Hay días en los cuales no puedo creer lo afortunado que he sido por conseguir adorarte.
(Rebecca Cohen)

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Dedicado a EkaterinaKurae716 ❤

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[Día 30]

POV ALEC

-¿Alexander? -y esa voz... ¿era Magnus?

Magnus.

Las palabras se atascan en mi garganta. Siento más lágrimas resbalar por mis mejillas. Espasmos recorriendo mi cuerpo.

Lo recuerdo.

Magnus. Mi brujo y yo su cazador.

Magnus en cada pintura. En una vida vacía.

Y ahora... Magnus, lo último que escuche en una vida de sombras.

Lo recuerdo, lo he vivido, y ahora lo sé. Estoy muriendo.

POV MAGNUS

Está bien. No, nada está bien, pero no puedo derrumbarme. No ahora, mi hijo me necesita, Alexander me necesita.

-Está bien -mi voz me contradice-, está bien. Escucha, Max. Tenemos que centrarnos. Ve con Esperanza, vayan a lugares donde creen que pueda estar, pregunten a Isabelle. ¡Max! -tengo que moverlo bruscamente hasta que sus ojos me enfocan, mi voz se suaviza cuando lo hace, acaricio su mejilla-. Tu papá está bien, ¿sí? Lo vamos a encontrar. Lo vamos a recuperar. Sólo...por favor, tenemos que actuar con la cabeza fría, ¿sí?

-S-sí -él asiente varias veces antes de soltarme-. Y-yo...yo voy...

-Hey -antes de que pueda irse lo abrazo sólo una vez-, te amo. Todo va a estar bien.

Hay una media sonrisa antes de que salga de la habitación. -También te amo. A ambos, papá.

Tengo que aclararme la garganta para deshacer el nudo ahí presente. Y limpiarme las lágrimas que empezaban a acumularse. Él está bien, todo va a estar bien. No es el momento.

Cierro mis ojos, ignorando el dolor punzante en mi pecho al recordar la vez anterior que hice esto, cuando él estaba intentando...

No. No pienses en eso, Magnus.

Pero un sollozo se me escapa cuando lo veo. Tirado en la hierba mojada, frente a la tumba de su hermano, los labios azules, la piel de un color nada natural, su cuerpo temblando y...

Hago el portal a ciegas, sin abrir los ojos. Cruzo y sólo entonces me permito abrirlos.

-¿Alexander?

Es él. Llego, a grandes zancadas, hasta él. Está helado. Lo tomo en mis brazos, sus párpados aletean, pero no se abren. Sus labios siguen temblando, dientes castañeando, su cuerno sacudiéndose con espasmos contra mí.

-Alexander -mi mano acaricia su mejilla helada, magia brillando en la punta de mis dedos sin mi permiso.

Un jadeo me hace voltear. No había notado tres presencias aquí.

Isabelle Lightwood, que aparentemente venía llegando y se quedó inmóvil a un metros de su hermano, me mira boquiabierta.

No hay modo de explicar esto. Y no voy a dejar que la muerte me lo arrebate otra vez si puedo impedirlo.

Miro a las otras dos figuras, más cercanas. Jace Herondale y Max Lightwood.

El niño, ángel, moviéndose ansioso. Una mano de Jace en su hombro, los ojos dorados de éste me miran con desaprobación.

No me importa.

-Voy a hacerlo -le digo, no pregunto, mientras mi mano baja hasta el pecho de Alexander, la magia curando su cuerpo.

Si hubiera tardado un poco más.

Max sonríe cuando ve el color regresar a su hermano, un sonido ronco brotando de su garganta, y sus manos me buscan. Los labios arrogantes de Jace se curvan un poco, un asentimiento -Vamos a volver- parece ser su despedida.

-¿Magnus?

Y un suspiro de alivio puro se me escapa. Bajo mis labios hasta su frente ahora menos fría.

POV ALEC

-¿Magnus? -después de una hermosa vida a su lado, y una desolada sin él, no necesito verlo para saber que es él. Magnus.

Mi Magnus.

Mis manos acarician su rostro cuando lo encuentran. Él hace un sonido muy parecido a un ronroneo. Casi puedo sentir su sonrisa cuando habla: -Creí que te perdía de nuevo.

Estoy por responder que no volverá a perderme cuando otra voz se acerca: -¿Alec?

-¿Izzy? -me remuevo contra Magnus, tratando de sentarme, de volverme hacia donde su voz está.

Escucho y siento el susurro de Magnus en mi oído: -Ella sabe. Me vio.

No tiene que decirme a qué se refiere.

Izzy no podría entenderlo. No ahora. Y tengo razón: -Alec, ven conmigo -ella suena en shock, asustada, pero decidida.

Y no hay tiempo.

-Hazla olvidar -sé que puede-. Haznos olvidar esto.

-¿Qué? -el pánico en la voz de Magnus me rompe el corazón.

Izzy está ya casi sobre mí. La siento. -Haznos olvidar. Yo...yo sé quién soy, quién eres, quiénes somos... Sin importar qué...no vas a perderme.

He tomado mi decisión.

-¿Alec...? -su voz se hace más pequeña hasta desaparecer y sé que lo ha hecho.

Siento la caricia de Magnus en mi frente y lo digo antes de irme de nuevo: -Te amo, Magnus. Siempre. No me dejes ir.

No dejes de luchar.

No te rindas.

Y entonces me he ido.

POV MAGNUS

Con los dos cuerpos a cuestas cruzo el portal. Apenas está amaneciendo, los dejo en sus camas, y vuelvo al loft.

Llamo a Max.

<<Te amo, Magnus. Siempre. No me dejes ir.>>

Si pudiera leer entre líneas, y puedo, en él puedo, me está pidiendo no rendirme.

Él es así.

Era lo mejor para su hermana. Isabelle, en esta vida, no lo entendería.

Eso no lo hace más fácil.

Todavía tengo que esperar su respuesta y luchar sea cual sea.

Esperar un rato y buscarlo  en el Destino, mi destino.

CONTINUARÁ...

¿Recuerdan el inicio? ¿El día 30? 🙊 nos acercamos a ese momento!