[Ao'nung ]
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Si... todo fue peor de lo que pensaba.

Si antes las miradas me incomodaron, ahora me estaban ahogando. Todo se volvió pesado y casi asfixiante, no debí venir... talvez la oferta de Lo'ak hubiera sido mejor.

-Ma'nung!- las manos de Neteyam me tomaron del rostro y me sacaron del bucle de malos pensamientos- respira...

-Eh?- aun me costaba concentrarme, las miradas y los susurros.

-Mírame...

Eso me hizo reaccionar y de inmediato busque la mirada de Neteyam. Se veía preocupado y frustrado, pero... no parecía estar viendo a nadie más, sólo yo.

-Si... te veo.

-Bien, ahora escucha bien- susurro- alzaras la cabeza como antes y demostraras porqué eres el sucesor del Olo'eyktan. Entendido?

-Pero...

-Aun tienes ese puesto, aun eres hijo de Tonowari y te deben respeto no?

-Si, eso creo.

-Vamos, no me dejaste derrumbar antes, yo tampoco lo haré ahora.

-Si... tienes razón- entrelace nuestras manos y suspire antes de tratar de seguir avanzando.

-No están solos tontos- Lo'ak se recargo sobre mi espalda.

-Bueno, no pero...

-No habla sólo de él- Tsireya llego con nosotros, seguida de Rotxo, Kiri y Tuk.

-Que hacen aquí?- pregunte sorprendido.

-Obvio, comer con ustedes- replico Tuk.

-Estamos en esto juntos, no solo ustedes... todos fuimos a rescatar a Payakan- aseguro Kiri.

-Saben que esto no es por salvar al Tulkun- fruncí el ceño

-Pues entonces a esta gente se les olvida lo que realmente importante- Lo'ak alzó la voz para llamar la atención.

Eso por lo menos los volvió mas discretos y nos dejaron de mirar un poco.

-Vamos- Rotxo nos dio nuestra porción de comida y nos sentamos un poco alejados de los demás.

-No esta siendo esto un poco incomodo?- Tey menciono, una vez que empezamos a comer.

-Están así desde ayer- contestó Tsireya- el hecho de que humanos nos ayudarán con los heridos los confundió, también el rumor de que nuestros padres están enojados con Ao'nung y... bueno, verlos tan juntos ha sido el detonante.

-Creerán que es mi culpa?- pregunto Neteyam, pero con poco interés.

-No es tu culpa- gruñí.

-Eso significa que sí...- se burló.

-Ao'nung!- la voz de mi padre sonó más alto que todo el bullicio que había- Acompáñame...

Con eso volvió a salir de aquel lugar. Voltee a ver a Neteyam y este parecía nervioso. Tsireya también estaba preocupada, joder.

-Puedo ir contigo- sugirió Tey.

-No, déjame hablar primero con él.

-Ya lo hiciste solo... esta vez quiero hablar también.

-Puede que sea mejor idea que vayan juntos, cualquier decisión les incumbe a ambos- dijo Tsireya.

-Estás seguro?- voltee de nuevo a Tey- no creo que sea una platica muy buena...

-Esta bien, estamos juntos en esto.

Se levanto antes de que si quiera respondiera, Tsireya me alentó, pero notaba los nervios en sus ojos... ella era más expresiva de lo que le gustaría.

Suspiré y camine junto a Neteyam bajo las miradas de todos, nunca pensé estar en una situación como esta... toda esta gente apenas hace un día, me sonreían y se alegraban de mi ayuda, me felicitaban por ser un gran futuro líder... y entiendo que tengan miedo, pero me conocen desde que nací, por qué no me dan la oportunidad?

Probablemente la actitud de mis padres influye, aah una mierda.

-Has pensado... que hacer si esto no funciona?- su voz tembló.

-No- abrace disimuladamente su cintura y me pegué a él- te refieres a el futuro? O ahora?

-Pensaba a futuro...- se mordió los labios- ya sabes... entiendo lo difícil de nuestra situación, yo no pertenezco aquí y... que nos uniéramos complicó también tu situación.

-Tu perteneces aquí.

-Sabes de lo que habló, mi situación no es normal... y no me quejo, me alegro de que todo ese mal rato me trajera a tu lado, solo que... como vamos no se si mi familia se quedara o yo mismo...

-Piensas irte?- me asuste.

-No!! No sin ti, por lo menos- se encogió.

-Nunca lo pensé... aunque era una posibilidad nuestro enfrentamiento con nuestros padres, esperaba que todo se arreglara.

-Aunque se arregle, no será lo mismo.

-Y a donde iríamos? A tu clan?

-No... o no sé, es mi hogar, pero no sentiría justo que ahora tú te enfrentarás a una nueva cultura sólo... yo por lo menos tenía a mi familia.

-Eso es...- no lo había pensado- no lo sé Tey, de verdad, quisiera tener una respuesta, ser más fuerte o poder darte algo más estable, pero es... ridículo, tenemos 15 años y entiendo que apresuramos las cosas... pero eres lo más seguro que tengo.

-También yo Ma'nung, podemos pensarlo después... solo quería preguntar por si hay que hacer algo.

-Pensémoslo mejor... quiero creer en ellos...

-Haré lo que creas conveniente.

-Lleguemos a un acuerdo y...

-Ao'nung- la voz de mi madre nos hizo retroceder un poco, cuando se paro muy cerca de nosotros- solo pedimos hablar contigo.

-Nos involucra a ambos, así que lo resolveremos juntos- defendí a Tey, enfrentando a mi madre y dejándolo a él un poco atrás.

-Ustedes no entendieron el error que cometieron- estábamos cerca de nuestra casa, pero aparatos de la gente, cerca de la playa.

Empezó a caminar a la casa central, donde ellos reunían a nuestro pueblo para tomar decisiones... y cada vez me veía en peor situación. Apenas llegamos note a mi padre, pero a nadie más y por lo menos eso me dio algo de paz.

-Vinieron ambos?- preguntó mi padre.

-Estamos juntos en esto, era justo que viniera también- gruño Neteyam.

-Hagan lo que quieran, ya comprobaron que no escuchan a sus líderes- afirmó mi madre.

-También son mis padres -fruncí el ceño- no deberían ser menos estrictos?

-Con mayor razón- frunció el ceño- te hemos dado todo Ao'nung, por qué desobedecer ahora?

-No es así!- me exalte- no es que no aprecié todo y tampoco es que dolo me uniera para ir en su contra.

- Entonces?- pregunto mi padre igual de frustrado.

-No quería que tomaran esta decisión- Tey puso su mano sobre mi espalda y trate de tranquilizarme- nunca me he quejado por nada de lo que me piden, porqué es razonable... son cosas que me han servido en mi vida, pero... unirme a alguien, estar toda mi vida con alguien a quien no amo.

-Por eso te dimos opciones, mujeres valiosas para nuestro clan- alegó mi madre- Podías conocerlas, enamorarte de una de ellas y cuando fuera el momento... unirse.

-No! No es así- me defendí- aunque me enamorara de alguna de ellas, seguían siendo tus opciones, seguía siendo tu elección.

-Ao'nung, es algo... de nuestras tradiciones. Siempre la mejor mujer debe estar a tu lado, uno para llevar el clan y otro para ser el vínculo con Eywa- explicó mi padre.

-Me se la historia, no necesito que me lo digas de nuevo- suspire- es solo que...

-No tiene sentido esta discusión- interrumpió Tey y los tres volteamos hacia él- ya esta hecho, así que aceptando eso, que quieren hacer?

-Después de saber que arruinarte...

-No arruine nada- se defendió- ustedes son quienes nos juzgan, claro que esperaba reclamos... sigo siendo un forastero, pero castigar de esa manera a Ao'nung?

-Debe tomar responsabilidad por lo que hizo.

-Y esta aquí haciéndolo, pero solo escucho una platica incoherente... estamos unidos y hablan como si no lo estuviéramos o fuéramos.

-Podíamos evitar esto, si hubieran hablo antes de tomar una decisión tan importante.

-Para qué? Para evitarlo? - interrumpí- no, esta fue la mejor decisión.

-Podemos avanzar en esta platica?- gruño Tey- ya no hay cambios en lo que hicimos, que quieren hacer ahora?

-Tu eras el siguiente Olo'eyktan, que se supone que hagamos con Neteyam como tu pareja?- pregunto mi padre.

-Pueden tener a Tsireya como la Tsahik- sugerí- ella esta lista.

-Eso es...- mi madre dudo.

-No perderán nada... sus hijos seguirán llevando a los Metkayina -apoyo Neteyam.

-Tsireya...- se quedaron callados- ella no esta lista.

Me estaba hartando, esta platica solo era para juzgarnos. Ni siquiera parecían querer ceder... cual era su propósito? Que cediera a lo que quieren?

-Si no aceptan lo que tengo con Neteyam, entonces yo mismo renunciare...- sentencie- puede que Tsireya o mi hermano menor cumplan sus expectativas.

-Ao'nung!- grito mi padre

-Vamonos- tome la mano de Tey y salimos de ahí.

No lo solté hasta que llegamos a mi pequeña tienda escondida... fuera de la aldea y me derrumbe. Grite y solloce, mientras Tey me abrazaba y trataba de darme apoyo.

-Por que dijiste eso si te ibas a arrepentir?- me susurro mientas acariciaba ni espalda para tranquilizarme.

-No nos iba a dejar en paz si no lo decía... no quiero que no te acepten, no tenían intención de escucharnos.

-Ellos... escucharan, eres su hijo...

-Solo... olvidemos por ahora, pensemos que hacer mañana.

-Primero esperemos una respuesta de ellos.

-No, hagamos nuestro plan... para lo que sea que pase.

-Bien... hagamos eso...

Si, lo arreglaremos.