco mi dedo índice en su boca para que no hable más, veo sus ojos cristalizados.
- No tienes que agradecer nada, lo único que te puedo pedir es que me ames cada día más - me besa.
Estamos tan metidos en nuestra borbuja de amor que no nos damos cuenta que la música ya terminó y nosotros seguimos bailando.
- Disculpa pero me puedo robar a la novia - Dice mi padre.
Eros sonríe y me deja ir con mi padre mientras el baila con mi madre.
Luego de bailar por un rato, estoy muy agotada y decido alejarme y tomar un poco de aire, camino por el jardín y me alejo de todos camino por el lateral cuando cruzó la esquina veo algo que detiene mi andar.
- ¡LO SABIA! - grito con emoción haciendo que Susa y Víctor brinquen del susto.
Los dos se estaban comiendo la boca muy apasionadamente.
- Jade, yo... el... y - tartamudea Susana.
<< Susana sin palabras que decir, jamás creí ver esto >>
- Susa, ya, no me tienes que decir nada, todos nos hemos dado cuenta de sus sentimientos - ellos se miran y luego me miran a mí.
- Mejor los dejó - doy media vuelta y camino un par de pasos pero luego me volteo - Victor.
- Si.
- Ella es mi hermana, si me entero que la lastimas yo misma te castrare - el se pone pálido, yo doy media vuelta y me voy.
Ya a las once de la noche estoy sentada en nuestra mesa hablando con Jeysi, Eros llega a mi lado y dice.
- Llegó la hora de robarme a la novia.
- Me parece bien, disfruten esa luna de miel - contesta Jeysi.
- Y Ángel le dijiste a Susana y a mi mad...
- Si hija, ya todo está listo, ve y disfruta - dice mi madre llegando a mi lado.
Me despido de mis amigos y de mis padre y nos vamos a nuestra luna de miel.
Quien se podía imaginar que mi vida podía cambiar tanto, que luego de cerrar mi corazón y decidir dedicarme a mi hijo, iba a aparecer una señora ganándose nuestro cariño y dejándome en una casa conviviendo con un amargado y dicho amargado me robaría el corazón.
Nunca pensé que algo así me podría pasar, son cosas que suceden solo en libros.
Pero a mí me sucedió, cuando menos lo espere, llegó a mi vida el guapísimo Eros Smith trallendo consigo "UN AMOR INESPERADO"
***FIN***
***************
Hola, ya es el final de la historia 🥹
Capitulo dedico a tod@s Ustedes que me han apoyado en este libro
Y en especial a:
panchita8901
SilviaMelo086
YalitzisGomez
EmiraSez
Gracias por su ayuda.
Ya llegamos al Final de este libro, la verdad me cuesta dejar ir a estos personajes.
Pero tranquil@s pronto publicaré unos extras 😊
Trate de dar lo mejor de mi en esta historia, como lo he dicho muchas veces, esto es solo un borrador y no soy escritora profesional.
Es solo que tengo muchas historias revoloteando en mi cabeza y las escribo para compartirlas con ustedes.
Me gusta leer sus comentarios.
Se les quiere ❤️
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro