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El concierto de la solista Minatozaki Sana acababa de concluir, todos los fanáticos estaban tan eufóricos por la increíble presentación que la chica ofreció, y con esa misma emoción se encontraba Dahyun saliendo del estadio en el que su artista favorita acababa presentarse, no podía creer lo fascinante que fue tener a su ídola casi frente a ella, pues por primera vez había conseguido un lugar en la primera fila.

Dahyun aún no podía creer que había estado ahí tan cerca de Sana, aún estaba procesando todo cuando finalmente había llegado a las afueras del estadio, pero de momento su ensoñación se vió abruptamente interrumpida al escuchar lo que parecía ser la voz de Sana hablando con algún miembro del staff.

Enseguida la coreana volteó la mirada hacia el lugar del que provenía aquella bonita voz y miró a través de unas lonas lo que parecía ser el camino hacia el camerino de Sana, había un pequeño pasillo antes de llegar a dicho lugar por lo cual, se mantuvo espectante para averiguar si realmente se trataba de su ídola.

Y fue así como la vió, Sana estaba entrando a lo que parecía ser su camerino, y sus suposiciones se aclararon cuando la artista cerró la puerta, pues tenía su nombre decorado con estrellitas afuera de esta.

Entonces Dahyun se planteó la idea de acercarse, todos ya habían salido del estadio, no había nadie cerca del pasillo en el que había visto pasar a Sana y el camerino de la chica estaba ahí con la artista dentro, ella tenía la oportunidad perfecta para hablarle, pero también tenía miedo de lo que podría pasar si la descubrían, ella no quería meterse en problemas, o peor aún, temía que Sana pudiera tomarla como una acosadora y desagradarle, además sabía que era una simple fan, por lo que probablemente incomodaría a Sana si se acercaba y tocaba la puerta de su camerino.

Pero la tentación era tan grande que se escabulló entre aquel pasillo dividido por una gran lona negra, al parecer improvisada por el staff para mayor privacidad de la idol, y logró llegar a una pequeña explanadita en donde habían camionetas pertenecientes a la seguridad de Sana.

Y sin más Dahyun caminó hasta la puerta del camerino de Sana subiendo las escaleras de este con la intención de tocar.

Pero entonces se acobardó y se sintió como una loca al haber llegado tan lejos solo para ver a Sana más de cerca.

Entonces quiso abandonar aquella descabellada idea, pero cuando se dió la vuelta para bajar por las escaleras del camerino la puerta de Sana se habrió sorprendiendo a Dahyun, la cual volteó el rostro encontrándose con aquella idol a quien tanto admiraba.

"Sana..." Dahyun habló tímida al ver a la chica frente a ella.

"Ahm, disculpa, qué haces aquí?" Sana preguntó extrañada al ver a una intrusa parada en un lugar que supuestamente era seguro.

"Y-yo... L-lo siento m-mucho, m-me equivoqué" Dahyun comenzó a tartamudear por los nervios intentando huir lo más pronto posible de ahí.

Pero por supuesto que Sana no le creyó, es decir, estaba claro que nadie podía entrar ahí por equivocación y menos pararse frente a un camerino que decía su nombre en la puerta.

"Oye, tranquila" Sana la detuvo tomándola de la muñeca cuando la vió así de nerviosa.

Y Dahyun casi se desmaya al sentir la mano de Sana tocarla.

"Y-yo no debería estar aquí" Nuevamente la menor intentó irse, pero Sana la frenó.

"Y no te gustaría quedarte a comer conmigo? Iba a cenar sola y dudo que después del concierto no tengas hambre" Sana trató de verse amigable con la joven coreana.

Ella sabía que estaba frente a una fan suya, pues la había visto en primera fila de su concierto un par de horas atrás y había quedado cautivada por la belleza de aquella joven, unas cuantas pruebas de ello habían quedado guardadas en el celular de Dahyun, pues había grabado varios videos del concierto cuando de repente Sana volteaba a verla y ella explotaba en gritos como una loca.

Entonces Dahyun intentó lucir tranquila y asintió ante la invitación de Sana, pero estaba casi segura de que sus nervios eran completamente notorios y seguramente Sana la había visto temblar al estar parada frente a ella.

Así que apenas entraron la mayor cerró la puerta de su camerino con seguro, pues sabía que si su manager se enteraba de que había metido a una fan sin consultarle a nadie probablemente se metería en problemas. Por lo cual, decidió mandarle un mensaje a su manager para decirle que no era necesario que la acompañara a cenar esta noche con el pretexto de que iba a tomar una siesta debido a lo cansada que se encontraba.

Porque claro, cenar sola era solo una mentira para que Dahyun se quedara con ella.

"Te gusta el kimbap de queso?" Sana rompió el tenso silencio en el que se encontraba la menor mientras calentaba su comida en un pequeño microondas que tenía ahí.

"Si" Dahyun respondió totalmente nerviosa mirando a Sana servir la cena en un par de platos.

Realmente la coreana no sabía cómo sentirse ante eso, no esperaba que Sana realmente la viera ahí y mucho menos que la invitara a cenar.

Y cuando la japonesa acabó de servir la cena para ambas lo llevó a la mesita del camerino y acomodó una silla para la tímida fan que tenía frente a ella.

"Siéntate" Sana indicó con una sonrisa la silla frente a ella.

Y entonces la coreana tomó lugar en silencio mirando a Sana servirle un poco de jugo.

"Y bien, cómo lograste llegar aquí?" Sana volvió a romper el silencio.

"Yo... Fue una equivocación" Dahyun argumentó antes de empezar a comer. Ella realmente tenía hambre.

"No te creo" Sana soltó sin más mientras comía "Te ví en primera fila y no es fácil entrar aquí, es obvio que me seguiste" Sana comentó riendo mientras exponía a la contraria.

"No te seguí, solo te escuché hablar y... Espera, realmente me recuerdas del concierto?" Dahyun preguntó bastante sorprendida.

"Eres demasiado bonita como para pasar desapercibida y además gritabas mi nombre a todo pulmón, era imposible no notarte" La sonrisa avergonzada de Dahyun no tardó en aparecer ante lo que Sana contaba "Desde ahí quise saber tu nombre" Sana soltó aquello esperando a que la contraria le respondiera.

"Me llamo Kim Dahyun" La menor se presentó tímida antes de seguir comiendo.

"Que bonito nombre" Dahyun sonrió "Pero ya dime, qué quieres, Dahyun?" Sana preguntó de pronto sorprendiendo a la menor con eso haciendo su sonrisa desaparecer.

"Qué quiero?" Dahyun preguntó con las mejillas llenas de comida y el corazón latiendo a mil, temía haber incomodado a Sana con su presencia.

Sana por el contrario solo asintió.

"Si, querías una foto? Un autógrafo? Tal vez querías decirme algo o darme una carta?".

"La verdad... Ni siquiera yo misma sé lo que quería" Dahyun se sinceró sintiéndose un poco más cómoda al saber que Sana no estaba enojada con ella "Supongo que solo quería estar cerca de tí".

Y Sana sonrió ante eso.

"Así que solo querías estar conmigo" Sana canturreó en ese tono coqueto que sus fans conocían tan bien "Acaso te gusto?" Sana bromeó intentando sacar un poco de información de la menor.

"Obviamente, eres perfecta" La menor respondió con total sinceridad, pues estaba aprovechando el tiempo para hacerle saber a Sana mediante cumplidos lo mucho que la admiraba.

Y mientras la menor seguía hablando sobre lo mucho que adoraba a Sana, esta la escuchaba con atención buscando el momento preciso para ofrecerle el contrato de confidencialidad a Dahyun, pues desde que la vió llamó mucho su atención y realmente se sentía un poco estresada luego de tanto trabajo debido a la gira que estaba dando, así que creyó conveniente dejarla quedarse un rato más.

Compartieron un poco más de charla después de que la cena terminó, Sana había ofrecido un poco de vino a la contraria y esta se había soltado un poco más al sentirse en confianza con aquella chica a la que tanto había admirado desde lejos.

Habían pasado un par de horas desde la llegada de Dahyun al camerino de Sana y la plática seguía fluyendo entre ellas, cuando de pronto la menor notó la hora en su teléfono.

"Creo que ya debería irme, sé que tienes más conciertos en los próximos días así que deberías descansar" Dahyun sugirió levantándose del lugar.

Pero Sana no quería que se fuera.

"Espera" Así que la detuvo "Antes quería darte algo" Sana la llamó un poco nerviosa y buscó entre unos cajones lo que parecían ser un par de papeles.

Y sin más se los entregó a Dahyun.

"Qué es esto?" La menos preguntó confundida.

"Es un contrato de confidencialidad" Sana respondió pasándole un bolígrafo a Dahyun.

"Oye, no te preocupes, no diré nada sobre la cena de hoy" Dahyun sonrió tranquila a punto de firmar el documento.

"No es por eso" Sana la detuvo "Primero lee el contrato" La mayor indicó.

Y Dahyun obedeció.

Pero cuando llegó a la tercera linea entró en un estado de shock.

Era un contrato para involucrarse con Sana de manera sexual y sin ninguna clase de compromiso.

"Pero, qué? Sana, qué es esto?" Dahyun preguntó incrédula.

"Un contrato de confidencialidad" Repitió la artista "Te dije que habías llamado mi atención" Mantuvo una sonrisa tranquila mientras se acercaba lentamente a Dahyun "Pero puedes simplemente olvidarlo y marcharte" Intentó parecer decepcionada, pero en el fondo sabía que Dahyun no desperdiciaría esa oportunidad.

Y sus suposiciones fueron confirmadas cuando tomó los papeles de la mano de Dahyun y esta los sujetó más fuerte en un intento porque Sana no se los llevara.

Entonces Dahyun firmó aquel contrato, ya había leído lo suficiente como para saber que quería pasar esa noche con Sana.

Así que cuando la mayor vió que Dahyun había colocado su nombre y firma tomó los papeles de su mano y los dejó a un lado para finalmente besar a la contraria.

La coreana por su parte no podía creer lo que estaba pasando, su ídola y amor platónico la estaba besando en estos momentos con la intención de llevársela a la cama. Entonces se dejó guiar por Sana hasta acabar sentada en la cama del camerino con la Idol a horcajadas sobre sus piernas.

Era bastante fascinante poder sentir el cuerpo ligero de su ídola tan cerca del suyo, respirar su perfume y sentir cada parte de su boca con la punta de su lengua.

Estaba tan embriagada con los besos de Sana cuando esta repentinamente se separó de ella.

"Puedes tocarme, esta noche seré tuya" Sana habló sobre los labios de Dahyun mientras acariciaba su nuca con sus uñas.

Y la menor sintió su corazón latir a mil al escuchar esas palabras, así que volvió a besarla y acercó sus manos a la cintura de la mayor para acariciar con delicadeza las curvas de la japonesa y detenerse en los pechos de esta para comenzar a masajearlos con suavidad.

Apretó un poco los pechos de Sana por encima de su ropa para después moverlos en círculos y bajar sus manos hacia el abdomen contrario sin dejar de besarla, se sentía tan bien poder acariciar a Sana de esa manera, todo en ella le parecía tan perfecto y a la medida, así que metió sus manos por debajo de su blusa para poder acariciar directamente la piel de su abdomen y se arrastró un poco más hacia arriba encontrándose con sus pechos aún atrapados en el sostén que la mayor portaba.

Entonces los apretó un poco sintiendo la piel, que su sostén no alcanzaba a cubrir, hacer contacto con las palmas de sus manos y supo lo mucho que deseaba acariciarla sin una sola prenda interponiéndose en su camino.

Así que se separó del beso y miró a los ojos de Sana mientras sus manos se posaban en el broche de su sostén.

"Puedes hacerme lo que quieras, ya te lo dije" Soltó la mayor dando luz verde a la tímida chica debajo de ella para que comenzara a desvestirla.

Entonces abrió su sostén dejando sus pechos libres aún debajo de su camisa y acarició un poco más su delicada espalda antes de regresar a los pechos de Sana.

Y finalmente los tomó entre sus manos sintiendo sus pezones erguidos en sus palmas, por lo cual decidió quitar la blusa de la mayor para poder mirar su torso desnudo.

Era tan fascinante poder mirar la obra de arte que Dahyun tenía sobre su cuerpo que incluso parecía irreal, quería hacerle tantas cosas que necesitó detenerse por un momento para pensar en lo que haría primero.

Pero claro que lo sabía, se la había imaginado tantas veces de esa manera que incluso podía resultarle extrañamente familiar, aunque claro, poder mirarla y sentirla era algo totalmente nuevo, simplemente era otro nivel.

Entonces volteó sus cuerpos dejando a Sana pegada a la cama y ella encima de su cuerpo con las piertas en medio de las de Sana, y con extremada delicadeza pasó la punta de sus dedos desde el pecho de Sana hasta su abdomen bajo en donde se mantuvo jugando con el botón de sus jeans mientras hundía su rostro en el cuello de la mayor.

Y Sana sintió su corazón palpitar desenfrenado al sentir el cuidado con el que Dahyun la trataba.

Estaba en completo shock al notar el cariño con el que la menor acariciaba su cintura y besaba su cuello, que le costaba creer que iba a tener sexo con ella.

Pero claramente esto no era simple sexo para la coreana, porque de todo lo que podía hacer ahora ella solamente tenía una idea en mente.

Tenía la oportunidad perfecta para demostrarle a Sana lo mucho que la amaba sin necesidad de palabras y era justo lo que iba a hacer.

Entonces continuó bajando sus besos por el cuello de la mayor, dejando un pequeño rastro de saliva por donde iba pasando, hasta llegar a sus pechos en donde dedicó un par de minutos dejando besos y caricias con su lengua.

Y la mente de Sana simplemente estaba colapsando, Dahyun no había hecho mucho aún y Sana ya podía sentir sus bragas completamente empapadas con esas simples lamidas que la menor dejaba en sus pechos alternando entre ambos hasta dejarlos completamente húmedos de saliva.

Así que continuó bajando sus besos por el torso de Sana causando un espasmo en su cuerpo cuando llegó a la parte baja de su abdomen y la mayor necesitó retener un jadeo cuando sus ojos hicieron contacto visual con Dahyun.

Había un brillo especial en la mirada de su fanática que por un momento se sintió en la necesidad de preguntarle Qué somos? A la menor, pero a pesar de lo íntimo que parecía el encuentro simplemente terminaba reduciéndose a una cosa.

Sana estaba recibiendo sexo gratis de una fanática.

Y no era la primera vez que lo hacía, pues a lo largo de su carrera se había topado con tantas fanáticas hermosas al rededor del mundo que estaban dispuestas a pasar una noche con ella y luego desaparecer como si nada hubiera pasado.

Pero entonces, por qué Dahyun la hacía sentir tan diferente? Tan... Especial, no lo entendía, pero tampoco pudo analizarlo mucho cuando sintió a la menor abrir sus pantalones y sacarlos de su cuerpo para después mirarla desnudarse frente a ella.

Y demonios! El cuerpo de Dahyun era jodidamente perfecto, tan pálido y suave cuando sus pieles se juntaron nuevamente en la misma posición ahora con las bragas de Sana como la única prenda que se interponía entre ellas.

Eran color rosa, uno de los favoritos de Dahyun, pero sin duda lucía aún más bonito cuando estaba entre las piernas de Sana siendo adornado por una mancha de humedan.

Entonces pasó uno de sus dedos por encima de la tela, mirando la espalda de Sana curvarse cuando hizo presión sobre su inchado clítoris.

Y un suave jadeo escapó de los labios de la mayor cuando Dahyun subió su otra mano hacia su pecho y acarició con las yemas de sus dedos su pezón derecho.

Acarició su piel con delicadeza una última vez antes de sacar las bragas de Sana por sus piernas y tenerla desnuda frente a ella, entonces lo confirmó, Sana era una obra maestra tallada a mano por la diosa de la belleza.

Era preciosa y casi dejó una lágrima caer al sentirse tan afortunada de poder amar y admirar el cuerpo de su ídola de esta manera.

Así que no pudo evitar bajar hasta la entrepierna de Sana y sumergir su rostro en la intimidad de la artista arrancándole gemidos audibles cuando su lengua se enterró entre sus pliegues y sorbió los fluidos que lubricaban su entrada.

Las manos de Dahyun subieron por los muslos de la mayor para sujetarse de sus caderas y sumergir su rostro aún más cerca de la intimidad de la japonesa mientras que sus dedos se encargaban de acariciar su piel.

Entonces sintió a Sana sospener su cabeza para empujarla un poco más es un intento desesperado por sentir su lengua finalmente entrar en ella.

Así que lo hizo, sacó la lengua de su boca y la enterró en la intimidad de la mayor para acariciar sus paredes con aquel resbaladizo músculo, era cálido y bastante húmedo con un olor único que podía embriagar a la menor y hacerla adicta a ello.

Simplemente era lo más delicioso que Dahyun había podido probar, y para Sana también era delicioso sentir la lengua de la coreana entrar profundo en ella para acabar sorbiendo sus fluidos.

El camerino se sentía bastante caliente y los gemidos de Sana eran lo único que se escuchaba ahí adentro junto al sonido de su humedad siendo lamida por su fanática.

Y justo cuando estaba por venirse sintió a Dahyun abandonar su entrepierna y subir hasta su boca para besarla.

"Me encanta tu voz, pero tu personal podría escucharte" Dahyun aclaró cuando se separó de los labios de Sana.

"Al diablo todos, quiero que sepan lo bien que me estás haciendo sentir" Sana la volvió a acercar a ella para unirse en otro beso sintiendo sus lenguas encontrarse y acariciarse con suavidad mientras los dedos de Dahyun se encargaban de satisfacerla con lentas caricias en su intimidad.

Para Dahyun, Sana era la obra de arte más valiosa en el mundo y ahora tenía el privilegio tocar cada parte de ella que incluso si tuviera que escoger entre el piano más costoso y la idol ella escogería, sin pensarlo dos veces, escuchar la música que salía de la boca de Sana cuando la tocaba.

Porque ninguna canción podía igualarse al perfecto sonido de los gemidos y suspiros que Sana soltaba cuando Dahyun arrastraba sus dedos por su intimidad.

Se sentía tan húmedo y resbaladizo que sus dedos casi entraban en la mayor sin siquiera intentarlo, así que pensó que ya era momento de dar un paso más y comenzó a sumergirse en su interior con los dedos, medio y anular, de su mano derecha, mientras que con la izquierda trazaba dibujos imaginarios sobre la piel de Sana.

Estaba sudada y roja, y eso solo encendía más a la menor, quien sin poder evitarlo comenzó a llenar de besos el torso de Sana deteniéndose un momento para chupar sus duros pezones antes de enterrarse en su cuello para dejar un par de besos delicados.

Dahyun deseaba con toda su alma que Sana fuera suya, pero sabía que no podía, millones de personas amaban a Sana y ella no podía simplemente aparecer y quedarse con ella, porque al final de cuentas ella seguía siendo una simple fanática y el contrato que ella había firmado explicaba claramente que no podía si quiera dejar marcas sobre el cuerpo de la artista.

Pero qué tan malo sería desobedecer siempre y cuando no fuera un área visible?

Así que lo intentó y bajó de nuevo a la entrepierna de la mayor para dejar una marca morada con su boca en el muslo interno de Sana, realmente cerca de su intimidad.

Hizo lo mismo del otro lado y finalmente besó con suavidad el clítoris de la mayor antes de regresar a la parte superior de su cuerpo y dejar besos inocentes en su hombro izquierdo.

"Te amo" Dahyun no se pudo contener de decirlo antes de entrelazar su mano libre con una de las manos de Sana y aumentar gradualmente la velocidad de sus embestidas.

Y esas dos palabras fueron suficientes para que Sana entendiera porqué ese momento lucía tan diferente a todos sus demás encuentros con otras fanáticas, ahora sabía porqué todo lucía tan íntimo y correcto.

Porque ellas no estaban teniendo simple sexo por contrato, Dahyun realmente le estaba haciendo el amor y Sana podía sentirlo.

Incluso parecían una pareja por la posición en la que se encontraban ahora, unidas en un cálido beso mientras mantenían una de sus manos entrelazadas y Dahyun la satisfacía con la otra.

Y demonios, ellas se completaban tan bien, como si sus cuerpos hubieran sido creados especialmente para unirse de esa y muchas maneras más.

Además de que Dahyun era completamente su tipo, bajita, de piel pálida, caderas anchas y pechos pequeños, además de tener una cintura para morirse, ella tenía todo para volver loca a Sana y las paredes de la mayor podían confirmarlo al comenzar a apretar con fuerza los dedos de Dahyun en señal de que nuevamente estaba cerca de correrse.

Entonces Dahyun aceleró un poco más sus embestidas mientras acariciaba su clítoris con su pulgar de la otra mano, aún sin soltar la mano de Sana.

Sin más, Sana finalmente se corrió gritando en alto el nombre de la coreana que la había hecho sentir muy bien, manchando un poco sus manos unidas y dejando el resto de sus fluidos caer en el colchón.

Tal vez era solo una fan, pero después de cómo la hizo sentir, Sana incluso estaba considerando pedirle matrimonio.

Sin embargo, a pesar de lo convencida que estaba de que Dahyun la iba a aceptar, ella sabía que eso no era posible.

O tal vez, no por el momento.

Necesitaba comprender mejor acerca de la nueva sensación que estaba descubriendo, y quería tomar las cosas con Dahyun de forma tranquila y en calma.

Así que invitarla a un café después de pasar la noche durmiendo juntas sería un buen comienzo para ambas.

Algo que empezó como simple sexo sin compromiso parecía haber llegado a su fin.

Porque ahora, Sana no necesitaría ofrecer contratos de confidencialidad a ninguna otra fan.

No cuando finalmente había conseguido a una fan destacada.

A/N
Sáquenme del flop (ㅠㅠ)