No sabían lo que estaba sucediendo, todo pasó tan rápido que cuando se dieron cuenta la guerra había terminado y las torres de los demonios antes destruidas ahora lucían imponentes protegiendo la ciudad, los pocos sobrevivientes que quedaban caminaban entre los muertos buscando a sus familiares y amigos con la esperanza de encontrarlos con vida.

Ahora los nefilim podían considerarse una raza casi extinta, eran pocos los que quedaban, la mayoría niños, los ancianos también habian luchado en la guerra protegiendo a sus descendientes, incluso los submundo los protegieron con su propia vida y ahora eran cuidados por las manadas de hombres lobo a cargo de Luke mientras brujos sanadores estaban tratando a los heridos, Lily caminaba llevando a rastras a Maia quien estaba gravemente lastimada, Catarina atendía a Isabelle quien con la mirada perdida solo murmuraba los he perdido.

Robert aún sostenía entre sus brazos a su parabatai quien se puso en medio de una daga dirigida a él, no quería perderlo, no otra vez, ya lo había perdido casi todo, en eso apareció Asmodeo llevando a su hijo en brazos, Magnus estaba inconsciente a causa del shock de haber visto lo más doloroso de su vida, lo acomodó suavemente en el suelo y luego empezó a curar a Michael, se sentía culpable pues él lo había involucrado en la guerra.

- ¿Qué fue lo que pasó? por más que pienso no logró entender ¿Por qué los Ángeles no nos ayudaron?

- No lo se, no entiendo, si estamos vivos es por tu hijo, el se sacrificó para salvarnos a todos.

Pasaron dos días de duelo antes de despedir a todos, entre lágrimas fueron incinerados los caídos en batalla y esta vez no hubo distinciones, nefilim junto a submundo todos compartieron el ritual de despedida. Fue el lamento de diferentes razas unidas por el dolor de la pérdida.

Robert sostenía fuertemente la mano de Maryse mientras Isabelle lloraba aferrada a ellos, a su lado Jace trataba de no dejar caer sus lágrimas pero no pudo hacerlo por mucho tiempo, se derrumbó y fue Maryse quien lo sostuvo, solo ellos quedaban, Clary, Simón y Alec se habían ido.

Pasó una semana desde la triste despedida a los guerreros caídos y Jace salió en busca de sus hijos, los logró encontrar luego de un mes de caminar errante en un país desconocido y Becky se los dio junto a una carta.

"Si estás leyendo esto, quiere decir que me he ido y Alec también, lo lamento, lo lamentamos..., muchas cosas pasaron pero no hubo un día que no extrañara tus brazos, lo siento Jace, lo sabía, lo sabía todo, se que no eras culpable, no lo supe al instante sino meses después, pero ya era tarde, el destino se interpuso en el camino y tuvimos que engañarlo para darles una oportunidad a todos, no me odies y por favor si puedes hablales de mi a nuestros hijos y también de él, de Alec, se que es difícil para ti, pero el veló por mi y por los niños, luchó cada día para que nada nos faltara y nos dio amor, un amor de hermano para mi y amor de padre para ellos y a pesar de lo que pasó entre ustedes él te amo hasta el último día..., Jace... te amo, desde aquella vez, jamás deje de hacerlo"

No había más, se notaba que lo había escrito aprisa, no sabía que pensar, no entendía nada, tomo a sus hijos y se despidió de Becky y George y regresó a Alacante junto a los Lightwood.

                                     FIN

Hasta aquí; pueden considerarlo el final pero aún seguiré por unos capítulos más, tal vez este un poco enredado y genere muchas dudas, tenganme algo de paciencia.