Capítulo final
10 horas antes.
Jesús sale sin decirle nada a nadie, se va directo al mismo punto de encuentro en donde lo está esperando Alejandra.
Al llegar, se acerca a la recepción donde le dicen en que habitación esta ella, agarra las escaleras y se dirige hasta el lugar.
— ¡Ábreme Alejandra! — dice Jesús golpeando la puerta.
— ¡Pasa!
— ¡Eres una imbécil! — Le dice dándole una cachetada — ¿Cómo pudiste ponerme en una situación tan embarazosa?
— ¡Tu no me vuelves a poner una mano encima! — Exclama mientras le devuelve la cachetada - esto lo provocaste tú, eres un jodido mentiroso.
12 horas antes.
Carolina se levanta, feliz porque mañana es por fin su graduación y ese sueño que veía tan lejano ya está a la vuelta de la esquina.
Ella se para de la cama y baja cuando oye una fuerte discusión entre su primo Jesús, Alejandra y Miguel tratando de separarlos.
— ¡Ya! Dejen la bendita pelea. ¡Me tienen harto los dos!
— ¡Díselo a ella, Miguel! ¡Eres mi desgracia Alejandra!
— ¿Por qué es tu desgracia Jesús? — pregunta interrumpiendo por completo Carolina.
— ¡Respóndele! ¿Por qué soy tu desgracia? — exclama Alejandra.
«Esto no te lo voy a perdonar perra» piensa Jesús.
De vuelta a las 10 horas antes.
— ¡Me hiciste poner nervioso! ¡Desaparece de una vez!
— Tú solo te vas hundiendo, tú dijiste sin saber que Carolina estaba allí que yo era tu desgracia y ¿sabes qué? Si, si lo soy y te voy a hundir. Vete de aquí. Si viniste por esto ya es tarde y no voy a asistir a esa horrible graduación.
Jesús se va molesto del lugar, pero tiene una preocupación y no confía en nada en Alejandra. Algo estaba a punto de pasar...
Presente.
— ¿Tú? ¡Dime que no es cierto!
Alejandra corre dejando el lugar en segundos. Todo el lugar se paraliza, una alumna iba asesinar a otra.
— Ya vengo, tengo algo que hacer — le dice Jesús a Miguel.
— No, yo voy contigo.
Mientras tanto Carolina y Edward van a donde los directivos a pedirles un tiempo de receso (aunque no ha empezado la ceremonia) para poder ir por Alejandra. Aceptaron y fueron.
— ¡Perra! ¡Eres una fucking perra! — dice estallando de la furia Jesús.
— ¡Cállate! — Dice dándole un fuerte golpe en la parte baja a Jesús — estoy harta de esta mierda.
— ¡Reacciona Alejandra! ¿En qué estabas pensando? — le pregunta Miguel a Alejandra.
— ¿Quieres saber en qué estaba pensando, Miguel? ¡En matar a Carolina!
— ¡Dios mío! ¡Qué clase de madre mata a su propia hija!
— ¿Q-Que has dicho Miguel? — interrumpe infraganti Carolina quien estuvo junto a Edward a punto de entrar al pequeño salón en donde están.
20 años atrás.
Alejandra sufre de una extraña enfermedad que la hace aparentar una adolescente, aunque ya es toda una mujer enamorada de un hombre quien padece la misma enfermedad. Al pasar el tiempo se enamoran los dos, se casan y todo iba maravilloso pero un día ella sale embarazada y todo cambió...
— ¡Amor! ¡Amor! ¡Mira! ¡Seremos papás! — le dice emocionada Alejandra a Jesús.
— ¡Abórtala! No quiero bebés.
— ¡No haré semejante cosa!
Jesús era director de un hospital psiquiátrico, quien decidió meter a su esposa en ese tétrico lugar. Al pasar los nueve meses ella dio a luz pero él le quita el bebé para darlo en adopción.
A pesar de que dio a la niña en adopción, se arrepintió al tiempo después causando que contratara a unos sicarios para matar a los padres adoptivos de la niña. Luego del asesinato de estos, él se queda con la niña, le pone su apellido para criarla bajo el engaño que es su primo. Mientras tanto el deja de dirigir la clínica psiquiátrica para dedicarse junto a su hermano Miguel a criar a la niña. Alejandra la dejan libre luego de que el nuevo director la examinara y determinara que no tenía ninguna enfermedad mental. Desde ese día Alejandra juro vengarse de Jesús... aunque de eso se tratará matar a su propia hija...
Presente.
— ¿Q-Que has dicho Miguel? — interrumpe infraganti Carolina quien estuvo junto a Edward a punto de entrar al pequeño salón en donde están.
— Nada por favor Carolina vuelve a la ceremonia, de seguro esta por empezar — balbucea Jesús.
— ¡Me importa un carajo si empieza! ¡Díganme que está pasando aquí!
— ¡Cálmate Caro...!
Carolina interrumpe a Miguel.
— ¡No! ¡Acabas de decir que Alejandra es mi madre! ¡Cómo pudieron hacerme esto!
Los tres se quedaron callados.
— ¡Respondan! ¡Basta de sus fucking mentiras!
— Ca... Carol Perdóname.
Carolina esta devastada, su vida es un completo engaño desde un principio. Su enfermedad solo fue el comienzo.
— Cuénteme la verdad.
— Amor, saldré y te esperaré en el otro salón — le dice Edward dándole un beso a Carolina.
Es un momento íntimo, donde todos tenían que encarar a Carolina.
— Carolina la verdad es... Jesús es tu padre y Alejandra tu madre. Ambos tienen una enfermedad que los hace aparentar ser unos adolescentes y yo soy tu tío.
Carolina no aguanta y empieza a llorar a mares.
— Ustedes me arruinaron mi vida, me mintieron son unos desgraciados.
— Perdóname por favor — dice Alejandra con lágrimas en los ojos.
— Con permiso, lamentamos interrumpir pero la señorita Alejandra queda detenida por intento de homicidio — dice un policía esposando a Alejandra para llevársela.
Ese día fue el día más feliz pero a la vez doloroso para Carolina, al enterarse de la dura verdad decide irse de la ciudad junto a su pareja Edward, juntos siendo bachilleres para estudiar en una universidad.
Edward mantuvo siempre una conexión con sus padres pero Carolina se despegó de todos, es hora de buscar nuevos horizontes.
Jesús a los dos días después de lo acontecido trata de suicidarse haciendo que Miguel lo internara en un psiquiátrico para luego el irse a Francia donde muere a las semanas a causa de un accidente automovilístico.
20 años después.
Carolina ya es una mujer preparada, celebrando junto a su amado esposo Edward su cumpleaños número 39. Junto a la única persona que siempre le dijo la verdad.
— Feliz cumpleaños linda esposa, futura madre de mi hijo.
Carolina ya tiene cinco meses de embarazo, quien le acentuaba muy bien.
— Gracias Amor, todo esto es precioso. De verdad gracias por nunca haberme dejado so...
Carolina cae al suelo con una bala en el pecho, quien cae a los brazos de Edward.
— ¿Tu?
— Recuerda siempre seremos nosotros — responde Marta.
Todas las historias de amor son hermosas, pero esta fue la excepción...
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