(72 horas antes)

Adam

— ¿Me dirás qué te pasa? — Preguntó mamá a mí lado — Cuando acepté tú invitación para tomar café esperaba resolver la duda de qué te tiene tan consternado.

—Es una pregunta estúpida — Dudé un momento antes de tomar todo el valor posible y continuar — ¿Qué es exactamente el amor?, ¿Por qué no es para siempre como siempre nos dijeron de niños?, ¿Por qué es tan efímero?

Mi madre me observó un poco sorprendida, pero un momento después tomó mi mano y junto con un gran suspiro se dispuso a responderme.

—Tú puedes querer a cualquier persona, de cualquier manera, pues sientes cierta empatía, cierto cariño hacia ese individuo, pero cuando hablas de amar, es otro tema completamente diferente, muchas personas se dicen "Te amo" entre sí, pero lo que sienten no está ni cerca de esa palabra. La triste realidad es que pocos conocen su verdadero significado Adam, como psiquiatra he visto psicópatas hablar de amar, he visto a pacientes con esquizofrenia afirmar que sienten cariño, y aunque muchos ponen en juicio sus palabras, a opinión personal considero que por lo menos ellos a pesar de tener problemas mentales donde carecen de empatía, el sentido de la realidad, entre otras cosas... — Una pequeña sonrisa se formó en su rostro — Ellos por lo menos son honestos cuando se trata de amar, pues una mente como la de ellos no diría algo de ese estilo solo por decirlo.

>>Así que cuando se habla de amar realmente a alguien, no la amas gracias a que su parte física es deslumbrante en falsos prototipos sociales, la amas por que como dice una célebre palabra, morir por alguien lo hace cualquiera, pero el que viva por alguien, es aquel valiente capaz de entregar su corazón a otra persona — Su mano acarició levemente mí mejilla — Es un sentimiento finito, pero lo importante no será su duración, sino lo intenso que puedas llegar a experimentarlo, y que quede claro cariño, no hieres a quien amas, no le mientes ni le ocultas verdades a la persona a la que le has dado tú corazón, y aquel que lo haga es porque ya ha dejado de amar.

—Sí hubiera sabido lo buena consejera que eras, definitivamente te habría buscado antes — Sonreí porque a pesar del desastre que era en ese momento, de alguna forma hablar con ella aclaró mi cabeza.

— ¿Me dirás quién es la chica que te tiene pensativa? — Dijo dejándome perplejo.

Me tomé un momento para analizar sí era conveniente ser sincero con ella, y aunque algunas dudas aparecían en mí cabeza, era lo justo, luego de todo lo que me dijo para ayudarme.

—Es ella mamá — Por un momento su rostro expresa total confusión, pero cuando supongo conecta con mi época de investigador por un amor de la infancia, su boca forma una perfecta o, provocando cierta gracia de mí parte.

—No....Puede...Ser — Una pequeña sonrisa se forma en su rostro — Solo en este momento me atrevo a decirte que por un instante llegué a pensar que solo era parte de tú imaginación, pero vaya que me has dejado sorprendida.

—La verdad es que... — Me veo interrumpido por el sonido de llamada de mí teléfono, donde la ver la pantalla muestra un número desconocido y aunque tenga duda, contesto.

—Hol...

—Adam — Una conocida voz femenina me interrumpe — Yo sé que no es pertinente que te llame pero la verdad estoy desesperada, Alissa no apareció en clases y no responde nada de sus mensajes, esto no es normal en ella, estoy muy preocupada.

—Primero que todo, ¿Quién eres?

—Perdón, soy Davine, la que estuvo con Alissa el día que fue a tú casa — Entonces en ese momento recuerdo a la chica que la acompañaba.

—Pero... ¿Qué te hace pensar que sé dónde está? — Sí bien no quería parecer grosero, cierta incomodidad y preocupación invadió todo mi cuerpo.

—Bueno... — Un atisbo de duda se hace presente en su voz — La última vez que supe algo de ella fue cuando me dijo que iría a hablar contigo.

El recuerdo de nuestra conversación llegó a mi mente, y aunque sabía que no fue tosca mí manera de hablar las cosas, para nadie era un secreto que no siempre se entendía como uno lo quisiera, de tal forma que corto la llamada sin responderle para centrarme en ir a visitarla en su casa. Me despido de mamá no sin antes agradecerle por la gran ayuda que me brindó al aclarar mi mente.

El camino sin explicación alguna comienza a resultarme familiar, cuando la verdad es que he estado muy pocas veces en su casa, pero de alguna manera no puedo ignorar que a medida me acerco, cierta ansiedad crece en mi cuerpo.

Cuando estoy a una sola cuadra de llegar una llamada llega a mi teléfono, y aunque en un inicio pensaba contestar, al ver el número de mamá me detengo.

—Mamá...

—Cariño — Su voz está temblorosa, y de pronto un gélido peso se instala en mis hombros —Tú hermano...

— ¿Qué pasó con Connor? — Pregunto ya con el temblor en mis manos y esperando la peor de las noticias.

—Tuvo un accidente...Está en urgen.. — De pronto su voz se quiebra y solo gracias a papá es que puedo saber en que lugar se encuentra para dar retorno y dirigirme hacia donde se encuentra mi hermano.

El camino al hospital se hace extenuante, es como sí el tiempo se hubiera ralentizado en mi contra, y solo cuando por fin entro por urgencias y me recibe el ambiente de pánico es que los segundos dejan de parecer horas.

—¿En qué...

—Connor Johnson — Exclamo sin dejar terminar a la enfermera, y ella al ver mi rostro de angustia y ansiedad, solo señala una habitación a la que corro como sí mi vida dependiera de ello.

Cuando entro al lugar, lo primero que veo es a mí hermano con una pierna vendada completamente y un brazo en el mismo estado, pero solo la tranquilidad y podría decir que hasta mi vida vuelve cuando sus ojos se encuentran con los míos.

—Connor — Susurró mientras me acerco a su lado — ¿Qué pasó?, Mamá me llamó....

—Caín y yo fuimos en su auto para almorzar cuando de repente perdimos el control de los frenos y entonces pasó. — Cierra los ojos como sí le costara hablar —Caín... — Sus ojos se humedecen al pronunciar su nombre — Está muy grave Adam, yo....

—Tranquilo, necesito que te enfoques en recuperarte para estar atentos en Caín — Sonreí mientras le acaricio su cabello — Todo estará bien, ya verás que los dos salen de esta.

—No quiero que le pase nada malo — Su voz se torna un poco rasposa, por lo que le acerco un vaso de agua que me agradece con la mirada — Yo le dije lo que.... — Su tono de voz baja como sí le diera pena hablar al respecto.

—No sabes lo orgulloso que estoy de lo valiente que has sido — Una pequeña sonrisa aparece en su rostro — Duerme un poco mientras esperamos a nuestras padres.

—No puedo... — Al verlo más de cerca, se pueden percibir las grandes ojeras que han aparecido debajo de sus ojos — Debo estar alerta por sí llega a pasar algo...Casi muere — Lo último lo dice en un susurro que por poco no alcanzo a escuchar.

—Entonces déjame hacer guardia mientras duermes un poco — Veo un atisbo de duda en sus ojos, así que decido acercarme más — Confía en mí, no dejaré que nada le pase.

—Siempre y para siempre hermano....

****** 

Holaaa

Luego de casi más de un mes desaparecida, volví para terminar esta historia, pues ya faltan pocos capítulos para el epílogo :)

Gracias por seguir aquí....