Luego de saber los días libres que BeomGyu tenía del club, TaeHyun había ido todos esos días.

Una semana entera que había ido al club, sin falta, a la misma hora, a pedir los mismos servicios, y uno que otro día se aparecía en su hora de salida del restaurante para hablar con él y llevarlo a invitarle cosas.

En todo ese tiempo, TaeHyun no lo había tocado y no había habido otro encuentro que entrara en lo sexual.

Y eso, en lugar de relajarlo, lo ponía aún más tenso y nervioso.

¿Qué estaba esperando el alfa? ¿Qué planeaba? ¿Por qué no hacía nada? ¿Le estaba dando largas al asunto?

Esas preguntas lo acompañaron toda esa semana, aún más cuando parecían ya haber armado una rutina.

Esa era la segunda semana, esa noche le tocaba dar varios shows al público.

¿Si irá a venir? Preguntó su lobo mientras se preparaba para dar el segundo espectáculo de la noche.

Siempre viene, es un acosador. Le contestó formando una sonrisa falsa para salir a dar el espectáculo, un baile erótico en frente de un montón de personas que le gritaban, lo halagaban y lanzaban billetes hacia él.

Se concentró en la música para ignorar las palabras de morbo.

Esa noche había más gente de lo común en el club, tal vez porque era sábado.

—Que precioso eres —halagó un alfa dejando un billete en los shorts del omega que sonrió, tomándolo de la barbilla en una suave caricia.

—Gracias —agradeció levantándose para despedirse del público, dando por acabo su baile luego de unos minutos, dándole paso a otro bailarín por el cual aplaudieron de la misma forma, volviendo al mismo auge de antes.

Suspiró bajando del escenario, tomando una botella de agua.

—Bonito —llamó una voz desconocida, volteó mirando a un tipo fumando tabaco, apoyado de la pared.

BeomGyu solo le dió una mirada y siguió caminando, buscando salir de ahí sintiendo que el tipo lo perseguía.

Otro cliente intenso. Pensó volteando a ver al tipo que lo perseguía, cuando volteó para seguir caminando, chocó con un pecho fornido.

—¿Cuánto cobras la noche, lindura?  —preguntó tomándolo del brazo con fuerza, BeomGyu frunció el ceño.

—No hago esos servicios —negó agitándose para zafarse del agarre, en eso, sintió al tipo de antes acercándose en su espalda, recostando su entrepierna de él.

A partir de ahí, sintió que no podía respirar bien.

Se agitó con todas sus fuerzas, arrojando agua a la cara del alfa que tenía en frente, el que tenía de espaldas lo abrazó para inmovilizarlo, se agitó mirando como lo llevaban a uno de los pasillos en contra de su voluntad.

—¡Suéltame! —exigió mirando al segundo acercarse, subió una de sus piernas y le pateó el abdomen con todas sus fuerzas haciéndolo retroceder y perder un poco el aire.

—Así que eres agresivo... —rió el mismo acercándose para darle un puñetazo en la mejilla, luego otro en la nariz, BeomGyu se quejó, volviendo a subir la pierna para patearlo, pero al alfa lo tomó de los tobillos.

Ahora sí, estaba inmovilizado por completo.

La música se oía de fondo, los gritos de la gente emocionados por el bailarín, nadie sin saber lo que pasaba en ese pasillo.

BeomGyu tomó aire para gritar, pero la mano del tipo que tenía atrás cubrió su boca.

Se removió, sintiendo un beso en su cuello, el tipo que lo tenía de los tobillos lo obligó a separar las piernas, dejándolas alrededor de sus caderas.

Ambos alfas besaron su cuello, aprovechando que lo tenían inmovilizado y no había nadie alrededor.

BeomGyu se removió una y otra vez, intentando de todo pero era inútil, se quejó cuando el alfa le apretó los tobillos, causando dolor.

Apretó los ojos aguantando un lloriqueo al sentir ambos cuerpos restregarse en el suyo.

Inevitablemente soltó un par de lágrimas, estaba asustado, sentía impotencia y rabia.

—¡HEY! —el grito de alguien se escuchó en la entrada del pasillo.

Uno de los tipos lo ignoró, el otro si volteó a ver qué y quién era, recibiendo un puñetazo en su barbilla.

BeomGyu sintió sus pies en el suelo, se removió sintiendo al otro tipo dejar de abrazarlo repentinamente.

Sintió dolor en sus tobillos, se apoyó de la pared, mirando a su izquierda, y al responsable de quitarle a esos dos tipos de encima.

TaeHyun.

El alfa estaba arrodillado sobre uno, golpeando su nariz varias veces, el otro estaba noqueado un poco más lejos. El alfa le dió un último empujón al otro para levantarse, volteando a ver al omega que retrocedió con un poco de dolor en los tobillos.

—¿Estás bien? —preguntó acercándose a él, BeomGyu pasó su dorso por sus ojos, borrando las lágrimas, TaeHyun igualmente se acercó, alzando una mano a la cara del omega que se hizo un poco hacia atrás en reacción— Te sangra la nariz —explicó el alfa pasando su dedo índice por la nariz del omega, mostrando la sangre que manchó su dedo.

BeomGyu dejó su mano en su nariz, aún sintiendo miedo y ansiedad de la situación anterior.

Con su mano libre, tomó el puño de la camisa del alfa, haciéndolo caminar tras él directo a una de las habitaciones en dónde se hacían los servicios de baile, como siempre.

—¿Enserio estás bien? —preguntó el alfa mirando al omega contener lágrimas y estar en completo silencio.

BeomGyu asintió caminando al minibar dejando a TaeHyun solo, pasó sus manos por su cabello mientras que suspiraba sintiendo opresión en el pecho. No había sido una situación linda, y si TaeHyun no hubiera llegado la situación hubiera sido mucho peor.

—Oye —llamó TaeHyun asustando al omega que alzó la mirada, frunciendo el ceño.

—Espera en el sillón —le ordenó señalando a dónde normalmente se sentaría un cliente, TaeHyun estaba en la entrada del mini bar, avanzando hacia él, BeomGyu lo observó con cautela, retrocediendo cuando el alfa se acercó, sintió la barra en su espalda, no tenía salida.

TaeHyun tomó una servilleta y se inclinó al omega, pasando el papel por la nariz ajena con pequeños toques y cuidado.

—No te voy a hacer nada —prometió negando con la cabeza, simplemente limpiando la sangre de la nariz ajena, BeomGyu lo observó— No te ves bien... —murmuró mirándolo a los ojos, estaban cerca, tanto que TaeHyun podía captar el aroma a fresas, era un aroma agrio por el miedo— Tenlo aquí —pidió dejando el papel presionado a la nariz ajena, BeomGyu le obedeció en silencio, mirando al alfa ver los refrigeradores con bebidas alcohólicas y una que otra gaseosa.

TaeHyun tomó una de las gaseosas, estaba fría, aún así, la acercó a la mejilla del omega que se alejó un poco por el frío.

—Tienes la mejilla roja —comentó dejando la gaseosa apoyada unos segundos, separándola y volviendo a colocarla, mirando al otro contener las ganas de llorar con todas sus fuerzas.

—Gracias —fue lo único que dijo BeomGyu desviando la mirada cuando el alfa quitó la gaseosa, parpadeó e inevitablemente cayeron un par de lágrimas por sus mejillas, tomó un respiro, inhaló todo lo que pudo sintiendo el aroma a canela rodearlo.

TaeHyun solamente asintió, separándose un paso del omega.

—¿Cerveza o whisky? —preguntó BeomGyu pasando sus manos por su cara, despejando el llanto.

—Sientate conmigo allá —respondió haciendo una seña para que el omega lo siguiera, queriendo que descansara y se tomara su tiempo para calmarse de tal suceso.

BeomGyu lo obedeció, sin ánimos ni ninguna razón para ser cortante con el alfa.

Tomó asiento, subiendo los pies al sillón, abrazó sus rodillas quitando el papel de su nariz.

—¿Estabas bailando? —preguntó TaeHyun mirándolo asentir.

—Me agarraron cuando bajé del escenario —contó carraspeando un poco, debía calmarse, superarlo y seguir con su trabajo, no podía estar llorando allí y mucho menos frente a Kang.

A él no le importa... Murmuró su lobo en su cabeza, BeomGyu suspiró.

Puede usarlo en nuestra contra.

¿En qué? Nos acaba de salvar y nos ayudó mucho.

No por eso voy a confiar en él. Ya es suficiente con todo este espectáculo.

—Lo lamento mucho —habló el alfa mirando al otro subir sus hombros, pensó en lo que hubiera pasado si no los hubiera encontrado o si no hubiera ido ese día.

Recordó la situación de la fiesta y los tres alfas, él también se había encargado de eso.

Si no estuviera, ¿Qué hubiera pasado?

—¿Te sientes bien? ¿No te duele nada? —preguntó mirando al omega pasar sus manos por sus tobillos algo enrojecidos y con marcas de manos, el alfa lo había apretado fuerte después de todo.

—Estoy bien —mintió sin querer entrar en detalles y sin algún tipo de confianza para hablar más a profundidad de ese tema.

Se irgió en su lugar, ladeando la cabeza.

—¿Con qué quieres que te pague este favor? —preguntó mirándolo a los ojos, TaeHyun negó de inmediato con la cabeza.

—No me debes nada —negó alejándose cuando el omega se acercó a él, rodándose un asiento. TaeHyun quedó apoyado el posabrazos, cruzó sus piernas mirando al omega— Enserio, no me debes nada, BeomGyu...

—No digas mi nombre —pidió el omega negando con la cabeza, inclinándose aún más hacia el alfa que se encogió en su lugar— Golpeaste a esos dos alfas a riesgo de que ellos te hicieran algo, ¿Y no vas a cobrarme?

—Bien, te voy a cobrar —cedió el alfa mirando al otro alzar las cejas— Aléjate primero —pidió mirando al omega volver a su puesto normal, TaeHyun suspiró acomodándose en su lugar.

¿Ves qué si quiere algo a cambio? Le preguntó a su lobo que se quejó en su cabeza.

Si tanto le insistes...

—Tu... ¿No has pensado en renunciar aquí? —preguntó TaeHyun, mirando al omega que frunció el ceño.

—¿A ti que te-...

—Ese es mi pago, a cambio de que te defendí, respóndeme tres preguntas —pidió mirando al omega cruzar los brazos, frunciendo el ceño y soltando un sonido de aceptación.

BeomGyu cruzó sus piernas, mirando hacia al frente, pensando en su respuesta.

—Sí lo he hecho...

—¿Y por qué no lo haces?

—Cuando entras a este mundo no puedes salir como si nada —contestó, alzando los hombros, TaeHyun frunció el ceño, dejando al omega hablar y reservarse su opinión— Además, tengo una deuda... Sumado a uno que otro interés, la voy pagando poco a poco —explicó, mordiéndose la lengua después.

No debió haber dado tanta información. Y se enojaba consigo mismo por ser tan confiado con ese alfa.

TaeHyun se quedó en silencio, pensando en su siguiente pregunta.

—¿De cuánto es tu deuda? —preguntó mirando a BeomGyu hacer una mueca.

—Actualmente unos... Catorce millones... De dólares —contestó mirando la mueca sorprendida del alfa.

¿Actualmente? ¡Debe la mitad de mi sueldo! Pensó balbuceando.

—Tu... Te pagan en wones, en tus dos trabajos te pagan en wones y convertirlos a dólares es...

—Ujum —afirmó sabiendo que era tardío y algo impactante.

—¿Por qué debes tanto? —preguntó el alfa con impresión, BeomGyu alzó los hombros.

—Ya hiciste tres preguntas —cortó haciendo al alfa suspirar— Aunque... —murmuró queriendo morder su lengua— La deuda no es mía —soltó levantándose del sillón, estirando las piernas y sintiendo el dolor de sus tobillos pasar.

TaeHyun se quedó en silencio, sintiendo aún más curiosidad de la situación del omega y entendiendo muchas cosas.

BeomGyu volteó a verlo fijamente, pensando en lo que pasaba por la mente del alfa.

—¿Te doy lástima? —preguntó arqueando una ceja, TaeHyun negó con la cabeza— Entonces deja de verme como si así fuera —pidió retrocediendo para ir al mini bar y tomar un agua mineral para él mismo, bebiendo de ella mientras miraba a TaeHyun que solamente se quedó en sillón, mirándolo aún.

Necesitaba deshacerse de ese alfa. Era definitivo, ya se estaban acercando cada vez más por mucho que lo negara, y era peligroso.

Para él lo era.

Cerró la botella de agua para caminar hasta el alfa que lo observó, irguiendose en su lugar cuando el omega lo tomó de los hombros para poder tomar asiento en su regazo a horcajadas.

—No quiero esto —negó el alfa apretando los bordes del sillón, evitando acercar sus manos al omega.

Debía mantener su promesa.

—¿Por qué no haces lo que quieras y te vas? —preguntó el omega abrazándolo por los hombros, rozando sus narices— Deja de preguntar cosas... Y solamente hazlo todas las veces que quieras, hasta que te canses... —propuso mirándolo a los ojos, TaeHyun frunció un poco el ceño, el aroma a canela se hizo un poco más intenso— Solo termina lo que viniste a hacer desde un inicio... —pidió inclinándose los pocos centímetros que los separaban, juntando sus labios con los del alfa que se tensó, apretando aún más la tela del sillón.

BeomGyu lo besó, el alfa no abrió los labios. Se separó a verlo con el ceño fruncido.

—¿Enserio quieres que las cosas sean así? —preguntó el alfa mirándolo a los ojos, BeomGyu ladeó la cabeza.

—¿Cómo debería de ser si no? —preguntó de vuelta, TaeHyun negó un poco con la cabeza— Tu quieres conocerme más... ¿Con qué objetivo?  ¿Cuál es tu razón final?

—No todo es sexo —negó haciendo al otro sonreír de medio lado.

—Aquí sí lo es, me buscaste por sexo, todo ha girado entorno a él... ¿Por qué te molestas tanto en conocerme pudiendo meterlo de una vez? —preguntó bajando una mano por el pecho ajeno. TaeHyun frunció el ceño— Tu sólo eres un cliente, TaeHyun, no eres más que eso y solo necesito que tomes lo que quieras de mi y te vayas —habló, muy seguro y sin alguna otra solución a esa situación.

TaeHyun relamió sus labios, quedándose en silencio y pensando las palabras del omega.

¿Cree que me voy a aburrir? Pensó mirándolo fijamente.

Sonrió de medio lado, alzando una mano para tomar la barbilla del omega, atrayendo su cara a él, volviendo a besarlo, ésta vez, abriendo la boca para usar su lengua en la cavidad ajena.

BeomGyu lo abrazó por los hombros, cerrando los ojos.

¿Ves? Eso era todo. Le habló a su lobo, simplemente sintiendo la mano del alfa bajar a su cuello, apenas y apretando, la otra mano se mantenía aferrada al sillón, evitando moverse a otro lugar.

El aroma a canela lo rodeó de inmediato, inevitablemente soltó un jadeo al sentir el aire faltarle, el alfa mordió su labio inferior antes de separarse, dando apenas un apretón en el cuello ajeno.

—No puedes resolver todo con sexo —negó en un susurro, besando castamente los labios ajenos, lo hizo dos veces— Pero te seguiré la palabra si quieres llevar las cosas así...

—No es como que te resulte tan difícil —contestó ladeando la cabeza, recibiendo un beso húmedo en el cuello, sintió un escalofrío.

Él es bueno... Afirmó su lobo, sin sentirse decepcionado por el accionar del alfa, aferrado a la idea y la confianza que sentía con él presente.

BeomGyu rodó los ojos en medio del beso, un chasquido que solo ellos dos escucharon.

Dale un tiempo y no lo vamos a ver más. Aseguró pasando su mano por el pecho ajeno, ladeando la cabeza para profundizar el beso, las manos del alfa no lo tocaron más, simplemente se dejaba besar, y besaba al omega con pasión, más no lo tocaba.

Sólo es cuestión de tiempo.

:D

The_Dark_Diamond04