- ¿Quién era ese chico y por que estaba aquí? - preguntó el mayor apenas la puerta estuvo cerrada.

- Es un compañero de la escuela, tenemos un trabajo en parejas y el otro día que vino a casa dejó su equipo - explicó rápidamente el menor.

- Hablaré con tu profesor, no puede ser posible que te haya dejado ser compañero de alguien como él - dijo con el desagrado notable en su voz.

- ¿Alguien cómo él? - preguntó sin entender muy bien a que se refería.

- Sí, debe ser de esos chicos que tienen una beca y buscan la oportunidad de acercarse a alguien que si tiene dinero para luego quitárselo -

- Estoy muy seguro de que Changbin no es así papá - el pecoso defendió a Seo.

- Eso no es lo importante ahora, vengo a hablar seriamente contigo - Minho se arregló su traje.

- ¿Y qué es lo que tienes que decir, padre? - se cruzó de brazos.

- ¿Qué fue esa escena del restaurante? - casi gritó el mayor - gritaste y nos pusiste a tu madre y a mí en ridículo por algo tan tonto como tu cumpleaños.

- ¿Tonto? - preguntó el menor incapaz de procesar lo que acababa de escuchar - ¿ahora piensas que cumplir años es tonto? Oh, pero hace unos meses el grandioso señor Lee estaba festejando su cumpleaños número cuarenta, y el día de tu importantísima cena dándole regalos a alguien que nisiquiera es tu hijo.

- Yoongi es un muchacho estupendo, hijo de nuestros socios, el es alguien importante - respondió el señor Lee.

- ¿Y TÚ propio hijo no es importante acaso? - replicó el más bajo

- Lo serías si hicieras lo que tu madre y yo te dictamos -

- ¿Para qué? ¿Para vivir una vida infeliz, haciendo lo que no me gusta? - el pecoso hizo como si estuviera pensando - Oh, así es justamente como estoy viviendo ahora, me obligan a estudiar modelaje cuando quiero ser repostero, quieren que pose en miles de revistas y finja una sonrisa apesar de no ser feliz, ustedes se olvidaron por completo de mi cuando comenzaron a hacerse conocidos, incluso me sacaron de casa para que al verme, no sintieran pena por tener un hijo que va en contra lo que ustedes hacen - furioso, Felix le plantó cara a su padre, sus puños apretados a sus costados, su ceño fruncido y respirando dificultadamente.

Lee se quedó sin palabras, su boca estaba abierta de la sorpresa, había quitado los brazos de su pecho y los tenía a su costado.

- No te atrevas a hablarme así Lee Felix, soy tu padre y me tienes que tratar con respeto - exclamó bastante furioso.

- ¿Ahora si eres mi padre? - preguntó con burla el menor.

- Siempre lo he sido, he buscado lo mejor para ti y sacrificado cosas importantes para llegar hasta donde estoy -

- ¿Sacrificar el amor que le tenías a tu hijo es una de esas? Por que si fue así, era mejor no sacrificar nada, con lo que teníamos era suficiente, no necesitábamos más - exclamó el pecoso - pero siempre has sido tan avaricioso que no te alcanzan todos los millones de wones que tienes en tus cuentas bancarias, sumando las joyas, los vestidos y bolsos caros de mamá, tu colección de autos y la mansión que tienes como casa -

- ¡Suficiente! - gritó el mayor dando un pisotón que resonó en todo el lugar, se acercó peligrosamente a menor y levantó una de sus manos, propinado una cachetada a Felix, su mano quedando marcada en su pálida piel.

- Listo, ahora si te has superado - escupió el rubio - eres el padre perfecto, gracias por tus sacrificios y por mandarme a vivir al otro lado de la ciudad con tal de no verme la cara, ¡eres el mejor padre del mundo, te amo! - exclamó con falsa alegría.

Sacó algo de su sacó y lo tiró al suelo - y alejate de ese chico, los rumores han comenzado y tu madre y yo no queremos dañar nuestra imagen - dicho eso se dio la vuelta y comenzó a caminar hacía la puerta, al llegar a esta la abrió saliendo y cerrando de un portazo.

Felix recogió el sobre del suelo y lo abrió, dejando ver fotos del día de su cumpleaños, estaba junto a Changbin tomado de la mano mientras cruzaban la calle.

El capítulo lo tenía escrito hace unos días así que lo subo ahorita q no tengo nada q hacer