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Único


Solamente tu, solamente yo
Quiero que aceptes tus sentimientos
y contigo estar para siempre
Ámame a pesar
que yo lo intento
Sabes muy bien que te quiero

(Kimi dake wo )


No recordaba su nacimiento, pero estaba completamente seguro que aún antes de ello su hermana ya estaba ahí. Lo mismo sucedía con ella, sabía con certeza que su hermano había estado para él desde el principio de todo.

A partir de que llegaron al mundo estuvieron juntos en todo momento, cuando salían a la calle vestidos de forma similar y tomados de la mano la gente no podía evitar detenerse a elogiarlos por lo lindos que lucían. Tener un mellizo para ellos era normal, no se imaginaban cómo era para los demás estar siempre solo.

Jugaban, comían, bañaban y dormían los dos, eran tan inseparables que sus padres pensaron que siempre serían así. Sin embargo aquello no duró mucho, porque vino la adolescencia de ambos y cada quien tomó un rumbo diferente a partir de que dejaron de compartir cuarto. Poco a poco se fueron alejando lentamente hasta casi dejar de hablarse, intercambiaban palabras básicas de vez en cuando y ni siquiera iban juntos a la escuela.

Probablemente las cosas habrían seguido su rumbo si no fuera porque el destino decidió otra cosa...

—¿Dónde está mi uniforme limpio? — Salió a preguntar con solamente una blusa blanca de tirantes y un pequeño short amarillo pipí que solía usar debajo de la falda. Se acercó solamente a donde comenzaban las escaleras para escuchar la respuesta de su madre.

—¡Lo dejé en tu cuarto! — Contestó con un grito.

—¡No, sólo está el de mi hermano! — Dicho eso se abrió la puerta que estaba justo enfrente de la suya, se giró para verlo y ahí estaba su gemelo con su uniforme en las manos — ¡Ya lo encontré!

—Demasiado ruido en la mañana — le tendió el uniforme y luego observó cómo estaba vestida.

—¿Qué ves?— Preguntó con tono rudo, agarró su ropa y se fue a su cuarto.

—Espera, el mío — la siguió y no le dejó terminar, cuando estuvo en el marco de la puerta le aventó su ropa y cerró la puerta de un portazo.

Minseok sopló hacia arriba moviendo su fleco y con un mohín se regresó a su cuarto para terminar de alistarse. Mientras se abotonaba la camisa blanca veía su reflejo en el espejo que tenía enfrente, hoy era el día de San Valentín y tenía planeado al fin confesar su amor a Jongdae quien era su mejor amigo desde hacía tiempo, pero jamás pudo verlo por completo como un simple amigo. Se había ido enamorando lentamente de él y ahora deseaba decirle todo lo que sentía, tenía la pequeña esperanza de que si era sincero obtendría una respuesta. Empezó a hacerse el nudo de su corbata y al ver su reflejo recordó a su hermana, ya no eran tan cercanos como antes, a veces se preguntaba por qué. Quizá era parte de su miedo a que su familia se enterase que era gay o simplemente la pubertad los alejó, después de todo no eran idénticos y diferían en muchos aspectos.

Sin embargo, realmente tuvo curiosidad por saber si ella estaría enamorada de algún compañero y pensaba hacer algo en San Valentín.

Moonbyul pasaba su mano por la falda de cuadros negros y verdes que usaba como uniforme, estaba demasiado nerviosa porque en ese día iba a confesarse por fin a su mejor amiga, YongSun o como solían decirle, Solar. Era tan extraño al principio porque jamás se imaginó que le gustaría una mujer, pero pasó, estaba enamorada de Solar desde hacía tiempo y al fin se había decido a confesarle lo que sentía. Su vista viajó a la caja de chocolates que había preparado para ella, esperaba que le gustase, sabía que sí porque Solar adoraba los dulces, pero si los aceptaba significaría algo más.

Suspiró y pasó sus dedos por su flequillo para acomodarlo una vez más, revisó su aspecto y finalmente se decidió por bajar a desayunar. Al mismo tiempo salía su gemelo, intercambiaron miradas y Minseok se fijó en aquella caja de chocolates que llevaba ella, al parecer si tenía un romance. Estuvieron comiendo en silencio sin decir nada, su madre ya se había ido a trabajar desde hace rato, mientras que Moonbyul estaba estirada en la silla su hermano se encontraba correctamente sentado pero con la mirada perdida.

—Bien, ya me voy — se levantó de inmediato para irse.

—Apenas comiste — observó su hermano el plato casi lleno que dejaba.

—No tengo hambre — excusó, la verdad era esa, no tenía hambre por los nervios.

Empezó a caminar para irse a la salida cuando escuchó un pequeño: "suerte". No se detuvo, tenía cierta vergüenza de contestar aquello, ¿qué pensaría su hermano si le dijera que era lesbiana?

***

Sus pies no se movían de donde estaba y él ya quería entrar a clases, sin embargo su cuerpo no quería obedecerle en ese momento. Estaba demasiado nervioso y si hubiera sido por la mano de Chanyeol que le empujó hacia adentro se habría quedado ahí por mucho tiempo más.

—¿Qué haces? La clase está por comenzar — le dijo pasando a su lado con una gran sonrisa, detrás de él venía Baekhyun cargando miles de chocolates.

—Mira, todo este chocolate me han regalado — presumió mientras daba saltitos hacia su asiento para comenzar a acomodar todos los regalos de sus fans.

Suspiró antes de entrar por completo y por fin pudo ver que ahí estaba Jongdae en su sitio.

—Joder, ¿por qué él si obtiene muchos chocolates y yo no? — Se quejaba señalando a Baekhyun.

—Porque yo soy hermoso — explicó Baek.

—¿Y yo no?

—Pues...— lo miró de abajo hacia arriba con aire despectivo.

—¡Vas a ver, Byun! — Se levantó de su asiento como si le fuese a dar un golpe, Baek puso sus bracitos en el rostro para impedirlo, pero sólo había sido un susto.

—No puedes pegarle a este bello rostro — hizo una pose de diva y mejor se sentó.

—Ya te darán algo — fue lo primero que dijo al acercarse hacia donde estaba Jongdae, su asiento era justo detrás del suyo.

—Hola, Min— saludó primero alzando una mano para que la chocara con él, el castaño lo hizo con entusiasmo aunque realmente tenía ganas de mejor besarlo — Supongo, alguna fan he de tener por ahí — miró hacia donde estaban las chicas hablando con aire soñador.

—Sí, seguro — le animó aunque por dentro deseaba que no fuera así.

Se quedó en su asiento de siempre observando la nuca descubierta del chico del que estaba enamorado, su nerviosismo creció al darse cuenta que le confesaría sus sentimientos ese día y las dudas regresaron, porque era obvio que Jongdae era heterosexual. Suspiró, quizá debía esconder los chocolates y dárselos a alguna chica bonita.

***

Cuando se encontró con una pila de chocolates en lugar de Solar no se alarmó, ya sabía que ella recibiría muchos porque era una chica muy guapa, demasiado. Era normal que los hombres fueran detrás de ella, sin embargo ninguno era lo suficientemente bueno para conquistarla y además Moonbyul se encargaba de espantarlos a todos.

—Me tendrás que ayudar a comerlos todos — la pila de chocolates habló de repente y sacó unos brazos a los costados — creo que son más que el año pasado

—Algo me dice que sí — sacó unos cuantos para poder ver la cara de su amiga del otro lado, cuando se encontraron se sonrieron ambas — ¿Algún buen prospecto? — Quiso saber, por lo general nunca había uno.

—Umm no, nada interesante — parecía algo decepcionada — Este año pensaba salir con alguien

—¿Con quién? — Preguntó asustada.

—No sé, pero desearía tener un novio ya para saber qué es lo especial en ello — se quedó pensativa y Moonbyul apuró a sacar sus chocolates.

—Los hombres no tienen nada de especial, mejor cásate conmigo — y de su mochila que colgaba a un costado sacó una caja en forma de corazón para entregársela.

—Aww, claro que me quiero casar contigo — se levantó de su asiento para ir a abrazarla.

—¿En serio?

—Claro, eres mi mejor amiga — y mientras la apretujaba, Moonbyul maldijo por dentro, no la estaba tomando en serio — Bueno, hoy vamos a ver películas de terror en tu casa para festejar

—Claro, helado, chocolate, papas fritas y Béla Lugosi

—Ay no, no quiero ver otra película en blanco y negro o me dormiré de nuevo — hizo un ligero puchero que a Moonbyul se le hizo adorable, tuvo que contenerse para no ir a morderla.

—Es que si vemos una película que de verdad dé miedo creo que me quedaré sorda por tus gritos — le molestó, Solar sí que gritaba fuerte.

Estuvieron molestándose así hasta que llegaron Hwasa y Wheein a unírseles, luego comenzaron las clases.

***

Minseok había planeado jugar videojuegos con Jongdae aquella noche, sin embargo cuando llegó se topó con que la sala la había ocupado ya su hermana con su amiga.

—Creí que saldrías — comentó Minseok al verlas a las dos muy cómodas.

—¿Qué? No, es obvio que no — los tres se quedaron viendo un rato, entonces tocaron el timbre y Minseok fue a abrir porque sabía que era Jongdae.

—A veces olvido que tienes un mellizo, son tan parecidos que creo que si se pone una peluca podría pasar por ti — le susurró Solar que estaba recargada en el hombro de Moonbyul viendo la televisión.

—No exageres, no somos tan parecidos — refunfuñó, en la sala entró de nuevo Minseok junto con Jongdae.

—Buenas noches — saludó el chico mostrando su sonrisa — no sabía que tendríamos una pequeña fiesta

—No es una fiesta — apresuró a decir Minseok — además es mi hermana, ¿no la ves?

—¿Qué? — Se acercó más a ellas y efectivamente era la melliza de su amigo — Ah, Moonbyul, hace tiempo que no te veo...sigues igualita a tu hermano — la chica le dio un ligero golpe en la cabeza.

—Y tú sigues igual de bobo, por eso no tienes novia — le molestó.

—Eso fue cruel — llevó las manos a su corazón.

La única que se rió de ese gesto fue Solar, con su risa tan melódica Jongdae se percató de su presencia.

—Hola — saludó él, la chica se tapaba la boca para no reírse tan fuerte ya que sabía lo ruidosa que era.

—Hey — dijo en cambio calmándose por fin — Soy YongSun — se presentó agitando su mano.

—Un gusto, yo soy Jongdae, amigo de Minseok — apresuró a presentarse.

Ambos chicos se miraban atentamente y a los mellizos se les hizo raro.

—En fin — habló de repente Minseok para romper el ambiente — las chicas están ocupando el espacio así que vamos arriba a jugar

—¿Qué van a jugar? — Preguntó Solar, Moonbyul la quedó viendo, ¿por qué se ponía tan animada?

—Xbox, traje el GTAV — Jongdae sacó la caja del videojuego para mostrarla y Solar se levantó de donde estaba.

—Juego con ustedes — se apuntó, Minseok que observaba todo miró a su hermana para que hiciera algo.

—No sabía que jugabas — le habló a su amiga jalándola un poco de su mano.

—Ah sí, suelo jugar con Wheein — eso jamás lo había escuchado.

Luego de un rato, los mellizos se encontraban sentados observando como sus sendos amigos jugaban Xbox solos como si estuvieran en una cita. Estaban cruzados de brazos completamente molestos, pero no lo aceptarían, que estaban ardiendo en celos porque sería admitir que eran gays.

—Dios mío, todavía no te atrapan y ya tienes cinco estrellas — estaba impresionado Jongdae.

—Tengo práctica en esto — la chica tenía el mando en sus manos y trataba de escapar de la policía mientras iba dejando desastres por la ciudad.

Jongdae se reía por todas las cosas que hacía Solar en el videojuego, mientras que los mellizos querían acabar ya con eso.

—Oh dios, ya es tarde — Habló Solar repentinamente mirando su celular — debo irme a casa ya

—Entonces te llevo — se apresuró a decir Moonbyul, ya quería sacar a su amiga de ahí y jamás volver a repetir semejante cosa.

—No te preocupes, yo la puedo llevar, traigo el coche — se ofreció Jongdae.

—No, lo haré yo, no hay problema — insistió Moonbyul, no pensaba dejarlos a solas y menos en un carro.

—Jongdae me puede llevar, no te preocupes — intervino Solar, aquellas palabras a Moonbyul le dolieron.

—¿Segura?

—Claro, no quiero molestarte — no le dio tiempo de decir más porque se apresuraron a irse.

Un: "no me molesta llevarte" se quedó trabado en la garganta de Moonbyul mientras veía a Solar irse con Jongdae. Los mellizos se quedaron de pie en la entrada viendo el auto irse a lo lejos de la calle. Se observaron por un momento fingiendo una sonrisa de apoyo aunque no hayan dicho nada en concreto, se estaban apoyando porque se encontraban en una situación similar.

***

Lamentablemente las cosas a partir de ahí fueron peores, de la manera más horrenda porque Jongdae y Solar intercambiaron números y se estaban hablando muy seguido. Solar no dejaba de hablar de Jongdae y viceversa, era obvio que se gustaban y que era cuestión de tiempo para que comenzaran a salir como novios. Por el otro lado, Minseok se enteró de primera mano al segundo día que se vieron, de la manera más sencilla le soltó la bomba, le gustaba Solar y deseaba intentarlo con ella.

Para el chico fue un golpe bajo, sabía que se lo confesaba porque eran mejores amigos y se contaban todo, sin embargo se sintió como una mierda al darse cuenta que en la mente de Jongdae jamás pasó como prospecto amoroso ni por un momento.

¿Qué se suponía que debía hacer? ¿Darse por vencido? ¿Apoyarlo con Solar?

Se maldijo internamente por ese día en que los caminos de la próxima nueva pareja se cruzaron, si su hermana no hubiera invitado a su amiga ese mismo día las cosas hubieran sido diferentes...

—¡Tú! — Alguien abrió de golpe la puerta de su cuarto espantándolo de muerte, cuando se dio cuenta que era Moonbyul señalándolo descaradamente y con una cara de endemoniada frunció el ceño — ¡Es todo tu culpa?

—¿Eh? — Dijo en cambio aún con el ceño bien fruncido.

—¡Que me estaba lamentando en mi cama hecha bolita mientras comía chocolate y veía fotos de Solar hasta que me di cuenta que era tu culpa! — Farfulló atropelladamente por todo el enojo que traía, de hecho en las comisuras de sus labios traía chocolate, probando su historia.

—¿De qué me hablas? — Minseok seguía sin captar lo que estaba pasando.

—¡Aghhh! — Gritó arrojándose hacia él como respuesta.

Él hizo una mueca de espanto y se fue hacia atrás con su hermana encima mientras le daba de golpes.

—¡Déjame, eres una bestia! — Le gritoneaba intentando quitársela de encima, pero la chica seguía removiéndose ahí encima de él.

—¡Tantos años yéndose a la basura porque tu estúpido amiguito tenía que venir a la casa! — Le intentaba dar puñetazos en la cabeza y él se cubría con sus brazos mientras la veía desde abajo y por fin se fijó en que su hermana estaba llorando mientras le reclamaba aquellas cosas sin sentido — ¡Yo la amo, más que Jongdae! ¡¿Por qué tenía que ser mujer?! — Se quejó a pleno pulmón.

En eso Minseok atrapó el brazo de su hermana y logró levantarse de la cama para quedar enfrente de ella.

—¡¿Quieres dejar de golpearme y echarme la culpa?! ¡Por dios, yo debería estar golpeándote por haber traído a Solar! — Una vena se le resaltó en la garganta al chico, estaba enojado — ¡Tu amiga no merece a Jongdae! ¡Él debería estar enamorado de mí, no de ella! — Gritoneó y luego su rostro se contrajo hasta quedar en unos ojos llorosos — ¿Por qué? Llevo enamorado de él tanto tiempo, he estado ahí para él y sigue sin notarme porque soy hombre...

Ambos gemelos se quedaron viendo durante segundos, ahora sabían la verdad del otro y que compartían una misma situación, al comprenderlo se abrazaron para darse apoyo y cayeron a la cama derrotados. Se quedaron mirando el techo, de repente se sentían tan cercanos aunque durante años se habían alejado, Moonbyul fue a tomar la mano de su hermano como tantas otras veces había hecho cuando eran niños.

—Lo siento — murmuró, Minseok seguía con los ojos en el techo, observando la blancura de este.

—Umm — contestó aceptando sus disculpas.

—No imaginé que estuvieras enamorado de Jongdae

—Y yo que lo estuvieras de Solar, al parecer somos más parecidos de lo que parece — volteó hacia ella y le dio una pequeña sonrisa que era más de lastima.

—Nacimos en el cuerpo equivocado al parecer, si yo fuera tú estaría enamorado de Solar y la invitaría a salir — aseguró algo triste.

—Y si yo fuera tú me habría enamorado sin duda de — en eso se detuvo dándose de una cosa — Espera — se sentó de inmediato en la cama y miró a su melliza — somos mellizos

Moonbyul lo miró y luego hacia otra dirección sin creerse que dijera algo tan obvio.

—¿Ah sí? Ya pensaba yo que era algo extraño haber nacido el mismo día y haber compartido el vientre de mamá por 9 meses — le dijo con tono sarcástico.

—O sea sí, pero no me refiero a eso, sino a que tú y yo nos parecemos demasiado — con su dedo índice la señaló y luego a él — Podríamos vestirnos como el otro y nadie notaría la diferencia

—Como cuando éramos niños, sí — comenzó a reflexionar aquello para caer en cuenta a donde quería llegar su hermano — ¡Podríamos hacernos pasar por el otro!

—¡Y así conquistarlos! — Terminó por ella.

—Pero, espera — Moonbyul detuvo la euforia del momento — Y si funciona, ¿qué pasará luego cuando les tengamos que decir?

—Bueno, el punto es hacerles darse cuenta que deben estar con nosotros sin importar nuestro sexo — contestó el chico decidido.

Ambos se vieron fijamente, era la última esperanza que les quedaba a esas alturas del juego y la tomarían sin importar qué.

***

Mientras caminaba podía sentir la pequeña brisa atravesar sus piernas y no podía evitar caminar con ellas lo más separado posible para no rozar su miembro y lastimarlo, era demasiado incómodo aquello y no podía dejar de preguntarse ¿por qué debía hacer eso desde tan temprano? Ni siquiera compartían clase los cuatro así que ir de esa forma desde tan temprano le pareció demasiado.

Igualmente acordaron otra cosa para que sus planes funcionaran y ahora debía decirle a Solar que Minseok le esperaba a la hora del almuerzo, pero ¡oh sorpresa! Él era Minseok y ese instante su hermana se estaba haciendo pasar por él mientras que...

—¡Moonbyul! — Gritó Solar cuando la vio entrar al salón y corrió hacia ella a darle un abrazo, aquello se le hizo demasiado extraño.

Bueno, en ese momento era realmente otra persona y pocas veces había hablado con la amiga de su hermana, por lo que aquellos gestos tan de improviso le eran extraños.

—Hola — saludó tímidamente, la chica alzó la vista hacia su rostro y lo miró fijamente.

Minseok comenzó a sudar, sentía que le veía demasiado, parecía que iba a descubrirle de un momento a otro y lo expondría en clases como un pervertido que iba a la escuela vestido como mujer.

—Estás más alta — dijo como veredicto final — ¿Creciste tan rápido?

—Eh, sí — comenzó a forzar la voz, por suerte su hermana no tenía la voz tan aguda como niña.

Comenzó a tener fe en todo el maquillaje que le puso en la mañana para disfrazar algunos rasgos. Solar le regaló una enorme sonrisa para luego jalarlo hasta donde estaban las demás chicas, se quedó en silencio durante un buen rato porque no entendía mucho de lo que hablaban y sólo asentía de repente. Se preguntaba cómo le había ido a su melliza.

***

Para Moonbyul fingir ser un hombre no era una cosa tan complicada, en minutos pudo dominar esa forma que tenía su hermano de caminar, así como algunos gestos y la voz grave de macho azotador que le salía de maravilla sin esfuerzo.

—Buenos días — saludó al entrar y sentarse en el lugar que le tocaba a su hermano.

—Min — volteó Jongdae quien había alzado la mano para que le saludase, sin embargo el que creía su amigo pasó de él, por eso lo miró extrañado.

Sin embargo, para la chica que estaba disfrazada detrás de él sintió que le había descubierto y casi se va hacia atrás del susto, soltó un pequeño chillido a lo que todos voltearon a verla. Jongdae tomó su mano y la jaló hacia su asiento.

—¿Estás bien? — Le preguntó algo espantado por tal reacción.

—Emm sí — apuró a decir intentando componerse.

—Te ves diferente — siguió mirándola con intriga, intentando buscar qué había de diferente en él — ¿Te cortaste el cabello? Es que tu cabeza se ve más pequeña

—Eh...sí, eso — sonrió forzadamente para despistarlo.

Jongdae alzó ambas cejas y luego las bajó.

—Te ves más bonito — regresó a su asiento a seguir con lo suyo.

Moonbyul suspiró, tenía suerte de que no fuera tan listo el amigo de su mellizo.

***

Miró al piso nuevamente con nerviosismo, no podía creer que estaba haciendo semejante cosa, pero la estaba haciendo, se había vestido como mujer para intentar confesarle su amor a Jongdae sólo que en ese momento pensó que tal vez estaba haciendo el ridículo.

—¿Moonbyul? — Cuando escuchó la voz de su amigo supo que era demasiado tarde.

Quería quedarse a apreciar por más tiempo al bello suelo del gimnasio de su escuela, pero tenía que alzar la mirada y enfrentar las cosas, iba a decirlo de golpe.

—¿Sabes jugar basquetbol? — Soltó en cambio con una gran sonrisa.

—¿Qué? — Preguntó Jongdae confundido.

—Que si — se alejó de él para ir a tomar un balón y regresó botándolo entre sus manos — sabes jugar — terminó diciendo mientras le pasaba la pelota.

Jongdae la agarró en el aire y sonrió divertido.

—Claro — la rebotó un poco para luego alzarse de puntas y aventar el balón hacia la canasta — ¿Me podrás seguir el ritmo? — Dijo al ver que encestaba.

Minseok debajo de todo ese maquillaje, ropa y peluca sintió que su corazón latía fuertemente al ver al hombre que amaba dedicarle una hermosa sonrisa, deseaba que pudiese darse cuenta de sus sentimientos a pesar de que no estaba mostrando su verdadero rostro, pero pedía que al menos pudiese distinguirlo.

Comenzaron a jugar ellos dos solos en ese gran gimnasio, la pelota rebotaba y sus zapatos rechinaban contra la madera del suelo, Jongdae se movía de un lado a otro evitando que su rival tomara la pelota, Minseok le seguía intentando robarle el balón, sin embargo en algún punto del juego las cosas comenzaron a ir más lentas para sus ojos.

La suave y perfecta sonrisa de la persona que amaba que se movía traviesa, sus ojos que desaparecían al ser feliz, todo eso para él era tan tentador que la pelota dejó de ser la cosa que quería obtener realmente y sus brazos comenzaron a buscar en cambio la espalda del chico de sus sueños.

Cuando este logró rodearlo desde atrás Jongdae se detuvo soltando la pelota y dejando que rebotase sin control alguno, abrió los ojos sorprendidos de sentir como le abrazaban fuertemente y al mismo tiempo de forma cuidadosa. Podía sentir a una corazón pegado a su espalda latir ruidosamente, tan desenfrenado era la forma en que retumbaba que el suyo comenzó a seguirle el ritmo.

—Jongdae — dijo quedamente — por favor...elígeme a mí — pidió con la voz quebrada.

Sus labios se entreabrieron ligeramente buscando respuesta a ese deseo...

***

—Minseok — le saludó Solar con una deslumbrante sonrisa.

La pudo observar caminar desde el otro extremo del pasillo y le pareció sencillamente hermosa, la forma en que su cabello se movía a cada paso que daba con prisa, como su falda iba ondeando junto a sus piernas y esos ojos tan vivos que danzaban junto a todo lo que significaba ella.

El tiempo se movía lentamente para Moonbyul, sintió que si pudiese elegir un momento que pudiera durar toda una eternidad sería ese, podría dedicar toda su vida a contemplar la figura de Solar, a memorizar su voz, a tirarse de lleno en esos bellos ojos y...

—Me dijo Moon que me estabas buscando — le dijo cuando estuvo parada enfrente de ella.

Fue cuando ya no pudo resistirse más y se lanzó a tomar su rostro para acercarla a sus labios y besarla. Quizá había sido el hecho de que la viese de forma diferente el que le hizo tener tal reacción, porque de otra forma no se explicaba el repentino valor que tenía para por fin darle un beso sin haber dicho palabra alguna.

Pensó que si le rechazaba le echaría la culpa a su hermano, pero Solar le tomó del cuello y correspondió su torpe beso. Durante varios segundos los demás alumnos de la escuela se quedaron observando la escena que se había dado tan repentinamente de la nada y ellas olvidaron que estaban siendo observadas. Lo que importaba era el hecho de sus labios parecían llevarse bien.

Cuando se separaron pegaron sus frentes con cariño y sostuvieron sus manos, Sola le contemplaba fervientemente y sus ojos brillaban aún más que antes.

—¿Sabías que te ves muy bien así? — Moonbyul cayó en cuenta que lo había sabido desde el principio, que había cambiado de papeles con su mellizo.

—Te amo — contestó en cambio — siempre lo he hecho

—Y yo...me he dado cuenta que no quiero estar con nadie más que contigo — le contestó besando su mejilla con cariño.

Todos los que estaban ahí observando comenzaron a vitorear al escuchar la confesión de amor, las dos chicas cayeron en cuenta que pensaban que seguramente eran una pareja normal, aprovecharon aquello y se fueron corriendo tomadas de la mano por todo el pasillo entre risas traviesas.

***

—Minseok — susurró — ya te he elegido a ti

Al escuchar su nombre su mente se quedó en blanco por varios segundos, aquella era la respuesta que había querido oír desde hace tiempo.

—Verás...Solar y yo nos hemos dado cuenta que a pesar de que estábamos interesado en el otro, la cosa no iba bien, había algo que no encajaba — la mano de Jongdae fue a parar hacia donde estaba la de su amigo que le seguía sujetando.

—¿Eso significa que valió nada vestirme de mujer? — Preguntó avergonzado desde atrás, Jongdae soltó una ligera risa.

—Pienso que te ves hermoso — se giró hacia él pero este intentaba taparse el rostro de lo apenado que se encontraba, con cuidado tomó sus manos para apartarlas — déjame verte, por favor — le pidió acercándolo más a su cuerpo.

Cuando las manos de Minseok desaparecieron, Jongdae se encontró con un par de mejillas rojas y unos labios rosas debido al brillo labial, fue hacia ellos sin pedirle permiso al chico y lo besó con fuerza, le había tomado mucho tiempo darse cuenta que la persona que deseaba encontrar estaba justo detrás de él, acompañándolo en todo momento. Ahora no quería dejarlo ir en mucho tiempo...

A veces el amor es amargo, duele y pesa cargar con él, pero en ocasiones se vuelve una felicidad que irradia en besos que no quieren terminar, en una huida mientras tomas la mano de la persona que amas entre suaves risas compartidas.

Fin.


Hola, aquí empieza el festival de fics del día del amor y la amistad :v hecho para todas esas personitas que pasarán este día como yo: valiendo verga *voz de locutora* jajajaja la verdad siento que me quedó algo mierda este os, empezó siendo una cosa y terminó en otra, en fin. He pensado hacer una especie de concurso, de todos lo os que saque el día de hoy alguno podría convertirse en un fic más largo si ustedes votan por él, valido hasta el 15 de febrero solamente jajaja dejen sus comentarios si quieren ver este os más desarrollado, aunque no prometo empezarlo luego luego :v así que ya saben.

Besitos a todas, las amo y yo tienen mi lof aquí por si sienten solas 7u7r ♥

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