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✶ Descubierto ¹⁰/₂

El teléfono no había sonado. El reloj marcaba las doce de la mañana y un omega recién bañado, veía el aparato puesto en el escritorio.

La habitación volvía a estar vacía como siempre, pero eso no era lo que le importaba. Félix estaba nervioso por el mensaje del mayor, sabía que solo serían las imágenes para el proyecto, pero sería su oportunidad para encontrar una conversación.

El aún no sabía de que iría, pero quería hacerlo.

— ¿Por qué no escribe? — se preguntó con ansias.

Se dejó recostar en el espaldar de la cómoda silla, moviéndose un poco de lugar por las ruedas en las patas. Su lobo estaba impaciente, Félix también se sentía de tal manera.

Sin embargo, el mensaje nunca llegó. Por lo que decepcionado se acostó en su cama y enrolladose como un gusano, se abrazo a sí mismo hasta quedar dormido.

El vibrar del teléfono sobre su almohada, había despertada al somnoliento omega qué tanto le costó dormirse. Tomo de este con los ojos cerrados y deslizó queriendo apagar la alarma, pero había contestado la llamada entrante.

Félix...

Levantó la cabeza al escuchar la voz por el gran silencio en el lugar. Vio el teléfono y vio el nombre en él.

Hwang hyunjin.

Tomó tan apresurado que le dio pena. — ¿Hyunjin?. ¿Qué haces despierto a esta hora?

No podía dormir, así que acepte una salida con Seungmin.  M-mierda — escucho un ruido llamando su atención, ahora que lo escuchaba bien, su voz sonaba ronca y pesada.

Se sentó en la cama con el ceño fruncido. Vio a un costado "3:34am" alzó las cejas en impresión, ¿acaso hyunjin regresaba de una fiesta?.

— hyung..-

¿Te puedo decir algo?...Mi corazón no es malo, no soy como los alfas del instituto que alardean tener el culo de los omegas más buenos. Y-yo.. Felix yo de verdad..- — la llamada fue trancada, dejando perplejo al omega con el teléfono colgando de la mano.

¿Qué mierda había sido eso?

Bajo este sin querer hacerlo, pero luego un mensaje llegó del mismo número:

Hwang hyunjin
[Este usuario acaba de enviar un enlace drive, ¿deseas entrar?]

Son las fotos.

Había entrado de una vez con la curiosidad y su falta de sueño. Las primeras en salir fueron tan impresionantes que no parecían sacadas de un sitio web, y lo supo cuando en una, vio el reflejo en un espejo y la cabellera roja dejaba a entender mucho.

Hyunjin las tomó por su cuenta, eran tan limpias que deberían de ser publicadas. Juraba que si se hacía, ganaría mucho dinero.

Era la primera vez que veía una imagen de un crisantemo, sus colores eran hermoso y ahora entendía del por que hyunjin quería hacer su pintura de ellas. Eso le hizo recordar sus palabras en la llamada, dejandole con el corazón a mil.

Esa iba a ser una noche larga.

Un dolor insoportable en su cabeza, le hacia andar con el ceño fruncido y sin ganas de querer hablar con alguien. Hyunjin apenas había ido a clase cuando nuevamente había visto al cabellera azul frente a él.

— hyunjin,  ¿te ocurre algo? — sintió la preocupación en su voz, pero hyunjin no se sentía bien para compadecer.

— Sí, que me impide el camino — quejó, queriendo esquivarlo.

— Dohyung dijo algo de ti.., — inició, logrando que hwang dejara sus planes a otro lado. —  No es muy bonito, le dije que no lo hiciera pero igualmente lo hizo. Era algo muy personal y..-

— Qué dijo.

El peliazul paso saliva.

— Es sobre tu relación con ese beta, bueno, omega. — hwang alzó las cejas al escuchar lo último. Internamente comenzó a maldecir, comenzando a preguntarse si eso llegó ya a felix.

— ¿Quién lo sabe? — Mentira, el no quería saberlo.

— Todo el instituto.

Una mierda, comenzó a caminar dejando a atrás al chico. Quería buscar a Félix y aclararle las cosas antes de que lo malentienda.

Por los pasillos podía escuchar que todos hablaban de eso: del secreto de Félix. 

Una vez pudo llegar al salón, lo primero en recibirlo, fue un empujón del pelirosa completamente furioso.

— ¡Eres una mierda hwang hyunjin! — mascullo, mientras lo veía con decepción.

— Félix..-

Kim chasqueo la lengua en fastidio, comenzando a sobar su cien.

— ¿Y aún tienes el descaro de preguntar por el? Todo el instituto lo sabe por tu culpa. Al final de día terminaste siendo como todos aquí...

Le paso por un lado, golpeando su hombro al hacerlo. Hyunjin no entendía, a penas había llegado y ahora lo culpaba por decir algo que no hizo, su lobo se sentía peor que ayer por que sentía que ahora si el omega que quería, lo odiaba por completo.

— pero yo no sería capaz de hacerle eso — murmuró con pesar. No queriendo dejarse llevar por su tristeza.

La melodía de su canción,  sonaba a través del piano. Felix estaba evitando lose profesores,  a los alumnos pues le estaban tachando de regalado por usar las cosas de hyunjin en el instituto.

No podía creer que una noche antes le llamo borracho confesando sus sentimientos nuevamente.  Y a la mañana, enterarse de que dijo cosas horribles de él.

Felix no era un alumno regalado

Felix no tenía sus notas por acostarse con los profesores.

El no había usado a hyunjin para tener mejores notas.

Menos le había ofrecido tener sexo.

Una lagrima callo sobre sus manos, sus labios temblaron por un segundo por que en el fondo no quería creer que el le todo eso a la gente. Pero parecía encajar tan bien si ayer estaba borracho pudo decir muchas cosas estúpidas.

Se suponía que era un alfa diferente, ¿acaso era eso lo diferente?.

— Félix.

Su respiración se trancó por un segundo, conocía ese tono. No quería voltear, sabía que estaba ahí,  pero sus pasos aproximarse le hicieron soltar las palabras acumuladas.

— Hyunjin, solo quería que me digas si es cierto. ¿Tú fuiste quien dijo todo eso?

— Jamás te haría daño, omega.

Apretó sus manos con fuerza, la acumulación en su cuerpo estaba siendo demasiado para él.  Un golpe en las teclas, lo hizo levantarse y voltear a ver al pelirrojo qué rogaba por dejarlo acercarse.

Sin embargo, el primero en hacerlo y por impresión; fue el menor, que rodeado sus brazos en su cintura y escondió su cabeza en su pecho, sintiendo su aroma apagado.

Había sido correspondido por el mayor, quien sintió un alivio gigante cuando fue abrazado. Félix no parecía odiarlo y eso era lo único que le importaba.

Sin embargo, había una persona a la cual se tendrá que encargar luego. Pero ahora solo tenia un solo trabajo: consolar al omega bajo sus brazos.

⛺️notita:
Los ojos se me cierran
solos pero aquí esta 👌🏻🙂.

¿Qué creen que ocurra?
La verdad yo siento que el
felix de aquí es una de las versiones,
más parecidas en mi, pero no diré nada más😉💕.

¡Hasta luego!
—Valen.

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