Capítulo III
-El capítulo acaba en tres...
-No
-Dos...
-Willow, no me están haciendo esto, ¿verdad?
-Uno...
Salen los créditos en la pantalla.
-¡NOOOOOO!- chillo. -¡NO ME PUEDEN ESTAR HACIENDO ESTO! ¡¡¡NO!!!-.
Willow y Suki ponen los ojos en blanco.
-Sabes que el siguiente capítulo lo veremos mañana, ¿no?- me chincha Suki. Le lanzo una mirada asesina y me apresuro a alcanzar el mando, cunado Willow lo coge, se pone de puntillas y alza la mano. Y Willow me saca una cabeza normal, imagínate de puntillas.
Me pongo a saltar intentando alcanzar el mando, pero Willow lo deja en la PUÑETERA ESTANTERÍA MÁS ALTA DE TODO EL APARTAMENTO. ¿Por qué seguía esa estantería ahí?
Mi móvil empieza a vibrar y me sale una notificación de Coin Master. Genial, para rematar, Ce me había destrozado mi pobre pueblecito (que ya había sufrido mucho por SU culpa porque él era mejor que yo en TODOS los PUTOS JUEGOS).
Ya habían pasado 2 semanas desde que nos conocimos, y nos llevabamos muy bien, la verdad. Habíamos quedado varias veces.
-Oye, ¿y si vamos a la feria de mi pueblo a pasar el puente?- nos propone Suki, que mira el whatsapp distraídamente.
-¿Qué?- digo yo algo perdida.
-QUE SI VAMOS A LA FERIA DE SU PUEBLO, SORDA- me repite Willow.
-¡No estoy sorda!
-PARA NADA- dice Suki. -Bueno, aunque me acaba de decir mi abuela que podríamos invitar a uno más, porque tiene 4 entradas-.
Ce se me viene a la mente.
-¿Puedo invitar a un amigo mío?- pregunto.
Willow y Suki me miran con cara de "quiero chisme".
-¿Qué "amigo"- Suki hace énfasis y hace el gesto de las comillas con los dedos.
-Es solo un amigo- aclaro.-Se llama Ce
-¿Ce? ¿Como Once de Stranger Things?- dice Willow con curiosidad.
Ostia, pues nunca lo había visto así
-Eh... Sí
-¿Pero cual es su nombre real?- pregunta Suki.
-Ehm... No lo sé
-Umm... Un hombre misterioso. Me gusta- concluye Willow.
-¿Y... no prefieres invitar a Andrew?- pregunta Suki.
-Mmm... No- digo encogiéndome de hombros.-Esto es una quedada de amigos, ¿no?-.
Suki y Willow se miran y, acto seguido, se ponen a chillar y a dar saltitos.
-¿Qué pasa?
-¡¡¡Ya no estás obsesionada con Andrew!!!- chilla Willow.
-¡¡¡No conozco al tal Ce, pero ya me cae bien!!!- prosigue Suki.
-¿Q...? ¡Yo nunca he estado obsesionada con Andrew!- digo algo indignada.
-Nooo, para nada- dice Willow.
-¡Es verdad!
-Bueeeno, ¡llama a Ce porque salimos de aquí a y media!- dice Suki todo-emocionada.
Y así acabamos en el metro camino al pueblo de Suki. Ya le había escrito a Ce, y había accedido a ir. Nos íbamos a quedar unos días en la casa de su abuela (Ce incluido, y no sabía cómo sentirme respecto).
Llegamos tras 1 hora y media al pueblo, y nos vamos directamente a la feria, donde habíamos quedado con Ce.
-¿Cómo es Ce?- dice Willow con un atisbo de curiosidad en sus ojos.
Muy caliente, querida
-Es guapo- concluyo. Willow y Suki se lanzan otra mirada cómplice.
-¿¡Qué pasa?!
-Andrew es el más guapo del mundo-me imita Suki.
-OMG, no me puedo creer que alguien tan caliente salga conmigo-continúa Willow.
-Es muy hermoso- dicen las dos a la vez.
-¡Callad!- las digo yo, avergonzada.
Ellas ponen los ojos en blanco, pero no vuelven a decir nada al respecto.
Llegamos a la feria, y tengo que admitir que era mucho más grande de lo que me esperaba. Había hasta dos montañas rusas y todo. Se lo curraban mucho en el pueblo de Suki.
-¡Ah, Lilliet!-.
Veo a Ce correr hacia mí, y yo le saludo con la mano.
-¡Gracias por venir!- digo cuando llega.
-De nada. Así puedo tomarme un respiro de los estudios- dice abrazándome. REPITO, ABRAZÁNDOME.
Por un momento me quedo paralizada, pero le devuelvo rápidamente el abrazo.
-Ehm...- carraspea Willow. Ce me suelta y dice:
-Parece que no nos han presentado- con una sonrisa, les da la mano a ambas.-Ce, encantado
-Willow
-Suki- dicen ellas.
-Bueno, ¿a donde vamos primero?- pregunto alegremente. Ce señala a una montaña rusa negra con tropecientos loopings.
-Me apetece ir ahí- dice.
-Oh, no- digo.
-Oh, sí- dicen Willow y Suki a la vez. Empiezo a ponerme nerviosa. Me daban auténtico PÁNICO las montañas rusas.
-Oh vamos, no seas aburrida- dice Ce, cogiéndome de la muñeca. No fui consciente del mundo que me rodeaba hasta que empezó a tirar de mí. ¿Qué me pasaba?
Cuando llegamos a la cola (que no era precisamente corta) fui consciente de que me iba a montar.
-Buenooo, yo me voy...
-Oh, no no no no no- dice Suki agarrándome de mi pobre coleta y devolviéndome a mi sitio.-Tú aquí quietecita
-¡Pero...!
-¡Ay, de verdad niña, cállate!- me dice Willow. La obedezco y pasamos la cola mientras Willow y Suki le hacen un interrogatorio al pobre Ce, que no sé cómo no las había mandado ya a la mierda.
-¿Y cuál es tu café favorito?
-¿Vives solo?
-¿Tienes novia?
-¡Chicas!- las digo, abochornada.
-No pasa nada- me tranquiliza Ce.-Mi café favorito probablemente sea el capuchino, vivo solo y estoy solo-.
Las chicas se quedan con la boca abierta, y empiezan a cuchichear en el oído.
-Perdona, es que son muy pesadas...
-No pasa nada- dice soltando una risa.-Son majas
-Uf pues no sé cómo las aguantas
-¡Siguiente!-la voz de la supervisora de la atracción hace que me piten los oídos.
Un momento, ¡¿YA ÍBAMOS A ENTRAR!?
-Pasen, por favor- dice la supervisora.
-¡Me pido con Suki!- dice Willow alegremente.
-Ay, Dios santo- digo yo.
Nos montamos en los vagones, yo con Ce (porque NO me iba a montar sola), y nos ponen una protección de hombros y un cinturón para agarrar el mismo.
-No siento las piernas- comento bastante nerviosa. Dios, esa cosa apretaba demasiado.
-Tranquila, no eres la única- dice Ce distraídamente.
Entonces el vehículo arranca y siento que me voy a morir en cualquier momento. Y se me ocurre la maravillosa idea de MIRAR HACIA ABAJO.
-¡Ay, mierda, esto está muy alto!- grito.
-Brillante novedad, Sherlock- me dice Ce con expresión divertida. Le mataría, pero estaba más centrada en que no me diera un infarto, sinceramente.
-¡AAAAAH!- grita Suki desde el vagón de atrás. -¡SE ME HA CAÍDO EL COLETERO!
-¡EN SERIO, SUKI! ¡ME HAS ASUSTADO!
-¡PERDÓN!- oigo a Willow decir.
-Ya llegamos- me dice Ce.
-¡¡AY, JODER!! ¡¡¡QUÉ CAÍDA ES ESTA!!!- chillo.
-En tres, dos, uno...-.
Y entonces el vagón se detiene.
-¡¿QUÉ?!- ay, mierda, esto no está pasando.
Pero entonces el vagón arranca. Y caemos.
-¡¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAH!!!!!- grito desde lo más profundo de mi alma.
Tras unos loopings y varias bajadas más, salimos de la atracción.
-¡Ahora a la lanzadera!-dice Willow alegremente.
-NI SE OS OCURRA-digo yo. Siento que voy a vomitar en cualquier momento, te lo digo de verdad.
-¿Por qué no?- dice Willow con un mohín.
-Porque no- digo, y se me ocurre tocarme el pelo. -¡Ay, mierda, se me ha enredado un huevo el pelo!
-Por dos- dice Suki, la cual tiene 3.432 nudos en el pelo (a ver, no contados, pero se entiende).
-Debería haberme traído un peine- dice también Willow.
Miro hacia delante para ver las posibles opciones, y veo la cárcel.
-¡Vamos a la cárcel!
-¿A la qué?- dice Suki. Willow y yo la miramos con cara de "¿en serio no sabes lo que es?"
Respondo a su pregunta señalando una atracción con forma de cárcel que sube y baja rápidamente.
-Oh, no, más bajadas no, por favor
-Venga, por fa, por fa, por fa...-decimos Willow y yo a la vez para intentar convencerla.
Suki pone los ojos en blanco y, con un suspiro, dice:
-Está bien
-¡Yuju!- grita Willow. Ce nos mira con una cara de confuso y de que parecemos tontas.
No lo parecéis, lo sois
Nos dirigimos a la fila de la cárcel cuando noto una presencia que me observa. Me giro para ver quién es.
Y veo al hombre del metro.
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