-Pero no hay mentiras en tu cara. Tengo en sentimiento de que todo lo que dices es sincero.
Alec se inclinó hacia adelante. -¿Quieres salir conmigo?
Magnus parpadeó. –Ves, eso es a lo que me refiero. Sincero.
Alec se mordió el labio y no dijo nada.
(Extra de cuidad de hueso: Beso)

* * *

[Día 23]

POV MAGNUS

Veo como gana su indecisión y su miedo cuando suspira y me pregunta: -¿Qué me contarás hoy?

No puedo evitar sonar un poco decepcionado, pero luego recuerdo que yo dije que no lo presionaría. Así que mejor pienso, ¿qué podría contarle? Algo importante para ambos…

-Pues…podría… No sé… Hablarte de…de la pelea, de cuando usamos aquella runa, cuando me besó frente a todos y…

Y entonces él hace una de esas cosas típicas de él que no deberían sorprenderme, pero lo siguen haciendo:

-¿MAGNUS.QUIERES.SALIR.CONMIGO? –lo dice sin respirar entre palabras, casi gritando, demasiado rápido.

Me quedo un momento sin saber qué decir. ¿Realmente me acababa de pedir esto, después de haberme rechazado varias veces?

Cuando miro hacia él, tiene su rostro entre sus manos y está, literalmente, temblando.

¿Era de miedo, tal vez? No podía saberlo, pero no me gustaba verlo así.

Así que hago algo de lo que tal vez me arrepienta luego.

POV ALEC

Apenas lo digo, siento como mi rostro arde, lo cubro con mis manos esperando que no lo note, pero éstas, mis piernas y todo mi cuerpo, empiezan a temblar…

No debí haber hecho eso. No preguntarlo así. Ahora Magnus no dice nada, y si acepta, será por pena.

Siento un nudo en mi garganta, un vacío en el estómago. Esto es demasiado para ser simples nervios o miedo al rechazo. ¿Por qué ha de afectarme tanto Magnus, un hombre al que conozco hace poco más de tres semanas?

Quiero pedirle que lo olvide, que no era en serio, que no he dicho nada, pero las palabras no me salen.

-Mag…

Y entonces lo siento, su calor, su olor, su presencia, en un segundo acorta la poca distancia que nos separaba. Siento sus brazos envolviéndome y sus labios dejando un beso fugaz en mi cuello.

Seguro era ahora cuando me decía que no.

-Sí. Claro que sí, para ti siempre será un sí…

Casi podría jurar que ya antes me ha dicho algo así. No sé por qué me sucede esto con él, esta especie de dejavus. Pero la emoción que siento, el ritmo acelerado de mi corazón, me impiden pensar en otra cosa que no sea ese “sí”.

¡Me ha dicho sí!

Y hace…tanto no me sentía tan feliz, tan emocionado, que no sé qué decir.

-Sólo dime que no te has arrepentido, Alexander. Porque tu silencio me está asustando…

POV MAGNUS

No pretendo obligarlo a recordar, me salen las mismas palabras de hace tanto tiempo sin darme cuenta: “Para ti siempre será un sí…”

Siento como su cuerpo, que se había tensado y relajado con mi abrazo, ahora vuelve a tensarse, y no dice nada.

-Sólo dime que no te has arrepentido, Alexander. Porque tu silencio me está asustando… -y de verdad me asustaba-, aunque si lo has pensado mejor y crees que lo mejor es no salir conmigo de momento, yo entiendo…

Claro que no lo hacía, pero había prometido ser paciente y no presionarlo.

-¿Alexander?

-¿Es que tú…tú no quieres? S-Sé que…que te dije varias veces ayer que no, y debe parecerte extraño que hoy te lo pida yo… -empieza a removerse, tratando de zafarse de mi abrazo-, si tú no quieres… Magnus déjame ir…

Eso último me hace reír, y él hace un ruidito indignado que sólo logra enternecerme.

-Pero si te estoy diciendo que sí… ¡Sí quiero! Quiero salir contigo…

Lo aprieto un poco más contra mí, y él se queja: -Mags…no puedo respirar… Y no grites, la gente nos ve…

¿Qué…?

Sí, varios curiosos nos veían. Entre ellos, Max y Esperanza, con los pulgares en alto.

POV ALEC

Puedo sentir varias miradas cuando Magnus grita que sí, quisiera gritar yo también de emoción, pero puede más mi pena.

-Sí quiero –me repite en un susurro que eriza mi piel, giro mi rostro, dándome cuenta demasiado tarde que sus labios estaban en mi mejilla, y nuestros labios se encuentran, se rozan unos solos segundos que despiertan las sensaciones que dormían en mí desde que nos habíamos besado…

…parecía que hiciera tanto de esos besos. Y ahora me doy cuenta que los extraño, los necesito como un adicto, como si no hubieran sido solo tres, como si hiciera ya años, siglos, vidas, que nuestros labios se conocieran…

Empiezo a ponerme nervioso y, aprovechando que él tampoco se esperaba ese beso accidental, uso mis manos para separarme de él…

-Eh… -tengo la garganta seca, me la aclaro para poder seguir-, …entonces, ¿qué me ibas a contar hoy? ¿Una pelea y un beso?

La verdad es que dudo que pueda ponerle atención, cuando yo me siento como si flotara, ya una vez habíamos salido, pero no había sido una cita…

¿Aunque esto era una cita?

-¿No quieres mejor hablar de nuestra cita? –ok, sí era una cita-, ¿ya tienes un plan?

-N-No –no quiero tener que decirle que todo está en manos de Izzy-, ¿cómo puedo tener un plan si no sabía si dirías sí?

-Yo nunca te diría que no… A nada, absolutamente nada…

-¡Magnus! –su tono me hace ruborizar-, sigue con tu historia porque no pienso reponerte este día ni el de mañana…

-Eso es trampa, Alexander. Pero está bien…

CONTINUARÁ…

Heeey! Extrañé escribir aquí… me extrañaron un poquis?
En fin, si leyeran mis notas nos evitaríamos los malos entendidos… como que me pidan que actualice cuando lo hago diario y cuando no les aviso, o que digan que no quiero llegar al día 30… como dicen eso? He seguido el ritmo de siempre y además ya dije que habrá continuación para quien quiera leerla!

Pasando a otros temas, ya está la actualización de Con recuerdos, el Alternativo que esperaban, y Aprendiendo juntos… esta semana seré mala y no les preguntaré qué historia quieren, porque la mayoría han quedado en suspenso, así que los sorprenderé actualizando sin avisar! Y en estos días subo la continuación de Loco amor, por si la esperan…