Día 28 (continuación/5)
Magnus inclinó su cabeza, lo más cerca que pudo de hacer una reverencia mientras sostenía al bebé. —Estoy encantado de presentaros a todos—dijo—, a Max Lightwood.
Magnus sintió la mano de Alec, cálida como agradecimiento y seguramente como amor, recargarse contra su espalda. Bajó la mirada al rostro del bebé. El bebé parecía mucho más interesado en su biberón que en su nombre.
(Nacido para la noche eterna)
* * *
[Día 28]
POV MAGNUS
-¿Puedes imaginar lo hermoso que era? Un pequeño bebé de piel azul, adorable y regordete. Buscando algo de amor y aceptación a su corta edad.
Su expresión, si hay un reconocimiento o cambio en sus ojos, queda oculto tras sus gafas oscuras.
Hay un corto silencio antes de que él hable. -Supongo que en esos casos, como padres, sí existe el amor a primera vista. Incluso si ustedes no eran sus padres biológicos. No pudieron no ver y sentir al instante que les pertenecía y ustedes a él...
No puedo evitar pensar en eso. En cómo fue él quien se enamoró de Max en primer lugar.
Como él preguntó "¿Puedo sostenerlo?" y
el pequeño brujito azul había dejado de llorar apenas Alexander lo sostuvo.
Como aquellos ojitos azules, un poco más oscuros que los de Alexander, le devolvieron la mirada. Azul y azul. Y la sorpresa en los más claros, como si tampoco él entendiera por qué el bebé había dejado de llorar.
Pero, en el fondo, debía saberlo, o sentirlo. Sus corazones habían conectado. Él había nacido para encontrarse con nosotros. Para darnos aquello que merecíamos los tres, y más tarde Rafa: una familia.
Y nunca dejaré de agradecer su confusión. Cuando yo dije:
<<No pretendo dejar a un tierno niño brujo a las misericordias de la Clave. Hacemos esto, ¿no, Alec?>> y él, muy seguro, apartando la mirada del bebé sólo un momento dijo <<Sí. Lo hacemos>>, yo me refería a cuidarlo un tiempo, algo temporal, debí saber que la nobleza de Alexander daba para más y que ese tierno Arándanito nos robaría el corazón a todos, incluso a los Lightwood.
Justo como lo presencié aquel día. Jace tratando de tapar las grietas. Robert y Maryse peleando por quién era mejor. Alexander pidiendo que no lo rebotaran. Isabelle segura que no debía pelear por el bebé pues ella le daría la mamila...
-¿Magnus?
-Lo siento. Me perdí en...los recuerdos...
Su sonrisa es avasalladora. Comprensiva. Dulce.
Es la de mi Alexander. La que tanto he extrañado.
POV ALEC
-¡Dime más! -por alguna razón me encanta escuchar de sus hijos, de Max, de su familia.
Como ya dije, aquella calidez que suelo sentir sólo por mi familia, se extiende en mi pecho al oír a Magnus y más cuando son cosas así.
-Alguien lo había abandonado ahí, seguramente su madre no pudo con eso...
Eso.
¿Cómo puede alguien ver como un "eso", una carga, a un bebé, a un hijo?
-...su piel azul hacía evidente lo que era. No cualquiera podría con eso...
-Pero ustedes pudieron -algo arde en mi interior al hablar de esto-. Ustedes, no sólo porque tú eres un brujo y él era parte también de tu mundo. Yo sé que. incluso de haber sido...mundanos, lo habrían hecho. Tuvo suerte de encontrarlos.
-Sí -hay algo diferente en su voz cuando lo dice-, nosotros pudimos. Él más rápido que yo. Su confusión nos dio uno de los mejores regalos del mundo.
-¿Confusión?
Hay una clara sonrisa en su voz cuando habla: -Sí. Yo pretendía que lo cuidáramos temporalmente, por su seguridad, pero él creyó que yo hablaba de quedarnoslo. Cuando vi a toda su familia ahí... Oh, dios... Creí que sería el primer brujo en tener un infarto...
No puedo evitar reír ante el dramatismo de Magnus. -¿Fue incómodo?
-Más que eso. Fue inesperado... Y luego estaba su padre...
-¿Te hizo algo? -no puedo evitar tensarme.
-¿Qué? No -es ahora él quien ríe-. No. Fue lo que dijo. Él...
-¿Qué dijo? ¿No estaba de acuerdo?
-Oh, claro que sí. Estaba más que feliz. Apoyaba incluso la idea de que yo lo hubiera...hecho...
-¿Cómo que hecho?
¿Quién demonios piensa algo así?
-Sí. Así como con...magia. Él dijo que no pudo evitar notar que el bebé era azul, igual que los ojos de...Gideon, y mi magia y...
-¡Qué absurdo!
Él suelta una risita. -Lo sé. Pero fue bueno. Nos unió esa pequeña cosita azul. Cambió nuestro mundo.
-Lo amas -no era una pregunta.
-Claro que sí. Tanto como a Rafa. Ambos son mis hijos. Nuestros.
Nuestros.
-Eso suena hermoso...
POV MAGNUS
-...nuestros -lo digo a propósito, aunque él no lo entienda.
-Eso suena hermoso, Magnus. Fueron tan afortunados los cuatro.
-Lo sé. Lo fuimos...
Lo fuimos, mi amor.
Lo somos.
CONTINUARÁ...
sé que hay capítulos más cortos que otros, quienes escriben entenderán que a veces hay más tiempo, inspiración y ganas que otras 🙈 lo siento, sigo leyendo sus comentarios aunque no conteste siempre ❤
y el Favorito pasó a hoy porque ayer escribí el OS Golpe de suerte y el inicio de Mi Único 🙌
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