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122

Príncipe había quedado encerrado y dormido en la habitación del omega, sin inmutarse de lo que estaba pasando.

Y mientras el cachorro estaba acostado patas arriba, dormido profunda y cómodamente, BeomGyu estaba en el sillón, abrazando sus piernas, soltando pequeños lloriqueos, apretándose de más para buscar consuelo.

Pero no lo encontraba.

La noticia, el momento le había caído como un balde de agua fría, las piezas empezaron a encajar, y se dió cuenta que todo lo que había sobrepensado había sido en vano.

Porque la realidad era peor.

Escuchó el timbre, luego el toque característico del alfa, apretó los ojos, haciéndose bolita en el sillón.

—BeomGyu... ¡BeomGyu, abre, por favor! —pidió el alfa tocando con más insistencia la puerta, con ambas manos, el omega sollozó mirando a la puerta— ¡Abre, tenemos que hablar! T-te... Te lo voy a explicar todo, lo juro —prometió recibiendo puro silencio, apoyó la frente de la puerta, soltando un suspiro.

En segundos, BeomGyu abrió la puerta, mostrando ojos enrojecidos, las mejillas mojadas de lágrimas, una mueca de tristeza.

TaeHyun avanzó un paso, cerrando la puerta a sus espaldas. El omega lo rechazó cuando quiso tomarlo de la mano.

—BeomGyu...

—¿Desde cuándo sabes esto? —preguntó con voz temblorosa, mirándolo con ojos cristalizados.

—Desde hace dos días, lo supe el día que discutimos...

—¿C-casarte? ¿Es obligación de tu familia o a-algo así? —preguntó manteniéndose de brazos cruzados, TaeHyun lo observó, tratando de ir con él pero cada vez que avanzaba, BeomGyu retrocedía el doble.

—Ahora estamos pasando por... Un momento difícil en las empresas y la solución es casarme con alguien... Para poder compartir bienes y juntar herencias que mantengan el imperio... E-es... —tartamudeó mirando como el omega soltaba una lágrima, luego otra y otra, llorando con tristeza y dolor frente a él.

—¿Es un hombre o-o... O una mujer?

—Es una mujer... La conoceré el domingo... Se ve más joven que yo, n-no lo sé... Todo está arreglado y-...

—¿Lo... Lo vas a hacer? —preguntó con un susurro dolido, TaeHyun se sintió petrificado, tragó grueso, abrió la boca para decir algo pero sus ojos respondieron primero, soltando una lágrima traicionera.

—Perdóname... —susurró, el otro soltó un sollozo agachando la cabeza— Encontraré como solucionarlo, t-te prometo que yo-...

—¡No hagas nada, TaeHyun! —negó alzando la voz, aún llorando, lágrima tras lágrima— ¡Tu mamá tiene razón! ¡Carajo, es que la tiene!

—No, no digas eso...

—¡Es cierto, TaeHyun! ¿¡Acaso no lo ves!? ¿¡Qué puedo ofrecerte yo!? ¿¡Ah!? —preguntó con todo el dolor del mundo, sintiendo todo a flor de piel, llorando hasta más no poder— ¡Y t-tu-... Tu eres un hombre de dinero! ¡Soy una puta basura a un lado tuyo! ¡Eres un Kang, carajo! Y-yo sólo... ¡Soy un estúpido al pensar que todo podría ir bien sabiendo la familia que tienes! —soltó un sollozo, sintiendo que no podía respirar bien, el alfa avanzó y lo abrazó con fuerza, apretando los ojos para intentar dejar de llorar pero le era imposible.

La situación los tenía al borde de los sentimientos, a flor de piel.

—Yo sólo me dejé llevar... P-pensando q-qué no iba a importar esto de nuestras vidas y-...

—No importa, eso no importa —negó TaeHyun apretándolo más cuando el omega quiso separarse.

—¿P-por qué tienes que irte entonces?
.. ¿¡Si no importa por qué ya no puedes estar conmigo!? —preguntó dolido, sintiendo su garganta doler, su pecho también dolía, TaeHyun lo observó a la cara, alzó su mano herida para secar con sus dedos las lágrimas ajenas, BeomGyu cerró los ojos.

—L-lo voy a resolver, te lo juro, te lo juro que yo no... Yo no tengo ganas de hacerlo, p-pero...

—Es tu familia —susurró la respuesta abriendo los ojos, dándose cuenta de que el alfa estaba herido, tomó con cuidado la mano ajena.

—Beom-...

—Dejame curarla, por favor —murmuró pasando sus manos por sus ojos, TaeHyun aceptó la atención del omega en silencio.

BeomGyu sentía sus manos temblar, su pecho doler y oprimirse, el dolor, la tristeza, todo vuelto un nudo que se instalaba en su garganta y no lo dejaba hablar por un tiempo.

Curó al alfa con su botiquín de primeros auxilios, limpiando con delicadeza y en silencio, sorbiendo su nariz.

Había sido un estúpido en pensar que jamás habría inconvenientes en su relación por sus clases sociales, al creer que podían vivir como si nada.

Y el hecho de no poder pelear por su relación lo llenaba de más dolor e impotencia.

¿Cómo él iba a competir con una mujer que tenía privilegios? ¿Contra un imperio? ¿Cómo él iba a estar por encima de la familia Kang?

Él no tenía nada que ofrecerle a TaeHyun, no les llegaba ni a los talones a todos esos ricachones.

Y a final del día, TaeHyun también era parte de esos ricachones.

—¡Auch! —se quejó el alfa dando un salto en su lugar, el omega quitando un pedazo de vidrio incrustado en la palma, empezando a curar en silencio, y con cuidado, deteniéndose cuando el alfa se quejaba.

—Ya pasará... —murmuró vendando con cuidado.

—Gracias... —murmuró TaeHyun mirando su mano vendada, BeomGyu dejó las cosas a un lado del sillón, tragó grueso sintiendo el nudo en su garganta, soltó más lágrimas al tener en mente lo que diría.

—T-taeHyun... —susurró con un hilo de voz, el alfa lo observó, recibiendo la mirada de tristeza del omega— Terminamos... —soltó con todo el valor que tenía en ese momento, desviando la mirada cuando el alfa empezó a negar con la cabeza.

—¿Q-qué? ¡No, no! ¡Te juro que lo voy a arreglar! —prometió tomando las manos del omega que sollozó desviando la mirada al notar como Kang TaeHyun se arrodillaba frente a él— Y-yo te amo... —susurró el alfa soltando lágrimas, empezando a llorar sin control.

—P-para tu familia no es... No es suficiente... Yo no soy suficiente para ellos, tampoco para ti...

—¡Si lo eres! —afirmó con desespero, llorando y apretando las manos del omega— ¡Para mi lo eres! ¡E-eres suficiente para mí y yo-... Perdóname, perdóname... Perdóname, ojitos... —susurró apoyando su frente en los muslos del omega que apretó los ojos cuando escuchó un sollozo del alfa— Voy a resolverlo... Te lo juro, por la Luna... P-pero no me dejes... Y-yo... ¡Podemos llevarlo!...

—¿Ah sí? ¿¡Cómo quieres que lleve que el hombre que quiero está casado con otra!? ¿¡Ah, TaeHyun!? ¿¡Cómo si fuera el tercero en su matrimonio!? —preguntó, dolido, el alfa lo miró a los ojos, derramando lágrimas— ¡Tú vas a estar casado con ella y yo-! ¡Tú eres mi novio, ella es la otra aquí!... Yo... Yo no voy a ser el tercero...

—No quiero perderte, e-entiende que yo-...

—Tu no me vas a perder nunca —negó alzando la mano derecha, acunó la mejilla ajena, quitando las lágrimas, tomó un respiro tembloroso— Porque yo siempre seré tuyo...

—No me hagas esto... —susurró llorando aún más, sintiéndose atrapado, sintiendo como todo se derrumbaba.

No podía ponerlos en una balanza, no podía elegir a uno, tenía sentimientos encontrados, la mezcla del deber con el querer haciéndolo dudar de todo.

—Tendrás una esposa, igual de prestigiosa que tú... Adinerada, aceptada por tu familia... —murmuró el omega secando las lágrimas del alfa cuando él mismo seguía llorando, TaeHyun negó con la cabeza.

—N-no quiero eso... No quiero eso...

—Los estás ayudando... E-ellos... Te necesitan...

—¿Y tú no me necesitas a mi? —preguntó, sus ojos grandes, brillantes por las lágrimas, enrojeciendo poco a poco alrededor.

—Te necesito como el aire para respirar... —susurró su respuesta, con un nudo en la garganta— P-pero yo-... Yo no te puedo dar nada, yo no te puedo ofrecer nada a ti, ni a tu familia...

—No necesito eso... —negó con la cabeza, una y otra vez, BeomGyu sólo suspiró— Te juro que haré algo... Y-yo no me voy a casar, voy a buscar que hacer, te lo juro, yo-... Buscaré la manera de estar contigo en paz... —prometió enredando su meñique con el del omega, apretó su dedo, ambos miraron la unión de ambos meñiques.

TaeHyun sorbió su nariz.

—Mientras tanto yo-...

—No vamos a vernos más —soltó el omega, el otro lo observó rápidamente, soltando más lágrimas, BeomGyu relamió sus labios— Mientras no te cases... Y-y... mientras solucionas todo... No vengas...

—¿Por qué lo haces tan difícil? —preguntó con un susurro dolido, sintiendo que no podía parar de llorar. BeomGyu le acunó ambas mejillas con delicadeza, juntando sus frentes, ambos cerraron los ojos.

—Yo sólo... Te quiero muchísimo, TaeHyun, pero te convertiste en un hombre que no será mío... —sususurró la respuesta, sintiendo las manos de TaeHyun en su muñeca, acariciando con suavidad.

—Yo voy a volver, te lo juro que yo no voy a dejar esto así... —prometió, BeomGyu asintió sintiendo una opresión en el pecho.

—Y si no es así... Felicidades por tu boda...—murmuró con un nudo en la garganta, soltando un sollozo cuando el alfa se levantó para abrazarlo.

Le devolvió el abrazo con rapidez, sujetándolo y rodeándolo con sus brazos con fuerza y seguridad, con desespero pidiéndole silenciosamente que no se fuera aún, que alargaran esa despedida lo más que pudieran.

TaeHyun dejó una mano en el cabello del omega, lo abrazó a su pecho sorbiendo su nariz, sintiendo culpa de no poder hacer más, sintiendo impotencia.

La idea de darle la espalda a su familia estaba latente en su mente, porque no importaba los privilegios, no le importaba todo el dinero que podía tener su familia, ni toda la reputación que manejaban.

Porque BeomGyu era lo que le importaba.

Ninguno de los privilegios le podían comprar el afecto que le daba el omega, ni todo el dinero del imperio  podía comprar lo que era despertar a su lado.

Era simplemente un privilegio que él había obtenido, y no iba a soltar.

—Te amo... Te amo, no voy a dejar esto así —prometió luego de que decidieron separarse, en la puerta, BeomGyu asintió cerrando los ojos cuando recibió un beso en la frente.

—Te voy a esperar... Lo que sea necesario —prometió de vuelta, TaeHyun le dió una mirada que no necesitaba explicación, le acarició la mejilla antes de irse, BeomGyu cerró la puerta apoyando su frente ahí— Porque... Porque yo te amo demasiado, TaeHyun... —susurró cuando estuvo sólo, sin poder decirle de frente el primer "te amo" de su relación.

Porque ya no había una.

Caminó a rastras a la habitación, abriendo la puerta, siendo recibido por Príncipe que lloriqueó a la par del omega que lo subió a la cama, acostándose con el cachorro que le dió apoyo quedándose a su lado y lamiendo sus mejillas.

Soltó un sollozo aferrándose a Príncipe que lloriqueó junto a él, recostando su cabeza en el pecho del omega que limpió su cara, pero era en vano, soltaba más y más lágrimas.

Sintiendo como una vez más la vida y las circunstancias le arrebatan a quien amaba.
























¿Cómo ven las cosas? Qué opinan?

The_Dark_Diamond04

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