25. La Chica de la Nieve (II)
La chica no paraba de jadear, el dolor en el hombro era tan persistente como la ardiente luz roja que emanaba de él.
Ortho le limpió el sudor de la frente con un poco de papel higiénico. Trataba de mantener la calma, pero en el fondo estaba bastante preocupado por la incertidumbre.
─Respira ─urgió para ayudarla a calmarse─. Intenta respirar por la nariz, dentro, fuera. El señor Lilia Vanrouge regresará con ayuda, te pondrás bien y te encontrarás con tu hermano pronto, ¡ya lo verás!
Estaba asustada, pero en el fondo aún tenía esperanza de que aquella pesadilla terminara pronto. Apartó la mirada de la repugnante tinta negra que había echado en el lavabo e intentó decir algo, pero solo logró estornudar violentamente, creando una potente estela de brillos mágicos.
─Salud ─le dijo el androide antes de revisar la gema de su pluma mágica─. Mira, lo estás haciendo bien, la gema no se ha manchado aún más. ¡Sigue así!
─Menos mal... ─murmuró ella antes de cubrir la luz de su hombro con la mano izquierda en un intento de reducir el fulgor, pero la apartó rápidamente al sentir una fuerte sensación de calor.
─¡Es mejor que no te lo toques! ─insistió Ortho─. No sabemos qué es y podría empeorarse. Ya sé, busquemos información sobre esto, a lo mejor hay algo que nos ayude mientras el señor Lilia Vanrouge está fuera.
Creó varias pantallas holográficas en las que aparecieron una gran cantidad de texto con imágenes adjuntadas, Ortho las miró frustrado.
─Luces en el cuerpo, ropa quemada... Esto puede llevar un rato. ¡Oh, no llegaste a decirme el nombre de tu hermano! Lo vamos a necesitar para encontrarlo después, a lo mejor se trata de uno de los chicos con los que nos cruzamos antes.
La chica tosió un poco antes de decirle el nombre, el cual Ortho recibió con sorpresa.
─¿Lo conoces? ─le preguntó ella al fijarse en su reacción.
─No personalmente, pero he oído hablar de él. Tenía un poco de notoriedad por ser no-mágico hasta que ayudó a resolver un incidente en Heartslabyul. Debería haberme imaginado que se trataba precisamente de él, os parecéis mucho en aspecto.
El pecho de la chica se llenó de emoción, estaba cada vez más cerca de poder verlo finalmente y resolver las dudas que la apabullaban desde que había despertado. Hablar de ello parecía ayudar, ya que el dolor de su hombro se alivió un poco hasta el punto de ser más tolerable.
─¡Esa podría ser la solución! ─exclamó Ortho al detectar los cambios y fijarse que estaba jadeando menos─. Vamos, continuemos hablando de esta manera para distraerte del dolor hasta que los demás vengan.
En ese mismo momento se abrió la puerta, Ortho deshizo sus pantallas y la chica se cubrió apresurada el rostro con la capucha.
Mientras tanto, Lilia fue preguntando a varios estudiantes de Heartslabyul cercanos hasta que uno de ellos dijo haber visto a Riddle en el patio interior. Se teletransportó ahí y corrió hacia él nada más verlo; estaba acompañado por más personas, entre ellos el prefecto de Ramshackle y su compañero, el pequeño monstruo.
─¡Riddle, por fin te encuentro! ─exclamó con preocupación.
─Lilia Vanrouge ─dijo Riddle al verlo─. ¿Ocurre algo? Justo ahora necesitábamos hablar contigo sobre un asunto en cuanto al torneo de Magical Shift, ¿te has encontrado con Cater?
─No, pero no hay tiempo para eso. ¡Tenemos una emergencia! ─dijo Lilia con seriedad─. ¡Es posible que necesitemos tu Magia Única!
Todos lo miraron con atención.
─¿Mi Magia Única? ─repitió Riddle─. ¿Por qué? ¿Hay alumnos peleándose?
─En absoluto, en estos momentos una joven está teniendo problemas para controlar su magia y está creando blot como consecuencia, ¡temo que pueda entrar en Overblot si no la detenemos!
─¿¡Blot!? ─repitieron Grim, Ace y Deuce con alarma antes de mirar a Yuu, aún sentado en el banco.
─¿Una chica? ─preguntó Jack─. ¿Acaso será...?
Yuu miró el choker negro en sus manos, leyó la carta una vez más y dio un respingo al comprender la situación.
─Sé que es una medida extrema usar tu collar en este caso, Riddle. Pero no se me ocurre otra...
─¡Debe de ser ella! ─lo interrumpió Yuu mientras se ponía de pie de un salto.
─¿Qué? ─preguntó Grim, atónito.
Yuu se acercó a Lilia con la carta en la mano.
─¿Podría decirme dónde está? Aquí pone que debo darle este choker para ayudarla.
Rápidamente, Lilia leyó lo suficiente para hacerse una idea de lo que estaba pasando.
─¿De dónde has sacado esto? ─preguntó, sorprendido─. Estas gargantillas no se obtienen tan fácilmente.
Grim se bajó del banco.
─¿Que no? ¡Pues nos lo acaba de dar una especie de paloma mágica!
Lilia alzó una ceja, confundido.
─Sé que suena raro, pero lo explicaremos más tarde ─dijo Riddle con seriedad─. Dijiste que es una emergencia, ¿no? ¡Llévanos con ella!
─Vale, ¡démonos prisa! ─urgió Lilia antes de echar a correr, seguido por Grim, Riddle y Yuu.
─¡Vamos con vosotros! ─avisó Deuce─. ¿Te vienes, Jack?
Jack estaba confundido por la situación, pero no parecía tener intención de seguirlos.
─Esto no tiene nada que ver conmigo, ¡id sin mí!
─¿En serio? ─preguntó Ace con incredulidad─. ¿No tienes ni un poco de intriga por lo que acabas de ver?
Pillado por sorpresa, Jack desvió la mirada por un segundo y se fijó en el choker blanco, aún colocado en el interior de la caja. Resopló, le puso la tapa y la sujetó.
─Solo... ¡Solo voy porque se ha dejado esto! ─insistió─. Entiendo que tenga prisa, pero no debería ser tan descuidado y dejar sus cosas por ahí.
─Lo que tú digas ─bufó Ace antes de echar a correr.
Se apresuraron y Lilia los guió por los pasillos hacia el servicio donde la había dejado con Ortho.
─Lilia, dijiste que estaba creando blot, ¿verdad? ─preguntó Riddle─. ¿Qué tipo de magia ha estado usando?
─Eso es lo más extraño, ¡no hizo ninguna en absoluto! ─respondió Lilia.
─¿¡Cómo dices!? ─exclamó Deuce.
─¿¡Acaso es eso posible!? ─preguntó Jack.
Ace, Deuce, Yuu y Grim no recordaban haber oído algo similar en las advertencias que les había dicho el director.
─Sé que suena imposible, pero la gema de su pluma mágica está presentando manchas a pesar de no haber hecho nada. Al parecer está generando magia en su cuerpo, ha tenido que regurgitar y echar fuera el blot que se le acumuló en el estómago.
Ace se estremeció de solo imaginarse aquella repugnante escena.
─¿¡Estás diciendo que vomitó blot!? ¡Qué asco!
─¿¡Pero cómo...!? ¡Creía que el exceso de blot se expulsaba directamente al exterior! ─exclamó Riddle, recordando la oscura neblina, la tinta y el humo que su cuerpo generó mientras cambiaba de forma al caer en Overblot.
─No lo sé, pero fue una experiencia terrible para ella. Fue el pequeño de los hermanos Shroud quien la encontró, se ha quedado con ella por aquí cerca.
Sin embargo, al llegar a su destino encontraron al joven androide en el pasillo, hablando con el profesor Trein. Detrás de ellos había un estudiante de Savanaclaw con orejas de hipopótamo y una expresión adolorida mientras se agarraba el brazo.
─¡No, no ha usado magia en ningún momento! ─dijo Ortho con insistencia─. ¡Señor Lilia Vanrouge! ─exclamó al verlo.
─¡Aquí estamos, he traído a Riddle! ─dijo Lilia antes de mirar a su alrededor─. ¿Dónde está la chica?
─¡Se ha ido! ─respondió Ortho con preocupación─. Hace apenas unos minutos que estaba conmigo...
─¿¡Qué!? ¿¡Por qué, qué ha pasado!? ─preguntó Grim.
─Después de que Lilia Vanrouge se fuera, decidimos esperar dentro del servicio en caso de que le volvieran a dar náuseas. Entonces este estudiante entró y se fijó rápidamente en el blot que ella había expulsado en el lavabo, se alteró e intentó atacarla... Y...
─¿Qué pasó? ¿¡Le hizo daño!? ─exclamó Deuce, con una mezcla de furia y preocupación. No iba a perdonar que un estudiante del Night Raven College se atreviera a ponerle la mano encima a una chica.
Sin embargo, Ortho negó con la cabeza
─¡En absoluto! ─dijo con decisión─. ¡Fue ella la se defendió, de hecho! Al no querer escucharnos al pedir que se calmara, trató de agarrarla y ella le dio un codazo en el pecho, un rodillazo en el estómago y lo derribó al suelo.
─¿¡Qué!? ─exclamaron todos a la vez mientras al estudiante intentar moverse.
─Lo siento... ─murmuró el joven quejosamente.
─Regresa a tu clase, ve a la enfermería si lo consideras necesario ─le indicó Trein─. Pero no hemos terminado contigo, ¡has intentado atacar a alguien y habrá consecuencias por eso!
El joven agachó las orejas cabizbajo y dijo algo por lo bajo entre gruñidos.
─¿¡A este tipo!? ─cuestionó Grim mientras lo veía irse─. ¡Pero si es súper alto! ¡¿Acaso es una chica gigante?!
─Ella es exactamente tres centímetros más baja que Lilia Vanrouge, aún así lo hizo sin mucha dificultad ─respondió Ortho─. Pero tras eso, el dolor y la luz de su hombro se intensificaron mucho más, entró en pánico y salió corriendo. Intenté detenerla, pero no me escuchó y la perdí de vista...
Excepto Lilia, el resto no comprendió a qué se refería con aquello de luz, pero sabían que no debía tratarse de nada bueno.
─¿No era que el exceso de magia es peligroso si se junta con sentimientos negativos como la furia o el miedo? ─preguntó Ace, consciente de la influencia de los sentimientos negativos.
─¡Sí, se va a poner aún peor si está aterrada! ─exclamó Riddle─. ¡Tenemos que encontrarla en cuanto antes!
─Llegué a cruzarme con ella al venir aquí, fue capaz de evitarme cuando intenté detenerla ─añadió Trein─. Pude ver que uno de sus hombros emanaba una luz, por eso le acabo de preguntar al joven Shroud si había usado magia para confrontar su atacante.
Yuu se llevó de forma casi involuntaria al hombro izquierdo al imaginarse la escena y pensó en su sueño de la noche anterior.
─No, no lo hizo ─repitió Ortho─. Sus movimientos fueron rápidos y precisos, no me extrañaría si tuviera talento en artes marciales.
Aún pensando en el sueño, su corazón se paralizó por un momento y Yuu tragó saliva al escuchar las palabras "artes marciales", a ese punto nada debía de tratarse de una simple coincidencia. Su intrépida decisión de darle la gargantilla se estaba transformando lentamente en una de miedo y preocupación al caer en la cuenta de que la persona que creía que se trataba estaba en peligro.
─Por algún casual... ─comenzó a decir con voz temblorosa─. ¿Te dijo su nombre?
─Sí, me dijo que se llamaba Yukiko... ─Ortho se fijó mejor en él y lo miró de cabeza a los pies antes de dar un respingo─. ¡Eres tú!
─¿Qué...? ─preguntó Yuu, confundido.
El androide se acercó con tanta rapidez que se habría chocado contra él si Yuu no se hubiera echado atrás.
─Te mencionó y llegó a decirme tu nombre, señor Yuu Oshiro, ¡ella estaba impaciente por verte!
─¿¡Yukiko me estaba buscando!?
─¡Sí! Nos cruzamos contigo antes, cuando estabais persiguiendo al señor Ruggie Bucchi, pero no os fijasteis en el otro hasta que reconoció tu voz. ¿Recuerdas el estudiante encapuchado que fue empujado al suelo? ¡Era ella!
Yuu se estremeció aún más, ¡la había visto antes y no se había dado ni cuenta! Una pequeña parte de su interior sentía emoción, pero una mucho más grande fue invadida por el miedo.
─¡¡Tengo que encontrarla!! ─exclamó al salir de sus pensamientos con un involuntario alzamiento de voz─. ¿¡Por dónde se fue!?
Ortho frunció el ceño, preocupado.
─La vi desaparecer al final de este pasillo...
─¡Oshiro! ¿Qué significa todo esto? ─preguntó Trein─. ¿Acaso sabes algo de esta situación?
Yuu le tendió la carta con insistencia.
─¡Tome! ¡Lea esto y tal vez lo entienda! Tengo que irme ─dijo antes de echarse a correr.
─¡Oye, espera! ─exclamó Ace─. ¡No tienes ni idea de dónde está!
─¡Secuaz malo, vuelve aquí! ─exclamó Grim antes de seguirlo corriendo en sus cuatro patas.
─¡Acabas de decirme que no voy a cambiar las cosas yo solo! ─gritó Jack con insistencia─. ¿¡Acaso vas a poder tú, actuando impulsivo!?
Yuu solo quería irse de ahí, pero los escuchó y se detuvo de inmediato. Incluso si sabía como resolver la situación, no tenía ningún plan ni iba a poder hacer gran cosa por sí solo si ella estaba fuera de control. Trató de recuperar la respiración mientras regresaba con el grupo.
─Tenéis razón, perdón ─murmuró con un temblor de voz.
─Primero dinos de qué conoces a esta Yu... ─comandó Riddle, antes de suspirar frustrado─. Disculpa, nunca antes había escuchado un nombre como este, ¿cómo se llama?
─Yukiko ─respondió Yuu, seguro de no conocer a nadie más con el mismo nombre─. Se llama Yukiko Oshiro.
─¿Oshiro? ─repitió Deuce antes de abrir los ojos como platos─. ¿Significa eso que es tu...?
─¡...Hermana! ─lo interrumpió Ortho─. Fui yo quien la encontró, estaba dentro de una puerta en la Sala del Espejo... Tornó en un mal estado gradualmente y se puso aún peor tras ser empujada al suelo.
─¡Parad el carro! ─exclamó Ace─. En caso de ser tu hermana, ¿significaría eso que ha venido de vuestro mundo? ¿Cómo?
─No lo sabe, no recuerda siquiera haber subido al Carruaje Negro ─explicó Ortho─, dijo que su recuerdo más reciente fue ver a su hermano en un sueño, pero...
─¿Te suena algo como eso, prefecto de Ramshackle? ─preguntó Lilia─. Se supone que es una leyenda, pero se trata de un tipo de sueños en los que las personas se comunican con otras mientras duermen.
─Pues a decir verdad...
─¡No es momento para discutir eso! ─reclamó Trein─. El director y los profesores están de camino. Vanrouge, avisa al resto de líderes de dormitorio en caso de que sea necesario ─Lilia asintió y desapareció en un abrir y cerrar de ojos─. ¿Quién te ha dado todo esto, prefecto? ¿Es esa la gargantilla que se menciona aquí?
─Sí, la acabo de recibir ─dijo Yuu mientras le mostraba nervioso el accesorio─. No sé quién me la ha dado exactamente, pero pone aquí que es esencial que se lo dé. ¡Debe de estar tan confundida y asustada como yo en mi primer día aquí!
─Lo está, su gema mágica no aguantará mucho más blot a este paso ─añadió Ortho.
Jack le tendió la caja que tenía en manos.
─Recibió todo aquí, hay otro choker dentro ─informó antes de ver a Yuu─. Ella debe de estar poniéndose peor a medida que hablamos, tenemos que actuar pero ya.
─Eso es cierto ─afirmó Trein─. Ella sentirá más confianza si ve a alguien que conoce. Por eso, Rosehearts, dejo en vuestras manos el plan de encontrarla, voy a ir avisando a los alumnos más cercanos para que se refugien en caso de que vaya a peor. También voy a llevarme esto, Oshiro, el director lo tiene que ver ─dijo mientras guardaba la carta en el interior de la pequeña caja.
Ambos asintieron al mismo tiempo antes de verlo irse.
─Yuu, sé que no te va a gustar oír esto ─le dijo Riddle en un tono suave─, pero si por algún motivo no somos capaces de darle el choker, no tendré más remedio que usar Off With Your Head en tu hermana como último recurso, lo sabes, ¿verdad?
Yuu frunció el ceño antes de volver a mirar la suave gargantilla de seda en su mano.
─Lo sé, y lo entiendo... ─murmuró─. Pero vamos a salvarla, ¡lo sé!
─Déjame ver ese choker, por favor ─pidió Ortho mientras creaba un rectángulo holográfico para investigarlo─. Normalmente suelen ser de metal o eléctricos, y son muy usados en prisiones o en hospitales, por lo que no deberían tener un aspecto de accesorio ordinario ─Yuu se estremeció al escuchar aquella información, no le gustó imaginarse a su hermana en lugares como aquellos─. ¿Realmente sella la magia?
─Lo averiguaremos, déjame probarlo ─insistió Deuce mientras extendía una palma abierta.
─¿Estás seguro? ¡No, espera! ─exclamó Yuu, pero Deuce ya se lo había puesto al cuello y su rostro se contrajo con incomodidad.
─¡Idiota! ¿Estás bien? ─preguntó Ace con una ligera preocupación.
─Sí, solo pica un poco ─sacó su pluma mágica─. ¡Ven aquí, caldero! ─no ocurrió nada─. ¡Ven aquí, caldero! ¡Caldero! ─repitió, pero tampoco se materializó nada─. ¡Sí, parece que funciona! Es exactamente como el collar de Rosehearts.
─¿Entonces a qué estamos esperando? ¡Vamos a por ella! ─decidió Grim.
─Será difícil encontrarla en poco tiempo, habrá que separarse en grupos ─dijo Jack.
─De acuerdo, Ace y Deuce irán con...
─¡AAAH! ─gritó Grim repentinamente mientras se echaba atrás, interrumpiendo a Riddle y sobresaltando a los demás.
─¿¡Qué pasa ahora!? ─exclamó Deuce.
─¡Mirad el suelo! ─Grim señaló lo que parecían ser unas oscuras manchas de tinta con forma de huellas de zapato que se alejaban de forma irregular a lo largo del pasillo─. ¡Acaban de aparecer así de la nada a mi lado!
─¡Es el rastro de Yukiko! ─exclamó Ortho─. Ella corrió precisamente por ahí.
─Esto sí que es conveniente ─comentó Ace, sorprendido.
─Si esto es blot que ella ha producido, el hecho de que se haya materializado debe de significar que se ha puesto peor, ¡va a caer en Overblot! ─exclamó Riddle, pensando nuevamente en el horror que había vivido días atrás.
─¡No si podemos evitarlo! ─exclamó Yuu, antes de seguir el camino de pisadas.
─Yo ya os alcanzaré, voy a traer a los profesores ─avisó Ortho.
Se sentía como una tonta por irse corriendo y dejar atrás la única compañía que tenía en aquel lugar desconocido. Había intentado buscar una salida, pero acabó perdiéndose en aquel laberíntico edificio.
La luz roja y el dolor habían desaparecido, dándole fuerza suficiente para intentar buscar refugio en lo que parecía ser un patio interior con un pozo, pero en su lugar tuvo problemas para moverse y su cuerpo fue envuelto por una especie de neblina oscura que transmitía una vibra negativa llena de miedo y tristeza.
Ortho y Lilia le habían dicho que mantuviera la calma, pero a ese punto ya era imposible; su respiración era pesada y, en caso de que alguien quisiera ayudarla, no había nadie cerca. Si aquello era una pesadilla, solo quería despertar.
Desesperanzada, se detuvo al lado del pozo, cayó en sus rodillas y trató de resistir en vano las ganas de llorar. La neblina se volvió aún más oscura.
Estaba completamente sola, iba a ser incapaz de encontrar a su hermano, no iba a poder dar las gracias a las personas que la ayudaron e iba a ser engullida por algo terrible...
No se había dado cuenta del camino de huellas de tinta que había dejado a su paso.
─¡El rastro termina aquí! ─exclamó Jack al llegar al patio interior─. ¡Aquí está!
─¡Eh, chica! ─exclamó Grim desde lejos─. ¡Levántate, tenemos que ponerte un collar!
Intentó acercarse a ella al no ser escuchado, pero la espesa neblina dificultaba el paso y resultaba imposible no toser cerca de ella.
─¡No podemos entrar! ─exclamó Deuce.
─¡Es demasiado tarde para alcanzarla! ─exclamó Riddle mientras sacaba su pluma mágica─. ¡Off With...!
─¡Espera! ─exclamó Ace mientras extendía un brazo delante de él para detenerlo. Tuvo una corazonada al fijarse que la niebla parecía mucho más ligera que la de Riddle durante aquel ataque de ira y sacó su pluma mágica─. ¡Dejadme esto a mí! ¡Gran Vendaval!
Su idea funcionó, alzó su pluma mágica y la neblina se disipó con el viento originado con su magia. Hecho que fue notado por la chica, quien levantó la cabeza al sentir la fuerza del repentino viento y miró confundida a su alrededor.
─¡Ya podemos pasar! ─exclamó Grim.
Ella intentó ponerse de pie, pero su cuerpo estaba demasiado débil para reaccionar, perdió el equilibrio y cayó de bruces contra el suelo.
Jack aprovechó la oportunidad para alcanzarla.
─¡Levántate, no es momento para rendirse! ─dijo antes de agarrarla por debajo de los hombros, levantarla y asegurarla con los brazos, sin importar que la chica intentara resistirse.
Ella no estaba muy dispuesta a colaborar después de lo ocurrido con el estudiante anterior.
─¡¡No, suéltame!! ─chilló con desesperación mientras intentaba liberarse de aquellos fuertes brazos─. ¡Yo solo quiero irme de aquí!
Antes de que su cuerpo emitiera más neblina negra por su miedo, una persona corrió hasta parar justo delante de ella.
─¡¡¡Yuki, Yuki, Yuki!!! ¡Soy yo, soy yo, soy yo!
La producción de neblina se redujo considerablemente, ¡por fin escuchaba una voz familiar! Levantó la vista, humedecida por las lágrimas y manchada por una mezcla del delineador corroído y la tinta oscura, y por un segundo creyó estar alucinando.
─¿Yuu? ─preguntó entre jadeos.
─¡Sí, soy yo! ─exclamó él, incapaz de contener la emoción─. ¡Confía en nosotros, esto va a ayudarte!
No perdió ni un segundo más y le puso finalmente el choker alrededor de su cuello, tras lo cual la chica gritó ante una fuerte sensación cortante.
Yuu temió haber cometido un error al verla así, mas la neblina y las lágrimas y pisadas de blot se desvanecieron inmediatamente en el aire. Y al final ella fue capaz de recuperar lentamente el aliento.
Ace guardó su pluma mágica, pero Riddle continuó blandiendo la suya mientras miraba a la chica fijamente.
─¿Se acabó? ─cuestionó con duda.
Sin notar otro peligro existente, Jack empezó a soltarla con cuidado.
─Al parecer sí, pero está agotada ─dijo.
Al ser liberada de su agarre, Yukiko trató de ponerse de pie una vez más, pero tambaleó mareada y cayó hacia delante, acentuando las palabras de Jack. Yuu la atrapó a tiempo para rodearla con sus brazos y acomodarla sobre su regazo.
Grim se asomó con curiosidad, Jack dio unos pasos atrás para darles espacio y los tres estudiantes de Heartslabyul se acercaron con cautela.
─¿Va a estar bien? ─preguntó Grim, aún nervioso por lo que acababa de presenciar.
─Lo va a estar ─aseguró Yuu antes de limpiarle el sudor, las lágrimas y las manchas de maquillaje─. Madre mía, estás ardiendo...
Aún no estaba convencido de que las circunstancias fueran seguras, pero Riddle buscó algo en bolsillos interiores de su chaqueta.
─Ten, usa esto ─le dijo mientras le tendía un pañuelo de tela─. No le toques la cara sin haberte lavado las manos.
─Muchas gracias ─dijo Yuu antes de recibirlo.
Tras terminar de limpiarle la cara, Yukiko abrió los ojos con cansancio y sintió un leve mareo.
─¿Eres tú de verdad...? ─murmuró al verlo.
─Sí, Yuki ─respondió él, conmovido─. Estoy aquí... ¡Y tú también!
─¿Qué ha pasado? ─preguntó ella, desorientada─. ¿Hice daño a alguien?
─Aparte de ese tipo al que le diste una buena tunda, a nadie más.
─Yo solo me defendí, él se había lanzado primero atacarme, lo juro...
─Tranquila, lo sé ─aseguró Yuu antes de desabotonarle el cuello de la camisa para que pudiera respirar mejor y le acomodó la gargantilla─. Ahora descansa, has pasado por un mal rato.
Grim tuvo la confianza suficiente para acercarse a la chica.
─¡Será mejor que nos des las gracias! ─dijo con altanería y malicia─. ¡Nosotros también hemos pasado por mucho para salvarte, sabes! Acepto pago en latas de atún.
Yuu le dirigió una mala mirada.
-¡No es el momento, Grim!
Yukiko, por otro lado, alzó las cejas con sorpresa al fijarse en aquel pequeño monstruo con forma de gato. Iba a preguntar por él cuando un rápido sonido de pasos corriendo hacia ellos se hizo más fuerte.
─¡Están aquí! ─se pudo escuchar a Ortho exclamar desde lejos para avisar a los profesores.
Yukiko sonrió levemente al escuchar la voz de su nuevo amigo mientras Jack y los estudiantes de Heartslabyul se apartaban para dejar paso a Vargas, Trein y Crewel.
─¿Lo habéis logrado? ─preguntó Trein antes de fijarse en los jóvenes sentados en el suelo.
Riddle volvió a ver a la cansada chica y guardó finalmente su pluma mágica en el bolsillo.
─Ha sido un éxito ─asintió con una sonrisa orgullosa.
─El pequeño Shroud nos lo ha explicado todo, ¡sois todos unos buenos chicos! ─exclamó Crewel con una mezcla de orgullo y alivio en su voz─. Dejad que nos encarguemos del resto a partir de aquí.
Vargas se acercó a los mellizos y se agachó con los brazos extendidos hacia la chica. Al verlo, ella dio un respingo.
─¡NO! ─exclamó con energía mientras lo rechazaba con un débil manotazo.
─Tranquila, tranquila. Es un profesor ─la calmó Yuu mientras le sujetaba la muñeca con suavidad─. Está aquí para ayudar.
─¿Qué vas a hacer con ella? ─preguntó Grim con recelo.
─No os preocupéis, solo voy a llevarla a la enfermería ─respondió Vargas con un semblante sereno─. Allí nos aseguraremos de que se encuentra bien.
Yukiko cerró los ojos y se apretó insistente contra su hermano para dar a entender que no quería moverse de ahí. Por otra parte, Yuu suspiró y le echó un último vistazo antes de acercarla a los robustos brazos de su profesor.
─No tengas miedo, estaré contigo ─le aseguró.
En eso se fijó finalmente en la ropa quemada en su hombro derecho y dio un suave respingo al fijarse en una gran marca de color azul que se le hizo muy familiar...
─Así... Muy bien, vámonos ─dijo Vargas antes de levantarse lentamente con ella en brazos y regresar corriendo al interior de la escuela, seguido por los otros dos profesores.
Yuu se levantó y comenzó a ir tras ellos, pero una fuerte mano lo sujetó por el hombro repentinamente, deteniéndolo en el acto. Sintió unas puntas metálicas clavarse levemente en su piel.
─¡Ya es suficiente, prefecto! ─dijo severa la voz de Crowley, que al parecer también había estado allí con ellos─. Ya has oído al señor Crewel, los profesores nos encargaremos a partir de aquí.
─¡Por favor, déjeme estar con ella! ─le imploró Yuu antes de ver a Vargas alejarse con Yukiko─. ¡Le he dicho que voy a estar a su lado, me necesita! ─tragó saliva─. ¡Yo la necesito!
Crowley suspiró y relajó su semblante junto a la intensidad de su agarre, simplemente sosteniéndolo.
─Joven Yuu, me he enterado de todo. Puedo ver que te preocupas por tu hermana y lo comprendo perfectamente ─le dijo con un tono tranquilizador─. Tus amigos y tú habéis hecho un gran trabajo en salvarla, de veras que sí. Pero ha sido un día complicado para todos, ahora permítenos ocuparnos de ella mientras se relaja la situación, se va a poner bien.
Viendo que no tenía otra opción posible, Yuu se envolvió con los brazos y suspiró abatido.
─De acuerdo... ─respondió, resignado.
─Muy bien, ahora trata de recuperar la calma, tienes permiso para saltarte las clases de hoy si lo consideras necesario. Te avisaré cuando sea posible verla.
Siguió el camino del profesor Vargas y se fue caminando con su bastón. Grim, Ortho y los demás se acercaron a Yuu.
─¿Te encuentras bien? ─le preguntó Ace.
Él asintió serenamente y se sentó en un banco cercano. Grim se subió junto a él y no pudo evitar mirarlo con preocupación.
─Eh, hemos estado geniales, ¿sabes? ─fue lo único que se le ocurrió decir─. ¡Asegurémonos de contarle todo cuando se ponga mejor!
─Tú también, señor Yuu Oshiro ─añadió Ortho─. El choker acabó siendo la clave para salvarla.
─Sí, muchas gracias, chicos ─murmuró Yuu, esbozando una débil sonrisa─. No habría podido hacer esto sin vosotros...
─¿Necesitas hablar de esto? ─le preguntó Riddle─. Debes de tener muchos sentimientos mezclados.
─Estoy bien, de verdad ─insistió Yuu, pero el quebrantamiento de voz lo delató─. Solo tenemos que esperar y... ─no pudo soportarlo más y unas lágrimas comenzaron a formarse en sus ojos para finalmente caer en un sonoro sollozo. Era la primera vez en que todos los que estaban ahí lo veían llorar.
Grim no dudó en subirse a su regazo para apoyarse en él y rodearlo con sus patas en un pequeño abrazo.
─Perdón, no pretendía... ─dijo Yuu mientras le acariciaba la espalda y se secaba las lágrimas con la manga─. ¡Pero esto ya es demasiado...!
Ace y Deuce no se demoraron en sentarse a cada uno de sus lados, el primero lo rodeó con el brazo y el segundo posó una mano sobre el hombro.
─Todo saldrá bien ─le aseguró Deuce.
─Tengo la certeza de eso ─confirmó Riddle, convencido─. Si yo fui capaz de recuperarme del Overblot, ella estará indudablemente a salvo al no haber terminado de caer.
Yuu asintió una vez más antes de volver a llorar suavemente.
Por otra parte, Jack se quedó mirando la escena sin saber exactamente qué hacer o decir, pero la triste frunción en su rostro demostraba que la escena no le era completamente indiferente.
[Publicado el 24/4/2022]
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