3 meses de gestación, Huening y Choi.

Soltó un suspiro abrazando su peluche, acariciando entre las orejas de su amado y preciado osito, hace semanas había estado usándolo al dormir, no le preocupaba que Príncipe tuviera un accidente con el peluche puesto que estaba entrenado, tenía sus propios juguetes y procuraba dejarlo fuera de su alcance.

—¿Qué ocurre? —preguntó el alfa acercándose a su esposo, besando su hombro, bajó una de sus manos, sintiendo la diferencia de tamaño con una pequeña sonrisa.

Apenas con tres meses de gestación se estaba notando la diferencia en su abdomen.

—Solo veo... Extraño mucho esto —sinceró mirando el pole, la habitación que el alfa le había mandado a hacer  hace años, ya había dejado de entrenar, aparte de que era peligroso, con su embarazo se había empezado a sentir cansado, y sentía que pesaba mucho más de lo normal.

—Volverás luego —murmuró el alfa con una pequeña sonrisa, su esposo sonrió aún acariciando su peluche— Por cierto, ¿Quieres ir a la agencia? Hoy hay una pequeña junta y luego nos quedaremos en cafetín... Reunidos...

—¿Los dejan beber en el trabajo? —cuestionó volteando a ver a su esposo, el alfa asintió besando su mejilla.

—Solo después de salir de nuestros deberes.

—Bien, iré... —aceptó con una sonrisa, TaeHyun asintió.

—Irán los esposos de algunos del equipo, o sus novias... Irán más personas de otros pisos, puedes conocerlos —propuso, BeomGyu rió.

—¿Cuál es tu afán de presentarme personas? —preguntó caminando a la sala de estar, TaeHyun lo persiguió.

—Solo lo digo.... Por si quieres amigos...

—Tú eres mi amigo —contestó arrojándose al sillón, TaeHyun cruzó los brazos.

—Auch... —bromeó sacándole una risa al omega que dejó sus piernas en el regazo del alfa cuando tomó asiento en el sillón.

—Tu eres mi amigo, mi novio, mi esposo, mi alfa, mi baboso y el papá de mi hijo, ¿Qué más títulos quieres? —preguntó acomodando la ropa del peluche distraídamente, TaeHyun sonrió orgulloso por las palabras del omega, pero se centró en lo que quería decir.

—Yo sólo me refiero a... No lo sé, si quieres salir con alguien que no sea yo... No lo sé, pensándolo bien no tienes amigos aparte de nosotros tres...

—Así está bien —asintió muy seguro, TaeHyun sólo lo observó— Y también tengo a Príncipe, así estoy bien... Y yo no soy Don Todos me conocen como tú —señaló con una risa, el alfa rió.

Entre los dos, TaeHyun obviamente tenía más conocidos, era un alguien sociable, tenía grupos de amigos y conocidos para salir.

Por otro lado, BeomGyu solamente tenía a ChangBin, TaeHyun y Kai.

Y si no le diera tanta vergüenza, tendría a Solar.

—Ella siempre fue buena persona contigo —opinó TaeHyun masajeando distraidamente el tobillo del omega que asintió.

—Si, ella es... Un amor... Aún tengo su número...

—¿Y por qué no le escribes?

—Me da vergüenza —murmuró sacándole una risa al alfa que negó un poco con la cabeza.

—Bien, bien, quédate con tu vergüenza —afirmó, su teléfono empezó a sonar, frunció un poco el ceño mirando al remitente— Diga —fue lo que ordenó, con voz seria y demandante.

BeomGyu hizo una mueca, tomando asiento para prestar atención al alfa.

—¿Vas a tener un hijo?

—Si ya lo sabes, no preguntes ridiculeces —espetó a la defensiva, BeomGyu lo miró fijamente antes de tomar asiento en su regazo, lo abrazó por los hombros, quedándose en silencio, sintiendo como la mano libre del alfa le acariciaba la espalda.

—Siquiera te dignaste a decirnos algo, eres un malagradecido y tú esposo-...

—Yo puedo ser todo lo que tú digas, pero no tienes el maldito derecho de decir algo de mi esposo y lo sabes —cortó frunciendo el ceño.

—Ese bebé puede ser heredero.

—No, porque mi hijo no es un Kang y jamás tendrá ese apellido, así que ni te atrevas a aparecerte solo por conveniencia.

—¡Soy tu madre, carajo! ¡Tengo derecho a conocer a mi nieto!

—Ya veré si te dejo o no, aunque en realidad la decisión no está en mis manos —negó, BeomGyu se irguió dándole una mirada a su esposo— Reza para que te dejen verlo cuando nazca.

—¡Es tu hijo también, carajo! ¡Tienes que decidir, dile que nos deje verlo y punto! ¿Por qué te dejas manipular tanto? ¡Te alejó de nuestra familia!

—Tu hiciste que me alejara —murmuró, cerró los ojos tomando un respiro— Como sea, la decisión de conocerlo o no, no está en mis manos y en realidad, no es porque no pueda decidir, es porque no quiero siquiera pensar en mi hijo en tus brazos...

—TaeHyun... —murmuró el omega en un pequeño tono de reproche, mirando a su esposo colgar, arrojando el teléfono a un lado— Fuiste muy duro... —opinó mirándolo a los ojos, el alfa suspiró.

—Se lo merece...

—Yo no tengo problema en que lo conozcan —explicó, TaeHyun lo observó fijamente— Son sus abuelos después de todo...

—¿Después de cómo te trataron?

—Han pasado años, Tae... Y ellos nunca dejaron de llamarte en estos años, seguir con esta riña es... Cansado... —asintió sabiendo que tenía toda la atención de TaeHyun en ese momento— Si me dicen que soy una puta... Un prostituto o lo que sea, no me importa... Tampoco es que sea una mentira...

—Ojitos-...

—Pero mi realidad es otra, y eso es algo que ellos entenderán con el tiempo... Puede que mi pasado no haya sido el mejor, pero tampoco quiere decir que define mi presente... Eso es algo que el tiempo les hará entender y si no lo hacen, no tengo porqué afincarme en tratarlos mal... Si ellos quieren seguir teniendo esa imagen de mi, está bien, porque yo sé lo que estoy viviendo y sé quién soy... —asintió muy seguro de sus palabras, TaeHyun lo miró con los ojos bien abiertos— Sobre nuestro bebé... Te dije que no hay problema que lo conozcan y es así, sigue siendo su familia a pesar de no compartir apellido... Con que lo conozcan es suficiente, además... Tiene derecho de conocer a sus abuelos también...

—No me gusta como te tratan —murmuró desviando la mirada, BeomGyu sonrió besando su mejilla.

—Creeme, me tratarán mejor —aseguró, TaeHyun arqueó una ceja.

—¿Cómo sabes?

—Bueno... Si de verdad quieren conocerlo, tienen que tratarme mejor, ¿Cierto? Veremos de aquí a que nazca si cambian o no...

—Son hipócritas... —bufó, el omega sólo sonrió besando sus comisuras.

—No te molestes, no seas un cascarrabias desde ahora... —pidió con un tono meloso, el alfa sonrió de medio lado— Si, sonríe... Que lindo te ves sonriendo —bromeó rozando sus narices de un lado a otro, el alfa lo rodeó con ambos brazos.

Se metieron en su propia burbuja de amor como siempre, disfrutando de su momento como pareja, en su vivienda, sin estrés y sin problemas.

—Sabes... Quería llamar a la señora Che —habló TaeHyun haciendo a su esposo ladear la cabeza.

Desde antes de casarse, la señora Che no había ido más, BeomGyu se había encargado de la limpieza todo ese tiempo.

—¿Para qué?

—Bueno, no me gustaría que estuvieras limpiando ni ordenando cosas por el momento...

—Bien —aceptó haciendo al alfa alzar las cejas con sorpresa. Sin creer que había sido tan fácil convencerlo.

—¿Qué? ¿Estoy escuchando bien? ¿Aceptaste traer a la señora Che?

—Si... Pero —alzó un dedo callando al alfa— Sólo cuando me sienta lo suficientemente cansado para limpiar, mientras eso no pasa, seguiré haciéndolo yo...

—Te voy a ayudar, lo prometo —asintió, BeomGyu soltó una risa.

—Quiero ver eso —aseguró recostando su cabeza el pecho del alfa que sólo se relajó, quedándose en silencio.

—¿Qué piensas de... Mudarnos? —preguntó el alfa mirando a su pareja abrir los ojos, BeomGyu lo pensó.

En realidad, no había espacio para la llegada del bebé, la habitación que quedaba se había habilitado para pole dance, sólo tendrían la habitación del bebé si cambiaban esa habitación.

—Uhm, si... Creo que es lo mejor...

—¿Quieres una casa o un apartamento? Puede ser un penthouse más grande, lo que tú pidas —propuso, el omega se irguió mirando a su esposo, avergonzado de tal propuesta.

—No sé... Algo que queramos los dos...

—¿Todavía te da vergüenza pedir algo?

—No, es que... ¿Y si a ti no te gusta dónde elija yo?

—Si me va a gustar —afirmó totalmente seguro, el omega lo observó desconfiado.

—¿Cómo sabes?

—Porque en cualquier lugar que estés tu, yo estaré feliz  —aseguró, el omega soltó un quejido antes de cubrir su cara, avergonzado. El alfa rió abrazándolo mientras besaba su cien con afecto.

BeomGyu sólo propuso pensarlo mejor, sin querer verse como un esposo exigente.

Aunque en realidad, no lo era y TaeHyun estaba esperando el momento en qué lo fuera con muchas ansias.

Él podía cumplirle todo, llevarlo, comprar, traerlo y hacer lo que le pidiera.

Pero aún a BeomGyu le daba vergüenza pedirle la tarjeta para compras de la casa.

El omega suspiró con dramatismo, recostando su cabeza en el pecho del alfa que sonrió de medio lado.

—¿Ocurre algo?

—Uhm... Es que quiero... Un tiramisú —murmuró jugando con la ropa del alfa que sólo sonrió.

—¿Tiramisú?

—Si... ¡Pero no cualquiera! —aclaró irguiéndose en su lugar, TaeHyun le prestó atención— Ese tiramisú que me compraste cuando fuimos al centro comercial, ¿Lo recuerdas?

—Sé que tienda es, si —asintió con una sonrisa.

—Y los batidos de café con un toque de canela también son deliciosos... Uhmmm, también quiero uno —decidió sintiendo que no podría sacar esos sabores de su cabeza, relamió sus labios.

Claramente era un antojo.

—¡Y las galletas de chispas! Son deliciosas, también se me antojan —murmuró volviendo a relamer sus labios. Se dió cuenta que estaba pidiéndole al alfa, carraspeó un poco— Si, si tú también quieres... No es obligatorio que lo compres, i-igual no te gusta tanto el dulce y puede ser mucho para ti...

—Mi ojitos.

—¿Si?

—Ve a cambiarte, iremos a comprar todo, ¿Si? —propuso con una pequeña sonrisa, el omega alzó las cejas antes de sonreír en grande.

—¿¡Enserio, enserio!? ¡Gracias! ¡Ya vuelvo! —se animó apretando las mejillas de su esposo para besar su nariz antes de ir a cambiarse a pasos rápidos, TaeHyun rió negando con la cabeza.

BeomGyu sabía que un batido, un tiramisú y galletas no era nada para TaeHyun económicamente hablando.

Pero él no veía solamente el antojo de ese día, él recordaba todos los antojos que tuvo esos tres meses.

Había pedido innumerables cosas para comer y solamente en esa semana había tenido cuatro antojos diferentes.

Así que se sentía un poco avergonzado.

—¡Vamos, vamos! —animó al alfa que ya lo esperaba en la puerta con su billetera y las llaves del auto, además Príncipe estaba afuera, esperando con su arnés.

Un antojo se había convertido en una salida familiar.

Príncipe ya estaba más que entrenado y acostumbrado a esos escenarios, así que fue tranquilo en la parte trasera del auto, solamente sacando la cabeza por la ventana aveces.

—No pongas esa música —se quejó el omega escuchando la melodía tan suave que el alfa puso, TaeHyun rió.

—A ti te gusta la música ruidosa, ¿No quieres relajarte?

—Esto relaja también —insistió presionando en la pantalla sin querer la aplicación de radio.

—En otras noticias, el criminal Choi SooBin ha logrado que su sentencia bajara un año gracias a sus buenos comportamientos y el adelanto de sus labores sociales, el criminal está-...

—¿Qué quieres oír? —preguntó BeomGyu cambiando a otra aplicación de música, buscando con calma, TaeHyun lo observó de reojo.

—Tu...

—Uhm, vamos a llegar al centro comercial y sin música, que aburrido —rió empezando a revisar las listas de reproducción en silencio, TaeHyun volvió a observarlo en un semáforo— SooBin me da igual —soltó sabiendo el motivo del silencio del alfa— Ya han pasado dos años, tengo cosas más importantes en las que concentrarme...

—Sólo no quiero que te afecte si llega a salir... Antes de lo debido...

—No me afectará... —aseguró inclinándose a besar la mejilla del alfa— Nada me afecta si los tengo a ustedes... —murmuró con una pequeña sonrisa— Además, SooBin tendrá cosas más importantes en las que ocuparse cuando salga, no tenemos nada que ver después de todo... Ya cortamos lazos...

—Bien, pero si te llega a afectar-...

—Si, mi vida —asintió con un tono de voz suave, TaeHyun alzó las cejas gozando del apodo— Conduce —rió el omega besando su mejilla de nuevo antes de volver a su lugar, dejando una canción aleatoria.

Ciertamente, ya había pasado la página con SooBin, ya no tenían nada en común, y tal vez no fuera justo las comodidades y la facilidad de poder salir antes de lo debido por labores sencillas, pero eso no era algo que estaba en sus manos.

No podía controlar si SooBin salía o no, si iba o no iba, él no tenía ese poder.

Si así lo tuviera, definitivamente tenía cosas más importantes en las que enfocarse, su familia, sus amigos, su propia vida.

Y hablando de Choi SooBin...

Byeee

The_Dark_Diamond04