Aquel día era miércoles. Decidieron que el viernes por la tarde sería el día perfecto para el duelo.

Ya que no podían volver a Heartslabyul sin haberse disculpado a Riddle, Yuu les ofreció a Deuce y a Ace pasar la noche en Ramschackle hasta entonces, oferta que ellos no vacilaron en aceptar.

Por la tarde aprovecharon la oportunidad para limpiar entre todos dos habitaciones para Ace y Deuce, puesto que Yuu no estaba dispuesto a hacerlos dormir en el suelo o en el sofá por más de un día. Al principio Ace y Grim protestaron por tener que trabajar, pero cambiaron rápidamente de idea tras ver a los otros dos irse solos a la habitación donde se encontraban las lavadoras en la escuela.

Deuce y Yuu los pillaron limpiando el polvo de los muebles.

─No es como si realmente quisiera ayudar, pero ¡Deuce no para de insistir en ser un noble compañero de clase que quiere dar lo mejor de sí y no quiero quedarme mirando cómo se adelanta! ─se excusó Ace mientras limpiaba el espejo─. ¡Y seguro que cometerá un error y destrozará aún más este sitio!

─¿Cómo has dicho? ─le preguntó Deuce sin disimular su molestia mientras colocaba sobre la cama algunas de las sábanas recién sacadas de la secadora.

─¡Y yo también tengo la responsabilidad de ocuparme de mi secuaz! ─insistió Grim─. Debo asegurarme de que dejéis todo limpio.

─Y como he empezado yo a limpiar aquí, ¡me quedo con esta habitación! ─insistió Ace.

─¡No decidas por tu cuenta! ─protestó Deuce.

Yuu suspiró por la cómica tozudez de sus amigos y negó con la cabeza.

─Chicos, sois los mejores ─respondió─. Venga, que no es mucho. Y cuando terminemos prepararé la cena para compensaros. Volveré a la tienda de Sam para comprar lo necesario. Había pensado en pollo o hamburguesas, pero ¿qué preferís hoy?

─¿Eh? ¿De verdad sabes cocinar eso? ─le preguntó Ace.

─Solo sé preparar algunos platos básicos. Pero sí, mi hermana y yo solemos cocinar de vez en cuando, sobre todo cuando mamá se lía con el trabajo. Y en mi escuela anterior yo estaba en el club de cocina, por lo que pude mejorar un poco.

─No solo sabes cocinar tartas, pero ¿también platos comunes? ─preguntó Grim maravillado─. ¡Eres un secuaz increíble! ¿Qué más secretos ocultas de nosotros? ¡Dime, dímelo!

Yuu cogió la funda de la almohada y arqueó una ceja.
─¿Cómo qué?

─¡Lo que sea! ¡Algo de tu vida!

─¡Eh, eso suena interesante! ─dijo Ace─. ¡Venga, cuéntanos!

─Chicos, no deberíais preguntar a la gente sobre su vida personal ─les espetó Deuce.

─No pasa nada, no me importa hablar un poco sobre mí ─aseguró Yuu─. Así nos conocemos mejor. Eso sí, a cambio debéis decir algo sobre vosotros. ¿Trato?

─¡Trato hecho! ─exclamó Ace─. De hecho comenzaré yo, que tengo algo bueno: durante la ceremonia de entrada del Night Raven College, me estaba aburriendo tanto que decidí escaparme y convencí a otro chico de irse conmigo en caso de tener que inventarme la excusa de acompañarlo a la enfermería.

─¿¡Hiciste eso!? ─preguntó Deuce, horrorizado─. ¡Así que fuiste tú el estudiante que el líder de dormitorio salió a buscar! ¡¿Sabes qué habría pasado si te hubiese pillado!? ¡También habrías metido en problemas al otro estudiante!

─Sí, sí... Me hubiera decapitado... ─dijo Ace tocándose el collar en el cuello─. Pero pudimos volver sin que nos pillaran y pude ver a Grim causar todo el alboroto ─se rio al recordar el momento.

─¡No estás en posición de reírte! ─exclamó Grim con enfado mientras trataba de colocarse en una posición cómoda para aguantar el collar de su cuello.

─¿Qué pasó con el otro chico? ─preguntó Yuu mientras cogía la escoba para barrer el suelo.

Ace se encogió de hombros.
─Bueno, no he vuelto a hablar con él. Pero lo vi antes en la cafetería cuando Trey y Cater nos hablaron de los dormitorios. De hecho, es el mismo chico de Pomefiore que confundisteis por una chica.

─¡¿En serio?! ─preguntó Grim.

─Sí. Admito que cuando lo vi por primera vez, yo también pensé que era una chica. Le pregunté si lo era para asegurarme y se ofendió un poco.

─Mira que preguntar algo así a alguien... ─suspiró Yuu.

─No era muy hablador, pero parecía un buen tipo ─recordó Ace─. En fin, ¡es tu turno, Deuce!

─¿Por qué yo? Venga, de acuerdo... A ver, algo interesante sobre mí... ¡Oh, ya sé! ─exclamó finalmente─. Se me da bien arreglar aparatos electrónicos.

─Qué aburrido ─respondió Grim sin entusiasmo.

─¿Qué más queréis que os diga? ─preguntó Deuce con indignación.

─No sé... ¿Qué tal algo sobre tu etapa de chico malo? ─sugirió Ace.

─¡Chicos, no creo que a Deuce le guste hablar de eso! ─interrumpió Yuu antes de que Deuce dijera algo─. Tranquilo, Deuce. A mí sí que me parece interesante, ¿qué sabes arreglar?

Él se alivió de oír aquello.
─Normalmente aparatos pequeños como relojes y máquinas de casa ─respondió─. Mi madre siempre me pide ayuda porque no se le dan bien ese tipo de cosas. Al principio lo hacía sin muchas ganas, pero acabé por encontrarlo divertido.

─Parece útil ─comentó Yuu.

─Vale, Yuu. Ahora te toca a ti ─insistió Grim─. ¡Y que sea muy interesante!

Él lo pensó un poco. Consideró hablarles sobre la marca, pero se decidió por algo mucho más sencillo:
─Mi madre trabaja en una guardería. Mi hermana y yo solemos ayudarla ahí.

─Oh. ¿Significa eso que tienes experiencia cuidando niños? ─le preguntó Deuce.

─Un poco. Solemos tratar con bebés y niños pequeños. En general me llevo muy bien con ellos.

─No me extraña ─rio Deuce─. Eres tan amable que un niño no tendría miedo en confiar en ti.

Ace no pudo reprimir una risa.
─Eso ha debido de ser útil para ti. Como Grim se comporta como un niño pequeño, no debe de ser muy difícil para ti ocuparte de él.

─¡¿Qué has dicho, Ace?! ─preguntó Grim, ofendido─. Yo no soy un niño, ¿sabes? Y Yuu, eso no es un secreto interesante, ¡es aburrido! ¡Dime algo que sea jugoso!

Yuu fingió sentirse indignado.
─Bueno, ya que todo te parece TAN aburrido... No creo que te interese saber que hasta ahora he tenido tres parejas.

─¿¡Eh!? ─preguntaron los tres a la vez.

─¿Qué? ¿A qué viene la sorpresa?

─¡¿Tres parejas a los 16 años?! ¿Tan popular eres en tu hogar? ─le preguntó Deuce con estupor.

─¿¡Tres!? ¿Cómo puede tener éxito con las chicas alguien de aspecto tan común y simple como tú?! ─preguntó Grim.

Yuu frunció el ceño en respuesta.
─No todo se trata de aspecto físico, ¿sabes? ─le preguntó con molestia─. Pero como he dicho: como veo que todo te parece aburrido y no te va a interesar, vamos a continuar limpiando ─dijo mientras recogía el resto de sábanas limpias─. Aún queda la habitación de Deuce y tengo que preparar la cena.

─¡No! ¡Realmente me interesa, cuéntamelo! ─insistió Grim─. ¡Prometo que esta vez no me quejaré!

─¡Ya es tarde, ahora estoy ocupado! ─dijo Yuu al salir de la habitación con una sonrisa traviesa.

─Fgnaaa... ─lloriqueó Grim y se sentó sobre la cama con un gran sentimiento de derrota.

Tras esta escena, Deuce y Ace intercambiaron una mirada e intentaron aguantar la risa. La relación de Yuu y Grim parecía como la de una madre con su hijo revoltoso.... O la de un hermano con su hermanito pequeño.

─Vale, vale. Ya vamos ─dijo Ace─. Pero algún día tendrás que hablarnos de tus líos amorosos ─bromeó.

─¡De lo que tenemos que hablar ahora estos días es sobre el duelo contra Riddle! ─respondió Yuu desde la otra habitación.

Finalmente, la noche anterior al duelo, Yuu volvió a soñar con Alicia y la Reina de Corazones.

─¿Otro sueño raro? ─dijo en voz alta al verse nuevamente con el vestido azul.

El lugar en que se encontraba no era el laberinto de rosas de las dos veces anteriores, sino lo que parecía ser el tribunal de un juicio. De hecho, la Reina de Corazones estaba sentada en lo más alto de una alta mesa de juez mientras que Alicia estaba por debajo de ella. Había muchas cartas-soldado.

La reina estaba manchada de lo que parecía ser mermelada y Alicia se comió algo rápidamente.

─¡CÓRTENLE LA-!

El grito de la Reina de Corazones se vio interrumpido cuando Alicia comenzó a crecer de forma apresurada hasta golpear el techo con la cabeza.

Yuu no entendía la situación en absoluto, pero justo cuando Alicia pudo asustar finalmente a los soldados que se acercaban a ella, vio una especie de brillo azul no muy lejos de él, a su izquierda...

Dio unos pasos hacia ella y distinguió lo que parecía ser la una oscura sombra con forma de persona. A pesar de ser una silueta negra, pudo distinguir perfectamente una figura femenina.

Yuu pudo distinguir en ella una cabellera larga, además del mismo vestido con delantal que estaba llevando él. El brillo provenía de su hombro derecho y tenía una forma exacta a la de él.

─¿Alicia? ─la llamó, creyendo que debía de tratarse de la joven chica rubia.

Pero se fijó mejor en que la chica de la sombra era algo más alta y esbelta que la propia Alicia, también tenía el pelo mucho más liso. No pareció haberse fijado en él, estaba mirando con cautela y atención a la Alicia gigante discutiendo con el rey.

Yuu tuvo una corazonada y se levantó la manga izquierda del vestido, revelando que la marca azul de su hombro estaba brillando de la misma forma.

¿La marca siempre se había puesto a brillar así en sus sueños? ¿A qué se debía eso?

Sus pensamientos se interrumpieron por la siguiente escena: la Alicia gigante hizo una reverencia a la reina antes de enfadarse. Verla enfrentarse a ella de aquella forma le recordó a Ace confrontando a Riddle por su tiranía.

─¿Su Real Majestad? ¡Usted ni siquiera es reina! ─exclamó la niña sin darse cuenta de que estaba encogiendo de vuelta a su tamaño original a medida que hablaba─. ¡Usted solo es una tirana que hace lo que quiere! ¡Egoísta, malvada y muy maleduca-!

Se detuvo enseguida al ver que había perdido su ventaja de tamaño.

La reina se frotó las manos con malicia al verla en aquel estado.

─¿Podrías repetir lo que has dicho? ─le preguntó con furia contenida.

Un gato con rayas moradas que Yuu reconoció como el Gato de Cheshire, sentado de repente sobre la cabeza de la reina.
─¡Ella acaba de decir que eres una tirana gorda, egoísta, malvada y muy maleducada! ─exclamó apresuradamente con una aguda voz, como si no le importase la vida de Alicia.

La chica palideció y trató de hacerle gestos para que se callara, pero ya era tarde...

─¡¡¡¡¡CÓOORTENLE LA CABEZAAAA!!!!! ─gritó la Reina de Corazones con toda la fuerza que sus pulmones le podían proporcionar.

Muchas cartas-soldado se abalanzaron sobre Alicia para atraparla.

─¡Que la degollen! ─exclamó el rey usando su enorme corona como megáfono─. ¡Que la degollen por orden de mi reina!

Yuu pudo ver a Alicia echar a correr antes de que los soldados intentaran atraparla...

...Y cómo en medio del caos la chica sombra lo estaba mirando fijamente... Como si se acabara de dar cuenta de que él estuvo allí todo el rato.

Antes de que la situación fuera a más, todas las imágenes del sueño desaparecieron. La sombra tampoco parecía estar allí, puesto que no se veía por ninguna parte el brillo azul.

─Alguien debería haber detenido a la reina antes de llegar a esta situación... ─dijo Yuu en voz alta, pensando en lo que acababa de ver─. Igual que con Riddle...

Recordó nuevamente a Ace endureciéndose con Trey por no haber hecho nada con Riddle y su tiránico mandato.

Y a pesar de que la situación se trataba de la reina, no fue capaz de olvidarse de la sombra con forma de chica mirándolo fijamente por un momento.

La sombra tenía un aspecto extraño, intrigante y espeluznante, pero Yuu no la sintió como algo totalmente peligroso. No supo decir si era porque ella tenía la misma marca que él o por la sensación de calma que sintió con ella por un segundo, antes de que el gato morado provocara el caos.

Yuu se despertó de un sobresalto al sentir una leve sacudida y se frotó los ojos para ver mejor que se trataba de Grim y Ace.

─¡Oh, ya estás despierto, Yuu! ─dijo Grim, sentado sobre la cama.

Ace estaba de pie, vestido con su uniforme de dormitorio.

─¡Hoy es el día! ─dijo con seriedad mientras le quitaba la manta de encima─. ¡Venga, vámonos!

─¡Vale, vale! Ya voy... ─exclamó mientras se levantaba, aún con la cabeza llena de cansancio y turbulencias provocadas por el alborotado sueño.

Mientras se ponía el uniforme escolar, volvió a marearse y escuchó una vez más el siniestro sonido de goteo...

─Espero que no pase nada malo... ─murmuró para sí mismo.

Aquella tarde, después de clase. Todos se reunieron en la entrada del laberinto de rosas de Heartslabyul.

Los estudiantes de Heartslabyul no paraban de hablar y murmurar entre ellos sobre el duelo al líder de dormitorio. Unos mostraban curiosidad, otros intriga. Muchos se esperaban el resultado con Riddle como el ganador y otros comentaban sobre la audacia de los dos estudiantes de primero para enfrentarse al líder.

─¡¿Acey y Deucey han retado a Riddle a un duelo para quitarle el título de líder?! ─preguntó Cater con miedo y estupefacción─. ¿¡Van en serio!?

─Intenté detenerlos... ─dijo Trey, derrotado.

─Sí que son imprudentes... Espero que esto no acabe peor de lo que parece.

─Y yo.

─Hola ─los saludó Yuu.

─¡Yuu! ¿Tú sabías de esto? ─le preguntó Cater.

Yuu asintió.
─De hecho estuve con ellos cuando el director propuso el duelo.

─¿¡Y te parece bien!?

Él suspiró.
─No, pero habría imposible tratar de evitarlo. E intentar quitar los collares por las buenas no funcionó en absoluto, por lo que ahora toca hacerlo por las malas. No se nos ocurre algo mejor...

Cater iba a decir algo más cuando Grim, desde el suelo, dio tirones a Yuu de los pantalones.
─Ven, Yuu. Va a comenzar.

─Tengo que irme, ya hablaremos.

Yuu y Grim se colocaron al lado del director, quien apoyó su bastón en el suelo con firmeza.

─Muy bien, ¡que todo el mundo preste atención! Hoy seremos testigos de un duelo por el título de líder de dormitorio de Heartslabyul ─Ace y Deuce dieron un paso adelante─. Los retadores son Ace Trappola y Deuce Spade ─el director señaló Riddle, situado de pie en el otro extremo─. Y la persona que aceptó el desafío es Riddle Rosehearts, actual líder de dormitorio. Las reglas indican que no debe haber desventajas, así que quíteles el sello mágico, por favor.

Riddle obedeció y con un gesto del brazo hizo desaparecer los grilletes de los cuellos de Ace y Deuce. Ambos se masajearon los cuellos con alivio.

─¡Ah! ¡Por fin soy libre de ese collar! ─exclamó Ace.

Riddle esbozó una sonrisa cínica.
─No cantéis victoria, os la volveré a poner dentro de poco. Disfrutad de esta corta libertad mientras podáis. Me costó creerlo cuando me dijeron que me habíais retado a un duelo ─frunció el ceño─. ¿Vais en serio?

─Por supuesto ─respondió Ace.

─Nunca te retaríamos a un duelo si estuviéramos de broma ─añadió Deuce.

Riddle suspiró y sacó su pluma mágica para convertirla en el cetro dorado.
─Bueno, no importa. Hay que comenzar en cuanto antes.

Cater se acercó a él.
─Riddle, ¿qué deberíamos hacer con la hora del té de esta tarde?

─Qué pregunta más innecesaria ─contestó Riddle─. Las reglas indican que mi horario del té se fija diariamente a las 4 en punto de la tarde.

Cater sacó su teléfono móvil para revisar la hora.
─Pero si ya son las 3 y media pasadas...

─¿De verdad crees que voy a llegar tarde? Voy a acabar con esto rápido ─se dirigió nuevamente a Ace y Deuce─. Como podéis ver, no tengo mucho tiempo. Enfrentarme a vosotros uno en uno me demorará mucho, así que venid los dos de una sola vez.

La mayoría de los estudiantes de Heartslabyul comenzaron a animar y vitorear a Riddle.
─¡Vamos, líder de dormitorio!

─¡Acabe con ellos!

Los dos contrincantes, Grim, Yuu e incluso Trey miraron con hastío a su alrededor.

─¡Solo se animan a hablar en momentos como este! ─murmuró Deuce por lo bajo.

─¡Agh! ¡Como me fastidia eso! ─exclamó Grim con frustración.

─¡Que sepas que no hemos venido sin una estrategia! ─informó Ace.

─¡Chicos, mucho ánimo! ¡Estoy seguro de que vais a ganar! ─gritó Yuu con fuerza para intentar hacerse oír entre el alboroto.

Observó a Riddle acercarse a Crowley.
─Director, cuando esté listo ─le dijo.

Crowley sacó un espejo de mano y lo alzó en el aire.
─El duelo comienza cuando el espejo caiga al suelo y se rompa. ¿Preparados? ¿Listos? ─lo lanzó al suelo con fuerza y este se rompió fácilmente─. ¡A luchar!

Parecía que Ace y Deuce tendrían la ventaja en número para derrotar a Riddle, mucho más con la estrategia de lanzarle un caldero y rematarlo con magia de viento y fuego.

Pero para sorpresa de ellos, Riddle se les adelantó fácilmente y con un gesto del cetro mágico formó una gruesa línea de fuego que los hizo echarse atrás y perder el equilibrio.

Al verlos caer al suelo, Riddle no se demoró en hacer un gesto con el brazo libre y mirarlos con furiosas pupilas contraídas.
─¡¡¡OFF WITH YOUR HEAD!!!

Los dos gritaron de dolor y frustración al volver a sentir los collares apretando sus cuellos...

─¡Maldita sea! ¡No pudimos ni usar nuestra magia...! ─exclamó Ace.

─¡Pensar que ni siquiera tuvimos la oportunidad! ─añadió Deuce.

─¡Dios mío! ─exclamó Yuu─. ¡Ha sido tan rápido que apenas he podido verlo!

─La fuerza mágica de una persona proviene de la fuerza de su imaginación ─explicó Crowley─. Cuanta más fuerza emplees para imaginar qué quieres hacer con tu magia, saldrá más poderosa ─Yuu recordó dar aquello en clase─. El joven Rosehearts ha demostrado haber mejorado muchísimo su poder mágico ─dijo con orgullo.

Eso era razón de orgullo para él como director y educador profesional que era, pero para Yuu era algo preocupante, puesto que ahora sus compañeros continuaban en aquel problema.

El sentimiento era compartido por Grim, quien se estremeció ante la inesperada fiereza de Riddle.

─Ah... La diferencia de nivel de magia es demasiado grande ─musitó.

─No se nos ocurrió pensar en eso para la estrategia en absoluto ─añadió Yuu, sintiéndose igualmente frustrado.

─¡Bien hecho, líder de dormitorio! ─gritaron muchos de los estudiantes que presenciaron su rápida victoria.

Alimentado por su triunfo y las felicitaciones dirigidas hacia él, Riddle esbozó una sonrisa serena.

─Ja. Esto no ha durado ni cinco segundos ─dijo satisfecho antes de mirar a sus contrincantes con desdén─. Me sorprende que me hayáis retado a un duelo con tan baja capacidad. ¿Acaso no os da vergüenza? ─frunció el ceño─. Lo sabía. Cualquiera que rompa las reglas no llegará a ser nada... Tal y como dice madre.

Yuu soltó un respingo de horror, tanto por ver personalmente la confirmación de la historia de Trey como por el hecho de que Riddle dijera algo así porque alguien trajo un tipo de tartaleta sin saber que no estaba permitido y por estar en desacuerdo a un modo de vida inadecuado.

Como si le hubiera leído la mente, Deuce se levantó y miró a Riddle con firmeza.
─Es cierto que hay que seguir las normas, pero ¡la forma en que obligas a cumplir cada reglas absurdas al pie de la letra te convierte en un tirano! ¡Eso es opresión! ─exclamó para volver a intentar hacerlo en razón.

Sin embargo, Riddle apenas reaccionó a sus palabras.
─¿Eh? El quebrantamiento de las normas tiene consecuencias ─se señaló así mismo con una mano─. Y en este dormitorio, yo soy la ley. ¡Por eso, todo aquel que se atreva a desobedecer no tiene derecho a quejarse cuando le corto la cabeza! ─dijo con voz autoritaria.

Yuu no lo aguantó más. Apenas pudo hacer algo para ayudar al novio de su hermana, no iba a quedarse de brazos cruzados y mirarlo repetir aquellas palabras como si intentara convencerse así mismo.

Bajo las sorprendidas miradas de Crowley, Ace, Grim, Deuce y de algunas personas, se acercó a Riddle hasta quedar a tan solo a unos pasos de él. Yuu era apenas unos cinco centímetros más alto que él, pero los tacones de las largas botas de Riddle compensaban aquella pequeña diferencia, por lo que el contacto visual fue directo.

─¡Te equivocas! ¡Lo que haces está mal! ─exclamó─. ¡No puedes seguir usando las reglas como excusa para hacer lo que quieras! ¿Acaso no piensas cómo deben de sentirse los demás?

Era la primera vez que Yuu hablaba así de directo con él, pero lejos de desconcertarse, Riddle golpeó su cetro contra el suelo como respuesta.

─ ¡¡Yo soy el que decide lo que está mal!! ¡Y nadie seguiría reglas poco exigentes! ─exclamó con severidad antes de mirarlo con una sonrisa cínica y burlona─. ¿Qué clase de normas y educación tuviste para que no puedas entender algo tan simple como eso?

Yuu frunció el ceño y negó con la cabeza, confundido por la pregunta.
─¿Qué? 

Riddle le echó una rápida mirada de pies a cabeza y se jactó.
─Lo más probable es que hayas nacido de padres que no pueden usar magia. Estoy seguro de que por eso no has recibido una buena educación antes de entrar a esta escuela. Eres inadecuado aquí. Realmente patético.

El joven se horrorizó por aquel insulto. Ya era duro para él estar alejado de su madre, quien se esforzaba mucho por él y su hermana incluso después de la muerte de su padre... En un mundo que apenas conocía, donde se encontraba en desventaja desde el primer día...

Desvió la mirada para no demostrar que sus palabras habían sido un fuerte puñetazo emocional para él, pero la intención fue frustrada por el apretón de sus manos y de su mandíbula.

─Mamá... ─murmuró mientras luchaba por contener las lágrimas.

Grim soltó un respingo al verlo así. Trey no pudo evitar hacer lo mismo. A pesar de las cosas que lo había visto hacer, nunca llegó a pensar que Riddle diría algo así a otra persona.

─¡No me creo que haya dicho eso! ─exclamó Cater con incredulidad.

Ace y Deuce tampoco quedaron indiferentes ante la escena y a la dolorosa reacción de su amigo, sobre todo siendo conscientes del peso de aquellas palabras para él.

─¡Serás...! ─gruñó Deuce con furia.

─¡¡¡¡¡¡¡¡YA ESTOY HARTO DE TI!!!!!!!! ─gritó Ace colérico mientras corría hacia Riddle para propinarle sin vacilar un fuerte puñetazo en la cara.

Riddle no tuvo ni tiempo para reaccionar, cuando quiso darse cuenta sintió el doloroso impacto y el cetro se le resbaló de las manos. Su pequeña corona dorada también había caído al suelo.

─¡¿Riddle?! ─gritaron Trey y Cater con estupefacción antes de correr hacia él de forma instintiva para socorrerlo.

─¿¡Rosehearts!? ─exclamó Crowley a su vez.

Se levantó un fuerte murmullo entre el público de estudiantes.

─¡Ese fue un golpe directo a la cara! ─exclamó Grim con orgullo.

─¿¡Ace!? ─exclamaron Deuce y Yuu al mismo tiempo.

Ace continuó mirando a Riddle.
─Ah, estoy harto ─farfulló─. Ya no me importan ni tu puesto de líder ni este duelo .

Riddle se acercó la mano a la parte golpeada y miró a Ace como si no creyera lo que acababa de pasar.
─Duele... ¿Eh? ¿Acabas de golpearme?

Pero Ace no lo escuchó y señaló a Yuu y a Deuce por un segundo.

─Los hijos no son trofeos de sus padres y los padres no se valúan por lo que hagan sus hijos ─le dijo a Riddle con mucho enfado.

─Ace... ─murmuró Yuu con admiración.

Pensar que la primera persona que se burló cruelmente de él en su primer día pasaría a ser el primero en defenderlo de lo mismo...

─¡Por fin entiendo que el que seas un asco de persona no es culpa de tus padres en absoluto! ─continuó Ace mientras colocaba los brazos sobre la cintura─. ¡Llevas un año en esta escuela y no has hecho ningún amigo que te diga que lo que haces no está bien! ─Trey desvió la mirada con vergüenza de sí mismo─. ¡Eso es solo culpa tuya!

─¿Qué... estás diciendo? ─dijo Riddle mientras sentía como el impacto de las palabras de Ace se asimilaban al del puñetazo.

─Entiendo que hayas sido criado por una madre obsesiva que está mal de la cabeza, pero ¡no paras de decir "Mamá esto! ¡Mamá lo otro!". ¡¿Acaso no puedes pensar por ti mismo?! ¡Al cuerno con eso de "Gobernador Carmesí"! ¡No eres más que un bebé con talento para la magia!

Se escuchó un respingo general.

─¿Me has llamado bebé...? ¡¿A mí?! ─Riddle tartó de retener la furia al ver que alguien lo reprendía por su vida personal, pero no fue capaz y se apartó de Cater y Trey─. Tú no sabes nada... ¡No sabes nada sobre mí! ─farfulló por lo bajo.

─Tienes razón, no lo sé. No sé nada en absoluto ─respondió Ace con hastío─. ¿De verdad crees que sabría algo de ti con esa actitud? ¡No seas estúpido!

Esa fue la gota que colmó el vaso para Riddle.
─¡Cállate, cállate, cállate! ¡¡SILENCIO!! ─gritó con todas sus fuerzas mientras daba patadas al suelo─. ¡Madre tiene razón! ¡¡Por eso yo también tengo razón en todo!!

Trey dio un paso adelante al ver que Riddle estaba por volver a agarrar su cetro.
─Riddle, cálmate ─le dijo con insistencia─. ¡El duelo ya ha acabado!

─El joven Clover tiene razón ─dijo Crowley con no menos seriedad─. ¡Cualquier ataque realizado fuera del duelo anulará tu victoria! Si continuáis peleando de esta forma, ¡ambos estaréis rompiendo las reglas!

Para sopresa de todos, uno de los estudiantes del público se adelantó.

─¡Los chicos de primero tienen razón! ─gritó airado─. ¡Ya estoy harto de esto!

Entonces lanzó algo a la cara de Riddle que lo empapó con una sustancia viscosa de color amarillo y transparente. El líder cerró los ojos por el nuevo impacto.

─¿¡Eh!? ─exclamó Trey─. ¿Qué es eso? ¿Un huevo? ¿Alguien lo ha lanzado?

Riddle se limpió como pudo la clara y la yema.
─¿¡Quién ha sido!? ¿¡Quién me ha lanzado este huevo!? ─demandó saber.

Inspirados por el intrépido y audaz discurso de Ace, los estudiantes habían decidido finalmente dejar sus miedos de lado y revolucionarse contra el líder tirano. El culpable no quiso confesar ni los compañeros de dormitorio situados cerca de él tenían intención de delatarlo, por lo que todos guardaron silencio y no respondieron a la pregunta de Riddle.

Al entender la situación, Riddle rió de forma maníaca para volver a expresar su ira.
─¿Que vosotros estáis hartos? ¡Soy yo el que debería estar harto! ¡No importa cuántas veces os corte la cabeza ni lo estricto que sea, siempre seguís rompiendo normas! ¡Absolutamente todos sois unos idiotas egoístas! Pues de acuerdo, si nadie va a confesar, ¡todos asumiréis las consecuencias! ─volvió a recoger su cetro─. ¡Os cortaré la cabeza a todos! ¡¡OFF WITH YOUR HEAD!!

Con su magia puso un collar a todos los estudiantes situados en la zona desde la cual se lanzó el huevo. Tras verlos retorcerse por la incomodidad e intentar liberarse, Riddle se rió de forma arrogante.
─¿Qué tal esto? ¡Ahora nadie puede levantar una mano contra mí! Lo sabía, siempre tengo razón porque siempre cumplo las normas.

Crowley perdió aún más la paciencia.
─¡Detente, Rosehearts! ─demandó─. ¡Esto de no seguir las normas es muy impropio de ti!

─¡Trey, esto es malo! ─exclamó Cater─. Si sigue usando su magia así, él...

Trey se acercó por detrás de Riddle para agarrarlo de los hombros.
─¡Riddle, ya basta! ─le espetó.

─¡Oye, tú! No todo puede salir de la forma que quieres, ¡¿sabes?! ─exclamó Ace ante su nueva acción─. ¡Esta rabieta que estás montando me da la razón por haberte llamado bebé!

Riddle apartó a Trey de un empujón, su cara se tornó completamente roja de ira y sus ojos se inyectaron de sangre.
─¡RETIRA LO QUE ACABAS DE DECIR! ─chilló─. ¡¿Acaso quieres que te haga pedazos!?

─Ni hablar, me niego a retirarlo.

Riddle chilló con furia y comenzó a reunir mucha magia con su cetro.

─¡Esto no tiene buena pinta! ¡Chicos, salid de ahí! ─gritó Cater.

Pero en pocos segundos el bonito ambiente del jardín se tornó oscuro y hostil, el cielo azul adquirió un color rojo y se levantó una fina pero abundante niebla gris.

Entonces Riddle hizo un movimiento ascendente con el cetro y muchos de los arbustos de rosas fueron arrancados de la tierra para flotar por encima de su cabeza. Estaba mirando fijamente a Ace con una mirada peligrosa.

─¡Esto es una gran cantidad de magia! ¿¡De verdad piensa hacer daño a Ace!? ─exclamó Deuce.

─¡Rosales, escuchadme bien! ¡Reducid su cuerpo a pedazos! ─comandó Riddle antes de señalar a Ace.

Ace se dio cuenta de la intención de Riddle y se asustó.

─¡Esto es malo! ¡Sal de ahí! ─le gritó Crowley.

─¡Huye, Ace! ¡Corre! ─gritó Yuu.

Pero era tarde, los rosales se acercaron a una velocidad vertiginosa hacia Ace y él no tendría tiempo para salir de allí ileso.

Sin embargo, cuando los rosales iban a atravesar a Ace con sus numerosas espinas, se disolvieron en numerosas cartas de naipes justo antes de que pudieran siquiera alcanzarlo. Entre la niebla aparecieron unas coloridas luces en forma de los símbolos de la baraja francesa.

─¿¡Eh!? ¿¡Sigo vivo!? ¿¡Qué es esto!? ¿¡Cartas!? ─preguntó Ace en voz alta.

─¡Ace, ven aquí! ─exclamó Yuu y lo cogió de la muñeca para alejarlo de Riddle.

─¡Los rosales se han transformado! ─dijo Deuce con intriga y asombro─. ¿Qué es esto?

Trey se puso delante de ellos de forma protectora y miró a Riddle como si hubiera perdido la paciencia con él.

─Riddle, ¡ya basta! ─exclamó con severidad.

Cater reconoció el tipo de magia que anuló la de Riddle.

─Trey, ¿¡es esto tu Doodle Suit!? ─preguntó─. ¿¡Qué está pasando!?

─¡Mirad! ¡Mi collar que sellaba la magia ha desaparecido! ─exclamó Grim tras darse cuenta de que no lo sentía en el cuello.

─¡Chicos, los vuestros también! ─exclamó Yuu al ver a Ace y Deuce. También habían desaparecido el de los demás estudiantes.

─¿Recordáis lo que os dije? Mi Doodle Suit puede sustituir cualquier cosa por un corto periodo de tiempo. Por eso he sustitudo la magia de Riddle con la mía ─explicó Trey.

─¡¿Cómo...?! ¿¡Puedes hacer algo así!? ¡Eso es trampa! ─exclamó Cater atónito.

Trey había sido capaz de salvar a Ace en el último momento.

Al ver que no estaba logrando nada, Riddle miró confundido a su alrededor y volvió a mover su cetro.
─¡Que te corten la cabeza! ─gritó, pero su magia solo creó cartas─. ¡He dicho que te corten la cabeza! ─salieron más─. ¿¡Pero qué...!? ¿¡Por qué solo me salen cartas!?

Trey se acercó a él con paso decidido.

─¡Riddle, para! ─exclamó─. ¡Estás causando destrucción! ¡Mira a tu alrededor, a los demás!

Los estudiantes, aterrorizados, trataban de mantener una distancia alejada de Riddle y murmuraban entre ellos.

─¿Habéis visto eso? ¡Iba a hacerle daño de verdad!

─¡Eso es pasarse de la raya!

─Es... ¡Él es un monstruo!

Pero el orgullo de Riddle estaba demasiado herido como para darse cuenta de la terrorífica escena que él mismo había provocado.
─¿Qué? ¿Mi magia fue sustituida por la tuya? ¿Me estás diciendo que tu magia es más fuerte que la mía, Trey...? ─preguntó con desesperación.

─¡Eso no es verdad! ─insistió Trey con miedo─. Riddle, cálmate y escúchanos, ¡por favor!

Pero Riddle se negó a escucharlo y tiró su cetro al suelo con ira.
─¿¡Tú también me estás diciendo que estoy equivocado!? ─gritó─. ¿¡A pesar de que me esforcé tanto por proteger esas estrictas reglas!? ─cerró los ojos con tristeza y desesperación─. ¡A pesar de que aguanté tantas... tantas cosas! ─volvió a expresar su ira─. No... ¡No me lo creo! ¡¡¡¡¡Jamás me lo creeré!!!!!

Crowley miró la pluma mágica de Riddle y se fijó cómo ls gema roja se iba manchando de negro.
─¡Detente, Rosehearts! ─insistió─. Si sigues así, ¡tu gema mágica acabará acumulado blot!

Pero Riddle ya no quería escuchar a nadie, se llevó las manos a la cabeza como si hubiera perdido la cordura y sus ojos reflejaron una ira sacada de una pesadilla.
─¡Yo...! ¡SOY EL ÚNICO...! ¡¡¡¡SOY EL ÚNICO QUE SIEMPRE TIENE RAZÓN!!!!

La niebla a su alrededor se espesó y comenzó a envolverlo en un horrible torbellino que advirtió a Trey que debía alejarse.

─¡¡RIDDLEEEEEEEEE!! ─gritó Trey, temiéndose lo peor.

Además de un ardor en el hombro izquierdo, Yuu sintió un zumbido nublarle los pensamientos mientras escuchaba el sonido de una espesa lluvia de tinta.

Aún con los ojos cerrados, pudo visualizar la imagen de la pluma mágica de Riddle y su gema, roja como las rosas del jardín, tornarse de un profundo color negro como el carbón...

[Publicado el 30/9/2021]