Estoy de regreso, muchas gracias por su paciencia este capítulo lo escribí hoy hace una hora y espero sea de su agrado, si hay alguna interrogante y debe haber muchas haganmela saber suelo enredarme al escribir, trataré de contestarlas o incluirlas en el siguiente capítulo.

Espero leernos mañana, aunque no aseguró nada pues tengo más historias que actualizar además del trabajo.

Que tengan un lindo día.

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Rafael había hablado de más y aunque quería callar decidió seguir, tal vez si les decía todo lo que el sabía sus corazones podrían perdonar.

- Pero..., pero había curiosidad, te amaba pero sentía curiosidad por saber que se siente estar con un hombre,...

- Así que me fue infiel por curiosidad, genial, eso solo significa que no me amaba, dejémoslo así no quiero saber más, ahora ese hombre no significa nada tengo a Alec, el es mi esposo.

El ángel se puso nervioso y todos los demás estaban en silencio sin saber que decir hasta que Asmodeo carraspeó para llamar su atención, el demonio tenía algo que confesar.

- Me voy a arrepentir de esto pero debo decir que yo fui culpable de eso, yo... En ese momento una fuerte explosión destruyó las puertas y demonios al servicio de Leviatán entraron.

De inmediato Robert y Michael se pusieron en posición al igual que Simón, Clary empuño una daga mientras Alec era escondido de ellos por el angel.

Asmodeo estaba furioso por la intrusión de esos demonios, energía azul rodeo sus manos para proteger a sus invitados, los demonios a su servicio también entraron en una batalla sangrienta para proteger sus dominios, se estaban matando unos a otros así que Rafael adelantó sus planes abrió un portal y se llevó a todos con él.

Aparecieron en un lugar desconocido, estaban rodeados de naturaleza, una casona antigua pero muy bien cuidada en medio de grandes edificios.

- ¿Donde estamos?, este lugar es asombroso parece que estamos encerrados en una burbuja.

- Algo así, este lugar tiene múltiples protecciones, los subterraneos no pueden verlo y los mundanos menos.

Rafael le decía a Simón mientras veía a Alec abrazar a su ahora esposa, estaba inquieta y respiraba con dificultad muchas emociones la estaban afectando.

Al pasar las horas apareció Asmodeo diciendo que la limpieza estaba hecha, les contó que había eliminado a todos los demonios que habían osado invadir su dimensión, pero Alec quería saber otra cosa, quería preguntar pero apenas lo intentó escuchó un grito proveniente de la habitación donde estaba Clary.

Corrió y cuando entró la encontró con la mano en su vientre, estaba llorando había una gran mancha de sangre en su ropa y sobre la cama.

- Alec, ayúdame... mis hijos... estoy perdiendo a mis hijos.

Alec corrió hacia ella y la sostuvo en brazos sin saber que hacer, estaba desesperado.

- Jem, tenemos que traer a Jem el puede...

No necesito decir más el mismo Asmodeo desapareció y a los minutos regreso con el ex hermano silencioso quien estaba con espada en mano pero claramente había sido derrotado.

Cuando Jem enfocó la vista se sorprendió de ver a todos los que creía muertos, tenía muchas preguntas pero decidió dejarlas para después al ver el estado de Clary y de inmediato la reviso.

- Tengo que practicarle una cesarea, es urgente los bebés podrían morir, tenemos que llevarla a un lugar con los implementos necesarios y voy a necesitar ayuda no podré solo.

Asmodeo los llevo a un hospital que estaba en remodelación pero tenía todos los implementos necesarios para la cirugía y fue Robert quien entró, él tenía conocimientos en medicina porque cuando era joven Michael se lastimaba frecuentemente en las misiones y el se vio obligado a aprender en una universidad mundana, también Rafael fue con ellos para darle de su energía a Clary y velar por las criaturas.

Alec daba vueltas en la casa a donde lo habían llevado, no le permitieron ir con ellos por su seguridad, estaba desesperado por su amiga y ahora esposa, habían pasado varios minutos y aún no sabía que estaba ocurriendo, Michael quien se habia quedado para cuidarlo lo detuvo de dar tantas vueltas.

- Calmate ella estara bien, Robert está con ella, la cuidara no tienes que preocuparte.

- Confías mucho en él, pensé que después de lo que pasó entres ustedes...

- ¿Te contó? eso no me lo esperaba, pensé que..., olvidalo niño.

- Somos de la misma edad, no me llames niño.

- Mike lo es, pero por ahora el permanece dormido, yo tengo la misma edad que tu padre soy Michael su parabatai recuérdalo Alexander.

- Aún no entiendo como eso es posible.

- Reencarnación, renaci pero una parte de mi alma se quedó en el cielo junto a todos mis recuerdos, Asmodeo fue por mi y me trajo aquí para que lo ayudará en tu protección.

- ¿Por qué accediste?

- Por tu padre, quería volver a verlo, lo he extrañado, no pude despedirme de el y tambien por ti... -  mientras ellos hablaban en el hospital se escucho el primer llanto de un bebe.

Media hora antes Asmodeo había aparecido en Idris; de nada sirvieron sus protecciones el demonio entró como si fuera su casa y se enfrentó a varios nefilim, era divertido verlos luchar y perder hasta que visualizo al hombre que estaba buscando.

El también lo enfrento, era habilidoso pero aún así no pudo hacer nada, Asmodeo lo inmovilizó y desapareció con el ante la mirada de sus amigos incluido un demacrado Magnus.

Ellos de inmediato lo rastrearon, se organizaron y armaron para una batalla, abrieron un portal para ir a su rescate y aparecieron en medio del pasillo de un hospital, estaban confundidos no sabían que podría estar haciendo un demonio en un lugar así cuando escucharon un grito, era Clary.

Jace fue el primero en reconocer la voz he intentó entrar en la habitación  pero fue impedido por Simón quien de una patada lo alejó de la puerta, nadie se había dado cuenta de su presencia hasta ese momento.

Isabelle se acercó corriendo y se lanzó a sus brazos mientras los demás los rodeaban. Justo cuando lo iban a llenar de preguntas se escucho el llanto de un bebé.

- Es Clary, el nacimiento de mis sobrinos se adelantó

A Jace no le importó haber sido golpeado sabía que se lo merecía, el estaba feliz, eufórico de saber que la mujer que creía muerta estaba con vida y dando luz a sus hijos, quería entrar pero Simón estaba custodiado la puerta.

Otro llanto se escucho y fue el último, varios minutos pasaron y Jace no pudo más tenía que saber que estaba pasando, cuando estaba a punto de suplicar a Simón lo dejara pasar la puerta fue abierta y salió Jem.

Jace aprovechó la distracción de Simón y se escabullo en la habitación, se acercó a la cama y ahí estaba Clary profundamente dormida, busco con la mirada a su alrededor y los vio había dos pequeños envueltos en mantas, se acercó de inmediato pero no llegó a tocarlos, salió corriendo pero antes de irse chocó con Magnus.

- No son mis hijos, son de él...