Jungkook
No dejo de pensar en Seokjin, en lo cerca que sentí su alfa, en sus manos acariciándome y en como lo ayudé a masturbarlo. Lo que me hace desear más intensamente que él lo haga conmigo.
¿Cómo se sentirá tener sus dedos en mí interior? O más bien ¿Cómo se sentirá el sexo? Tener su miembro y que su nudo se infle dentro de mí. Una fantasía que mi omega quiere que se haga realidad lo más pronto posible, pero que dejando a un lado mí calentura, me da miedo.
Cuando vi cómo se inflo el nudo de Seokjin parecía grande, eso me deja pensar en la dimensión de como algo de ese tamaño pueda estar en mi interior, como si quiera su miembro va a entrar en mi pequeño agujero, sería más grande que mis tres dedos juntos.
Con tan solo pensar lo que sería ser tomado por él me excita, de esta forma que siento que no es natural. Quisiera tenerlo aquí y que me vuelva a tocar de todas las formas posibles hasta que me haga sentir seguro y no sienta remordimiento cuando veo a mis madres hablando alegremente de cómo están teniendo una buena racha en el bingo y no estoy entendiendo mucho de lo que dicen.
Tocan el timbre y me apresuro a abrir la puerta pensando que quizás Taehyung llego antes de la hora acordada, pues después de esta semana tensa que ha pasado después de su celo, él necesita "calor de omega" lo que significa quedarse a dormir conmigo y aplicar su tediosa rutina de cuidado de la piel.
Abro la puerta y me encuentro con JiMin con sus manos a su espalda como si estuviera escondiendo algo, sonríe nerviosamente y se queda callado intentando ver al interior de mi casa.
—Hola Jiminssi ¿qué pasa? —le pregunto.
—¿Aún no llega Tae? —claro que JiMin sabe que Taehyung pasará la noche conmigo, pero no está invitado por obvias razones y menos por que él fue el que asistió a Taehyung en su celo.
—No ¿por qué? ¿quieres pasar? —abro espacio para que pase, pero él niega.
—¿Puedo esperar contigo? Aquí afuera... podemos sentarnos en la banqueta.
Asiento y cierro la puerta para sentarme al lado de JiMin, supongo que hay algo de lo que quiere hablar, pero aún se pone nervioso. Al llegar a su lado puedo ver lo que lleva en sus manos, una pequeña caja de chocolates y una margarita del jardín de su casa.
—Y ¿eso? —le señalo.
—Es para Tae... creo que sigue molesto conmigo, mi mamá dice que a los omegas les gustan este tipo de cosas.
—Si es un bonito detalle —intento animarlo, a pesar de que el físico de JiMin ha cambiado, él sigue siendo esa persona dulce con nosotros. Ahora las cosas entre mis amigos se han puesto tensas, especialmente porque Taehyung sigue muy ofendido a pesar de las disculpas de JiMin.
Por la calle aparece el auto del papá de Taehyung y se para enfrente de nosotros. Taehyung sale del auto despidiéndose de su papá con su bolso de mano y con su típica boina combinada con su chaleco amarillo. Al ver a JiMin su sonrisa desvanece un poco, es cierto Taehyung quería al menos el fin de semana sin estar cerca de JiMin.
—Hola —saluda simplemente.
—Estas aquí —intento intermediar entre estos dos, le doy un pequeño abrazo a Taehyung —. No seas cruel con él —le susurro. Él suspira no muy conforme.
—¿Qué pasa Jiminssi? No me digas que te piensas unir a la noche de omegas —ni al caso solo somos dos, pero era una forma de decirle a JiMin que no sería prudente que estuviera con nosotros.
—No Tae, solo vengo a darte esto —le entrega la caja de chocolates y la flor.
—Y ¿esto por qué? —toma lo que JiMin le ofrece con duda.
—Sé que sigues enojado conmigo... no quiero que estemos así.
—Ah, ya te dije que no estoy enojado, olvídalo Jiminssi, además no importa si no te gusta o te da asco mi omega... a mí tampoco me gustas como alfa.
—Tae —le recrimino, pero el solo se encoje de hombros.
—Está bien —dice con desanimo JiMin —. Solo no quiero que nuestra amistad se vea afectada.
—Para nada, ahora nuestra amistad es más... sincera —noto el sarcasmo en su voz.
—Gracias por el detalle Jiminssi —digo lo que Taehyung debería decirle, aunque pretenda que está bien no me lo parece —. Nos vemos mañana en la iglesia.
JiMin asiente y dibuja una pequeña sonrisa para irse hacia su casa, tomo la mano de Taehyung para llevarlo al interior de mi casa, el me sigue sin protesta, seguramente lo que más quiere en este momento es estar lo más lejos posible de JiMin para quejarse de él.
Taehyung saluda a mis madres con su linda sonrisa, mi madre omega sin pensarlo viene a abrazarlo y preguntarle como paso su celo con JiMin, lo que no ayuda para nada y Taehyung se pone más tenso. Llevo a Taehyung a mi habitación para evitar las preguntas incomodas de mi madre.
—¿Cómo es que todos lo saben ya? —suelta con enojo Taehyung dejándose caer sobre mi cama.
—Mis mamas hablan de todo con los Park —tomo su bolso para acomodarlo al lado de la cama.
—No me refiero solo a tus mamas... en la escuela también lo saben.
—Estas paranoico Tae, en la escuela aparte de nosotros lo sabe Soobin y Beomgyu, nadie más.
—Pues no me sorprende que a uno de esos dos se le haya soltado la lengua —suelta con enojo.
—¿Qué pasa? ¿por qué estas tan seguro que lo saben más personas? —me siento a su lado y acaricio su espalda para animarlo a hablar.
—Ayer a la salida se me acerco Tzuyu... fue tan raro, enserio Jungkook ella es tan rara, parece que un día no me soporta y al otro se vuelve... pasable —Taehyung está divagando en sus pensamientos.
—Y ¿Qué paso con ella? ¿Qué te dijo?
—¿Recuerdas la gorra me dio cuando fuimos a su restaurante de pollo frito? —asiento, recuerdo la forma tan rara que fue y le puso la gorra en su cabeza —. Estaba marcada con su olor... ella dijo que era un regalo de cortejo y después la cago diciendo que si andaba tan urgido debí pedirle que asistirá mi celo y no mi inexperto amigo.
—Que grosera... entonces es cierto, le gustas y ¿a ti te gusta?
—¡Eso no es lo importante! Lo importante es como ella lo sabe cuándo no compartimos a ningún amigo en común ¿te imaginas cuantos más lo sabrán?
—Bueno... cuando estábamos en la biblioteca tú y JiMin no fueron muy discretos y varios se dieron cuenta —apenas lo digo y el me fulmina con la mirada.
—Todo es culpa de JiMin —señala, niego rápidamente, no es a lo que quería llegar —. Tonto alfa, como pretende que mi omega se sienta halagado con unos chocolates de la farmacia y una flor cortada de su jardín —agita la pequeña margarita, que resiste y ningún pétalo cae.
—Sí fuera una flor comprada ya se estaría deshojando ¿quieres que la ponga en agua?
—No, sí se marchita solo tendré que venir al jardín de JiMin por otra —dice con sarcasmo.
Lo dejo pasar, de todos modos, aún sigue a la defensiva. Le cambio el tema para calmarlo y llevarlo a la cocina para que me ayude a subir a mi habitación lo que he preparado para nosotros. Nos cambiamos a nuestros pijamas para comer y comenzar a ponernos las nuevas mascarillas que ha traído Taehyung, mientras le cuento todo lo que ha pasado con Seokjin.
—Seokjin está alterando demasiado a mi omega, es como si me estuviera volviendo adicto a él y cada vez quiero más y más —le cuento.
—Quizás tú omega ya reconocido a su alfa, además no sé por qué te sorprende si ya estabas obsesionado con él y Seokjin es un alfa de ensueño —hace un pequeño puchero aún sobre la mascarilla que tiene sobre su rostro.
—Es una lástima que no recuerdes lo que paso en tú celo... tú siempre eres el primero que experimenta las cosas, ahora quien me va a decir como es tener sexo... al menos que te animes con Tzuyu...
—¡No digas eso! —me regaña y solo me rio. Él se queda callado y serio por un rato debatiendo algo dentro de su cabeza —. Jungkook ¿puedo contarte algo y no se lo dices a nadie?
—Si Tae, sabes que soy bueno guardando secretos —justo tengo secretos que no puedo ni si quiera contárselos a él.
—Lo recuerdo todo, todo muy bien lo que paso en mi celo —dice como si esto le ocasionara gran malestar.
—Oh —me sorprende y a pesar de la inmensa curiosidad que tengo, lo menos que quiero hacer es ponerlo incomodo —. ¿Quieres hablar de eso?
Él se acuesta por completo en mi cama mirando hacia el techo, lo imito y me acuesto a su lado esperando que él rompa el silencio.
—Recuerdo todo lo que acordamos JiMin y yo, lo que estaba prohibido y como rompimos la mayoría de esas cosas —suspira —. Acordamos que no nos besaríamos, que evitaríamos dejarnos marcas en la piel o que no nos olfatearíamos demasiado... pero hicimos todo eso, aún soy consciente de cómo se siente los labios de JiMin ¿te has dado cuenta de los gruesos que son? Porque hasta ahora no puedo dejar de mirar lo carnosos que son y ¿desde cuándo besa así? Pensaba que él era tan virgen como tú.
No tenía idea de eso, quizás hay cosas que JiMin nos ha ocultado desde que se presentó como alfa o quizás nos ha ocultado la relación que mantiene con Yoongi, siempre me ha parecido extraña, ahora me puedo imaginar a JiMin y al beta teniendo algo oculto, por eso para JiMin era tan fácil asistir a Taehyung, cuando él antes había dicho que quería tener su primera vez de una forma especial y que se negaba cumplir los instintos que tenía su alfa de solo follar.
—Dejo pequeñas mordidas en varias partes del mi piel, cuando lo estaba haciendo sabía que eso era algo que le había prohibido... pero se sintió bien, sentir como su alfa estaba hambriento de mi cuerpo y sabes que no soy tonto Jungkookie... aunque JiMin dice que quedo asqueado de mi olor, no le creo, él miente, supongo que no quiere hacer las cosas incomodas y eso es lo que me molesta tanto, que lo haga de esa forma, cuando recuerdo como cada vez que podía buscaba mis glándulas de mi cuello cada vez que descansábamos o no se podía mover por tenía que esperar a que su nudo se desinflara.
La decepción inunda la voz de Taehyung, ahora entiendo porque se comporta de esa forma con JiMin, aunque tampoco sea la correcta. Tomo su mano y la acaricio para darle un poco de confort.
—Tú siempre dices que sea sincero y que no me complique la vida ¿Por qué no le dices a JiMin que recuerdas todo? Quizás él crea que es el único que recuerda y está evitando ponerte incomodo —ni si quiera sé si es un buen consejo, solo quiero que las cosas dejen de estar tensas entre ellos, siempre hemos sido los 3, no quiero que se comiencen a alejar.
—No lo sé, siento que él cree que, si hace como que no recuerda nada, es como si no hubiera pasado... que tonto fui, creía que podíamos dejarlo en solo follar.
—No me digas que crees que JiMin se ha enamorado de ti solo por eso.
—Bueno regalar una flores y chocolates son regalos de cortejo.
—Pero también lo pueden hacer los amigos ¿desde cuándo te volviste tan tradicional? Además, él te lo regalo como una disculpa... al menos que eres tú el que este sintiendo algo más por él.
—No te imagines cosas —se levanta de la cama para quitarse la mascarilla.
—Bueno tuve razón con lo de Tzuyu.
Él no está muy contento y mucho menos lo admite, lo dejo pasar por que tampoco sé si sea bueno que entre mis mejores amigos se desarrolle algo más que amistad, hasta ahora como van las cosas no pintan muy bien y si todo se complica más no quiero tomar un bando entre ellos dos.
JiMin vuelve a cantar como la voz principal en el coro y es un alivio que lo haga él, la semana pasada los nervios no me dejaban en paz, pensaba en todas las formas posibles en las que me podía equivocar, pero para mí alivio todo paso tan rápido y fue más fácil de lo que me imagine, aunque tampoco me quedan muchas ganas de repetirlo.
Al terminar la celebración guardo mis hojas en mi carpeta para irme, pero JiMin se acerca a mí de la misma forma nerviosa que llego ayer a mi casa, como si quisiera decirme algo, pero no se anima.
—¿Qué pasa Jiminssi? —le pregunto ante su silencio.
—¿Qué dijo Tae de mi regalo? —pregunta, sé que JiMin es tímido, pero no conmigo al menos y ahora ni si quiera puede evitarlo.
—Le gusto —decido mentirle —. Ya sabes cómo es Tae, aún está sentido, pero se le pasara si te sinceras.
—¿Me sincero, de qué? —él frunce el ceño —. Ya me disculpé y de verdad me arrepiento de decirle eso.
Lo miro analizando su cara preocupada y supongo que Taehyung tiene razón, JiMin miente y se ha de acordar más de lo que dice, pero no entiendo porque lo oculta.
—Pero si dijiste eso es por algo ¿de verdad aún sientes repulsión por los omegas?
Él mira hacia todos los lados con nerviosismo, aprieta sus labios y niega con la cabeza.
—No es el lugar para hablar de eso... me tengo que ir, tengo una cita con Yoongi más tarde —dice tomando distancia, pero antes de que se pueda ir me interpongo en su camino.
—Espera, ¿ahora estas saliendo con Yoongi?
—Algo así —dice y se va antes que pueda digerir todo, aún tengo muchas dudas, pero tampoco tengo que presionarlo.
Alguien toca mi hombro y volteo rápido para encontrarme con la bonita sonrisa de Seokjin que me hace relajarme de la incomodidad que me hace sentir la situación de mis amigos. Siento a mi omega brincar, si no estuviera en la iglesia y a la vista de mis madres no me contendría en lanzarme contra él. Intento mantener mi mente limpia y evitar desviar mi mirada hacia su parte baja, me siento tan sucio con tan solo darme cuenta de lo mucho que quiero ver su miembro otra vez.
—Hola —saluda
—Hola, pensé que venir a la iglesia sería aburrido para ti.
—Tenía la esperanza que volverías a cantar —dice como si estuviera decepcionado.
—Bueno JiMin regreso.
—¿Sabes quién más regreso? —pregunta, aunque ya me había mensajeado que su papá llego ayer —. Mi papá y quiere conocerte ¿tus mamas te dejaran ir a mí casa?
—Sí les decimos que tus padres estarán ahí, si — sé que es cierto, pero también me gustaría que fuera un pretexto para estar solas con él.
—Bien, por cierto, él quiere hacer unas pequeñas pruebas... para comprobar sus teorías sobre nosotros —dice con cierto temor.
Hasta ahora ya no le había dado vueltas a eso porque pensaba que habíamos quedado que somos destinados y por eso es fácil para su alfa sentir a mí omega y para mí omega perder los límites con él ante cualquier pequeño estimulo. Pensaba que solo era cuestión de tiempo, esperar a que su alfa despertara poco a poco y a que los dos presentáramos nuestro segundo aroma para confirmarlo.
Eso es lo que pensaba, pero Seokjin ¿tenía dudas?
Quizás sí, por eso quiere hacer estas pruebas.
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