Me quede un rato contemplándola, hasta que vi que llegaron dos hermosas niñas a despertarla, ahí aproveche y toqué el timbre.

Narra daka:
eran las 2 de la tarde y estaba muy cansada desde el día anterior no avía podido dormir nada, cuando desperté Aurora y Antonia llegaron a despertarme porque tenían hambre aproveche y me levanté hacerles algo rico de comida, estaba terminando de preparar el almuerzo cuando escuche que tocaron el timbre, milco bajo corriendo y dijo que el abriría cuando lo hizo se quedo un rato afuera y después entró.

Milco: ¡mamá mira a ver quien esta aquí!
Daka: ¿quién es?, estoy ocupada milco ven estoy en la cocina
Milco: ¡es papá!
Daka: ¿enserio?.

Cuando volteé y vi a murdo no lo podía creer, el estaba aquí, me puse súper nerviosa y no podía casi ni hablar.

Murdo: ¡hola!
Daka: ¡hola!
Murdo: te extrañe tanto, dije mientras abrazaba a daka y ella correspondió mi abrazo
Daka: yo también te extrañe murdo no sabes cuanto, dije mientras unas lágrimas salían de mi rostro cayendo a mis mejillas
Murdo: no llores, ya estoy aquí así como aviamos hablado
Daka: si lo se estás aquí
Milco: odió interrumpir pero mamá iré a darles de comer a mis hermanas ustedes hablen
Daka: esta bien gracias hijo
Murdo: y bueno ¿cómo están mis hijos?
Daka: ellos están bien Antonia y Aurora han crecido mucho una se parece mucho a ti, tiene tu carácter y las dos son hermosas, Sebastián es un bebe increíble me ha traído mucha alegría y milco es un hijo ejemplar
Murdo: me alegra escuchar eso, me gustaría conocer a Sebastián pero antes me gustaría preguntarte ¿me podrías dar una segunda oportunidad daka para estar contigo por el resto de mi vida juntó con mis hijos?, no quiero alejarme nunca de ti, yo te amo
Daka: pues sí quiero murdo, quiero intentarlo de nuevo, te amo
Murdo: espere tanto para que me dijeras esto de nuevo

Tome a daka de las mejillas y me hacer que a ella para darle un beso, cuando me separe nos quedamos dedicándonos miradas y sonrisas.