👆 seria una de las fotos del catálogo usen su imaginación  (No soy buena para esto, pero hago lo que puedo).

De regreso al Instituto Jace permaneció en silencio tanto que Tessa se preocupó de que haya sufrido una conmoción cerebral, tal vez no debió golpearlo con tanto amor, el pobre se dio de nariz contra la pared.

Fueron recibidos por Isabelle quien a pesar de querer preguntar solo espero a que su hermano decidiera hablar; el tomó el catálogo que Maia había dejado y paso sus dedos por la fina portada, era la silueta de Clary, luego de un par de minutos tomo una gran bocanada de aire y lo abrió, empezó a pasar las páginas lentamente ella modelaba ropa de maternidad, en cada imagen salía más hermosa que en la anterior, en cada una delineó su vientre recordando lo cruel y canalla que fue con ella.

Siguió observando el catálogo ante la atenta mirada de su familia que estaba tratando de adivinar sus pensamientos, volvió a pasar una página más y lo vio, la imagen central ocupaba dos hojas y en ella salía una peculiar pareja, eran ellos Alec y Clary, apretó sus puños hasta que sus nudillos se volvieron blancos y las uñas se enterraron en la palma de su mano haciéndole sangrar.
 
Ella llevaba un vestido impresionante y no era cualquier vestido, era uno de novia y a su lado Alec con una sonrisa vestido de Frac, frunció el ceño y empezó a pasar las páginas restantes y luego lanzó el catálogo con todas sus fuerzas, las sonrisas, los abrazos e incluso los besos en la frente, mejilla y labios eran tan naturales que mostraban al mundo su felicidad, una felicidad que debía ser suya.

Dio vueltas por la sala hasta que su mirada se posó nuevamente en el vil catálogo y sus ojos se llenaron de rabia, justo se había abierto en una página que no había visto en ella una sonriente Clary miraba con amor hacia abajo donde un apuesto Alexander colocaba un beso en su abultado vientre.

- ¿Donde los encuentro?, en donde se esconden, dime Isabelle donde mierda esta Alec ocultando a mi mujer e hijos.

- Cuida como me hablas idiota, no tengo idea donde se encuentran a los minutos que Alec fue dado de alta la pelirroja abrió un portal y desapareció con el.

- No te creo, estoy seguro que sabes Simón debe de haberte dicho donde...

- Ya te dije que no se así que no molestes pregúntale a otro.

Salió furioso iría a ver a Magnus si había alguien que podía ayudarlo era él.

Magnus se encontraba observando aquel catálogo que le habían dado a Catarina en el restaurante, este era uno para la sección masculina de la tienda y vaya que su garbancito lucia genial, se veía muy atractivo.

En muchas ocasiones había intentado fotografiar al nefilim pero él siempre se negó aduciendo que no era fotogenico. Vaya mentira no había foto donde saliera mal y dudaba que algún día la hubiera.

Queria verlo, lo deseaba pero mientras no definiera lo que sea que tenía con Jace se mantendría alejado  de el, asi que tomó su teléfono y llamo a la tienda para adquirir uno de los trajes que le había encantado y se enteró de algo muy interesante.

En dos noches habría un desfile de modas donde podría ver el traje que deseaba comprar modelado por Alexander, a si Clary también estaría ahí.

Apenas terminó la llamada tocaron a su puerta.

- Magnus necesito tu ayuda

Era Jace y le contó que Clary llevaba a sus bebés y eran tres, hablaba tan emocionado y con una boba sonrisa cada vez que mencioba a sus hijos y a su ex esposa que corazones flotaban a su alrededor, debía sentirse celoso por ello pero increíblemente estaba feliz por él.

Había tenido mucho tiempo para pensar y había aclarado sus sentimientos, tenía un hombre atractivo frente a él con el que se había acostado pero no lo amaba, ¿lo quería? Podría decirse que si, se habían hecho amigos mucho antes de ser amantes.

¿Como sucedió? pues por culpa de una borrachera; mientras Jace hablaba y hablaba no sabía de que, el empezó a recordar como empezó su amorio con el rubio cuando sintió unos delgados labios precionarse con los suyos.

Era sólo deseo no amor, solo pasión y sexo, dieron rienda suelta a los placeres carnales en el mismo sofá donde muchas veces había tomado a Alec, en el mismo lugar donde gritaba que lo amaba mientras llegaba al éxtasis.

No se dieron cuenta cuando la puerta fue abierta, estaban tan nublados por el deseo que no vieron a Alexander quien silenciosamente se retiró dejando la llave sobre la alfombra.

Había ido para hablar con él, para escuchar una explicación por parte del hombre que aún amaba, tenía, mantenía la esperanza, una muy pequeña esperanza de que ese hombre aún lo amara, pero como siempre se equivocó.

Tomo una decisión en ese mismo instante, al día siguiente convertiría a Clary en su esposa.