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Sueños y Esperanzas

-Bien, es hora de reorganizarnos.

Phineas toma nota de los daños y las reparaciones, así mismo intenta trazar un plan para poder regresar a los refugiados a sus respectivos mundos y rescatar a las dos chicas que cayeron, y resguardar el cubo en el cual contienen al monstruo.

-Esto está tardando tanto, solo vamos a rescatarlas de una vez- dice Buford perdiendo la paciencia.

-Tranquilo Buford, lo haremos pero debemos resguardarlos antes. -Mientras hablas ellas podrían estar en peligro, voy a...

-¡No hagas nada Buford! No puedes saltarte los protocolos, eso es lo que causó todo este desastre en primer lugar.

-No me grites Phineas, no soy Candace, a veces uno tiene que saltar a la acción porque no hay tiempo de pensar.

-Buford si no te controlas me temo que debo pedirte que vuelvas a la base.

-Tsk, como sea- Buford se va a una cabina.
-Coraline, por favor vigílalo para que no haga alguna locura.

Coraline asiente y se dirige donde Buford, los refugiados se sienten incómodos por la escena y algo empáticos con Buford, así mismo preocupados por Hilda y Mabel ¿Quién sabe lo que les estará

...

pasando? Sprig decide dirigirse también donde fueron Buford y Coraline, y así mismo los demás fueron siguiéndolo.

Buford estaba rebuscando en unas cajas de un compartimiento. -¿Qué estás haciendo Buford?
-Iré a buscarlas.
-Buford lo vamos a hacer.

-Pero no pienso esperar más tiempo, lo haré ahora- dice sacando un control.

-Buford, no irás a ninguna parte... no sin mí.

-Y tampoco sin nosotros- dice Sprig- Hemos pasado por mucho en muy poco tiempo, no las vamos a abandonar.

-¡Si yo voy también, no dejamos a nadie atrás!- dice Paco. -... Si, yo también- dice Wirt.

Entonces Buford los ve fijamente a todos y decide emprender marcha. Kim va a ver si están bien, pero ya todos se habían ido.

-¡Phineas! ¡Buford, Coraline y los niños ya no están! -¡Oh no!

-¿Frida? ¿Realmente eres tú? -Soy yo Hilda, ya estas a salvo.

Hilda entonces corre a abrazar a su amiga, por fin se siente segura y no la quiere abandonar.

-Lo siento, yo me metí en esto.

...

-Tranquila Hilda, todo va a estar bien- Pero entonces un brillo extraño empezó a emanar de Frida.

-¿Qué?

De repente los ojos de Frida cambiaron a un blanco intenso, y empezó a flotar con un aura rodeándola.

-No.

Hilda empezó a correr, pero mientras corría árboles salían del suelo brotando como margaritas.

-No hay donde correr Hilda, de verdad lo siento.

Entonces emergió una cabaña de madera, era la antigua casa de Hilda, donde vivía con su madre, se vio a si misma y a ella disfrutando de una tranquila noche, hasta que el pie de un gigante pisó la cabaña, Hilda se cubrió los ojos para evitar los escombros.

-NOOOOOOOOOOO, FRIDA... que... que estas haciendo.

-Lo siento...

Entonces absorbió a Hilda en un vórtice que la llevó a un espacio oscuro en el cual la estaban rodeando todos los monstruos que la persiguieron antes, la otra madre, la bruja del mar, la niña genocida, los robots monstruosos, el deforme gato. Todos la rodeaban y sobre ellos Frida absorbiendo todo el miedo que desprendía Hilda, hasta que los monstruos comenzaron a desvanecerse sorprendiendo a Frida y Hilda. Frida empieza a gritar pues también se desvanece.

Hilda entonces despierta. Todo era un sueño. -Oye niña, ¿Te encuentras bien?
-¿Quién eres?

-Me llamo Finn- dijo el chico, era un chico con un gorro blanco de oso cubriendo toda su cabeza, pero se veían mechones rubios largos saliendo de este, tenía un brazo metálico derecho, y una mochila verde, parecía un adolescente de 19 años y cargaba una espada vieja en la mochila.

-¿Finn? Me resultas familiar.
-Bueno, no se porque pero te sugiero que vayas a casa.

-¿Espera a donde vas?- dice ella viendo como el chico le daba la espalda.

-A ninguna parte.

-Espera, no tengo a donde ir... estoy perdida.

-¿Y tu casa?

-Yo lo perdí todo...

-... Yo también...

-¿En serio? Una bruja me dijo que había atrapado a mi mundo y debía salvarlo, ¿Eso te pasó a ti también?

-No. Yo solo lo perdí todo.

-... Lo siento. Espera, ya te recuerdo. ¿Eres Finn de Ooo?

-¿Me conoces?

-¡Entonces sí! Es decir... en casa, hay libros sobre tus aventuras, pero decían que eran ficticias.

-Bueno, soy muy real- Finn y Hilda caminaban a lo largo de un bosque bajo la luz de la luna.

-Ya lo veo, y entiendo por qué. Créeme, que he pasado por mucho... y de verdad mucho.

-¿Cómo terminaste aquí?- Hilda le contó a Finn todo lo ocurrido desde que encontró esa puerta misteriosa y conoció a esos niños.

-¿Y tu? ¿De verdad lo perdiste todo? -Sí... Iba de aventura con mi hermano. -Jake, sí.

Finn dio una pequeña sonrisa- Si, explorábamos un calabozo, derrotábamos monstruos, cosas típicas de nosotros, pero desbloqueamos un extraño portal que permitió la entrada a unos monstruos muy poderosos a Ooo, pensábamos que podríamos con ellos, pero nos equivocamos, conquistaron todo, no dejaron nada, y me tuvieron como prisionero en este, laberinto infinito. Ya pasó bastante tiempo desde que me rendí y solo espero el final.

-¿Qué? ¡No, no debes rendirte!

-No hay salida de aquí, he explorado cada rincón de este lugar y no hay nada.

-No hay nada, porque la salida está oculta- escuchan una voz, era Mabel, ella los encontró tras los árboles.

-¡Mabel estás bien!
-Sí, lo estoy, perdóname Hilda... yo causé esto. -¡Sabes la forma de salir!

Mabel los llevó a una roca, y la empujó dejando ver una placa con el símbolo infinito. Ella lo presionó y dejó aparecer una puerta, la atravesaron y terminaron en una cabina, se acercaron a una ventana y vieron que iban a alta velocidad por un recorrido de un lugar desértico con una tormenta de relámpagos verdes sobre ellos,

estaban dentro de un tren, y los vagones de atrás tenían líneas verdes conectando con un vórtice sobre el tren.

-¿Qué es este lugar?- dice Hilda.

-Es el tren infinito, ellos lo utilizan para atravesar mundos y conquistarlos.

-Debemos hacer algo para detenerlos, podemos hacerlo- dice Hilda corriendo tras los vagones.

-¡Espera, no sabes a donde vas!- grita Finn.

Hilda corre desesperada algo que le de una pista, termina en una habitación con un montón de pantallas. Mabel y Finn la persiguen pero terminan en otro cuarto, ellos están sorprendidos, había un monitor con las caras de Wirt, Greg, Finn, Craig, Kalsey, JP, Hugo, Paco, Luis, Rosita, Sprig y Hilda, todos tenían una X con excepción de Finn y Hilda. Mabel no estaba, y le explica a Finn de que ella era la carnada.

Soundtrack: (&list=PL8ClL4ctzO0QHP7UyTIQiSy-0r3_bqykj&index=10)

Hilda por su parte ve un botón que emitía una luz azul, ella lo presiona y los monitores del cuarto se encienden, estos cubrían todas las paredes del cuarto y como un estallido empezaron a bombardear a Hilda con circuitos de luces abrumándola y haciendo que se cubra la cara, era como estar parada en una montaña rusa en movimiento, entonces las luces se calmaron y flotaron lentamente al rededor de Hilda, ella entonces empezó a ver que eran diferentes mundos, diferentes realidades de su mundo, ella estaba sorprendida y con mucha curiosidad observaba.

Pero entonces sintió un movimiento atrás suyo.

Finn y Mabel seguían viendo el cuarto hasta que escucharon el grito de Hilda, corrieron donde ella y vieron que la perseguía un monstruo con cables como si fueran tentáculos de medusa, una cara blanca y ojos con flamas azules saliendo de estos. Finn alistó su espada y saltó hasta el monstruo, empezó a pelear con este mientras Mabel

ayudó a Hilda a salir de la cabina, Finn intentaba cortar los brazos del monstruo pero este agarró la espada y golpeó a Finn lanzándolo hacia las chicas. El monstruo estaba a punto de tasajearlos pero justo a tiempo llegó Buford con su equipo.

-¡Hilda! ¡Mabel!

-Chicos.

Buford les indicó que agarren al monstruo de sus extremidades mientras Buford alistó un arma y disparó a la cara del monstruo derrotándolo.

-¡Chicos gracias por su ayuda!

-No es nada- dice Sprig- Somos amigos después de todo.

-Sí... amigos.

-Oigan chicos, quiero disculparme- dice Mabel- Es mi culpa que estén en esta situación.

-No te culpes Mabel- dice Finn a lo lejos- Tu fuiste utilizada igual que todos. Pero vamos a arreglar las cosas.

-¿De verdad?- dice Hilda.

-Sí- dice Finn con seguridad. Después procedieron a presentarse cada uno.

-Bueno, es hora de recuperar sus hogares- dice Buford.

-¿Pero cómo vamos a encontrar a los encargados de todo esto?- dice Coraline.

Hilda les muestra el vagón de antes, Buford y Coraline se encargaron de buscar el próximo destino de los villanos, lo que encontraron fue un mundo en el cual hay una ciudad sobre unas nubes rosadas.

-Bien equipo, pónganse en marcha.

El equipo se incorporó en desestabilizar el tren y y reconfigurarlo para que con la ayuda del control de Buford, puedan ir a ese mundo y confrontar a los villanos. Buford y Coraline analizaron el funcionamiento del tren, Buford comenzó a reconectar el cableado, Coraline manejó las consolas para desconectar los portales, los chicos encontraron un cuarto lleno de maquinaria funcionando el tren. Coraline les dio instrucciones a cada uno de que hacer, Craig, Kelsey y JP zafaron unos engranajes y los llevaron a la consola principal, los Patos trazaban unos planos para construir el estabilizador y conectarlo al control, Mabel, Hilda y Sprig llevaron componentes a la consola principal, Finn ayudó a cargar los componentes más pesados. Había una placa de metal que Hilda no podía llevar pero Finn la ayudó a cargarlo, Hilda le dio un gesto de agradecimiento que Finn correspondió.

Con todos los componentes listos, empezaron a armar el portal, Kelsey le pidió a Sprig un destornillador y este le pasó con su lengua. Entre todos se pasaban los componentes, mientras Coraline terminó de deshabilitar todos los portales y redirigiendo la energía al control. Una vez terminado, todo el equipo chocó los cinco y Hugo presionó el botón logrando abrir un portal que los llevará a ese mundo.

...

Una chica pelirroja con anteojos estaba reflejada en una pared metálica viendo directo al chico del parche.

-Gracias por la información- dice el chico.

-¿Así que lograron encontrarnos?- dice la otra madre de Hilda jugueteando con una esfera en la cual se encuentra el pueblo donde vivía Hilda, incluido sus amigos y su madre real.

Una nave nodriza se encuentra dirigiéndose a esa ciudad sobre las nubes rosadas con una espesa neblina cubriéndolos.

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Finn es de Hora de Aventura. 


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