(Actualidad)

Alissa

A pesar de que no era amante de los días lluviosos y nublados, hoy representaban lo que sentía, cada parte de mí cuerpo estaba tan cansada de luchas que simplemente me limité a observar como otras personas se acercaban a las tumbas de sus familiares llorando, rezando o hasta alcoholizándose junto a sus muertos.

Me acerqué con paso lento a su lápida mientras lágrimas rebeldes que luché por no dejar salir resbalaban por mis mejillas.

¿Cómo es que el dolor de una pérdida puede ser tan agonizante?

Sabía que sí yo me hubiera permitido sentir la tristeza que se esparcía dentro de mi desde que murió, no estaría tan desgastada ahora, pero tenía que ser fuerte por él, no podía derrumbarme cuando él estaba en el mismo abismo, entre mis opciones no iba a dejarlo caer, así que mientras poco a poco él se recuperaba, el dolor me devastaba por dentro.

—Me siento inútil al no haber sido capaz de evitarlo — Susurré rozando mis manos con la roñosa piedra — A veces sí que me gustaría culparte porque al final de cuentas siempre pasaste de cada advertencia que dije....Pero lo que fuiste años atrás es lo que me ha hecho perdonarte por esos últimos meses y a la vez perdonarme a mí también en el proceso.

Con la tela de la sudadera limpié mis lágrimas a la vez que salía del cementerio antes de sentirme asfixiada por mis emociones.

Me acerqué a mi moto y sin ninguna precaución me limite a acelerar ignorando las miles de multas que podría adquirir por no tener un casco de protección en la velocidad en la que estaba. Cuando llegué a mi destino, la aparqué cerca porque fuera lo que fuera no dejaría que me robaran algo que tanto me costó obtener.

—¿Me das lo más fuerte que tengas? — Pregunté al bar tender mientras me instalaba en la mesa.

—Everclear 190 será entonces — Me sonrió con boca cerrada mientras comenzaba a preparar lo que sea que me haya dicho.

—Pero que sorpresa encontrarnos en este lugar — Dijo una voz varonil sentándose a mí lado, y cuando me giré para reconocer a la persona, un gran escalofrío me invadió en toda la espina dorsal. — ¿Quién diría que un año antes entramos a este bar siendo pareja para una estúpida fiesta de cumpleaños?

—¿Qué quieres Ascher? — Pregunté conteniendo mi rabia.

—Emborracharme para olvidar lo imbécil que fui al estar contigo — Ríe con total falta de gracia.

—Nunca he entendido porqué te haces el ofendido cuando tú mismo dijiste que nuestra relación solo era para evitar la soledad — El barman dejó un pequeño vaso en la mesa mientras con una intensa mirada en mí, vuelve su atención a otros clientes — ¿A qué se debió todo lo que causaste?

—Porque fuera la razón que fuera, eso no te daba el derecho de ser la perra en que te convertiste — Cuando me permití observarlo pude notar lo rojos que se encontraban sus ojos, así que no fue difícil entender que estaba drogado. — ¿Por qué tuviste que esperar para decirme la verdad?, ¿Te divertía engañarme con él?

—Desapareciste por semanas Ascher — Dije tomando de un solo sobro el extraño líquido que había pedido, así que poco a poco sentí el ardor pasar por mi garganta — La última noche me dijiste que no te importaba, así que ¿A qué se debe todo este papel que armaste?, al final él y yo no terminamos juntos.

—Siempre fuiste una hipócrita no te hagas la santa — Suspiró a la vez que se acercaba a mí — Y no sabes lo bien que se siente el ver que nunca podrán estar juntos porque ahora él te odia tanto que prefiere irse a otro país antes que compartir el mismo oxígeno contigo.

Quería golpearlo por tener el descaro de decirme eso pero la verdad no podía hacerme la ignorante, Ascher tenía razón en sus palabras, así que sin respuesta alguna de mi parte él se alejó con una gran sonrisa plasmada en su rostro, y aunque sabía solo eran apariencias porque estaba igual de roto que yo, me dolía que tuviera razón cuando dijo que lo único que Adam sentía por mí era odio. 

Mientras me ahogaba en el alcohol, la melancolía del pasado comenzó a invadirme, y a pesar de que el chico que me atendió antes intentara coquetearme en cada tiempo libre que tenía, mi cabeza no estaba disponible para pensar en alguien más que no fuera Adam....¿Cómo es que dañas a alguien que quieres tanto?.

Para cuando el bar comenzó a llenarse de viejos pervertidos, decidí irme sin ninguna dirección propuesta, la verdad quería divagar por las calles a ver si lograba olvidarme de él, pero como sí quisiera castigarme a mí misma, llegué a una casa que era muy conocida para mí y sin control alguno solo me limité a tocar la puerta mientras poco a poco unos pasos lentos se escuchaban por las escaleras hasta llegar a donde estaba y revelar a Adam con unos desgastados shorts siendo la única prenda que llevaba.

—¿Alissa? — Preguntó con voz ronca. — Son las cuatro de la mañana, ¿Qué haces aquí?

—No sé — Dije cuando de repente unas grandes ganas de reír me invadieron por lo patética que era — Eres la única persona que aún me quiere, o bueno, que alguna vez que quiso de verdad — En ese momento la alegría se esfumó y solo lágrimas quedaron a su paso. — ¿Cómo hago para que dejes de odiarme?, necesito que me ames como antes, necesito que estés ahí para abrazarme cada vez que esté a punto de derrumbarme, yo necesito que me vuelvas a dedicar esas sonrisas que solo eran para mí.

—Alissa yo...

—No me llames así — Exclamé interrumpiéndolo — Sabes que siempre fui tú Lara.

—¿Realmente fuiste mía alguna vez? — Apretó sus labios como sí estuviera discutiendo consigo mismo — ¿Cómo quieres que vuelva a ser el mismo después de todo lo que ha pasado? — Se acercó para quedar frente a frente y fijar esos verdosos ojos que tanto me encantaban en los míos — Lo intenté, estuve a tú lado mientras intentaba quitarte esas ganas de querer autodestruirte a cada segundo que podías, me tragué todas tus mentiras hasta que un día me enteré por otra persona que seguías con él — Intenté hablar pero el solo llevó su mano a mi mejilla — ¿Cómo esperas que me sienta sí el mismo día que te abrí mi corazón estuviste con él? ¿Acaso fui un juego para ti?

—Las cosas no fueron así — Dije con mi voz apenas audible.

—Entonces dime como fueron — Bufó — ¡¡Dime como hago para reconstruir mí corazón luego de que lo rompieras en pedazos!! — Se alejó para gritar a la nada — ¡¡¿Cómo hago para dejar de amarte?!!

—¡¡¡No lo hagas!!! — Grité con rabia sorprendiéndolo — Adam en mi vida he amado a otra persona que no seas tú — Dije mientras intentaba recuperar mi agitada respiración — Nunca fuiste un juego para mí, esa vez que estuve con Ascher fue cuando terminé con esa relación, no sé como es que se creó el chisme de que había pasado la noche con él — Como estaba de espaldas hice que se girara para verlo directamente — Podré ser muchas cosas pero no traicionaría al hombre del que estoy enamorada.

—Quisiera creerte — Dijo en un susurro — Así sería mucho más fácil para mí, porque podría volver a besar esos labios que tanto he deseado desde la última vez que tuve el placer de probarlos — Acercó su rostro al mío para quedar a pocos centímetros — Pero recuerda que ocultar la verdad también es una forma de mentir y lo hiciste tantas veces que has perdido toda la confianza que alguna vez llegué a sentir por ti — Una triste sonrisa se plasmó en su rostro — Que ironía es que pierda la seguridad de la persona en la que menos lo esperaba. — Se distanció para caminar hacia su casa.

—Adam, espera...

—No — Dijo seco — Ya no hay nada más que puedas romper Alissa, así que puedes irte — Sin voltearse se limitó a cerrar la puerta en mi cara y desaparecer.

¿Cómo le explicaba que mientras él se sentía lastimado yo solo veía como mis cenizas desaparecían?

¿Cómo decirle que en este juego al que nos metí la que pagó las consecuencias fui yo?

*****

Holaaaa

Estuve desaparecida porque comencé a estudiar y solo estuve concentrada en intentar terminar la historia, pero no todo salió como esperaba y sí bien tengo unos caps listos, todavía me faltan algunos.

De todas formas, solo paso por aquí para anunciarles mi regreso, estaré publicando en distintos días y más de un capítulo, todo depende de mi horario.

Sin nada más que decir, gracias por leer :)