16. Final De Heartslabyul
Pasaron los días hasta llegar finalmente el viernes y la esperada Fiesta del No-Cumpleaños.
Tras finalizar las clases de aquel día, Ace y Deuce se fueron directamente al dormitorio Heartslabyul para terminar de pintar de rojo las rosas que quedaban para la fiesta. Yuu y Grim regresaron a Ramschackle para recoger la cámara fantasma antes de la fiesta.
Al llegar al laberinto de rosas de Heartslabuyl, el cual había sido arreglado y restaurado a la perfección. Allí fueron recibidos por Cater.
─¡Hola, chicos! Sí que habéis llegado temprano ─los saludó alegremente.
─Riddle me dijo que rodaría la cabeza de aquel que llegara tarde, así que es mejor no correr riesgos.
─¡Ja, ja! Nunca mejor dicho ─rio Cater─. Bueno, justo como la última vez, se debe llevar ropa adecuada para la fiesta, así que dejadme echaros una mano.
Sacó su pluma mágica, transformó con magia el uniforme escolar de Yuu en el uniforme de dormitorio de Heartslabyul y el lazo a rayas de Grim en uno con los colores del dormitorio.
─¡Genial! ─exclamó el pequeño monstruo desde el hombro de Yuu─. ¡Vuelvo a tener el lazo guay de Heartslabyul!
─Gracias, Cater ─dijo Yuu mientras se veía el cambio en la ropa.
─Un placer, por cierto, ¿vas a hacer fotos con esa cámara? ─le preguntó Cater mientras señalaba la cámara fantasma, colgando del cuello de Yuu─. ¡Me gusta el estilo vintage que tiene!
─El director me la dio cuando me nombró como prefecto ─dijo Yuu mientras sujetaba la cámara─. Me dijo que sacara fotos de momentos con amigos y estudiantes del Night Raven College.
─¿Ya has tomado fotos con ella? ¿Qué tal se ven las imágenes? Es una pena que no se puedan subir a Magicam...
─Sí, hicimos varias con Ace y Deuce en Ramschackle, se ven bastante bien.
─¡Y las imágenes se mueven de verdad! ─añadió Grim.
─Sí, a veces se mueven.
─¿De verdad? ¡Ya tengo ganas de verlo! ─exclamó Cater─. Acey y Deucey deberían haber terminado ya con las rosas, ¡venid conmigo!
Los condujo a la zona de la fiesta, donde se encontraban todos los estudiantes del dormitorio, Deuce y Ace.
─¡Chicos, habéis llegado a tiempo! ─los saludó Deuce.
Por otra parte, Ace suspiró exhausto.
─Aagh. No solo tuvimos que limpiar y arreglar el jardín, sino que también tuvimos que preparar la fiesta.
─Venga, venga ─respondió Deuce con calma─. Lo importante es que el líder de dormitorio se encuentre bien. Por cierto, Diamond, ya hemos terminado de pintar las rosas.
─¡Buen trabajo, chicos! ─exclamó Cater─. El jardín se ve súper fotogénico ahora.
Momentos después, uno de los estudiantes tocó una fanfarria con una trompeta, como la última vez.
─¡Abran paso para nuestro gran líder! ─anunció─. ¡El Gobernador Carmesí! ¡El líder de dormitorio, Riddle!
Riddle y Trey entraron juntos a la zona de la fiesta tras el anuncio.
─¡Viva Riddle, líder de dormitorio! ─exclamaron los demás estudiantes. En sus voces se notaba una verdadera sensación de alegría y admiración, no solo porque Riddle se había recuperado, sino también porque iban a tener un futuro menos tiránico en el dormitorio.
─Hm. Las rosas son rojas. Los manteles son blancos ─comentó Riddle en voz alta tras echar un vistazo sobre la zona─. Una Fiesta del No-Cumpleaños perfecta─. Se acercó a una de las mesas y levantó la tapa de una tetera. ─Me imagino que habrá un lirón dormido dentro de la tete... ─echó un vistazo a su interior y su expresión de sorpresa hizo entender que no había nada dentro, pero sonrió y volvió a poner la tapa─. No importa si no está.
─No tienes que cambiar tan rápido ─le aseguró Trey con calma─. En vez de poner la mermelada en la nariz del lirón, podrías ponerla en un bollo. Después de todo, es mejor decir "estaría bien si estuviera eso" en lugar de "es inútil sin eso", ¿no crees?
Riddle asintió.
─Sí, tienes razón. ¡Oh, Grim, Yuu! ─exclamó al fijarse en ellos─ .¡Habéis venido!
─¡No me lo perdería por nada del mundo! ─afirmó Yuu con alegría. Pudo notar que Riddle estaba dispuesto a cumplir con su palabra de ser un líder distinto.
─¡Sí! ¡Yo tampoco me perdería por nada del mundo toda esta comida! ─exclamó Grim─. ¡Pienso comérmelo todo!
─¡Ok! ─exclamó Cater antes de señalar una mesa─. Vamos a sentar...
─¡Un momento! ─exclamó Riddle con seriedad para detenerlos.
─¿Eh? ─preguntaron Ace y Cater al mismo tiempo.
Riddle señaló unos rosales en los que algunas de las rosas seguían siendo blancas.
─Esas rosas blancas... ─dijo con serenidad.
Deuce, Ace y Cater las miraron con horror. Otros estudiantes que estaban cerca mantuvieron la respiración.
─¿¡Qué!? ¿¡Nos faltaron algunas!? ─farfulló Ace.
─AH, AAH, AAAAH, AAAAAH... ─tartamudeó rápidamente Cater con miedo─. ¡Acey, Deucey, dijisteis que las habíais pintado todas!
─¿¡Nos echas la culpa a nosotros!? ─preguntó Deuce, temiendo tener su magia sellada por segunda vez.
Incluso Trey estaba aterrado, todos habían sido testigos de la furia de Riddle por no cumplir una norma, incluso si fuera sin querer.
─R-Riddle, esto... ─murmuró, tratando de pensar en algo para salvar el pellejo a sus estudiantes.
La preocupación llegó a invadir también a Yuu y Grim.
─Riddle, no te enfades por esto, ¡por favor! ─pidió Yuu apresuradamente.
Pero para sorpresa y alivio de todos, Riddle se rio suave y alegremente.
─Estoy de broma ─dijo tranquilamente─. No voy a castigaros por una o dos rosas.
─¿¡De verdad!? ─preguntó Cater, emocionado por el nuevo cambio de actitud─. ¡Eres todo un ángel, Riddle!
Riddle observó las rosas y después al grupo.
─Si trabajamos juntos, podremos pintarlas más rápido ─dijo convencido.
─¿¡Las sigues queriendo pintadas!? ─preguntó Ace, estupefacto, aún pensando en el cansancio por pintar la última tanda de rosas.
Por otra parte, Deuce no parecía oponerse.
─Venga, no pasa nada ─Trey dijo para calmar a Ace─. Pero... Sí. Realmente has cambiado, Riddle.
Grim se bajó de los hombros de Yuu de un salto.
─¡No puedo esperar ni un segundo más! ─dijo impaciente antes de alzar las patas con entusiasmo─. ¡Terminemos con esto de la pintura y comencemos la fiesta!
Al ver que todos estaban de acuerdo, Riddle sacó su pluma mágica y la transformó en su largo cetro.
─Entonces, ¿estáis todos listos? ─preguntó.
El grupo asintió y se acercó a los setos de rosas.
─¿Está bien si os hago fotos? ─preguntó Yuu mientras mostraba la cámara.
─¡Pues claro! ─exclamó Cater─. Haz todas las que quieras.
─¿Cuándo fue la última vez que pintaste las rosas, Riddle? ─le preguntó Trey.
─No estoy seguro ─dijo pensativo─. Siempre lo he dejado a los estudiantes del dormitorio desde que me convertí en el líder.
─Es divertido hacerlo de vez en cuando ─le aseguró Cater─. Aunque tenemos que dirigir a los de primer año.
─¿Acaso estáis dudando de nosotros? ─preguntó Ace con aire competitivo.
─He estado varios días pintando rosas, ¡así que seguro que soy mejor que Riddle en eso! ─dijo Grim con malicia.
─Je, je, je ─rio Riddle con la misma malicia─, voy a mostrarte mis habilidades.
─¡Cuidado con no prender fuego a las plantas, Grim! ─le avisó Yuu mientras apuntaba con la cámara. La risa del grupo y la cara avergonzada de Grim hicieron una imagen memorable e hizo la foto sin más tardar.
Grim y los cinco estudiantes de Heartslabuyl comenzaron a pintar las rosas con magia. Yuu prestó atención para ir sacando buenas fotografías, las cuales iba guardando en un bolsillo de la chaqueta a medida que se imprimían.
─¡Vosotros dos esforzaos más! ─ordenó Riddle con firmeza al ver el trabajo de Ace y Deuce─. ¡El color rojo debe ser más intenso sin falta!
─¡S-Sí! ─tartamudeó Deuce, antes de centrarse en crear un color mejor con su magia.
─¡Sigues siendo igual de estricto ─exclamó Ace, atemorizado─. ¡Creí que te habías calmado un poco!
─Es que esa es la personalidad típica de Riddle ─explicó Cater.
─Si vais a hacerlo, tiene que ser perfecto ─insistió Riddle tranquilamente─. Para crear una buena fiesta, no voy a quedarme corto. Je, je ─rio─. Prestad con atención, os enseñaré cómo se hace.
Continuaron pintando las rosas de rojo. Tras unos pocos minutos, Riddle movió su cetro en dirección a las rosas blancas que quedaban y las tiñó de un intenso color rojo en menos de tres segundos.
─Muy bien, esas eran las últimas.
Yuu guardó las últimas fotografías y revisó el total que había tomado.
─¡Increíble! ¡Las ha pintado en un visto y no visto! ─exclamó Ace.
─Eres impresionante, líder de dormitorio... ─dijo Deuce con admiración─. ¡Todas están rojas!
─¡Pues claro! A Riddle se le da muy bien el uso práctico de la magia~ ─dijo Cater.
─Buen trabajo, Riddle ─le dijo Trey.
Riddle volvió a transformar su cetro en la pluma mágica y se la guardó en un bolsillo.
─Con esto ya estarían terminadas las preparaciones, ¡que comience la fiesta!
Regresaron a la zona con las mesas preparadas.
─¿Y bien? ¿Has traído tu tartaleta de disculpa, líder de dormitorio? ─le preguntó Ace.
─C-claro que la he traído. No te preocupes ─insistió Riddle y los guió a una de las mesas, donde reposaba una tartaleta con fresas cortadas y bien colocadas─. Es esta, hice una tartaleta de fresa.
─¡Quiero verla! ─exclamó Grim antes de escalar una silla y subirse a la mesa.
Como el experto en repostería que era, Trey examinó el aspecto de la tartaleta con atención.
─Hmm, hmmm. La forma debe ser trabajada un poco más, pero has hecho bien la parte de cubrir las fresas con glaseado para que brillen. Has hecho un buen trabajo para ser tu primera vez.
─Ah, ahí va Trey, siendo permisivo con él otra vez ─suspiró Ace mientras se sentaban a la mesa y cogió la espátula de servir que había ahí─. Pero en fin, vamos a probar esto.
Cater sacó su teléfono móvil.
─Un momento, no la cortes aún. Quiero sacarle una foto a esta poco frecuente tartaleta. ¡Ok, ya!
─Él tampoco cambia ─murmuró Ace divertido mientras comenzaba a cortar la tartaleta en trozos y servirlos en los platos─. Venga, vamos a comer ya.
Los seis invitados en la mesa se llevaron el primer bocado a la boca bajo la expectante mirada de Riddle. Tras saborearla, sus tranquilas expresiones se tornaron en una de asco...
─¡Esto está...! ─murmuraron Trey y Cater al mismo tiempo antes de que todos gritaran al unísono: ¡¡¡¡¡...SALADO!!!!!
─¡¿Qué?! ─exclamó Riddle, horrorizado.
El primero en reaccionar tras tragar fue Yuu, que cogió su servilleta para cubrirse la boca mientras tosía.
─¡¿Qué es esto?! ─pudo preguntar Ace mientras aguantaba las ganas de toser─. ¡Es como comerse el océano! ¡¿Qué narices le pusiste?!
─Seguí las normas al pie de la letra mientras compraba los ingredientes y al cocinar ─insistió Riddle, extrañado─. No debería haber nada raro... ─abrió mucho los ojos al darse cuenta de su error y jadeó sobresaltado─. ¡Ah! ¿Podría ser que es porque... añadí la salsa de ostras?
Deuce tosió.
─¿Te refieres a la broma que hizo Clover sobre la salsa de ostras del Sr. Morsa para que saliera bien?
─¿¡Cómo puedes echar salsa de ostras a un postre!? ─preguntó Yuu después de servirse un poco de té en una taza para quitarse el mal sabor.
─Pero Trey me dijo que todas las tartas buenas están hechas con eso, incluso si no sale en la receta ─explicó Riddle─. Como si fuera un ingrediente secreto...
Ace sacó la lengua tras imaginárselo, aún sintiendo el sabor salado en ella.
─¡Claro que no! ¡Si pensaras un poco en ello te darías cuenta de que es mentira! ─exclamó con molestia.
─Veo que tú también has caído ─comentó Yuu─. Pero aún no estoy preparado para una estapa en la que se eche salsa de ostras a las fresas...
Ya le estaba costando saber qué cuestionar, como chico no mágico que era, en un mundo mágico como aquel...
─Aún así, esto es mucho para un ingrediente secreto. ¿Cuánto echaste?
─N-Nadie compartiría sus secretos, ¿sabes? ─preguntó Riddle, abatido por el resultado de su error─. Como no estaba en la receta, no estaba seguro de cuánto añadir...
─Así que echaste mucha para asegurarte... ─comentó Yuu.
Riddle miró a Trey, quien no pudo contenerse más.
─Pfft. ¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja! ¡Nunca pensé que alguien llegaría a tomarse esa broma en serio! ─exclamó entre risas para volver a estallar en carcajadas.
Pero lejos de avergonzarse o enfadarse, Riddle sonrió y rio suave y alegremente.
─Es verdad, qué tonto soy ─dijo antes de reírse.
Con eso, a todos se les pasó el literal mal trago y se rieron también.
─Sabe tan mal que te dan ganas de reír ─dijo Deuce.
─Simplemente nos reíremos con eso ─añadió Ace antes de continuar riendo.
─Pero ahora que lo pienso, ¡creo que tiene un buen sabor! ─comentó Grim, convencido.
─Ah, estoy de acuerdo contigo ─le dijo Cater─. En realidad no sabe tan mal.
Eso hizo parapadear confundidos a ls tres chicos de primer año.
─¡Diamond, tienes un gusto tan raro como el de Grim! ─exclamó Deuce, consternado.
─No, no. No se trata de eso ─insistió Cater.
─La tartaleta te gusta porque no es dulce. Es eso, ¿verdad? ─supuso Trey.
─¿Qué? ─preguntó Cater como si acabaran de desvelar un secreto suyo.
─Cater, tú odias las cosas dulces ─dijo Trey tranquilamente, como si ya lo supiera desde hace tiempo.
─¿De verdad? ─preguntó Yuu, sorprendido─. Pero aquel día fuiste a la cocina para probar las tartaletas Mont Blanc, ¿no?
Todos fijaron la mirada en Cater, quien observaba a su alrededor, inquieto y tomado por sorpresa.
─Eh, eh... Trey, ¿cómo es que sabes eso? ─se limitó a preguntar─. Nunca le he hablado a nadie sobre mi aversión a los dulces.
─Siempre que comemos tarta, me pides que cambie el sabor con mi "Doodle Suit" ─explicó Trey─. Nunca lo demuestras, pero supuse que no te gusta el dulce.
─Ah... ¿Me han descubierto? Qué vergüenza... Pero, Trey ─frunció el ceño─, igual que con lo de Riddle, esa costumbre tuya de "Me di cuenta pero no dije nada" no es buena. Deja eso.
Trey sonrió.
─Para la próxima fiesta del No-Cumpleaños prepararé una quiche ─le prometió.
─Te lo agradezco ─murmuró Cater─. Haz que sea tan fotogénica como la tarta.
En ese mismo momento, se escuchó a alguien tararear una canción y se materializó en el aire el joven chico-gato de pelo morado que los chicos de primero habían conocido una semana atrás. El joven se había cogido un trozo de otra tartaleta que había cocinado Trey.
─¡Los dulces de Trey son siempre perrrfectos! ─dijo alegremente antes de dar un mordisco y saborearlo ruidosamente.
─¡Che'nya! ─exclamó Riddle, desconcertado─. ¿¡Qué estás haciendo aquí!?
El joven dirigió sus ojos ámbar hacia su amigo y ladeó la cabeza.
─¿Hm? ─murmuró antes de tragar y responder.─ He venido a celebrar la fiesta del No-Cumpleaños, miau ─dijo como si fuera algo obvio─. Felicidades, Riddle.
─La Fiesta del No-Cumpleaños es una tradición de Heartslabyul ─dijo Riddle con serenidad─. No tiene nada que ver contigo, ¿sabes?
Che'nya esbozó una gran sonrisa y se colocó detras de Grim y Yuu.
─Pero con ellos dos tampoco, ¿verdad? ─dijo mientras colocaba un brazo detrás de los hombros de Yuu.
─¡Oh, tú! ─exclamó Grim de forma acusadora mientras colocaba las patas en jarras─. ¡Eres el tipo de los chistes de gato del otro día!
─Hola de nuevo ─lo saludó Yuu después de apartarse suavemente de su brazo─. Parecía raro, pero tu consejo de aquella vez nos ayudó mucho. Tenemos que darte las gracias por eso.
─Oh, parece ser que mis habilidades para guiar a gente perdida han sido de utilidad una vez más, miau ─respondió Che'nya─. ¡Me alegro!
─¿De qué estáis hablando? ¿Os conocéis? ─preguntó Riddle, sorprendido.
─Fue él quien nos aconsejó hablar con Trey para saber por qué eras tan estricto ─explicó Yuu─. Nos dejó con muchas dudas, pero veo que sois amigos ─dijo mientras recordaba las memorias del pasado de Riddle.
─Y se nota que algo ha cambiado, nadie parece estar asustado por aquí ─comentó Che'nya─. ¡Excepto vosotros siete cuando aparecí!
─A propósito ─dijo Grim─, ¿en qué dormitorio estás tú? No llegaste a decírnoslo.
─Para empezar, Che'nya no es siquiera un estudiante del Night Raven College ─comenzó a explicar Trey─. Él es del eterno rival del Night Raven College, Royal Sword Academy.
Ante esa revelación, Ace y Deuce reaccionaron como si una maceta hubiese caído justo delante de ellos desde una gran altura.
─¿¡Eh!? ¿¡Él va a otra escuela!? ─preguntó Deuce mientras lo veía estupefacto.
─¿¡Y encima la maldita Royal Sword Academy!? ─exclamó Ace.
─Oh, no sabía que había más escuelas de magia ─comentó Yuu─. Pero ¿qué pasa con esa Royal Sword Academy?
Algunos estudiantes cercanos que podían oír la conversación no quedaron indiferentes al escuchar el nombre de la escuela y giraron la cabeza en dirección a ellos.
─Eh, ¿¡acaban de decir Royal Sword Academy!? ─preguntó un estudiante de pelo morado para estar seguro.
─¿¡Uno de esos imbéciles engreídos está aquí!? ─preguntó con una mezcla de indignación y furia en su voz otro joven alto.
Un estudiante pelirrojo sacó su pluma mágica.
─¿¡Cómo has dicho!? ¿¡Dónde!? ¡¡Vamos a echarlo a patadas de aquí!!
Al darse cuenta de que había dejado de ser bien recibido en la fiesta e iba a ser perseguido por una muchedumbre furiosa de estudiantes, Che'nya se irguió.
─Ups. Bueno, ya tengo mi tartaleta, así que es hora de irme a casa, miau ─dijo rápidamente justo antes de desvanecerse en el aire mientras tarareaba apresuradamente su cancioncilla.
─¡Ah, se ha escapado! ─gruñó el estudiante alto cuando alcanzó la zona donde el chico-gato había desaparecido─. ¡A por él!
El grupo de estudiantes se dispersó por varias partes de la zona de la fiesta.
Grim tragó saliva.
─De repente se han vuelto sanguinarios ─comentó nervioso.
El hecho de que no pudieran hablar un poco más con su amigo debido al comportamiento de sus estudiantes hizo a Riddle suspirar fatigado y a Trey llevarse una mano a la sien izquierda.
─Es muy probable que los estudiantes del Night Raven College se vuelvan muy hostiles hacia los del Royal Sword Academy ─explicó Riddle con incredulidad.
─Tras estar perdiendo contra ellos durante 100 años, no puedes culparlos... ─añadió Trey, apesadumbrado.
Cater se interpuso entre ellos y con ambos brazos los rodeó por detrás de los hombros.
─Venga, ¡dejemos de hablar de cosas tristes! ¡Estamos de fiesta! ¡Pasémoslo bien en nuestra Fiesta del No-Cumpleaños!
Estando de acuerdo con él, Grim se puso de pie sobre sus dos patas.
─¡Nyaha! ¡Voy a comer hasta explotar! ¡Feliz No-Cumpleaños! ─exclamó alegremente.
─Sí, feliz No-Cumpleaños ─comentó Yuu.
─Oh, ahora que lo pienso ─comentó Riddle─. ¿Cuándo es tu cumpleaños, Yuu? Si vamos a invitarte, no puede ser en un día en que celebres tu cumpleaños.
─Es el 30 de mayo ─dijo Yuu─. Ya pasó hace meses, así que no hay de qué preocuparse con eso.
─Entendido ─asintió Riddle─. Oh, casi lo olvido, tenemos que realizar el brindis. ¿Queréis venir con nosotros a la mesa grande?
─¿Eh? ¿Nos está invitando a sentarnos con usted, líder de dormitorio? ─preguntó Deuce, casi incrédulo.
─Exacto, después de todo esta fiesta es una reorganización solicitada por Ace ─afirmó Riddle─. A pesar de eso, ¿preferís no hacerlo?
─¡Claro que quiero! ─exclamó Ace─. No voy a perderme una oportunidad como esta.
─Y yo no voy a rechazar la oferta de la reina ─dijo Yuu alegremente, recibiendo una suave risa por parte de los demás excepto Grim.
─Ya vas diciendo cosas raras otra vez... ─bufó.
Yuu se colocó una mano detrás de la oreja.
─¿Qué has dicho, Grim? ¿Que no quieres sentarte en la mesa grande? ─preguntó travieso.
─¡Nunca he dicho eso! ─insistió Grim antes de apresurarse a subirse a los hombros de Yuu.
A Trey le dio gracia la escena.
─Se te da bien tratar con él.
─No puedes esperar menos de alguien que ofrece ayuda en una guardería ─respondió Ace.
─Oh, ¿trabajas en una guardería? ─le preguntó Trey, sorprendido.
─No exactamente, mi hermana y yo solíamos ayudar en la guardería de nuestra madre una o dos veces por semana ─respondió Yuu mientras se sentaba y colgaba la cámara fantasma en la silla─. Allí somos de gran ayuda y no tenemos muchos problemas en llevarnos bien con bebés y niños pequeños.
─Y por eso no tienes problemas en tener tanta paciencia con Grim, ¡es como un niño!
─¡Ace, te dije que no volvieras a decir eso! ─se quejó Grim.
─No solo eres amable, adorable y sabes cocinar, pero ¡¿también sabes cuidar niños?! ─preguntó Cater con asombro─. Si me dijeras que eras popular en tu colegio anterior, te lo creería. ¡Seguro que tienes mucho éxito con las chicas!
─Bueno, yo no era alguien exactamente popular en clase, pero no era ningún secreto que tenía alguna que otra admiradora ─dijo Yuu, tratando de ser modesto.
─¡Guau! ¿¡De verdad!? ¡Tienes que contármelo todo!
─Un momento, Cater ─lo calmó Trey─. Ahora tenemos que realizar el brindis, sentaos primero.
Riddle fue el primero en sentarse en su gran silla carmesí y Trey le sirvió té en una taza. Justo como la última vez, Riddle se levantó para hacer el brindis y todos los presentes levantaron sus tazas, la única diferencia era que la alegría festiva era mucho más notable y genuina.
─¡Brindemos! ─exclamaron al unísono.
─Vale, ya hemos hecho el brindis. ¡Venga, dímelo, Yuu! ─insistió Cater, sentado entre Yuu y Riddle─. ¡Dinos tus secretos~!
─¿Tan impaciente estás por saber de sus relaciones amorosas? ─preguntó Trey con una ceja arqueada.
─¡Yo también quiero saberlo! ─exclamó Grim─. Él mencionó algo al respecto y no nos quiso decir nada... ¡Yo también quiero tener éxito con las chicas! ¡Tienen que ver lo grandioso que soy, sabéis!
─No me importa hablar de ello ─aseguró Yuu, ignorando el comentario de Grim─. Aunque tampoco es que sea algo tan impresionante o intrigante, no es gran cosa. Eres mucho más carismático y extrovertido que yo, Cater, me imagino que habrás salido varias veces con alguien. ¿Tienes actualmente novio o novia?
Aquel comentario lo tomó por sorpresa.
─Bueno... Es cierto que compartido direcciones de Magicam con chicas increíbles y muchas otras personas, y que he tenido alguna que otra cita. Pero no, no estoy saliendo con nadie en este momento.
─Yo tampoco, pero hasta ahora he salido con dos chicas y un chico.
─¡Tres relaciones! ─exclamó Riddle, sorprendido─. ¿Y siendo estudiante? ¿Cómo has podido encontrar el tiempo?
─Yo le pregunté algo similar... ─comentó Deuce.
─Bueno, no es como si saliera con ellos en cadena, claramente tuve espacios de tiempo sin salir con nadie ─dijo Yuu antes de beber de su taza.
─No... No me refiero a eso ─murmuró Riddle─. Quiero decir, ¿cómo pudiste compaginar el tiempo entre tus estudios y la vida amorosa?
─No es difícil si sabes organizarte bien, puedes incluso combinar ambas cosas, como con citas de estudio o caminando juntos de vuelta a casa, por ejemplo ─explicó Yuu.
Grim agarró una galleta y comenzó a mordisquearla.
─Pero no es que parezcas alguien guay o popular. ¿Cómo has tenido éxito? ─preguntó con la boca llena.
─El aspecto no es todo, Grim ─le recordó Yuu─. Mi hermana también tenía cierta popularidad en clase, así que una vez decidimos recopilar varias cualidades de nosotros que a la gente le podría interesar.
─¿Cómo cuáles? ─le preguntó Trey.
─Por ejemplo, a ella se le da bien el kárate, a mí cocinar. A ambos se nos da bien tratar con niños, trabajábamos juntos en una cafetería y se nos da bien hacer amigos. Entre todo eso somos mellizos con mucho parecido físico, algo que suele llamar la atención.
Una vez más, Yuu escuchó a lo lejos la risa femenina. En lugar de reírse a carcajadas, se rio como si la pregunta le hubiera hecho gracia. Harto de tener que escucharla, Yuu apenas se inmutó y suspiró.
Pero de repente, la voz paró repentinamente de reír para comenzar a toser... Eso lo preocupó, era la primera vez que la oía hacer aquello.
─¡Eh! Si estás interesado puedo presentarte a alguien, conozco a varias personas que podrían ser de tu tipo ─le propuso Cater─. Lo mismo para los demás, lo haré encantado.
La propuesta de Cater lo hizo despertarse de sus pensamientos.
─¿Estás hablando de más pinturas encantadas? ─le preguntó Ace con incredulidad.
─¡Claro que no! ─insistió Cater fingiendo indignación─. Conozco a muchas personas de la vida real.
Yuu se rio.
─Gracias, pero estoy bien.
─Entonces con tantas cualidades buenas me cuesta comprender por qué no seguiste con ninguna de tus novias... Y novio ─comentó Grim.
Yuu suspiró.
─La primera me engañó durante nuestra relación a larga distancia, algo que propuso ella poco antes de mudarse de ciudad ─Riddle lo miró compasivo, recordando la conversación de aquel día─. Hasta entonces habíamos estado juntos durante nueve meses.
─¿¡Qué!? ¡Qué horror! ─exclamó Deuce─. No me puedo creer que hayas pasado por algo así.
─No te preocupes, lo superé. Después una amiga de mi tía me presentó a su hija, otra chica de mi edad. Al principio teníamos interés en el otro, pero después de dos semanas decidimos quedar como amigos porque no terminamos de conectar.
─Acabasteis en buenos términos, eso suena bien ─comentó Trey.
─Después vino el tercero, él se armó de valor para confesarme sus sentimientos y me pidió salir. Yo no lo conocía de mucho, pero era adorable y parecía majo, así que acepté. Me acabó gustando mucho ─frunció el ceño como si dudara continuar hablando del tema.
─¿Qué pasó? ¿Te hizo daño él también? ─le preguntó Ace al notar su preocupación─. No tienes que responder si no te sientes cómodo.
─Tranquilo, no fue nada grave. Salimos por casi un mes, pero me di cuenta de que él no estaba realmente preparado para salir con alguien, era muy tímido e inseguro. Al principio intenté ayudarlo, pero no funcionó y acabé por sentir que parecía obligado a estar conmigo, a pesar de que fue él quien me invitó a salir. Así que tras hablarlo decidimos terminarlo.
─¿Cómo puede alguien invitar salir a otro para después no sentirse preparado? ─preguntó Ace con incredulidad y falta de tacto.
─¡¡Ace!! ─le espetó Deuce.
─Calma, chicos. Estuve bien después de eso ─insistió Yuu─. Pero venga, dejemos el drama por un puñado de exes y continuemos con la fiesta. Estas galletas no se van a comer solas.
Los dos jóvenes de Heartslabyul de primer año intercambiaron una mirada y continuaron con calma.
Trey revisó la hora en su teléfono móvil y se acercó a Riddle.
─Ya está a punto de finalizar el tiempo de recepción, ¿comenzamos con el partido de croquet? ─le preguntó.
Riddle echó un vistazo rápido a su alrededor.
─Parece que algunos no han terminado con su té, esperemos unos minutos más ─indicó. Trey asintió como respuesta.
─¿Habéis visto alguna vez un partido de croquet? ─preguntó Cater a los chicos de primero.
Todos ellos lo negaron.
─¿Qué es el croquet? ─llegó a preguntar Grim.
─Ya que este será el primer torneo que veréis, prestad atención a las normas del juego ─les dijo Riddle─. Sobre todo vosotros dos, estudiantes de Heartslabyul, vais a jugar pronto.
─¡Sí, líder de dormitorio! ─exclamó Deuce.
Unos minutos después, todos los presentes se dirigieron al campo de juego, el cual no se encontraba muy lejos del edificio principal del dormitorio.
─¿Por qué hay tantos flamencos aquí? ─preguntó Grim al ver un grupo de estudiantes vigilando unos flamencos de distintos colores.
─¡Hala! ¿Cómo es posible que hay tantos colores para un flamenco además del rosa? ─preguntó Yuu, asombrado.
─La Reina de Corazones tenía flamencos de varios colores para sus torneos de croquet ─explicó Cater, Yuu recordó leer algo así en el libro de la biblioteca─. Cada jugador empleaba un color distinto, por eso usamos magia para cambiarlos de color, como con las rosas.
─¡Oh, leí algo así sobre ella! ¿Significa eso que también usáis erizos como bolas para el juego?
─Sí, exacto ─respondió Riddle─. Hablando de eso, creo que ese grupo de ahí está trayendo las jaulas con los erizos dentro.
Se acercó a ellos para revisar que todo estaba en orden. Estaban dejando en el suelo unas grandes jaulas metálicas.
─Oh, los había visto antes en la jaula grande del dormitorio ─mencionó Deuce.
─Yo también, pero es la primera vez que los veo tan cerca ─añadió Ace.
─Leí que se usaban los flamencos como mazos para golpear a los erizos, ¿no se hacen daño el uno al otro de esa forma? ─preguntó Yuu, preocupado.
─No, no se hacen daño. Los flamencos tienen una cabeza delgada y las púas de los erizos no pinchan a menos que que se sientan en peligro ─explicó Trey─. No te preocupes, siempre están en buenas condiciones.
─¡Quiero ver los erizos! ─exclamó Grim antes de acercarse rápidamente a ellos.
─¡Que no se te ocurra tocarlos o asustarlos! ─le avisó Yuu.
─¿Y tú, Yuu? ¿Quieres conocerlos tú también? ─preguntó Cater─. Eres nuevo para ellos, estoy seguro de que les encantará conocerte. Puede que incluso se dejen sostener por ti si les caes bien.
Sorprendido por la oferta, Yuu desvió la mirada.
─No gracias, estoy bien ─insistió.
Ace lo agarró por los hombros desde atrás.
─¿Qué pasa? ¿Acaso te da miedo tocar unos pequeños erizos? ─le preguntó con travesura─. ¿No sostienes a Grim constantemente?
─¡No es eso! ─insistió Yuu─. Es que... Nunca antes había visto erizos tan de cerca, nada más. ¡De verdad que estoy bien!
─¡Siempre hay una primera vez para todo! Vamos a verlos ─decidió Ace mientras lo empujaba suavemente hacia las jaulas.
─¿Qué? ¡No! ─exclamó Yuu antes de gemir nervioso.
Sabiendo que era inútil resistirse, fue llevado hacia Riddle. Grim estaba observando los erizos dentro de las jaulas.
─¡Líder de dormitorio~! ─lo llamó Ace alegremente─. ¡A Yuu le gustaría conocer los erizos! ¿Es posible antes del torneo?
Riddle se giró hacia ellos con un erizo rosa entre las manos.
─¿De verdad? Aún tenemos tiempo, así que sí, es posible ─acercó la cara al pequeño erizo y le dijo algo con suaves chasquidos de la lengua. El animal asintió como respuesta─. Este pequeño va a dejarte que lo sostengas.
Yuu tragó saliva.
─Eh... Gracias, pero... Nunca antes había sostenido erizos.
─¿Te preocupa que vayas a pincharte con las púas? ─preguntó Riddle, moviendo la cabeza hacia un lado─. No te preocupes, con tal de que no se sientan amenazados no pasará eso. Puede que suene raro porque ahora estoy llevando guantes, pero puedo asegurarte que es verdad.
El joven prefecto se calmó un poco.
─Entiendo, pero me preocupa hacerles daño... Nunca antes había sostenido animales tan pequeños.
Riddle se sentó lentamente en el suelo.
─Ven, siéntate y extiende las manos. Así no tendrás miedo de que se te caiga ─esbozó una sonrisa maliciosa a modo de broma─. A menos que quieras rechazar la oferta del líder de dormitorio.
─¡Ya sé! Déjame la cámara fantasma para capturar tu primer encuentro con los erizos ─le ofreció Cater─. Así de paso te la sujeto.
Viendo que no tenía otra opción, Yuu suspiró, le dejó la cámara, se sentó y extendió las manos sobre su regazo con un poco de duda. Cater hizo la primera foto.
─Con cuidado... Así, muy bien ─murmuró Riddle mientras colocaba suavemente el erizo sobre sus palmas.
─Hola... ─lo saludó Yuu en un murmullo.
Al sentir sus pequeñas patitas, no pudo evitar esbozar una sonrisa. Ace y Deuce se agacharon junto a él. Grim se acercó curioso y Cater le hizo otra foto.
─Esto no está tan mal ─comentó Yuu mientras aseguraba el pequeño animal en sus manos─. Eres una monada, ¿lo sabías? ─le dijo cariñosamente.
─¿Ves? Le caes bien ─dijo Riddle.
Como afirmación de sus palabras, el pequeño erizo rosa olisqueó las mangas de la chaqueta de Yuu antes de escalar su brazo y subirse a su cabeza.
─¡Eh, me haces cosquillas! ─rio.
─Mira, hasta los erizos se fían de ti ─rio Deuce.
─¡Eh, oye! ¡Volved aquí!
Un estudiante que había abierto una de las jaulas jaula para coger un erizo había exclamado aquello cuando dos erizos azules, dos verdes y otro rosa echaron a correr para rodear a Yuu como si una jauría de perritos quisiera jugar con él.
El joven bajó el erizo de su cabeza con cuidado y miró confundido a los demás.
─¿Eh? ¿Qué pasa?
De repente, los erizos se subieron a su regazo. Al ver que uno estaba intentando subirse a su cabeza, Yuu se tumbó cuidadosamente en el suelo. Los erizos lo examinaron curiosamente con sus patas y hocicos, provocándole muchas más cosquillas.
─¡Ah, ja, ja, ja, ja! ¡Parad! ─exclamó Yuu, sin parar de reír.
Cater aprovechó el momento para hacer otra fotografía más.
─¡Eh! ¡Ese es mi humano y mi secuaz! ─exclamó Grim con molestia─. ¡Buscaos vosotros el vuestro!
─Madre mía... No recuerdo la última vez que los erizos se comportaran así con alguien ─comentó Trey.
─Creo que yo no los he visto nunca... ─le dijo Cater en un murmullo.
─Vale, vale. Creo que ya es suficiente, chicos ─dijo Riddle mientras sostenía uno de los erizos azules─. Disculpa ─le dijo a Yuu─, suelen ser muy tranquilos. Me sorprende que se comporten así y se interesen tanto por ti. Que el resto ayude a recogerlos, el partido de croquet está a punto de comenzar ─indicó al resto del grupo.
Yuu volvió a reírse al sentir todavía las cosquillas en el cuerpo.
─Está bien, yo también me he sorprendido ─dijo mientras se levantaba y sostenía un erizo verde para devolverlo a su jaula.
─¡Espero que no te estuvieran oliendo para comerte! ─dijo Grim a modo de broma.
─¡No digas tonterías! ─espetó Ace mientras sostenía un erizo rosa─. ¿¡Cómo va a comer personas un erizo!?
─Pero esa forma en la que se acercaron a ti... ¿De verdad no habías interactuado con erizos antes? ─le preguntó Deuce.
─Solo los había visto en tiendas de mascotas. Es mi primera vez interactuando con ellos ─respondió Yuu mientras Cater le devolvía la cámara─. Este es el mejor día de mi vida ─farfulló en voz grave.
─Sea lo que fuere, ya se han calmado ─dijo Trey mientras introducían los erizos en la jaula.
Algunos de los erizos seguían mostrando interés en Yuu y se lo quedaron mirando por un minuto más.
─¿Te apetece ver los flamencos antes del torneo? ─preguntó Ace con una sonrisa maliciosa.
Yuu abrió los ojos como platos de solo pensar en las posibles consecuencias, una emboscada de flamencos no iba a ser la misma que la de los pequeños y adorables erizos.
─¡Eso sí que no! ─exclamó antes de agarrar a Grim en brazos y alejarse apresurado─. ¡Tengo ganas de ver el partido! ¿Me pregunto quién ganará?
Ace se rio mientras lo veía alejarse, pero paró en seco cuando Riddle, acompañado por Deuce, se acercó a él.
─Este es vuestro primer partido de croquet ─les recordó─, así que prestad atención para que sepáis cómo se hace.
─Sí, líder de dormitorio ─dijeron ambos a la vez.
La fiesta continuó sin ningún problema.
Yuu apenas se acordó de la voz femenina y su tos.
[Publicado el 14/12/2021]
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