3🌸⃤.ೃ࿐
Ya ha pasado casi un mes desde que decidí intentar arreglar el portal Kraang, y desde entonces he tenido que ir recolectando las piezas de la basura y de lugares de repuesto a bajo costo. Todo esto mientras intento que mis padres no se den cuenta, y a pesar de lo mucho que ha costado, poco a poco he logrado recolectar todas las piezas que necesito para arreglar completamente el portal.
Luego del colegio, me apresuré a dirigirme a casa rápidamente para poder seguir con los arreglos del portal, pero entonces sentí una mano en mi hombro haciendo que me detuviera y girara para ver quién era.
—¿Tan rápido te vas? —Sus ojos verdes brillaron como siempre lo hacen. Solté un suspiro de alivio.
—Perdón, Zack, tengo algunas cosas que hacer y estoy apurada.
Sus cejas se alzaron ligeramente para luego soltar un bufido. Pasó su brazo por encima de mis hombros con pereza.
—Pff, qué aburrido, y yo que te iba a invitar a mi casa a jugar videojuegos.
—Je, bueno, otro día será— Le di un suave golpe a modo de juego. Luego miré a mi alrededor confusa— ¿Y los demás?
—Luke tenía karate, Jenny fue a acompañar a su abuela al médico y Zoe se fue con su casi algo— Expresó esto último con algo de burla. Yo solo me limité a verlo con una mezcla de gracia y desaprobación. En eso, recordé una duda que llevaba tiempo pensando y creí que era un buen momento de preguntar.
—Ah, Zack, quería hacerte una pregunta.
—¿Hm?
—Cuando pasó lo de la apuesta del drenaje...— Al decir esto pude notar cómo el cuerpo de Zack se tensaba, lo cual hizo que me sintiera mal por abordar el tema— Quería saber ¿Cuánto tiempo estuve ahí abajo?
Zack detuvo se detuvo y me miró algo extrañado por la pregunta, mas no cuestionó por qué la hice. Pasó su mano por su cabello alborotado mientras suspiraba con pesadez.
—Ah... Mmh, veamos... fue hace un tiempo, así que no puedo decir exactamente cuánto, pero...— Alzó la mirada al cielo, como si estuviera buscando la respuesta entre las nubes— Diría que fueron más o menos diez minutos.
—¿Diez minutos?— Pregunté más para mí que para él. No puedo decir cuánto fue que estuve allí dentro exactamente, pero estoy segura de que no fueron ni de cerca diez minutos, sino más bien una o dos horas...
Recuerdo que en la serie habían dicho que el tiempo pasa diferente en la dimensión X, tal vez sucede lo mismo en este caso...
—Sí. ¿Por qué lo preguntas?— Habló Zack sacándome de mis pensamientos. Alcé la mirada y me encontré con una mezcla de preocupación y confusión en su mirada.
—Oh, uh... Bueno, es que no tenía muy claro eso y perdí la noción del tiempo, así que... sí.
Zack me observó incrédulo, pero no me cuestionó al respecto, cosa que agradecí nuevamente. Seguimos caminando y charlando hasta que llegó el punto en el que nos dividíamos. Él se despidió de mí, pero antes de que se fuera, lo tomé del brazo, haciendo que volteara.
—¡Por cierto! Casi lo olvido, este viernes tengo algo que hacer, pero no quiero que mis padres lo sepan, si les digo que me quedaré a dormir en tu casa ¿Podrías respaldarme?— Hice mi mayor intento en hacer ojos de cachorrito mientras él me observaba sorprendido.
—¿...Quieres que les mienta a tus padres?— Dijo casi indignado, me encogí en mi lugar algo avergonzada.
—Es... una mentirita piadosa, te juro que no es nada malo, solo... necesito confirmar algo.
Desvié la mirada, incapaz de verlo a los ojos mientras decía esto, estaba totalmente dispuesta a rogarle si era necesario, pero antes de pudiera hacerlo sentí una mano posarse en mi cabeza, cuando levanté la mirada pude ver que no estaba contento, pero tampoco estaba enojado.
—...Bien— Mi rostro se iluminó por completo e iba a abrazarlo cuando puso su dedo índice en mi frente, deteniéndome— Pero, luego tendrás que decirme adónde fuiste y si sucede algo me llamarás ¿Ok?
Mis ánimos bajaron al escuchar sus condiciones, sobre todo porque sabía que no me creería aunque se lo dijera, pero solo me pude limitar a asentir resignada.
—Bien, te lo prometo— Y antes de que se arrepintiera o agregara más condiciones me alejé de él y comencé a caminar hacia mi casa— ¡En fin, te lo agradezco, Zack, te debo una, nos vemos mañana, cuídate!
Lo último que pude ver fue su rostro teñido de preocupación antes de voltear por completo y seguir mi camino.
"Lo siento, Zack"
Llevo toda la tarde trabajando en este maldito aparato y aún no he podido conectar todos los cables del portal.
—¡Aaagh! Maldita porquería alienígena.
Apoyé mi mentón en el colchón mientras observaba el aparato a medio armar. Ya había conseguido reemplazar la parte abollada con un pedazo de chapa y había reparado casi todos los cables, pero aún había un maldito desgraciado que no me la ponía fácil.
—Vamos... Solo déjame conectarte con tu otra parte, ¿sí?— Le dije como si de una persona se tratase, luego con una pinza de cejas y mucha paciencia, lo fui enganchando lentamente.
—¡Y... listo! ¡¡Sí, lo logré!!— Grité ante la alegría, abrazando y besando el portal Kraang.
—¡¡T/n no grites!!
—Ay... ¡¡Perdón papá!!— Grité en respuesta para luego recostarme aún abrazando el aparato alienígena, lo alcé en brazo y lo observé orgullosa.
—Ahora solo queda ver si funcionas, pero para eso tengo que esperar hasta el viernes...— Suspiré al mismo tiempo que apoyaba el portal en mi pecho y miraba el techo. Solo tres días, y podría volver a viajar a aquel alcantarillado— Solo tres días...
Para mi sorpresa, esos tres días pasaron bastante rápido, hasta que llegó el tan anhelado viernes. Me encontraba bastante impaciente mientras miraba la hora en mi habitación. Le había preguntado a mis padres luego de hablar con Zack si podría quedarme en su casa, a lo cual ellos me contestaron que sí, ya que conocían a los padres de Zack desde antes de que naciéramos y confiaban en ellos más que en mí. Desde entonces me dediqué a acomodar las cosas que llevaría.
—Bien... Veamos: Mi celular, por supuesto, una libreta con un lápiz, comida, gasas, un bastón expandible...— Lo último no recuerdo ni cómo lo conseguí, pero uno nunca sabe. Luego de revisar todo y ver que no me faltaba nada, cerré la mochila y me alisté para irme. Me puse un gorro y me guardé una mascarilla en el bolsillo para pasar desapercibida una vez estuviera allí.
Salí de mi habitación y bajé por las escaleras, me despedí de mis padres con un fuerte abrazo a cada uno y salí de mi casa camino al lugar donde comenzó todo, el alcantarillado embrujado.
Me detuve en la entrada de este, la oscuridad se apoderaba del lugar debido a que ya estaba anocheciendo. Un escalofrío recorrió mi columna, pero no permití que eso me acobardara ahora, así que prendí la linterna de mi teléfono y comencé a caminar hacia su interior. Una vez estuve lo suficientemente adentro, saqué el portal Kraang de mi mochila y lo sostuve con ambas manos.
—Bien, es el momento de la verdad. Gasté mucho tiempo en ti, así que espero que no me falles.
Tomé un profundo suspiro y toqué el botón del centro mientras contenía la respiración. Al principio no hizo nada, pero al cabo de unos segundos unas luces violetas se encendieron. Luego se dividió en tres partes, haciéndose presente ese portal color violeta protagonista de mis pensamientos en estas últimas semanas, retrocedí un poco. Tragué en seco al ver lo imponente que se veía, mas ya era tarde para echarse para atrás, así que tomé mi mochila con fuerza y comencé a caminar hacia el portal. Cuando estuve a punto de atravesarlo, cerré mis ojos con fuerza sin detenerme...
Lo único que sentí fue una pequeña brisa que hizo que los pelos de mi nuca se erizaran. Lentamente abrí mis ojos para encontrarme nuevamente con ese maldito alcantarillado. Solté el aire que llevaba conteniendo y giré para ver el portal, en un inicio pensé en guardarlo para llevarlo conmigo, pero luego se me ocurrió dejarlo en caso de que tuviera que huir. Para asegurarme de que recordaría el camino, tome mi celular e hice un punto en una app de marca pasos que tenía por aburrimiento. Hecho esto, prendí la linterna de mi celular, notando que mi mano ahora se veía diferente, como si fuera sacada de una caricatura.
—Bueno, si estaba buscando una confirmación, sin duda esta es una...
Dije estupefacta mientras observaba mi mano en todos los ángulos posibles. Después de unos segundos, sacudí mi cabeza, diciéndome a mí misma que no era momento para pensar en eso, y comencé a caminar por el pasillo. El olor era repugnante, pero logré acostumbrarme al cabo de dos horas caminando por esos pasillos interminables. Mis pies dolían y estaba a nada de darme por vencida cuando noté una gran entrada. Al asomarme, pude notar un sofá junto a una televisión y muchas cosas más que le daban una sensación acogedora.
—Santa... Mierda.
Susurré al saber dónde me encontraba. No podía creer lo que estaba viendo, y menos el haberlo encontrado tan rápido. Luego de inspeccionar y confirmar que no había moros en la costa, salí lentamente y me adentré en la guarida. En un inicio traté de mantenerme lo más silenciosa posible, pero luego mi fanatismo pudo conmigo y comencé a observar todo con gran admiración. Realmente estaba en su guarida... ¡Esto es increíble! Caminé hasta el sofá y observé unas revistas que estaban tiradas en este.
—Las mejores series del momento...
Esto me pareció irónico considerando que ellos en sí eran una serie. Sonreí levemente, pero esta sonrisa no tardó en desaparecer al notar quién estaba en la portada.
—¿Esa soy... Yo?
┍━━━━━━━━━━»•» ✨ «•«━┑
Holiii, perdón por no subir esta parte antes, me olvide que tenia wattpad xdd.
★
Bueno, por lo visto Zack ya sospecha de algunas cosas.... Y parece que la prota se cruzó con algo que no debería haber visto.
★
¿Ustedes creen que fue buena idea dejar el portal en el alcantarillado?
Solo el futuro lo sabrá...
┕━»•» ✨ «•«━━━━━━━━━━┙
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro