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cuarenta y nueve; todos juntos #1.

''Existen dos maneras de ser feliz en esta vida, una es hacerse el idiota y la otra serlo...'' Sigmund Freud.

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Izumi Uchiha.

─Que no, Sasuke. Tú no vas.

El azabache frente a mi gruñó en respuesta mientras se afirmaba en la pared para no caer al no llevar muletas. Lo admito, me causó cierta gracia verle así... Sin embargo, el solo hecho de tener mi cabeza en esos ojos rojizos... no me lo permitía.

En realidad, ni siquiera fui capaz de hacérselo saber a Itachi en cuanto volvió a la habitación, pues luego de eso nos quedamos disfrutando e incluso desayuné con ellos, con Itachi, Sasuke y su madre. Pero me jodía el hecho de otra vez estar actuando y estar siendo tomada por tonta. ¿Por qué tenía que ser así?

Quizás luego hablaría con Shisui sobre esto en casa de mi amiga, él no dudaría en abrir su boca conmigo... o con Izune.

─Pero... ¡¿Y por qué no?! ─gruñó Sasuke en respuesta, algo cabreado─ ¡Mamá, Itachi no quiere dejarme ir! ¡Solo se hace el interesante porque está Izumi!

Itachi resopló en el aire y se llevó una de sus manos a su sien, como si tuviese que tener una paciencia tremenda con su hermano menor. Por esto era mejor no tener... digo yo.

Mis mejillas no demoraron en enrojecer.

─Pues porque yo digo que no y ya, Sasuke ─respondió, su voz bastante frustrada─ Además ¿A qué irás? ¿A que el cabeza hueca te de otra paliza? No seas imprudente, Sasuke.

Itachi-kun realmente se notaba algo cabreado con él y me causó cierto reselo pensar en Óbito, en como había roto el tobillo del menor sin piedad ¿Acaso ese idiota no pensaba? ¿Tan evidente quería hacer lo mucho que se moría por Izune? Entonces, ignorando mis insultos hacia él volví a posar mi vista en el debate que tenía en frente. Sin embargo, cuando pensé que el menor se rendiría. Otra voz se nos sumó desde la cocina.

─Itachi, déjale ir... ─fue la voz de Mikoto-san, quien apenas dijo esas palabras, salió de su lugar solo para vernos en el marco de la puerta principal, su rostro bastante tranquilo─ solo quiere saber si la chica está bien, no le veo el problema a eso.

En cambio, Itachi gruñó en respuesta y negó con su cabeza al instante, Sasuke sonriendo al admitir su victoria ¿Es que siempre eran así? Al parecer ser el bebé de la casa tenía sus beneficios...

Me sentí algo incómoda lo admito, pues, yo solo quería salir de ahí. Esos ojos...

Además ¿Quién no se sentiría incómoda en un debate familiar en casa ajena? ugh.

─No, él no irá madre... ─espetó, un tanto cabreado─ imagina luego se pelea con Óbito en casa del Hokage, ni hablar.

─¡Eso no va a pasar!

─Oye Itachi-kun... ─murmuré, por primera vez desde que había comenzado este debate en la puerta, mi voz temblando suavemenre al haber tomado su brazo─ quizás estás exagerando...

Él me fulminó con su mirada al instante y tragué saliva con nerviosismo. Sin embargo, cuando quiso decirme algo... volvimos a escuchar la voz de su madre, quien esta vez tenía su semblante serio y ambas manos en sus caderas, el sharingan activado como si estuviese molesta. Muy molesta.

─Basta los dos. ─espetó, apuntando levemente a ambos para luego hacerlo con Itachi─ Lo llevarás, quieras o no. ─gruñó, su mirada penetrante sobre Itachi-kun antes de volver a la cocina con los humos por todas partes. Pues, el de la tetera ya comenzaba a salir.

Me dio algo de temor su mirada, tenía que admitirlo también y hasta llegué a pensar en que quizás era algo bueno que mi madre no fuese Uchiha... pues, cuando me regañaba no tendría que poner esos ojos. Dios, esos sharingan...

¿De quienes son? Itachi-kun...

Observé a Itachi unos instantes para ver su reacción mientras Sasuke sonreía de manera burlona y pude ver como este se tocaba el tabique nasal con notable irritación, sin un toque de miedo en su rostro por el reciente regaño de su madre. Vaya familia.

Tendré que ir, Nii-san ─se burló su hermano menor una vez más, esta vez caminando sobre la pared para, supongo, ir a por sus muletas.

Itachi tragó saliva y le sentí tensarse. Me sentí aún más incómoda y desesperada.

─Itachi-kun...

Él ignoró mi llamado y tras soltarse de mi brazo, caminó enseguida a pasos sonoros dentro de su casa para seguir a Sasuke. Entonces, no pude evitar el hecho de fruncir el seño u siquiera no entrometerme, pues los nervios me carcomían y más al tener esos ojos aún en mi cabeza. Sin embargo, al ver lo que este estaba a punto de hacer no hizo más que aumentar mi pánico.

─¡Espera, Itachi-kun no... ─traté de advertir, aún así él no me escuchó. O fingió no hacerlo.

─No irás.

Dicho aquello, el hombre que más amo en todo el mundo... tocó con dos de sus dedos la frente de su hermano con bastante rapidez en la pared, sus ojos rojizos haciendo contacto con los suyos y pude ver que no era el sharingan común, entonces lo que decía Shisui era cierto... El mangekyou sharingan.

Por lo tanto, Sasuke cayó al instante al suelo con brutalidad. Mi rostro era de perplejidad pura ¿Cómo podía?

Itachi-kun que... ─balbuceé, bastante sorprendida y algo asustada, este cambió sus ojos de inmediato para acercarse a mi. Volviendo a la normalidad.

¿Acaso era idiota?

─Vamos, antes de que vuelva mi madre y tenga que llevarlo realmente... ─dijo, segundos antes de depositar un corto beso en mis labios y entrelazar sus dedos con los míos.

Mis mejillas enrojecieron enseguida y mi corazón latió con mucha rapidez, olvidándome casi por completo de mis regaños anteriores. Él era simplemente fantástico, esos labios suaves y el tacto de sus dedos... no podía creer el hecho que pudiese corresponderme, hace un mes siquiera no lo hubiese pensado.

Pero esos ojos... y el mangekyou... ¡Estaba hecha un lío!

Siento el drama familiar, pero no me gustan los secretos...

Su voz ronca, realmente me tenía en las nubes. Sin embargo, antes de que pudiese decir algo más él presionó mi mano con más fuerza. Solo para luego correr con bastante rapidez fuera de su casa conmigo a la arrastra.

─¿Q-qué le hiciste? Digo, Sasuke... ─hablé, o mejor dicho... intenté hacerlo.

─Solo lo dormí un poco ─respondió, sonriendo levemente─ No te preocupes, él estará bien.

Fruncí el seño tras su sentencia e iba a reprochar por ello ─a pesar de su sonrisa─, pues era el mangekyou de lo que hablábamos ¡Ni siquiera sabía lo que podía hacer con ello! y realmente quería explicaciones. Sin embargo, él tapó mi boca enseguida con su otra mano, sin dejar de correr.

Era un impredecible.

─Estuvo jodiendo toda la mañana, ni siquiera nos dejó disfrutar... ─explicó, cierta irritación notoria en su voz─ se lo merecía.

Entonces, tensé mi mandíbula y no dije más, inflando así mis cachetes un poco. Itachi destapó mi boca al notarlo y solo siguió su camino conmigo a la arrastra, una leve sonrisa de burla en sus labios.

¿Desde cuando Itachi era así conmigo?

La verdad... ya no me fiaba mucho de sus palabras, ni de sus acciones. Toda mi cabeza giraba en torno a esos ojos que encontré en su habitación o su mangekyou ¿Que la curiosidad mató al gato? Quizás si, o tal vez no. Pues aún estoy viva. Sin embargo, sabía que con aquello... hasta dejé de sentirme culpable por acostarme con Shisui un momento.

Itachi estaba lleno de secretos, y me jodía como nunca. Me volvía loca, solo por el hecho de un día tratarme bien y al otro ignorarme ¡Yo solo quería saber la verdad! ¿Tan difícil era hacerme partícipe de algo? ¿O tratarme bien siempre y no cuando se le de la gana? Al parecer si... y yo lo aguantaba, no tenía ni el más mínimo derecho a quejarme.

Siempre los aguanté, a todos ellos.

Desde ya podrían notar entonces, que las ganas de visitar a Izune se me habían ido. Menuda tarde tendría.

Eso no lo duden.

«...»

  ─Pues... tendrá que haber sido imaginación mía entonces...

Al escuchar esas palabras, Izune no dudó en besar cortamente los labios del azabache para zafar su angustia, este sorprendiéndose casi al instante. Por ende, tras separarse tocó su nuca un par de veces más, confundida. Aunque eso no duró mucho, solo hasta que notó la leve mueca en el rostro del moreno y su mano contra su sien.

Si bien era un quejica de primera, Izune sabía que ella no le había golpeado tan fuerte con la almohada y tras un beso él jamás se quejaría.

─Oye ¿Estás bien? ─preguntó, quitando la mano de su nuca instintivamente para tocar el rostro de su amigo en busca de algún síntoma─ No te di tan fuerte...

Obito soltó una risa ante ello, notando la preocupación de la peliplata sobre él y formando una sonrisa lasciva.

─Eso sonó mal ¿Lo sabes? ─se burló mientras tomaba sus manos y ella rodó sus ojos, esta vez apretando sus mofletes como castigo. Óbito se quejó, pues ni siquiera tenía cachetes grandes como para ser digno de dichos agarres.

¿Es que siempre tenía que ser así?

─Eres un...

Izune gruñó, sin siquiera terminar sus palabras. Pues, siempre que se preocupaba por él tenía que salir con alguna morbosidad o cualquier cosa. Y sí, la chica siempre había sido así de preocupada con los demás y hasta con tonalidad maternal.

De hecho, Hashirama siempre solía decir en su juventud que su hermana sería una excelente ninja médico si se lo propusiera. Porque, en cuanto se trataba de cuidar a las personas que amaba o tal vez, a otros. Ella era super precavida, protectora y cariñosa. Sobre todo cuando se trataba de Tobirama y Óbito, sus cascarrabias. Incluso si el primero no la dejase ni que lo tocara en casos así. En cambio con el moreno de cabellos largos era diferente, puesto que, el ninja del mokuton fácilmente se regeneraba por si solo.

Óbito también, pero no a gran rapidez como lo hacía el primer Hokage.

Sin embargo, eso jamás le vino a alguien como Izune... o siquiera lo pensó alguna vez. Ella siempre prefirió ser ninja de guerra, una kunoichi destacada como sus hermanos. Incluso si eso implicaba grandes consecuencias.

Yoshiro, Ukitake y Uryu eran el gran ejemplo de tales consecuencias.

─No te enojes gruñona,  ─se burló el pelinegro, quitando suavemente las manos de su rostro para luego sobar sus mejillas─ solo me las di de Kakashi al pensar tanto y ahora tengo dolor de cabeza... pero solo es eso ─respondió, con gracia al notar su nariz arrugada frente a él y sus cachetes inflados como una ardilla cualquiera.

Se veía tan adorable...

Entonces, Obito sin dudar en sus acciones se acercó a su rostro con rapidez, captando así de manera suave y profunda los labios de la Senju ─lo cual ella correspondió enseguida─ para luego al separarse morder su labio inferior y jalarlo un poco, haciéndola estremecer de tan solo verle así.

─No tienes que preocuparte tanto por mi, ya sé que me amas y que soy el pilar fundamental de tu vida pero necesito un respiro ya ves... los prodigios como yo necesitamos un pare de las mujeres bellas como tú ─dijo él, alzando sus hombros con gracia y un suspiro, a lo que ella solo dio un leve puño en su hombro.

─Prodigio, mujeres... ─se mofó Izune a ojos en blanco, Obito era un ególatra─ si claro, lo que digas campeón... te la compro.

Obito frunció el seño con indignación y luego se cruzó de brazos mientras la observaba. Izune se estaba burlando de él.

¡Que él si tenía fans!

─Yo si tengo admiradoras y soy fuerte, no te burles ─refunfuñó, amurrado y desconcertado totalmente sobre aquel sofá.

Izune volvió a reír, dando un leve empujón en el hombro del azabache.

─¿Quién? ¿Sakura? ─insistió, alzando una de sus cejas levemente al notar lo gruñón que se había puesto el Uchiha.

Como amaba ella sacarle de quicio.

¿Y qué si es Sakura? Es admiradora igual, ella sí reconoce mis encantos ves... ─gruñó, a lo que Izune mordió su labio para no reír más fuerte. Aquello molestó un poco más a Obito─ Además, Rin el otro día dijo que se arrepentía de no elegirme porque yo era más varonil que Kakashi, sus palabras... no mías.

Y... solo eso bastó para que la Senju de ojos rojizos cortase su risa de inmediato ¿Rin? ¿Acaso ella y Obito...?

Pero ella está obsesionada con Kakashi ¿Por qué te diría algo como eso?─soltó de la nada, su seño frunciéndose al instante. Todo lo que tuviese que ver con Rin, no la pintaba bien.

Entonces, el azabache de gran ego medió una sonrisa leve con malicia y luego alzó sus hombros con desinterés. Era su turno de mofarse.

─Kakashi le contó sobre su amorío con tu prima, luego yo la consolé y así pasó todo...

Izune presionó su mandíbula y rascó su nuca para no tener que decir algo hiriente o actuar como una loca ¿Desde cuando ella sentía celos? No, eso era porque se trataba de Rin... no eran celos. Estaba segura.

─No te la follaste de consuelo ¿Verdad? ─soltó de golpe sin pensar, su rostro bastante serio sobre él mientras presionaba ambos puños.

Óbito se sorprendió por su pregunta repentina, más no dio evidencia de ello al solo morder su labio con inocencia y sentirse feliz de cierta forma con la situación. Pues, generalmente él era quien montaba las escenas de celos y que ahora fuese ella quien estuviese así... Solo hacía la situación mejor, por lo tanto, solo alzó los hombros con malicia.

Queriendo disfrutar un poco más de su reacción.

─O siquiera ¿La besaste? ─insistió la albina, con los nervios por todas partes al ver que su amigo no respondía. Si algo así ocurriese... no lo perdonaría.

Óbito corrió la mirada enseguida y ella le dio un leve empujón para que confesara.

─Pues... ─balbuceó. Sin embargo, antes de que pudiese decir algo más sintió como la mano de ella chocaba contra su mejilla brutalmente─ ¡¿Y eso por qué fue?!

Izune negó con su cabeza y estuvo a punto de ponerse de pie con mucha rabia, su rostro muy pero muy molesto y sus casillas hasta el límite. Tan así que parecía que explotaría. No obstante, antes de que pudiese hacerlo el moreno entró en pánico e impidió lo que estaba por hacer enseguida, sin importar el gran golpe sobre su mejilla.

Golpeaba tan fuerte como mil demonios. De seguro su mano estaba marcada.

─¡Izune, es mentira es mentira! ¡No me la follé ni la besé, solo estaba jugando contigo! ─rogó el azabache, tirando su brazo con fuerza. Izune en cambio, solo intentó zafarse.─ Por favor, no te enojes conmigo... solo fue una broma.

La Senju de ojos rojizos bufó, pues si antes estaba molesta por el hecho de pensar en Óbito y Rin practicando sexo, ahora al saber que este le estaba tomando el pelo con ello lo estaba aún más ¿Desde cuando era tan idiota?

─Suéltame, no me gustan esas bromas y lo sabes. ─espetó la albina con molestia y Óbito mordió su labio inferior para no reír─ ¡Deja de burlarte de mi!

Óbito no contuvo la risa e Izune se zafó de inmediato al concentrar el chackra en sus puños, caminando directamente hacia la cocina con notorio enfado. Por lo tanto, el azabache frenó sus risas y se dedicó a seguirla, alcanzándola casi al instante ¿Realmente estaba tan molesta?

Oye... no te enojes, fue solo una broma ─dijo, por milésima vez desde que había llegado a la cocina y la observaba buscar algo en las gavetas con desesperación─ Izune... sabes que solo he follado contigo en toda mi vida, ella ama a Kakashi y no lo haría...

Ella alzó su cabeza como si una suricata fuese y le fulminó con la mirada, aún agachada en los cajones. Obito tragó saliva, los Senju realmente eran aterradores cuando se molestaban... Eso podía apostarlo.

─Y si no fuera por ese mínimo detalle Obito Uchiha ¿Te la follarías cierto? ─gruñó, por poco volviéndose loca al pensar en ambos─Eres increíble. 

Tras esas palabras, Óbito resopló en el aire y tocó sus sienes mientras Izune volvía a lo suyo en las gavetas ¿Por qué nada le salía bien?

─Que no, Izune... Agg, ella ya no me gusta, no podría y mucho menos sabiendo que se la ha chupado a Kakashi ─dijo, asqueando su rostro de inmediato mientras un escalofrío se escurría por su espalda─ ¿Cómo piensas que sería capaz de besar a alguien así? Sería como si yo le hubiese chupado la...

─Entiendo, no tienes que decirlo... ugh─interrumpió la Senju, finalmente sacando una caja de tonos grises y posarla sobre la pequeña mesa que tenían para cenar de vez en cuando.

Enseguida, la albina no demoró en abrirla. Los ojos del azabache aún sobre ella mientras rascaba su cabeza.

─Además ¿Tú la crees capaz de besarme sabiendo que le ha chupado el pene a alguien más? Yo creo que eso es insano, no sé tu...

Izune frenó en seco sus manos dentro de la caja y tragó saliva instintivamente con mucho nerviosismo. Pues, no pudo evitar llevar su mente al beso que se dio con Shisui en casa de Rin. Ella lo había besado, a sabiendas que antes había chupado el pene de Óbito miles de veces.

Entonces, su enojó de pronto... se esfumó en cosa de segundos. No tenía derechos de enfadarse.

Después de todo, solo eran amigos y algo más...

─Toma, con esto se te irá el dolor de cabeza. ─dijo, tras haber sacado una píldora de aquella caja, acercándose con algo de nervios a Obito. 

Este, analizó aquella pastilla unos instantes y luego lo recibió sin problemas, aunque de igual forma frunció el seño hacia ella. Pues, se le hacía meramente extraño el cambio de actitud tan repentino.

Pero mejor para él... la prefería más así que molesta. Aunque se mirase más sexy con su rostro enfadado.

─Gracias... ─murmuró, segundos antes de dar un paso hacia al lavabo para tomar agua. Sin embargo, Izune lo frenó enseguida al tomar su brazo─ ¿Que pas...?

Antes de que pudiese terminar su sentencia, la chica estiró sus labios como indirecta y se puso de puntillas con vergüenza, ambas mejillas bastante rojas. A lo que Óbito sonrió ampliamente y no dudó en besar esos labios que tanto añoraba. Su mente algo mas tranquila al saber que ya no estaba molesta.

Asimismo, tras separarse por la falta de oxígeno... el azabache no demoró en tomarse la píldora con agua del lavabo que había en la cocina. Izune afirmada en el mueble mientras le observaba con detenimiento, sobre todo a su gran espalda que a pesar de estar cubierta con aquella playera de mangas largas se notaba lo trabajada que estaba.

─¿Quieres un autógrafo?─se burló él, notando su mirada con una leve risita en cuanto cerraba la llave del grifo. Limpiando así con la manga de su mano los restos de agua que había en sus labios.

Izune bufó, esta vez cruzándose de brazos un tanto indignada.

─Dáselo a Sakura o a Rin, ellas seguramente lo quieran con ansias... yo no.

Óbito sonrió de lado y no dudó en acercarse a ella, posando así enseguida una de sus manos en su muslo, mientras que con la otra sujetaba su espalda para apegarse más a su cuerpo. La tensión haciéndose bastante evidente.

Por su parte, Izune remojó sus labios con nerviosismo y posó ambas manos en el pecho del moreno para frenarlo un poco, pues estaba muy cerca de ella, su respiración chocando suavemente con su frente. Era un martirio.

Entonces, Obito al notar los cabellos erizados de la Senju... en cosa de segundos la subió al mueble con brutalidad y abrió sus piernas de golpe para ubicarse entre ellas, corriendo así con su mano los cabellos que se escurrían por su cuello, dispuesto a besar  y chupar en ese sitio. 

Izune siguió tocando los marcados pectorales de su amigo por sobre la playera.

─Ellas podrán tener el autógrafo, pero tu me tienes a mi... eso es mucho mejor ¿No crees? ─murmuró con voz ronca y más rasposa de lo normal en su oído, cosa que hizo a la Senju estremecer.

─Qué afortunada soy... eh ─respondió de la misma manera, tirando su cabeza levemente hacia atrás mientras él sonreía y respiraba suavemente sobre su cuello.

─Serás la envidia de todas mis admiradoras...

─No lo dudo...    

El Uchiha con su orbe bastante ennegrecida sobre aquel pedazo de piel desnuda, comenzó así con besos suaves y mojados tras su oreja, para luego subir un poco y lamer el lóbulo de esta. Bajando de la misma manera a besos húmedos por  todo su cuello hasta llegar a la clavícula y viceversa, esto mientras acariciaba y presionaba con fuerza ambos muslos de la muchacha. Quien por lo visto, comenzaba a respirar con algo de dificultad y a dar leves suspiros... Sobre todo en el momento en que sus besos se convirtieron en mordidas y chupones salvajes.

El bulto de Óbito no demoró en crecer de manera exponencial al escuchar los suaves suspiros y tener esta vez bajo su mano el busto de su Izune. Sin embargo, era todo muy bueno para ser verdad... pues la puerta principal comenzó a sonar en un golpeteo, una y otra vez.

Fantástico. Pensó el azabache.

─Obito... ─intentó frenar la situación la albina entre besos, cosa que a Obito no le gustó. Para nada.

Agg, seguro es Kakashi... ─gruñó, presionando con fuerza los muslos de Izune y apegando ambas partes íntimas sobre la ropa . Ella soltó un quejido─ puede esperar.

─O puede ser Tobirama... Si nos ven así él...

El pelinegro volvió a gruñir con molestia y solo besó sus labios con fiereza, brutalmente saboreando cada parte de su boca. Sin embargo, los golpeteos se hacían cada vez más intensos e Izune se estaba comenzando a enfadar por el hecho de que su amigo no la escuchase y encima de todo, se molestara por esa estupidez. Además, sus caricias ya no eran como siempre, eran aún más brutas y salvajes.

─¡Óbito, ya! ─se separó ella─ luego seguimos, deja que abra la puerta...

Entonces, en cuanto la Senju quiso bajar del estante a regañadientes... Óbito se lo impidió al tomar su brazo con fuerza, su rostro bastante molesto y la nariz algo arrugada.

─Deja, yo me encargo de ese idiota... No te muevas de aquí.

Dicho esto, el moreno salió de la cocina a pasos rápidos sin siquiera esperar una respuesta de Izune, mientras asímismo intentaba acomodar su erección con sus manos. La cual al parecer no pretendía bajar o cooperar en aquel momento. Aquello solo le molesto aún más.

¿Qué parte de que quería a Izune solo para él no entendía su amigo?

Ag, a la mierda...─gruñó─ como si Kakashi nunca me hubiese visto con el pito erecto...

Entonces, a regañadientes ─haciendo notar el cabreo que sentía─y con una evidente erección abrió la puerta de golpe, enseguida comenzando a reclamar sin siquiera observar a quien tenía en frente;

─Kakashi ¿Por qué mierda no te vas y me dejas en paz? Izune y yo...ah, genial, eres tú ─espetó una vez más, esta vez observando con desagrado al ninja de cabellos alborotados que tenía en frente─ lo que me faltaba...

Shisui, quien no comprendió mucho su reacción alzó una ceja y no dudó mucho en bajar su mirada al evidente bulto que se marcaba en su pantalón.

Asco. Pensó.

─¿Me dejarás pasar o te quedarás ahí? Supongo que Kakashi te dijo lo...

─No, adiós.

Dicho esto, Óbito pretendió cerrar la puerta en su cara de golpe. No obstante, Shisui fue más rápido al poner su pie en esta y sujetarla. Él estaba siendo un cabrón a propósito y Shisui no se lo iba a permitir.

Él no era Itachi para cerrar las cosas en amenazas, ni mucho menos era Sasuke para dejarse atacar. Él era justo, y si podía interrumpir lo que estuviesen haciendo, eso le daba igual.

Mejor para él.

─Joder ¿Por qué no te vas y ya? que irritable eres... ─se quejó Obito, mientras forcejeaba la puerta para que pudiese cerrarse y dejar a Shisui fuera.

─¿Por qué no dejas de ser un inmaduro y simplemente me dejas entrar? Si mal no recuerdo esta no es tu casa para que te tomes el crédito de ver quien entra y quien no, Óbito. ─espetó Shisui, queriendo dar la pelea al otro azabache. La molestia bastante evidente en su rostro.

Óbito rodó ambos ojos, a pesar que uno solo era visible y generó un poco más de fuerza. Shisui rechinando sus dientes ante su acción.

─Demonios, que duras son las larvas como tú... ya lárgate ─gruñó, aún forcejeando─ Izune no quiere verte, supéralo.

Shisui contó hasta diez para no tener que propinar un golpe hacia él y simplemente siguió forcejeando. Aunque, no iba a callarse.

─¿Que no quiere verme? Si yo fui quien estuvo todo el tiempo con ella cuando llegó al hospital ¿Dónde estabas tu? ¿Eh?

Óbito largó una risa, una bastante amarga.

─Iluso, no sabes nada...

─Tú eres el que no sabe cosas, deja de ser un inmaduro por dios.

Entonces, fue cuando Izune notó la demora de su amigo y le preocupó el hecho de que pudiese ser Hashirama, pues con lo que su hermano sabía ahora lo más probable es que al verle con esa erección lo hubiese agarrado a amenazas en la puerta─incluso si él no fuese así─. Por ende, se acercó a observar.

Al hacerlo, un tic se formó en su ceja derecha inmediatamente y a pasos sonoros caminó hacia su mejor amigo. Tomando el cuello de su playera por detrás y concentrando el chackra asimismo en su puño para sacarlo de ahí de un tirón. Shisui por poco cayendo dentro de la casa.

─¿Qué. Se. Supone. Que. Estaban. Haciendo? ─espetó, bastante molesta y Óbito se zafó de su agarre, muy molesto.

Sin embargo, ninguno dijo palabra alguna. Shisui tocando su nuca con nerviosismo mientras que Óbito presionaba sus puños con evidente molestia.

─¿Obito? ─insistió ella, sus mejillas levemente sonrojadas al ver como este intentaba acomodar su erección por debajo del pantalón sin importarle la presencia de Shisui.

─No voy a explicarte nada, ─respondió, bastante a la defensiva con su seño fruncido─ si me disculpan, voy a encargarme de esto... ─señaló su entrepierna─  disfruta con Shisui.

Entonces, la de cabellos grises antes de que Obito pudiese dar un paso hacia el baño lo tomó de la playera con fuerza. Bastante sorprendida con su reacción, mientras que Shisui tan solo se mantenía en silencio, observando...

─¿Qué te pasa? ─reprochó ella en un tono bajo para que Shisui no escuchara y él solo se zafó de su agarre, saliendo así de la vista de ambos.

El silencio reinó durante ese lapso de tiempo, solo hasta que el azabache cerró la puerta del baño con un portazo.  Entonces, tras un suspiro apenado, la muchacha fue hacia la puerta principal y la cerró despacio, dejando a Shisui dentro... bastante incómodo.

─Perdona lo de Obito, no sé que...

─Entiendo, estaban a punto de follar... yo también me hubiese molestado si fuese él ─cortó las palabras el Uchiha, rascando su nuca aún con algo de incomodidad.

Izune soltó una pequeña risa apenada, algo sonrojada e hizo un ademán con su mano para que Shisui tomase asiento en alguno de los sofá, cosa que él agradeció y no demoró en hacer. Por su parte, la grisácea prefirió quedarse de pie y morder levemente sus uñas. 

No le gustaba estar molesta con Obito, menos en tiempos así. Y tampoco, le gustaba que Shisui lo supiese todo.

─Obito no te dijo que vendría ¿Verdad? ─Shisui cortó el silencio e Izune asintió, un leve bufido escapando de sus labios─ entonces supongo que tampoco te dijo que Kakashi, Itachi e Izumi vendrán también...

─Supones bien, no me dijo nada...

Nuevamente, ese silencio incómodo se hizo presente entre ambos. Shisui observando sus dedos o a cualquier lugar menos a Izune, quien solo se centraba en morder sus uñas con algo de nerviosismo ¿Por qué Obito tardaba tanto?  Al menos si estuviese con ellos no sería tan incómodo, incluso si estaba bastante enfadado por el momento.

─¿Cómo estás? ─soltó Shisui, y la chica alzó sus hombros─ ya veo...

─¿Has sabido algo de Kinoe o Kiara? yo no he podido... ─murmuró ella, esta vez rascando su nuca mientras evitaba la mirada del azabache en el sofá─ me gustaría verlos, ya sabes...

Shisui suspiró, luego medió una sonrisa y se atrevió a mirarla. Aún sentía esa presión en el pecho al saber que si no hubiese llegado, ella y Obito... se estarían follando como animales. Le dolía.

─La verdad es que no, solo sé que no han querido hablar... digo, para declarar.

Lo último fue más un susurro para él, sin embargo, debía saber que Izune lo escucharía de todas formas.

─¿Declarar? ¿Por qué? 

─No creo que sea buen momento para hablarte sobre eso, ─respondió Shisui, arrepintiéndose de haber dicho algo como eso en un momento así─  no quiero agobiarte, pero no es algo malo... te lo aseguro.

─Okey...

Ambos estuvieron así durante un tiempo, en silencio y sacando temas al azar de vez en cuando. Al menos hasta que la puerta del baño se abrió e Izune se volteó para ver a su mejor amigo y quizás hablar con él. Entonces, fue cuando Shisui abrió sus ojos de par en par con sorpresa al ver su nuca al descubierto, pues el sello... ya no estaba.

Debió imaginarlo, esto se iba a poner muy mal.

// Espero hayan disfrutado la lectura, esto es un mundo alterno pero igualmente pueden haber spoilers.

¡Hola!🙌 ¿Qué les pareció el capítulo? La verdad es que quiero llegar a las cosas que van a pasar esa noche😔 pero ¡Aún no puedo! 😭😭 así que si el capítulo está medio flojo es porque tuve que cortarlo jaja 💔😭 aunque será bueno ¿supongo? porque volveré pronto con otro capítulo😂

El sexo vuelve😏, y pronto... el sharingan de Izune con el mangekyou de Shisui será revelado !! ahre no jaja🙌🙌

En fin, siempre lo digo pero nunca es suficiente... realmente las/los amo con todo mi corazón y espero les haya gustado el capítulo porque sin ustedes esta historia sería nada. Eso, un beso y que tengan un muy lindo día 💓😍😘 Se lo merecen.

ps: @Unicorpato este capítulo es para 💓💓 quizás esperabas un regalo mejor por tu cumpleaños pero no sabía que más darte 😭 soy un asco con esto, gracias por apoyar la historia y adivinar casi todo jajaja😘

En fin, no aburro más y... adiosín!     

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