"Excelente, ahora solo firme aquí y ellas serán dadas de alta" Uno de los enfermeros de aquel hospital psiquiátrico acercó unos cuantos documentos hacia la doctora.

"Listo" La contraria respondió una vez firmó los papeles.

"Muy bien, doctora Dahyun, quiere pasar a despedirse de ellas? Digo, después de tantos meses atendiéndolas tal vez les tomó algo de cariño" El muchacho ofreció.

Y Dahyun asintió, necesitaba hablar con ese par de japonesas antes de que ellas abandonaran el hospital psiquiátrico.

Entonces se dirigió a la habitación de aquellas pacientes y con un pequeño saludo a los guardias entró sin más.

"Doctora Dahyun, vino a despedirse de nostras?" La chica más alta fingió nostalgia.

"Cierra la boca antes de que me arrepienta de esto, Sana" Dahyun respondió algo nerviosa.

"Ay no, parece que la doc está de mal humor" La otra chica se burló.

"Tienes razón, Momo" La primera paciente concordó "Pero tranquila, al rato la ayudaremos con ese mal humor que trae".

"Hagan silencio" Dahyun regañó con voz firme "Esto es una muy mala idea, ustedes aún no están bien".

"Pero estamos mejor que cuando llegamos, y además, tú todavía puedes ayudarnos a controlar nuestros impulsos, recuerda que te ofreciste solita" Sana se burló de ella.

"Lo sé, pero todavía tengo miedo" Dahyun afirmó jugando con sus manos.

"Nada malo va a pasar, solo necesitamos a alguien que nos ayude a mantenernos entretenidas, esa es la mejor terapia" Momo se unió a la plática de las menores "Además lucías tan emocionada cuando ideamos este plan, por fin tendrías a dos sexys japonesas para quitarte el estrés del trabajo y nosotras saldríamos de este horrible lugar".

Entonces Dahyun asintió, ya no había marcha atrás, ella debía apegarse al plan.

Así que con los nervios a flor de piel salió de aquella habitación para dejar que las contrarias terminaran de empacar sus maletas para finalmente partir del hospital psiquiátrico mientras ella se iba a su oficina para terminar el expediente de las japonesas.

Cuando la hora de partir de las mayores llegó Dahyun tuvo que encontrarse con ellas para recetarles algunas pastillas y entregarles sus respectivas carpetas con información que pudiera serles necesaria.

Sana y Momo habían llegado al hospital psiquiátrico diagnósticadas como ninfómanas, pues un par de años atrás habían sido acusadas de un intento de violación hacia una de sus amigas en Japón, afortunadamente nadie resultó herida, pero tuvieron que pasar por un juicio debido a que casi cometieron un delito.

Sin embargo, su condena no acabó en cárcel debido a que fueron diagnósticadas con transtornos ninfómanos, pues ellas mismas confesaron que mantenían relaciones sexuales de al menos tres veces por día y que en un momento de calentura habían intentado involucrar a una de sus amigas que ese día había ido a pasar una noche de películas con ellas, sin embargo, aquella chica se resistió y huyó cuando intentaron obligarla a tener relaciones.

Después de varias investigaciones y exámenes psiquiátricos se confirmó que ambas padecían un grave transtorno de ninfomanía, y como consecuencia fueron internadas en un hospital psiquiátrico de Japón, por desgracia, nada parecía mejorar, pues al principio al ser compañeras de habitación continuaron teniendo sexo entre ellas y en varias ocasiones intentaron abusar de pacientes o enfermeras.

Entonces fueron transferidas al hospital psiquiátrico más famoso de Corea, ya que ahí se encontraba la psiquiatra más popular por su historial de haber curado a todos los pacientes que atendía.

La doctora Kim parecía hacer un excelente trabajo con el dúo japonés, así que cuando notó mejoras decidió ponerlas a prueba dejándolas en la misma habitación y para sorpresa de todos parecían haber mejorado demasiado, el sexo desenfrenado prácticamente había desaparecido, pues eran muy pocas las ocasiones en las que se les encontraba de manera íntima a través de las cámaras de seguridad, parecían una simple pareja más aunque ellas afirmaban que solo eran amigas, así que con el tiempo Dahyun creyó que realmente estaban curadas.

Pero grande fue su sorpresa cuando en una de sus terapias las chicas comenzaron a insinuarse de manera sexual a ella, si bien, estaba aliviada de que no intentaran obligarla, realmente se sorprendió cuando Momo tomó su mano por debajo de la mesa y la hizo palpar su erección al mismo tiempo que Sana se unía para hacer lo mismo.

Dahyun intentó ser profesional, ella no podía hacer movimientos bruscos que pudieran alterar a las contrarias y tuvo que tratar esta situación como lo haría con los demás pacientes, ella les siguió la corriente con la intención de anotarlo más tarde en su libreta, pero realmente fue una experiencia nueva haber tocado los miembros de dos de sus pacientes por debajo de la mesa mientras la cámara de seguridad era incapaz de detectar lo que pasaba ahí abajo.

Los siguientes días no fue diferente, ella llegaba a la mesa de la habitación de las japonesas para hablar con ellas e indagar más a fondo en sus transtornos, pero lejos de concentrarse en su trabajo ella intentaba complacerlas con sus manos cuando las masturbaba por debajo de la mesa.

Así que una noche de trabajo descubrió que aquello las había mantenido más tranquilas por los siguientes días y Dahyun por su parte creía que se habían vuelto inofensivas al estar bien atentidas por ella.

Entonces lo pensó y llegó a la conclusión de que si se encargaba de ellas por su propia cuenta sería más fácil y divertido que mantenerlas encerradas en ese hospital, tendría a dos chicas para aliviar su estrés y un nuevo caso de pacientes curadas se uniría a su historial de psiquiatra perfecta.

Nada podría salir mal, siempre y cuando nadie se enterase de lo que realmente habían estado haciendo.

Así que regresando al presente ella dió todas las indicaciones necesarias para las japonesas antes de finalmente reintegrarlas a la sociedad y recibir cumplidos por haber curado a dos más de sus pacientes.

Así que cuando Momo y Sana salieron del hospital Dahyun continuó con su trabajo recibiendo minutos después la confirmación de las chicas de que habían llegado a su departamento.

Porque ellas no tenían un hogar en Corea, así que Dahyun amablemente ofreció su casa, siendo conciente del cambio que su vida tomaría al tener a esas chicas ahí dentro.

Pero ella ya estaba decidida y después de todo también tendría sus beneficios.

Así que cuando la noche cayó y finalmente regresó a casa se encontró con las japonesas sentadas en el sofá de su sala.

Se extrañó de encontrarlas tan tranquilas, pero después de todo era de esperarse, pues Dahyun había contribuido a que el comportamiento de las mayores dejara de ser peligroso.

"Hola" La menor saludó cuando se adentró a la casa.

Y ambas la miraron con las pupilas dilatadas y las manos temblorosas.

"H-hola" Sana fue la primera en responder.

"B-buenas noches, Dahyun" Momo respondió con dificultad.

"Se sienten bien? Hicieron algo en mi ausencia" Dahyun preguntó temiendo que sus impulsos ninfómanos agresivos hubieran regresado.

"N-no" Momo negó temblando "S-solo queríamos dar una buena impresión".

Y Sana asintió de acuerdo.

"Pero es muy difícil, Dahyun" Sana confesó aprentando sus pantalones.

Y Dahyun notó que ambas estaban excitadas.

"Se retuvieron toda la tarde para darme una buena impresión?" Dahyun preguntó recibiendo asentimientos como respuesta, no podía creerlo, estaba orgullosa de ellas "Chicas, ya no tienen que retenerse, al menos no conmigo o entre ustedes".

"Entonces nuestro esfuerzo no valió nada?" Sana preguntó con una mirada triste mientras acariciaba su miembro por encima de su ropa en un intento por calmar el dolor.

"Claro que sí, estoy muy orgullosa de ustedes, pero ahora que estoy aquí pueden ser libres conmigo" La doctora aclaró.

"Vas a ayudarnos?" Momo preguntó metiendo su mano bajo sus propios pantalones.

Y Dahyun asintió.

"Perdón si te hacemos daño" Sana habló con una mirada llena de culpa y cuando Dahyun asintió ambas fueron hacia ella para tomarla.

Momo fue la primera en besarla mientras comenzaba a rasgar su ropa, sin embargo, no pudo hacer mucho cuando Sana la empujó y se apoderó de los labios de Dahyun mientras continuaba desvistiéndola.

Entonces Momo sintió la ira apoderarse de ella y tomó del brazo a Dahyun para volver a tenerla, ocasionando que Sana dejara un rasguño accidental en el torso de la menor, así que cuando Dahyun sintió que las cosas se salían de control decidió intervenir.

"Chicas, no peleen" Pidió alejándose un poco, notando las marcas que ambas ya habían dejado sobre su desnudo cuerpo.

Así que ambas se calmaron un poco y decidieron llevar a Dahyun hacia su habitación.

Momo acorraló a Dahyun contra la puerta apenas entraron y sin más bajó hasta su intimidad para comenzar a lamerla, mientras que Sana se apoderaba de sus labios y su cuello.

Y en menos de lo que pensó, la menor terminó por correrse en la boca de Momo.

Pero esto apenas comenzaba, así que Momo se levantó del piso y quitándose la ropa se llevó a Dahyun hasta la cama para sentarse en la orilla y atraer a la menor hacia su regazo antes de comenzar a introducir su erecto miembro en la vagina de la coreana invitándola a montarla.

Sana mientras tanto se deshizo de su ropa mirando atentamente a las contrarias y comenzó a masturbar su duro miembro con una mano, entonces posicionándose detrás de Dahyun tomó sus caderas con la otra mano y comenzó a guiar los movimientos de la menor sobre el pene de su amiga.

Dahyun estaba tan perdida sintiendo a Momo llenarla que no tardó en correrse cuando sintió a Momo venirse dentro de ella.

Y segundos después Sana también llegó al orgasmo dejando su semen sobre la espalda baja de la menor viendo como escurría hasta perderse entre sus nalgas.

Entonces Momo se levantó y atrajo a Sana para sentarla en donde ella se encontraba minutos antes, pero ahora dejó a Dahyun en un ángulo de 40 grados invitándola a chupar el miembro de Sana.

Y así lo hizo la menor, gimiendo cuando Momo se posicionó detrás de ella y volvió a adueñarse de su intimidad.

Unos minutos mantuvieron esa posición hasta que Momo la llenó de nuevo con su semen y Sana se dejó ir en la boca de la menor.

Pero Sana no había acabado con la boca de Dahyun, pues no había metido toda su longitud la primera vez, así que cuando notó que Momo seguía entretenida en la misma posición, ella comenzó a masturbarse para volver a ponerse dura y empezó a restregar la punta de su miembro sobre los labios de la coreana.

Momo por su parte se retiró de la intimidad de Dahyun dejando sus fluidos escurrir por sus muslos y entonces alineó su miembro al ano de la menor comenzando a restregar su pene entre las nalgas de la coreana para tentarla un poco antes de finalmente alinear su miembro a su cavidad anal y finalmente comenzó a introducir la cabeza de su polla en el apretado orificio.

Era demasiado pequeño que a pesar de lo lubricada que Momo se encontraba tuvo dificultad para entrar en ella.

Finalmente cuando Momo metió por completo su miembro Dahyun soltó un suspiro al sentirse así de llena.

Y Sana por su parte aún yacía frotando su miembro en los labios de la menor  sintiendo la lengua de esta asomarse para acariciar su punta y besar la cabeza de su polla, entonces Sana comenzó a sumergirse dentro de la boca de Dahyun sintiendo la lengua de esta apoderarse de su longitud.

Sana gruñó al sentir como todo su miembro entraba hasta la garganta de Dahyun, quien hacía lo posible por relajarse para no soltar arcadas.

Y suavemente Momo comenzó a follar el ano de la menor, provocando que su cuerpo se sacudiera y metiera más del miembro de Sana a su garganta que como consecuencia terminó en una arcada.

Ambas japonesas follaban duro a Dahyun, mientras una le embestía la garganta la otra estaba disfrutando del apretado culo de la coreana hasta que volvieron a descargar su semen dentro del cuerpo de la menor.

Dahyun estaba agotada, había dolido un poco lo que acababa de pasar, pero lo había disfrutado, así que cuando notó a las japonesas salir de ella hizo su mayor esfuerzo por subir a su cama y acostarse rendida ahí.

Pero entonces sintió como su cuerpo era tomado por ambas para dejarla de rodillas sobre su cama antes de sentir a Momo tentar su ano de nuevo con su polla realmente dura.

Dahyun no podía entender como esas chicas seguían despiertas después de todas las veces que se habían corrido.

Sin embargo, sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando Momo comenzó a penetrarla por detrás mientras que Sana restregaba la cabeza de su pene en sus pliegues y finalmente pinchaba su clítoris.

Dahyun iba a correrse de nuevo, estaba tan sensible que solo le bastó sentir a Sana presionar un par de veces la cabeza de su miembro en su clítoris para dejar salir sus jugos sobre la polla de Sana, quien al sentirlo comenzó a meter su polla en la entrada sensible y adolorida de Dahyun para comenzar a embestirla al mismo ritmo de Momo.

Entonces cuando sintió como las mayores se corrían dentro de ella comenzó a sollozar a causa de lo sensible que se encontraba.

Así que las mayores salieron de ella y la dejaron descansar un poco, sus agujeros estaban completamente empapados de semen y continuaba escurriendo cuando se movía un poco.

Creyó que habían terminado con ella, creyó que por llorar ellas tendrían piedad, pero estaba muy equivocada, pues Momo se encargó de moverla cuando ella ya no podía hacerlo y colocándose detrás de ella sostuvo sus piernas abiertas para que Sana pudiera seguirla follando.

"Cógela, quiero que la llenes de semen hasta que yo te diga que te detengas" Momo ordenó con la mirada fija en Sana.

Y esta solamente asintió antes de comenzar a masturbarse hasta dejar su miembro erecto, el cual alineó al sensible orificio de la intimidad de Dahyun y sin más enterró su polla en ella.

Mientras Momo sostenía firmemente las piernas de Dahyun para mantenerlas abiertas Sana la penetraba lentamente dirfrutando de las cálidas paredes de la menor apretarla, y entonces su orgasmo llegó, lo dejó ir una vez más dentro del coño de Dahyun mientras continuaba penetrándola para prolongar su orgasmo hasta vaciarse por completo dentro de ella.

Y cuando su orgasmo terminó, Sana salió de Dahyun viendo su semen escurrir de la intimidad de la menor, entonces volvió a tomar su miembro con una mano y comenzó a masturbarse para volver a tenerlo erecto y de nuevo volvió a penetrar a la menor de forma suave.

Dahyun parecía estar inconciente, a este punto ya ni siquiera gemía, solo sollozaba con los ojos cerrados y la boca abierta, sintiendo como Sana la embestía suavemente y volvía a descargarse dentro de ella.

Y el patrón se repitió, Sana sacó su polla del coño de Dahyun viendo su leche escurrir de la vagina de la menor, para seguidamente masturbarse y volver a ponerse dura hasta sentir su orgasmo avecinarse, pero antes de vaciarse en su propia mano entró de nuevo en Dahyun para dejarse ir en el interior de la coreana.

Momo por su parte acarició los pezones de la menor mientras veía a Sana enterrar todo su miembro en la vagina de Dahyun a un ritmo realmente lento.

Dahyun estaba prácticamente cayendo inconciente mientras sentía el semen de Sana llenarla de nuevo y su polla salir de ella, y entonces sintió como una mano de Momo descendía por su cuerpo hasta llegar a su intimidad para frotar un poco su clítoris y tomar un poco del semen de Sana con sus dedos para seguidamente llevarlos hasta la boca de Dahyun.

La menor ya ni siquiera podía moverse, así que solo sintió como Momo frotaba sus dedos sobre sus dientes frontales para dejarle en la boca un poco de los fluidos de Sana.

Y mientras tanto esta última yacía masturbando su miembro para volver a tenerlo duro y volver a meterlo en el sensible coño de Dahyun.

"Aaahh" La menor gritó con las pocas fuerzas que le quedaban, estaba demasiado sensible.

Pero a Sana pareció no importarle mucho, pues continuó follándole la entrada al mismo ritmo que las veces anteriores y se mantuvo de esa forma hasta que se corrió de nuevo dentro de ella.

Entonces Sana salió del interior de la menor después de haberse vaciado en ella 4 veces seguidas y volvió a masturbarse.

"Por favor, detente" Dahyun pidió con lágrimas en los ojos, pues a este punto su vagina ardía de tantas folladas que había recibido esa noche.

"Vamos, cariño, solo una más" Momo pidió acariciando sus mejillas con sus pulgares intentando detener sus lágrimas.

"Sana, por favor, ya no más" La menor rogó.

"Solo una Dahyunie, prometo que será la última" Sana respondió, pues ella también estaba cansada.

Y cuando su pene estuvo completamente erecto volvió a introducirse en la intimidad de Dahyun para volverla a embestir suave mientras que Momo acariciaba su clítoris.

Entonces Dahyun se corrió, y a pesar del orgasmo que estaba teniendo, Sana continuó penetrándola sin importarle lo muy sensible que la menor había quedado.

"¡Sana! ¡Sana, para!" La menor gemía con la poca fuerza que le quedaba mientras sentía a Sana penetrarla "¡Sana!" Gritó de nuevo y sintió a Sana descargarse nuevamente dentro de ella antes de salir para ver su semen escurrirse de la intimidad de la menor.

Dahyun estaba temblando, sentía su intimidad arder y el semen caliente de Sana en su vientre, pero estaba más tranquila ahora que la mayor se había detenido.

Sin embargo chilló al sentir los dedos de Momo entrar en ella para tomar un poco de los fluidos que retenía, y sin más, los llevó al cuello de Dahyun para embarrarlos ahí y chupar de su cuello los fluidos de Sana.

Finalmente soltaron a Dahyun cuando ya habían tenido suficiente de ella.

Y entonces Momo y Sana comenzaron a besarse para aliviar esas ganas que aún les quedaban, ambas tenían la polla dura de nuevo y querían deshacerse de eso antes de finalmente dormir, así que Momo tomó a Sana de espaldas sobre su regazo y comenzó a follar su ano mientras que con una mano masturbaba el pene de Sana.

Ambas gemían con fuerza al sentirse al borde del orgasmo cuando este finalmente llegó, Sana dejandose ir en la mano de Momo y esta última descargando sus fluidos en el culo de su amiga para finalmente dormir.

Y así fue como acabó la primera noche que Dahyun tuvo a ambas japonesas en su hogar, definitivamente no sabía en lo que se había metido.

Lo prometido es deuda, actualización Saidahmo antes de que acabe el día. Buenas noches.