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CAP. 3 La mirada delata

Stella Carter

  Hoy me sentía más tranquila, después de dos días de reposo, he regresado a clases. Tuve que dejar que mi madre me trajera al colegio para que pudiera estar más tranquila, después de todo, el golpe que me llevé, no fue del todo normal.

- me alegra que andes mejor y que veas de otra manera la situación que tenemos actualmente - me abrazo con cariño Jack, hoy tenía un humor completamente distinto.

- gracias, bueno, quiero estar un poco más actualizada ¿Qué tenemos de nuevo? - dije feliz y ellos soltaron una sonrisa picara.

- bueno, primero que nada, Mack lleva días preguntando por ti...

- hasta nos ha pedido tu número - me guiñó el ojo Noah, yo instantáneamente me sonrojé.

- ¿En serio? - tragué con fuerza, debo admitir que ahora todo lo que tiene que ver con Mack, me pone un poco fuera de este mundo.

- pues si, pero recuerda lo que te dijimos... No puedes ponerte a recordarlo de golpe... Existen las posibilidades de que se conozcan, pero lo mejor que puedes hacer, es dejar que todo fluya de mejor manera ¿Bien? - me miró con ternura Jack, en estos momentos, ambos tenían toda la razón del mundo.

- ¡STELLA! - gritaba a medio pasillo mientras corría un Mack con una sonrisa de oreja a oreja, me abrazó con mucha fuerza y alegría, les juro que no puedo respirar.

- Mack... Suelta..

- lo siento - aligeró el abrazo - ¿Cómo sigues? Casandra y Noah me habían dicho que tuviste una decaída y te golpeaste - vio el pequeño morado en mi frente y estuvo a punto de tocarlo, pero le di un buen golpe en la mano.

- aún me duele, no toques, ya estoy mejor, pero necesito estar relajada, eso es todo - suspiré con tranquilidad y seguido de eso, se escucho el timbre para entrar a clases.

- bueno, hoy es un día diferente, Stela carga completo el uniforme - dijo con sarcasmo Jack, es un idiota.

- calla tu boca y vamos...

  Seguido de eso, no lo pensamos 2 veces y corrimos hasta nuestras aulas de clases. Las clases estuvieron aburridas como siempre, estuve toda la clases de Botánica pensando en Mack, no sé porque siento que también lo he visto en mis sueños, es verdaderamente raro todo esto...

- Señorita Carter ¿Está prestando atención a la clase de ciencias?  - me miró con enojo la Profesora Mirta, no me acordaba que ya habíamos pasado a la clase de Ciencias.

- no Profe Mirta, lo lamento - me levanté y bajé la cabeza en modo de disculpa, odiaba ello, pero me tendrían que creer cuando digo que no quiero que me bajen la nota. 

- esta bien, me imagino que tu distracción estará conectado con tu accidente, tranquila, eres una de mis mejores alumnas en ciencias, haz pareja con Mack, vamos a practicar con los tubos de ensayo - me miró con tranquilidad, pero la verdad, no estaba para nada tranquila y menos sabiendo quien era mi compañero de laboratorio.

- muy... muy bien - dije nerviosa, Mack sonreía, que extraño es todo esto, en serio.

- me alegra que seas mi compañera de laboratorio, será divertido aprender de la mejor alumna en ciencias - realmente no quiero estar con Mack.

  Hicimos varios experimentos y algunos me salieron un poco fallidos, la profesora Mirta me vio bastante raro y pudo notar un brillo especial en los ojos de Mack y unos claros nervios en los míos.

- Stella, dime algo.. ¿Te gusta Mack? - me había sacado hasta el portal del aula de clases para preguntarme eso, ella me miró fijamente a los ojos, yo rápidamente me sonrojé. 

- no no no, no es lo que parece profe Mirta, es solo...

- Alumna, no me mientas - me miró fijamente nuevamente, mentirosa no soy.

- es solo que algo me dice que conozco a Mack... Solo quiero saber de donde lo conozco y la situación me deja pensando mucho - dije un poco deprimida, la profe me abrazó.

- tranquila, ve, toca el último experimento y podrás ir a tu próxima clase - en la que está incluido también Mack.. Un momento, ¿Por qué está en casi todas mis clases?

  Entré nuevamente y me senté con Mack, estaba arreglando algunos tubos de ensayo al igual que él y de repente sin querer, ambos nos agarramos las manos y nos miramos por un instante. Vi en su mirada un brillo muy especial y aparte, una excelente cantidad de nervios. No sé que vería él en mi, pero su sonrisa era bastante nerviosa.
  Retiré mi mano rápidamente y comencé a hacer el experimento, pero me temblaban demasiado las manos... ¿Por qué? No comprendo que es lo que me ocurre...

- Stella, ese no es el tubo correcto ¡Espera! - dijo la profe Mirta, pero su grito me asustó y vertí mal el contenido del frasco y explotó en mi cara y en la de Mack... ¡Duele! Eres una tonta Stella.

  Rato después nos encontrábamos ambos en la enfermería y todo por mi culpa, de verdad que soy un completo desastre, debí escuchar un poco más a Jack, en vez de estar como loca concentrándome en encontrar respuestas, en pensar tanto en Mack y..

- oye Stella, disculpa ¿Cómo te sientes ya? - me dijo Mack con mucha ternura, se sentó en mi camilla, no pude evitar sonreír por la forma en que lo dijo.

- mejor, gracias ¿Tu como estás?..

- ya, estoy mejor, me alegra que no te haya pasado nada - me abrazó con ternura, con ese abrazo, vi un raro recuerdo, vi un niño, abrazándome, era Mack cuando estaba pequeño, me estaba abrazando a mi - hey Mack, dime, tú..

-  ¡MACKY! - llegaron las gemelas a la enfermería pegando gritos de desesperación mientras corrían a abrazar a su hermano mayor.

- nos enteramos del accidente en el Laboratorio de Ciencias ¿Estás bien?

- solo tengo quemaduras y ya Malena, todo bien..

- pero ¿Cómo pasó esto? - Mackena me miró confundida y yo bajé la mirada.

- es que..

- sin querer empujé a Stella y pues, vertió la cantidad de químicos muy mal y..

- ¡MACK IDIOTA! - ambas hermanas gritaron molestas y me reí intensamente por la divertida reacción.

  Rato después, mami fue a buscarme al colegio para que me fuera a descansar, pues tenía quemadura por mi cara y brazos, me ardía el cuerpo.

- bueno, es muy raro que la alumna experta en química, de repente no vierta de manera correcta los químicos... ¿Me puedes explicar que fue lo que te pasó? - me miró mi madre bastante dudosa ¿Qué respuesta le puedo dar ahora?

- bueno... Es que.. Un chico.. - y mi madre freno de golpe y me di nuevamente un golpe en la frente.

- ¿Un chico?... - me miró con mucha picardía - mi hija, ¿Está enamorada?

 ¿En serio?.. Mi madre freno de golpe solo para preguntarme una cosa como esa ¿Es en serio? Mi madre está paranoica, me duele nuevamente la frente. 

- primero, no vuelvas a frenar de esa manera, segundo, no, no estoy enamorada madre, simplemente siento que lo conozco, pero la verdad no sé de donde lo conozco y eso me está llevando al borde del colapso - dije con desesperación mientras agarraba mi cabeza, en serio todo esto me estaba carcomiendo por dentro. 

- hija, ¿Cómo se llama ese chico? - su expresión feliz cambió a ser una completamente neutra, eso era raro, pero algo me decía que tenía que decirle la verdad.

- se llama Mack Benentton - la miré con la misma expresión y ella hizo una sonrisa de lado.

- te recomiendo que pases más tiempo con él y que habrás la carta de Sam el día de mañana - sonrió y siguió manejando tranquilamente, ¿Qué tiene de especial el día de mañana? 

...

Mack Benentton

- y ¿Por qué te culpaste a ti mismo por ello? - me miraba muy extrañada mi hermana Malena - acaso, ¿Pensaste que le íbamos a hacer algo a Stella?..

- lo cual es lo más obvio viniendo de nosotras 2...

- Mackena - miró con molestia Malena a Mackena, mis hermanas son un personaje realmente - como sea, si Stella está así es por algún motivo en especial, digo yo

- pues si - sentí mis mejillas arder, estoy empezando a sentir cosas por ella, aunque realmente es tonto, solo tengo una semana conociendo a Stella.. Aunque algo en mi, me diga que la conozco de algún lado.

- hermano, andas igual de raro... Las miradas delatan muchas cosas ¿Lo sabías?... Ambos se gustan - se reía de mi Malena, yo sinceramente no encontraba como responder a las burlas de mis dos hermanitas menores, no creo que en serio sienta algo por Stella realmente.. Será que, ¿Tal vez, si?

  Al llegar a casa, mamá me recibió con un abrazo, su sonrisa no era la misma de siempre, ésta transmitía mucha alegría y serenidad.

- bueno mi querido niño, el día de mañana podrás abrir el regalo que tu tío te dejó antes de morir y será un completo alivio para ti - puso en la mesa los platos de comida mientras me hablaba ¿Qué tiene de especial el día de mañana?

  La noche estuvo tranquila y serena... Pero la verdad no pude dormir nada. Pasé la noche sentado en la terraza de mi casa, la vista era linda después de todo. Era noche de luna llena... La luna llena me hacía recordar algo... Me hacía recordar a ¿Stella?..

Flash Back

- luna, lunita bella... Siempre brillando, siempre eterna..

- cantas muy lindo amiga - dije acostado a su lado.

- gracias Macky - dijo de forma dulce y tierna - me gusta las noches de luna.. Mami dice que la luna brilla gracias al sol, son grandes compañeros. 

- si, como ustedes dos mis niños - llegó la madre de Stella y se sentó con nosotros - y al ser así, les entrego algo muy importante - sacó de una bolsita de tela un collar de luna y uno de sol - tomen, Stella será la luna.. Y tu mi querido sobrino, serás el sol..

Fin del Flash Back. 

- Stella.. La luna.. Madre - salí corriendo de mi habitación y entré en la habitación de mi madre dando una patada a la puerta - María Katrina de Benentton - se despertó mi madre asustada y mi padre se cayó de la cama con un giro que dio.

- Mack, por favor ¿Me puedes explicar que te sucede? - cuando mi madre se levantó furiosa, pude ver en su cuello el collar de sol, ese era mi collar.

- ese, es mi collar - señalé sin dudarlo más, mi madre estaba en completo shock y mi padre se levantó sonriente, me abrazo fuerte y comenzó a llorar.

- recordó Katrina.. Sus recuerdos están regresando - decía llorando sin control alguno - ¿Qué más recuerdas? Dime..

- Mario, no le hagas esas preguntas aún, no lo agobies - se levantó tranquila, me miró y seguido de eso, puso en mi cuello el collar - recordaste la luna ¿Verdad?..

- Stella.. Es la luna.. No logro recordar más nada por ahora.. Pero si recuerdo que ese collar, fue un regalo que me dio la Señora Selina, la madre de Stella.. Mi tía Selina, es tu mejor amiga.. 

  Vi como mi madre sonrió con nostalgia y me abrazo seguido de eso, ella estaba feliz de que estuviera recuperando mis recuerdos, yo estaba feliz de recuperar mis recuerdos, bueno, una parte realmente, no saben lo feliz que me pone saber que puedo seguir recordando, aunque aún no sé el motivo de mi perdida de memoria.

- madre.. Necesito comprender algo y es el ¿Por qué perdí mi memoria? No lo entiendo.. Stella tampoco me recuerda ¿Por qué?..

- hijo, hay cosas que tienes que recordar poco a poco, no te apresures ¿De acuerdo?..

  No podía ponerme grosero con mi madre, tampoco podía exigirle que me dijera la verdad, así que asentí tranquilo, la abracé y me fui nuevamente a mi cuarto, ahora entendía perfectamente las cosas, ya conocía a Stella desde muy pequeños, siempre hemos sido amigos, ella es mi luna.

- creo que es hora de tomar las riendas de la situación e ir recordando poco a poco, me quiero proponer a recordarte Stella Carter..

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