031.
Durante muchos años las misiones fueron ejecutadas correctamente y a la perfección, ninguno conocía aquel temor de cometer un error.
No hasta ese día.
Kitty terminó de asesinar junto a Bunny a los cuatro individuos que obstruían su paso hacia su verdadero objetivo, perforaron órganos y vaciaron casi por completo sus armas de fuego. Finalmente libre el paso, caminaron hacia el hombre rubio y de cuerpo robusto, este se mantuvo pegado a la silla de su enorme escritorio de madera oscura, aterrorizado por ver frente suyo su mortal destino.
—Solo deberías matarlo, no es necesario hacer lo que te dijo ese hombre —hablo el de mascara de conejo empuñando un cuchillo largo y filoso, de cuchilla ondulada y muy puntiagudo.
—Tsk ¿por qué no? Le cortaré el pene y los testiculos y se los llevaré en una bolsa de regalo, suena bien ¿no? Bastante rústico como él pidió. —sonrío burlonamente.
—Como tú más prefieras, solo termina el trabajo, toma —le tendió su cuchillo.
—No lo necesito, lo haré con mi preciosa —saco su daga rosa, con pedrerías y con la icónica frase escrita en ella "with love Kitty Gang"—. ¿Listo para morir? Hoy no me siento benévolo, así que no habrá últimas palabras.
Entonces decidido y apegado a su plan mortífero se acercó al robusto hombre que sudaba y temblaba como un loco, sabía lo que le esperaba, pero ellos no sabían lo que les esperaba.
El hombre presiono un botón debajo de su escritorio, y luego de unos cuantos minutos hombres armados y con trajes blindados aparecieron en el salón apuntando a los dos forasteros.
—Metti giù le armi e metti le mani sopra la testa! —les ordenó uno de ellos sin dejar de apuntarlos. Debieron esperar eso en el momento en que supieron que su presa era un político.
—Maldición, creí que todos los sistemas de riesgo estaban apagados. —masculló Park enfurecido—. Matare a quien sea que esté a cargo de la seguridad y de las cámaras.
—Kitty deben salir de allí ahora, vienen más refuerzos, olviden la misión los atraparán —resonó la voz de Gucci en su oído—. Al parecer Hos... Miami intentó entrar al sistema pero están bloqueados por completo, saben que los miramos, lárguense ahora.
—¡Joder! —gritó el rosado—. ¡Ventana ahora! —vociferó y entonces ambos se movieron velozmente rompiendo la ventana más cercana para salir por allí, pero no iban a dejar incompleta la misión, poder haber un error, pero no un fallo por completo—. Bye, bye.
Antes de ir detrás de Jeon y huir, sacó una pistola pequeña del cinturón de su muslo y entonces le disparó justo en la cabeza al hombre gordo terminado finalmente con la misión, no de la manera que deseaba, pero obteniendo la segunda paga.
Estaba furioso, jamás había comedido un error de esa magnitud, ahora la policía los conocen, saben quienes son ¿debía preocuparse? Su identidad está cubierta gracias al antifaz que le recomendó Jungkook, pero aún así estarían en peligro de ser buscados incluso por la CIA, de ahora en adelante debían tener aún más cuidado.
—¡Es mierda! —vocifero Park pateando la silla con ruedas giratoria que pertenecía a su mejor amigo—. ¡¿Como es que no pudieron desactivar los malditos sistemas?! ¡¿Acaso son imbeciles?! ¡Pudimos ser atrapados mientras que ustedes eran unos ineptos!.
—Jimin cariño relaja...
—¡No me voy a relajar, Jungkook! —bufo—. ¿Somos profesionales o no lo somos? Llevamos casi una vida en esto, y aún me sigue sorprendido su mediocridad, ya basta de jugar al maldito equipito de enamorados ¡somos asesinos joder! Debemos concentrarnos, tenemos muchos clientes importantes,
—¡No todo saldrá siempre perfecto Park Jimin! —interfirió Taehyung—. ¿Acaso no recuerdas como conociste al que ahora es tu novio? ¡Los malditos y jodidos errores pasan maldición! —soltó con desespero jalando sus cabellos azules.
—¡Era la maldita policía! ¡No un asesino como yo! ¿Qué es lo que no te entra? ¡Dejen de pensar con el trasero y esfuércense! ¡Púdranse! —les mostró el dedo de en medio y se retiró del sótano, o sea la oficina de los que se encargaban de la tecnología.
—Puto loco, está obsesionado con la perfección, dios siempre ha sido de esa manera —volteo los ojos Taehyung con enojo, su novio lo abrazo por los hombros dándole apoyo—. Lo siento Jungkook pero tu novio aveces es una patada en las pelotas, necesita que te lo cojas al parecer.
—Taehyung no te expreses de esa manera amor, no es debido que digas esas cosas de tu mejor amigo, y tampoco que le hables de esa forma a Jungkook —le dijo Hoseok.
Taehyung chasqueó la lengua.
—No me importa, él me habla de peores maneras, lo quiero, es mi hermano pero no pienso tolerar su humor de mierda —bufo.
—Hablaré con él ¿bien? Tratare de tranquilizarlo, ya verán que la próxima misión sale a la perfección —Jungkook era un alma más pacífica aveces en esas situaciones—. Aunque no les prometo nada, Jimin es alguien muy difícil.
[...]
—¡Mi equipo no tiene la culpa, bastardo infeliz! ¡Pudimos haber sido arrestados! —el rosado estaba al teléfono y al parecer la conversación no estaba nada bien—. ¡Debiste darme información más específica!
¡No me vengas con eso! ¡Ustedes unos críos que no saben hacer su trabajo bien! ¿Acaso no me dijiste con esa cara linda y egocéntrica que eran expertos?
—¡Jodete pendejo, al menos matamos a ese bastardo! ¡Quiero mañana todo nuestro dinero o iremos por ti y no fallaré en arrebataré tu miserable vida! —finalizó y colgó, para luego aventar el teléfono a la cama con tal fuerza que rebotó.
—Amor —Jungkook se percató de todo al estar parado en el marco de la puerta, y al ver a su amado en ese estado enseguida fue a darle apoyo y cariño—. Tranquilo, en este trabajo este tipo de cosas pueden suceder —lo abrazo pegándolo a su pecho acariciando su cabellera rosada—. No quiero que estés así de molesto, puedes lastimar a alguien y no hablo de armas, sino con tu boca, incluso a mi.
—Lo siento, se que me estoy exaltando pero joder Jungkook nos pudieron haber arrestado, realmente la cagamos esta vez —se separó de él y lo miro afligido, el contrario acuno su rostro entre sus manos tatuadas.
—Deja de preocuparte demasiado, no pasará de nuevo, nos esforzaremos más la próxima vez ¿de acuerdo? —ambos se sonrieron, Jungkook logró calmarlo—. Te amo, pero no seas de nuevo un hijo de puta hiriente.
—No lo haré, solo no me saquen de mis casillas ¿bien? —el azabache sonrió—. ¿Qué es lo que quieres? Lograste calmarme algo que ni Tae a podido.
—Mmm, no lo se ¿tú que crees? —sonrío ladinamente, tomando ahora de la cintura a su amado, insinuante.
—¿Follamos? —sonrió pícaramente.
—Obvio, solo hay que poner una almohada en la cabecera y no hagamos mucho ruido ¿bien?.
—Bien —aceptó Park.
Colocaron pestillo a la puerta, luego se aseguraron de poner la almohada detrás de la cabecera para que no golpeara la pared y molestar a sus amigos. Luego Jimin arrojó a la cama al chico de brazo tatuado y cabello negro.
—Cabalgame vaquero —pidió Jungkook desabrochando el cinturón de su pantalón rápidamente.
Park se subió encima de él a horcajadas, y besó sus labios fogosamente.
—¿Toda la noche? —preguntó el rosado.
—¿Puedes con ello? —enarcó una ceja Jeon.
—Pff ¿acaso dudas de mi?.
—Nunca amor mío.
Nuevamente juntaron sus labios, y entonces comenzaron a despojarse de todas sus prendas para comenzar una de esas largas noches turbulentas y satisfactorias.
[...]
—¿Quienes son ellos? ¿Tenemos algo informativo de los individuos? ¿Algo que nos de una señal de lo que nos enfrentamos ahora? —el hombre uniformado fumó de su cigarrillo luego de cuestionar.
—Esto es nuevo —dijo uno frente a una computadora, mirando toda la información en la pantalla.
—Ellos son nuevos, nunca los había visto ni tampoco escuchado algo.—aclaró el otro hombre a su lado.
—¿Qué tenemos aquí...? —se acercaron a mirar con interés—. Al principio se creía que eran dos pares nuevos por separado. Ya que dos poseen máscara en cambio el otro par no, con los últimos reportes se descubrió que... son cuatro, casualmente caminan como una sola sombra —explicó.
Nombre: Kitty Gang.
Habilidad: Armas de fuego, puntería perfecta, y gran habilidad física.
Aspecto: Piel pálida, cabellos rosados.
Fortaleza: Lucha de cuerpo a cuerpo.
Debilidad: Desconocido.
—Según los espedientes indica que puede derrotar a una horda de enemigos él solo, la última vez se le encontró bañado en sangre y desapareció en un segundo. Impresionante —soltó un suave chifló asombrado—. Aparte de ser ágil es hermoso. —continúo.
Nombre: Killer Bunny.
Habilidad: Katanas, cuchillas, en resumen toda arma blanca.
Aspecto: Usa una máscara de un conejo, su rostro todavía no es identificado, cabellos negros y un brazo tatuado.
Fortaleza: Lucha con las armas ya mencionadas anteriormente.
Debilidad: Desconocido.
—Se dice que fue capaz de asesinar a sangre fría desde muy joven y que le apasiona ello, posee una perfecta maestría, la última vez que se le vio le corto la cabeza a un bandolero en un parpadeo.
Nombre: Hopeline Miami.
Habilidad: La informática, un experto en tecnología y sabe un poco de armas.
Aspecto: Desconocido.
Fortaleza: Hackeo.
Debilidad: Desconocido.
—Se habla que es un consumidor de ingeniería maestra en sistemas, tanto que podría en tan sólo cinco minutos deshabilitar todo un edificio, no se le a visto en cuerpo completo, pero al última vez se le vio con una máscara de un mamífero.
Nombre: Gucci Gang.
Habilidad: También la informática, pero posee una espléndida puntería, y es bastante observador.
Aspecto: Cabellos azules, su rostro es desconocido.
Fortaleza: Informatica.
Debilidad: Desconocida.
—Podría decirse que es una mente, se conoce que asesino con fiereza a dos jefes de grandes empresas de sicarios. —finalizó—. Son un peligro fuerte ¿realmente tenemos oportunidad jefe? —cuestionó miedoso.
—Por supuesto —sopló el humo entre sus labios con una sonrisa satisfactoria—. Son una presa grande, un verdadero reto, no importa si no atrapamos a todos, con uno basta para que finalmente la policía sea respetada como se debe ¿son italianos?.
—Mmm —revisó la información en la computadora—. No, son Sur Coreanos y al parecer en su país siguen siendo demasiado reconocidos como asesinos, y su legado continúa aquí en Italia, al parecer ya han asesinado múltiples veces.
—Apenas han llegado y han dado de que hablar con sus peligrosos actos. Al parecer no tiene un líder, van por su cuenta, cuatro formas que desaparecen todo a su paso —sonrió el otro—. Debemos hacerlo, atraparemos a uno aunque sea lo último que hagamos.
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