Cita
Historia Original de Lucy_Trejo27
Al final del capítulo hay un regalito🤭🤭
Mentiría, en verdad mentiría si no estuviera emocionado, pero Mew se sentía mucho más que eso, la euforia lo mantenía cada vez con una sonrisa en su rostro la cual no podía dejar de lado tan fácilmente, y es que aunque para algunos encontrarse con viejos amores del pasado fuese doloroso, para él no lo
era, jamás había quedado en malos términos con Gulf, ni siquiera le había confesado nada sobre sus sentimientos en el pasado, ciertamente hacerlo hasta ahora seguramente lo haría ver como un idiota frente a Gulf, quién puede amar a alguien después de tantos años? Mew era esa persona, y no se arrepentía de ello.
Se miró por milésima vez en
el espejo, despeinó un poco su cabello, quería verse bien para Gulf, hoy sería un gran día para pedirle otra cita, quizás inclusive conocer más
a esos traviesos hijos que tenía a su alrededor, seguramente Gulf estaría sumamente encantado, soltó un resoplido, los nervios se estaban apoderando de su ser, debía ser fuerte, no debía dejarse llevar por el nerviosismo de su ser, e ir con el omega para pedirle una cita.
—Sólo es una cita –mencionó Mew, —no lo arruines.
Salió del baño para por fin comenzar su camino, llegó a la estancia de su departamento, tomó las llaves que se encontraban en la mesa de centro, arregló un
poco su corbata apretando más el nudo y caminó en dirección a la puerta principal, necesita ir de inmediato, no quiere perder
nada de tiempo, y mucho
menos cuando se trata de ir
con Gulf.
Lo había estado meditando mucho durante algunos días,
no había ido a ver a Gulf a pesar de que de vez en cuando pasaba del otro lado
de la acera para ver si acaso Gulf salía de casualidad, pero solamente podía ver como los hijos del omega iban de un lugar a otro, ellos eran los que más salían, Gulf se encargaba más de su negocio.
Eso había causado una leve decepción en el alfa, pues quería encontrarse con Gulf, pero no importaba ahora, llegó a la planta baja del edificio, y no evitó apresurar sus pasos para poder ir a la florería, en verdad se sentía sumamente ansioso por ver a Gulf, todavía los recuerdos de su adolescencia pasaban en su cabeza como si hubieran sido hechos que habían pasado el día de ayer.
Recuerda cuando se hablaron
por primera vez, ese día Mew
había llegado de la escuela con una gran sonrisa y sin parar de decirle a su madre
lo bonito que era el omega,
recuerda todas esas veces en
las que Gulf y él pasaban el
almuerzo hablando de comics de Marvel, hablando de lo horrible que eran las clases de matemáticas y de ciencia, hablando del futuro, Mew casi había cumplido todos sus sueños, recuerda que Gulf le mencionó que él quería terminar con sus estudios, quizás conseguir un trabajo cerca de su hogar, y jamás casarse, los planes pueden ser muy distintos a la realidad, en cambio él, recuerda haberle comentado casi lo mismo, pero a diferencia, Mew había mencionado que se quería
casar con el omega de sus
sueños, Gulf lo calificó de
empalagoso y se comenzó a reir de él, pero al final le
mencionó que esperaba que
encontrará a esa persona
especial para él, por supuesto Gulf jamás se imaginó que
fuera él ese omega especial
para Mew.
El alfa dejó los recuerdos de
lado, le llamó la atención algo, o más bien unas pequeñas personas, no los conocía del todo, pero con sólo ver a Lale, sabía que los demás seguramente estarían cerca, los niños se encontraban en una tienda de dulces, seguramente Gulf no sabía de esto, tal vez ayudaría a los niños a encubrir su travesura, sonrió y caminó sigiloso hacia ellos.
—¡Lale! –reclamó Gaia al ver a su hermana mayor comerse parte del almuerzo que su padre había puesto para él en su mochila. —Deja de comer, esa es mi comida.
—Papá dijo que es de todos –mencionó la hermana mayor, Athez soltó un bostezo, no había podido dormir muy bien ayer por la noche —Misael, será mejor que ayudes a Athez, parece que va a necesitar que lo cargues en tu espalda –el mencionado mostró sus labios en un puchero.
—¡¥a la cargué desde la
florería hasta aquí! Gaia tiene que ayudarme –mencionó Misael para después apuntar su hermano.
—Pesa mucho –reclamó Gaia, Lale rodó los ojos.
Su padre fue muy específico, dejen el último encargo del día, y con el dinero, repártanlo entre ustedes, y por supuesto lo hicieron, pero todos coincidieron que
querían algunas golosinas, llevarían los chocolates favoritos de su padre, los cuales el señor que atendía la
dulcería ya se había tardado
un poco en buscar, pero no
había pasado ni siquiera cinco minutos, los niños eran un poco desesperados.
Mew no pudo evitar reírse ante esa pequeña discusión
entre ellos, la hija mayor del omega no evitó escuchar esa tenue risa, se giró por completo y sus ojos brillaron al ver al alfa que quería para
que estuviera con su padre
omega.
—¡Mew! –chilló Lale haciendo que sus hermanos
mirasen a donde ella —¿Vienes por dulces? ¿Quieres
ir a ver a papá?
—Hola, Lale –el alfa miró a los demás, —Gaia –el pequeño ladeó la cabeza, ¿él
recordaba su nombre? Mew
miró a los mellizos —Athez
y Misael.
—¡Nos recuerdas a todos! –mencionó Misael, estaba sorprendido, la mayoría no
recordaba de inmediato sus nombres a la primera.
—¿Cómo no recordarlos?
–comento Mew —Por cierto,
¿qué se supone que están
haciendo aquí? Deberían estar con Gulfie...
Misael frunció el ceño al escuchar ese apodo, Gaia
parpadeó un par de veces al
escuchar eso, ciertamente no
les había gustado del todo el
apodo, aunque su hermana
mayor hubiera mencionado
lo genial, fabuloso y atractivo
que se trataba ese alfa, ellos no se sentían del todo convencidos al respecto, ellos
ya tenían a sus candidatos que podían ser sus posibles padres alfas, y Mew no estaba en esa lista, aunque Lale lo mantenía en lo alto del pedestal hasta ahora.
—Papá nos envió a entregar
unos ramos para damas de
honor –comento Athez –¡sus vestidos eran hermosos!
—¿Entiendo y qué me dicen
de los dulces? –los niños dejaron de verlo, la vergüenza se apoderó de sus rostros, Gulf casi nunca les deja comer mucha azúcar, y esta era una gran oportunidad para hacerlo. —No le diré nada a Gulf con una condición.
—¿Qué condición? –preguntó Gaia interesado.
—Llévenme con su padre
–mencionó Mew, —me gustaría invitarlo a salir.
—¡¿Una cita?! –Athez sacudió por los hombros a su mellizo agitándolo por la emoción de haber escuchado eso.
El alfa dió un asentimiento, Lale entrecerró sus ojos, sabe que su padre es un hueso duro de roer, no aceptaría
tan fácilmente, así que necesitaban brindarle ayuda
al alfa, Lale observó que el
señor que atendía el puesto de dulces había encontrado
los chocolates, de forma
decidida fue a pagar los
dulces de todos, y tomó la caja de chocolates, era pequeña, Gulf no gustaba mucho de los dulces, pero siempre podía considerarse un gran amante del cacao, en cuanto dió las gracias, salió corriendo afuera para encontrarse con el alfa.
—Papá no aceptará –mencionó Lale, a lo que sus hermanos estuvieron de acuerdo, —pero, puedes darle esto –le entregó la caja
de chocolates, Mew la miró por breves momentos para
después mirar a la pequeña
—apuesto a que papá aceptará de inmediato si le das un obsequio.
—Tienes razón –comentó Mew, aunque se le hacía un
hecho muy extraño que los
pequeños ayudaran a todo
esto, ¿planearan algo?
—¡Papá no espera! –mencionó Misael para comenzar a caminar, Athez
iba a su lado sin dejar de abrazar el brazo de su
hermano con insistencia.
Mew estaba desconcertado, muy desconcertado, esos niños parecían estar planeando algo, pero el problema aquí era ¿qué es lo que querían? Mew se extrañaba mucho de la situación, además de por supuesto esos comentarios
que había logrado escuchar,
Lale siempre comentaba algo que lo dejaba desconcertado, además estaba ese entusiasmo autentico al verlo y preguntar por su padre omega.
¿Acaso los niños están
buscando que Gulf tenga
pareja?
No, tal vez Mew se estaba haciendo ideas erróneas, eso sí que sería una locura, unos pequeños buscando una pareja para su padre omega, eso sí que sería digno de un
libro o una película.
EN EL PRÓXIMO CAPÍTULO
—¿Mew Suppasit? --el mencionado dejó de mirar a la niña para mirar al frente, encontrándose con la mirada de sorpresa que le lanzaba Boon Chinawut —¿En verdad eres tú?
—Boon –Gulf parpadeó un par de veces, ¿ellos se conocían? El mundo sí que es pequeño —¡Que sorpresa! ¿Vienes por flores para alguien?
—Vine a ver a Gulf.
—Es una casualidad –mencionó Mew acercándose en donde Gulf y Boon se encontraban —también vine a ver a Gulf.
Ambos alfas se miraban a los ojos, Gulf sintió como la sangre abandonaba su cuerpo, hace tiempo que no
ve a dos alfas querer marcar territorio, detesta cuando eso pasa, además estaban sus pequeños allí, no podían pelearse en ese momento, no ahora.
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