40
3 semanas después.
Su tobillo estaba mejorando poco a poco, así como las marcas en su cuerpo iban aclarando, su estado de salud física iba mejorando con el pasar de los días.
No estaba trabajando, estaba de reposo, el restaurante le había aceptado sin quejas el reposo médico, tenía un mes y un par de semanas de permiso.
Y hablando de restaurante...
Al momento que se enteró que había obtenido el trabajo a tiempo completo, ciertamente pensó que era un error y se habían confundido de empleado ya que él siquiera había optado aún por el tiempo completo, pero las piezas encajaron perfectamente cuando el gerente le dijo entre dientes que eran órdenes de los dueños.
De inmediato, TaeHyun tuvo cinco minutos de regaños y gritos de parte del omega, vía telefónica.
Aparte de estar agradecido por esa gran oportunidad y esa gran facilidad, se sentía aún más endeudado con Kang y el miedo a que esos favores pasaran factura pronto se incrementaba.
Aún así, luego de gritarle, le agradeció la oportunidad y ese inmenso favor.
No quería recostarse a nadie, tampoco aprovecharse de TaeHyun y todas las comodidades y facilidad de oportunidades que podía darle.
Terminó de pasar la escoba por su apartamento, recogiendo el sucio del suelo para arrojarlo al cesto de basura, todo con algo de lentidud, cojeando apenas un poco.
Había llorado todo lo que había querido llorar la primera semana, se lamentó, se duchó millones de veces, fumó cajetillas enteras y pensó las cosas en la soledad de su casa para llegar a la aceptación de su situación.
No fue malintencionado...
Entendió que TaeHyun lo había hecho para sacarlo de ahí, para ahorrarle más daños y lágrimas, aparte de ayudarle con la deuda, lo sacó en definitiva del club, algo que jamás creyó posible en su vida.
Y lo agradecía.
Le dió tantas vueltas al asunto que llegó al punto del agradecimiento al alfa, claro, seguía algo resentido por como se sintió al momento.
Volteó a su mesa con el sonido de un mensaje, una pequeña sensación de vacío en su estómago, teniendo el miedo de ver el teléfono y fuera SooBin.
Ya llevaba tres semanas sin saber del club, de SooBin o de cualquiera de sus compañeros, pero eso no quería decir que siguiera con secuelas o que se haya olvidado de lo que vivió allí por tantos años.
Lo que venía acumulando por años no se olvidaba en días.
Aún así, botó el aire de sus pulmones mirando el nombre de la persona que le había escrito todos esos días.
No es baboso, TaeHyun.
¿Puedo ir a verte hoy?
Mordió su labio inferior, pensando en qué responder.
Si, había entendido las razones de Kang al pagar por él, aún así, él sabía que muy aparte de sus buenas intenciones, cuidados y atenciones, había algo que él quería.
Y él tenía que dárselo, porque era suyo ahora.
Si, puedes venir
Dejó el teléfono de lado, siguiendo con su limpieza, organizando lo que había fuera de lugar.
Muy aparte de su relación... ¿Amistosa? Con Kang, había una relación de un toma y dame, algo sexual, algo que no involucraba sentimientos, pero sí sensaciones.
Y ahora que lo pensaba, ¿Siquiera le iba a pagar por hacerlo?
Aunque no debería cobrarle...
Mordisqueó su labio inferior caminando hasta su habitación, siendo precavido y tomando su peluche de la cama, metiendo al pequeño animal en su armario con sumo cuidado.
Se dió una ducha sin tantos apuros, pensando en que había servido de algo ahorrar las propinas del club, pues con eso se estaba manteniendo ese tiempo, había logrado pagar los servicios y el alquiler sin problemas, así como comprar sus cosas personales, comida y sus cigarrillos.
En esas tres semanas, había hablado con TaeHyun, sea por llamada o mensaje.
Pero no lo habia visto.
Así que cuando abrió la puerta de su apartamento, mirando al alfa del otro lado, no supo como reaccionar correctamente.
—Pasa —invitó dando un paso atrás, dejando al alfa pasar a su apartamento.
TaeHyun entró quitándose los zapatos, el aroma de la casa era a productos de higiene, pero también había olor a cigarrillos.
—Te traje esto —ofreció una bolsa plástica, BeomGyu negó con la cabeza.
—No quiero, gracias...
—Ten, se van a derretir, además, es para los dos —rió mirando al otro tomar la bolsa, revisando el contenido.
Dos helados de paleta, ambos de fresa.
—Tu... ¿Cómo has estado? —preguntó el alfa quedándose de pié al lado del sillón, BeomGyu guardó las paletas, volteando a verlo con una ceja arqueada.
—Puedes sentarte, no es tu sillón de cuero traído de la misma Inglaterra, pero no te va a hacer nada —señaló cruzando los brazos, TaeHyun rió tomando asiento.
—No es eso, ojitos, no soy así...
—Ni tú te lo crees... Dime, ¿Qué se siente al oler a la clase baja? —preguntó a modo de chiste, TaeHyun chasqueó la lengua, negando con la cabeza, BeomGyu avanzó a él con una media sonrisa, tomando asiento del otro lado, subiendo ambos pies, estaba descalzo, en ropa de casa.
No se sintió incómodo, sabía que no se sentiría incómodo en presencia del alfa, tuvo la opción de negarle y pedirle que fueran a otro lado, pero permitió que fuera a su casa.
Su lugar seguro.
—Sobre el billón de dólares... —habló, mirando a sus manos en sus rodillas, TaeHyun negó con la cabeza volteando a verlo.
—No es necesario que hablemos de esto, enserio yo-...
—Gracias —lo cortó tomando valor para mirarlo a los ojos, TaeHyun alzó las cejas tensándose por las palabras del omega— No... No había pensado bien las cosas, y sólo quería decirte eso... Gracias por sacarme de ahí... Estaba esperando verte en persona para decírtelo...
—Ojitos, no vales un billón, ¿Bien?... Tal vez no pensé bien las cosas y lo hice sin decirte antes... Pero tu vida vale mucho más que un billón... —asintió mirándolo directamente a los ojitos— Tu salud, tu bienestar vale más que eso...
—Entiendo que no lo hiciste con maldad... —asintió, TaeHyun le sonrió de medio lado.
—¿Ya no me odias? —preguntó alzando las cejas, BeomGyu chasqueó la lengua, desviando la mirada.
—No tanto... —contestó soltando una pequeña risa luego, TaeHyun lo observó— Nunca te odié, baboso —negó levantándose del sillón, dejando una mano en su cintura— ¿Quieres algo de tomar? No tengo cerveza —avisó, TaeHyun soltó una risa.
—Tal vez... ¿Agua?
—No es agua del manantial egipcio, así que espero que no te de una infección en la garganta —se burló el omega con una ceja arqueada, TaeHyun chasqueó la lengua.
¿Manantial egipcio?
—¿Por qué te burlas tanto de mi? —preguntó haciendo al otro alzar los hombros, buscando el vaso con agua del alfa.
—Es gracioso... —afirmó entregando el vaso de agua fría, TaeHyun bebió de ella sin problemas, iniciando una conversación con el omega que daba respuestas cortas o aveces dudaba en qué responder.
Simplemente estaban en el sillón, hablando, cada uno de un lado.
El aroma a canela le llegaba como era normal, un aroma suave.
—Un momento... —pidió el alfa sacando de su bolsillo su teléfono que sonaba, una llamada.
Chasqueó la lengua atendiendo la llamada.
BeomGyu solo lo observó, escuchando la conversación.
—No, Cecilia... Ujum... Yo te llamo, estoy ocupado... Bueno, tal vez... Claro... No... Adiós, Cecilia, no me vuelvas a llamar o te seguiré cancelando... —amenazó colgando con una mueca— Lo siento...
—¿Es la rubia de esa noche? —preguntó BeomGyu ladeando la cabeza, TaeHyun asintió.
—Solo es... Una amiga...
—Todos son tus amigos, TaeHyun —mencionó arqueando una ceja, el alfa relamió sus labios.
—Bueno, digamos que es una de las mujeres con las que tengo sexo casual, ninguno tiene pareja, no queremos algo formal así que... ¿Por qué no? —preguntó, BeomGyu asintió levantándose a buscar su paleta, impresionado de la cantidad de tiempo que tenían hablando.
—Mujeriego, ya veo... Ya lo sabía después de todo —asintió abriendo la paleta, caminó hasta el alfa, tomando asiento más cerca de él intencionalmente.
—No es malo...
—No digo que lo sea —negó, saboreando la paleta, TaeHyun lo observó fijamente— Escucha, hay que aclarar las cosas...
—¿Qué hay que aclarar?
—Me ayudaste en el club y con el restaurante, te lo agradezco muchísimo y entiendo que tus intenciones son buenas... Pero sé que te gusta mi cuerpo —afirmó mirando la paleta, TaeHyun se quedó en silencio— No es como si... Lo de la última vez fue por caridad, así que... Si vamos a tener sexo necesito que me digas, necesito que me digas directamente qué quieres, cómo y cuándo... Porque aparte de todas tus buenas acciones y comportamientos, sé que hay otra parte que me desea, y no lo odio... Pero sería mejor que en lugar de ignorarlo hablemos de una vez por todas de eso... —asintió metiendo la paleta a su boca, TaeHyun no se sorprendió por la manera tan directa, ya estaba acostumbrado después de todo.
—No puedo negarte nada de esto, ojitos... —rió dejando sus manos en sus piernas, pensando en sus palabras— Estás en lo cierto y no quisiera hacerte sentir mal por esta situación-...
—Yo lo entiendo —afirmó volteando a verlo, sus labios estaban húmedos y rojos por la paleta, su lengua también, TaeHyun observó su boca sin disimulo alguno— Veámoslo así... Tú me compraste, sean cuáles sean las razones, yo te pertenezco ahora...
—Eso no te quita derecho de opinar y decir si no estás de acuerdo o cómodo con algo...
—Eso está bien... —asintió, pasando su lengua por la paleta, volteó a ver al alfa— ¿Qué quieres hacer, TaeHyun? —preguntó relamiendo sus labios, el alfa se inclinó un poco hasta él, BeomGyu metió la paleta con tranquilidad, sorbiendo.
—¿Estás de acuerdo con estar conmigo? Sin fecha ni hora... —preguntó, BeomGyu sacó la paleta de su boca.
—Si eso es lo que quieres... —murmuró relamiendo sus labios, TaeHyun pasó su brazo por detrás de su cuerpo, dejándolo en el posabrazos del sillón.
—¿Cuánto quieres que te pague? —preguntó en voz baja, estaban lo suficientemente cerca ya.
—No me pagues —negó con la cabeza, sintiendo apenas sus narices rozar.
—¿Estás seguro? Yo puedo-...
—Mi única condición... Es que me pagues los anticonceptivos —cortó haciendo al alfa quedarse en silencio.
TaeHyun tenía varios amantes, si, y con todos usaba protección, así como los omegas se cuidaban con sus respectivos anticonceptivos.
No creía que fuera a llegar el momento en dónde no quisiera un condón de por medio, siempre se cuidaría.
—Está bien... —aceptó con un leve asentimiento, BeomGyu ladeó una sonrisa, metió la paleta a su boca una última vez, mordiendo un pedazo.
Miró a los ojos del alfa, estaba demasiado concentrado en sus labios como para darse cuenta de la mirada del omega.
BeomGyu se inclinó, juntando sus labios, sintiendo el choque leve de sus labios fríos con los tibios del alfa.
Sintió una mano en su nuca, simplemente puesta ahí, sin apretar o moverlo a algún lado.
Sacó su lengua, pasando el pedazo de la paleta a los labios del alfa que la recibió con gusto, saboreando la fresa en los labios ajenos.
Ladeó la cabeza para más profundidad, ambos compartiendo el pedazo de paleta de boca en boca hasta que se derritió en medio de ellos, ambos sintieron sus mentones húmedos.
Aún así, no dejaron de besarse.
El omega usó su mano libre, dejándola en el muslo del alfa que sólo ahí, se separó del beso, relamiendo sus labios.
Debía controlarse.
—No te has recuperado aún, precioso —señaló pasando su dorso por su mentón, quitando la saliva y restos de la paleta derretida.
Tomó la mano del omega en su muslo y besó su dorso, mirándolo comer de nuevo de la paleta helada.
—Solo vine a verte, no más —afirmó, BeomGyu sólo asintió devolviendo su mano a su lugar, mirando al alfa, el aroma a canela opacando todos los aromas de su casa.
BeomGyu agradeció en su mente, aún tenía dolor en partes del cuerpo después de todo.
—Es lindo... —murmuró TaeHyun mirando el apartamento, era sencillo, pequeño pero acogedor.
—¿Qué?
—Tu casa... Es muy linda —asintió, BeomGyu terminó su paleta.
—Gracias... Tu apartamento también es lindo... Aunque es obvio, las paredes las pintó Van Gogh —bromeó, TaeHyun chasqueó la lengua, cruzando sus brazos.
BeomGyu soltó una pequeña risa.
Una compañía sin segundas intenciones, una simple visita para charlar y acompañarlo.
No estaba mal estar acompañado, luego de tantos años viviendo sólo.
—No te traigo más paletas —señaló a modo de amenaza, BeomGyu alzó los hombros con una pequeña sonrisa.
—Tiemblo de miedo con esa amenaza —se burló levantándose para buscar la paleta del alfa, además de botar su propio envoltorio— Por cierto... Lavé tu ropa de la última vez —mencionó recordando que tenía ropa del alfa, así como zapatos.
—No debías lavarla, pero gracias...
—¿Tienes a alguien que lava tu ropa también? —preguntó arqueando una ceja, TaeHyun le aceptó la paleta, quedándose en silencio con una sonrisa.
Era obvio que sí.
—¿De casualidad no hay alguien que te lave los dientes en la mañana? —preguntó a modo de burla, TaeHyun soltó una carcajada, negando con la cabeza.
BeomGyu sonrió un poco.
Por lo menos, sabía que no lo pasaría mal con TaeHyun.
Ya es domingo! Así que actualización!
Espero les haya gustado!!
The_Dark_Diamond04
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