Aquellos silencios preñados de expresión, que confundían en un suspiro dos almas dispuestas a entenderse.
(Alejandro Dumas)

***

[Día 10…continuación]

POV ALEC

Magnus comenzó a contarme la historia de su amiga, con esa voz salida como de en sueño. Una voz que me hacía anhelar cosas que yo nunca podría tener, con él ni con nadie.

-Tessa, como te dije, era media bruja, pero ella no sabía, fue secuestrada por dos mujeres que querían aprovecharse de su poder…

-¿Qué poder? ¿Te refieres a su magia? –insisto, real o no, la curiosidad siempre me gana.

-No. Ella es…especial, ella puede tomar la forma de otras personas si cuenta con un objeto que le haya pertenecido…

-¡¿Cualquiera?! –pregunto tal vez demasiado alto, demasiado intenso, demasiado interesado.

-Eemm… básicamente… -me contesta Magnus, su voz con una pizca de duda e inseguridad.

-No, quiero decir cualquiera, de verdad, incluso alguien… -esto seguramente no sea correcto y seguramente ni es real, pero…-. Alguien, por ejemplo ¿muerto?

Magnus se queda en silencio un momento. Debí saberlo. Esto no es real. Él sólo juega conmigo. Entonces él contesta: -Sí. También muertos… Hay… Hay… -su voz siempre segura empieza a flaquear-. ¿Hay alguien a quienes hayas perdido y quieras "ver" de nuevo?

Sí. –No. Yo… sólo… sólo preguntaba por curiosidad…

-¿Estás seguro? –insiste Magnus-. Yo estoy seguro que a Tessa no le importaría…

-¡Basta, Magnus! –lo detengo molesto y herido, una cosa es jugar conmigo y con mi vista, pero prometerme que podría traerlo a él de vuelta, que podría escucharlo, abrazarlo, pedirle perdón… Era una burla insoportable-. Basta, por favor. Yo…he decidido escucharte los treinta días y hacer lo que esté en mis manos para ayudarte, pero…no abuses, por favor, no me hagas arrepentirme...

-Alexander, sé que es difícil, pero… ¿por qué no intentas creerme? Si me dieras la oportunidad de demostrarte que todas mis historias son reales…

-Basta, por favor –mi voz se rompe y es que de verdad, de verdad, quisiera creerle.

Él se queda en silencio. Un silencio incomodo, como si tratara de hacerme entender sin palabras, pero supiera que no lo lograra. Me siento mal por él, no debería pero lo hago, sé que han roto más de una vez su corazón, lo siento, me he vuelto un experto en corazones rotos desde lo de Esperanza. Tal vez sea por eso que mi corazón se ablanda por él, es simple solidaridad entre corazones rotos, no hay sentimientos de por medio. No los hay.

Y es por eso, mera solidaridad, que vuelvo acabo yo con el silencio. –Dijiste que tuvo dos amores, ¿cómo es eso posible?

-Ella…fue rescatada de estas mujeres por un par de cazadores de sombras, James Castairs y Will Herondale… -de repente ríe con este último nombre y algo que no logro descifrar, una sensación de incomodidad, se instala en mi pecho y desciende hasta mi estómago-.  Will –repite con voz suave y aquella sensación crece-. Creo que te habrías llevado bien con él, era un alma rota y tú amas recomponer almas así…

Un gruñido se me escapa y no entiendo por qué, pero creo que Will no es precisamente la clase de alma que me gusta. –Si tú lo dices…

-Podría asegurarlo. Will necesitó conocer a Tessa para poderse salvar, para dejar de autolastimarse…

-No sé cómo podría haberme caído bien alguien que se hace daño a sí mismo…

-No es que él quisiera. Él pensaba que tenía una maldición y sólo haría daño a quien amara, así que alejaba a todos y cerró su corazón por lo mismo…

-Me parece que más que sufrir él, seguramente hizo sufrir a los demás…

-¿Por qué hablas así, Alexander? –me dice Magnus sonando un poco molesto-. Sé que no eres así, tú intentas comprender a las personas, resaltar su lado bueno, en eso eres como su parabatai, Jem, el otro gran amor deTessa… Así que no entiendo el que lo juzgues sin conocer su historia…

-Tú no me conoces, Magnus, no puedes pretender que sabes cómo soy cuando hace unos días ni sabías de mi existencia. Y no estoy seguro de que la historia de este Herondale sea de mi agrado, casi podría asegurarte yo que no me habría caído bien…

Magnus no dice nada. ¡Oh dios! ¿Qué dije? Creo que esta vez me pasé, es de su amigo de quien estoy hablando… Seguro se ha enojado, aunque qué me importa a mí si se enojó.  Entonces me dice, de repente: -Me tengo que ir.

Suena apresurado, ni siquiera se despide, no agrega nada más. Ya no lo siento, y sé que se ha ido. ¿Y si no vuelve mañana? Habré fallado a mi promesa de ayudarlo y todo por un arranque de… ¡lo que sea que haya sido!

POV MAGNUS

No puedo creer las palabras de Alec, él no es así, no juzga a las personas, ¿qué le pasa ahora con Will? Y si supiera que lo conozco más que él mismo, que fue mío toda una vida y yo fui suyo. Entonces mi celular vibra y leo el mensaje en silencio: <<Max ha llamado ya diez veces y no exagero. Ven ya mismo. Catarina>>.

-Tengo que irme –le digo a Alec, antes de desaparecer casi corriendo para llegar al callejón y hacer el portal. Max es capaz de venir si no contesto otra llamada más.

Llego agitado a la casa, el teléfono está sonando de nuevo, Tessa y Catarina lo ven como si fuera una bomba nuclear y el sólo tocarlo desencadenara una catástrofe. Tessa suspira en cuanto me ve y Catarina me lanza el aparato con un gruñido.

<<-¿Hola? –contesto con miedo. ¿Cómo es que le tengo miedo a mi hijo? Esto debería ser al revés.

-¡Dónde estabas, Magnus Bane! Ayer estabas deprimido a morir y hoy no me contestas, por un momento pensé que habías intentado suicidarte y Cata y Tess mentían…

-¡Max! ¿Cómo se te ocurre siquiera? Yo nunca haría…

-Papá, no me hagas recordarte, nadie quiere recordar aquella vez…

-Fue un accidente…

-Ajá, claro. Como sea, ¿dónde estabas? Un corazón roto sólo se cura de una manera y no quiero pensar que le estás siendo infiel al recuerdo de papá Alec…

Tessa y Catarina, que ahora lo noto están a mi lado escuchando, me miran con los ojos muy abiertos, la boca de Tessa formando una pequeña O, a la vez que Cat se va lentamente. Gran ayuda…>>

CONTINUARÁ…

Perdón, me pasé unos cuantos minutos, en mi defensa (les cuento algo que no les importa, pero explica mi tardanza), ayer (domingo) era la fiesta de cumpleaños de mi hermana (quienes me tienen en Facebook saben que me disfracé de princesa y todo jajaja), en fin, agradezcan que me hice un espacio para escribir…

Yyyy… ¿se esperaban esa reacción de Max? ¿Y la de Alec? ¿A dónde se fue nuestro Alec comprensivo? ¿Ahora que contestará Magnus? Chan chan chan chan…

Los leo al rato aquí y en “Mi inmortalidad por ti”, buen inicio de semana 😊 (puede que el siguiente sea el extra de Esperanza y Alec 🙊🙈)