Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Tsukasa Yugi [El Loquito]

《¤》《¤》《¤》《¤》《¤》《¤》《¤》《¤》《¤》

Juego Perverso

La academia Kamome estaba envuelta en un silencio inquietante cuando el sol comenzó a ocultarse, dejando paso a la penumbra del anochecer. La luz tenue filtrándose por las ventanas creaba sombras alargadas en los pasillos, y el aire tenía un aroma a nostalgia y peligro. Sabías que no debías estar allí a esas horas, pero algo—o alguien—te llamaba.

Un susurro. Una risa juguetona.

Tu corazón se aceleró. Lo conocías. Lo habías sentido antes.

Yugi Tsukasa.

El rumor decía que su espíritu acechaba la escuela, que era un ser travieso y cruel, un niño demoníaco con una sonrisa encantadora y ojos llenos de locura. Muchos le temían, pero tú... tú estabas atrapado en su red. Había algo en él que te hacía volver, incluso sabiendo que no era seguro.

—Sabía que vendrías~ —una voz cantarina resonó detrás de ti.

Te giraste de golpe, encontrándote con él. Flotando, con su característica sonrisa burlona y sus ojos dorados brillando con diversión.

—Tsukasa… —susurraste su nombre, sintiendo un escalofrío recorrer tu espalda.

—¿Me extrañaste? —preguntó, inclinando la cabeza como si fuera un cachorro curioso.

No respondiste. No porque no quisieras, sino porque su presencia siempre lograba dejarte sin palabras.

—Oh, no te quedes callado~ —canturreó, acercándose demasiado. Demasiado. Su rostro apenas a centímetros del tuyo, su aura oscura envolviéndote—. Me hace sentir solito.

Sabías que no debía jugar con él. Tsukasa no era como su hermano, Hanako. No era amable. No era tierno. Era caos, destrucción, peligro.

Pero entonces, ¿por qué tu corazón latía tan fuerte cuando estaba cerca?

—Sigues viniendo a verme, pero nunca respondes cuando te pregunto por qué —susurró, su voz baja y melódica—. ¿Acaso quieres que te haga mío?

Sus dedos se deslizaron por tu muñeca, un toque gélido que erizó tu piel.

—No es eso… —intentaste decir, pero tu voz tembló.

—¿Ah, no~? —rió, con ese tono travieso y perverso—. Entonces dime… ¿por qué tiemblas?

No supiste qué responder. Era miedo. Era emoción. Era una mezcla de ambos.

Y Tsukasa lo sabía.

—Eres tan divertido~ —susurró, y antes de que pudieras reaccionar, su mano tomó tu rostro, obligándote a mirarlo. Su sonrisa se ensanchó, sus ojos brillaban con emoción pura—. Me gustas, ¿sabes? Me gusta cómo luces cuando tienes miedo de mí.

Tu respiración se entrecortó cuando sus labios se acercaron a los tuyos, sin tocarte aún, como si disfrutara del momento de tensión.

—Dime, ¿quieres que te bese?

Su voz era un veneno dulce, un juego peligroso del que ya no podías escapar.

Y lo peor de todo… es que tampoco querías hacerlo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro