I

[Monologo de Blu]

Ayudar a las aves y demás animales ha sido una de mis muchas virtudes que he tenido y que me ha caracterizado a lo largo del tiempo. Me he fortalecido en ese aspecto, pues antes de todo, tenia miedo de dejar mi zona, de qué algo me pudiera pasar como aquella vez cuando era un pequeño polluelo.

Pero cuando fui capturado por esos traficantes de aves, decidí dejar de lado ese miedo y ayudar a las aves que no podian hacer nada. Yo era diferente a ellos, esa es la verdad, pero fue tan necesaria para poder liberarlos a todos.

Y ahora eso mismo estoy haciendo con los demás animales del Amazonas, los estoy ayudando para que puedan estar a salvo y tranquilizarse, pues seguramente muchos de ellos aún siguen asustados luego de vivir algo que pudo haberlos matado. No tengo idea de cuantos taladores estuvieron por estas zonas, pero se que estas aves necesitan mi ayuda.

Pero gracias a Dios de que ahora mismo no estoy solo en esto, pues ahora estoy siendo acompañado por una guacamaya que en lo poco que la he visto, me ha dejado sorprendido.

"Esmeralda"

Hace apenas un día, conocí a Esmeralda, y no se como lo podria explicar, pero ya siento que ha dejado una huella profunda en mi corazón, una huella que refleja que puedo contar con ella en estos momentos, siento que ella podría considerarse mi gran amiga, aunque aún no hemos formalizado nuestra amistad, pero ya siento que es parte de ella.

Ella es tan valiente y decidida. La forma en que se mueve entre los árboles, con esa gracia natural, me recuerda que no estoy solo en esta lucha. Juntos, estamos haciendo algo grande. No solo estamos rescatando aves; estamos creando un refugio para aquellos que han sufrido tanto. Con ayuda de Linda y Tulio, el refugio para ayudar a muchas aves ha comenzado. Cada vez que veo su sonrisa mientras ayuda a un pequeño animal herido, siento una chispa de esperanza renacer en mí.

Esmeralda ha traído consigo una energía nueva, una luz que ilumina incluso los rincones más oscuros de este bosque. Me ha demostrado que no hay que tener miedo de salir de nuestra zona de confort. Me recuerda mucho a mi cuando decidí dejar mi miedo hacia atrás y enfrentarme a los humanos por mi cuenta y conocimientos. Si ella puede enfrentarse a sus propios desafíos, yo también pude enfrentar los míos.

A veces me pregunto cuántos animales todavía están asustados y necesitan nuestra ayuda. Pero con Esmeralda a mi lado, siento que podemos lograrlo. Juntos, somos más fuertes. Ella me ha mostrado que la empatía y la compasión son herramientas poderosas para sanar no solo a los demás, sino también a nosotros mismos.

Así que aquí estoy, agradecido por su presencia y por todo lo que hemos logrado en tan poco tiempo. Gracias, Esmeralda. Gracias por ser mi compañera en esta misión y por recordarme que siempre hay esperanza, incluso después de las tormentas más oscuras.

¡Vamos a seguir ayudando! ¡Por cada ave, por cada animal del Amazonas! ¡Juntos lo lograremos!

II

[Perla]

Ahora mismo nos encontrabamos en un nuevo lugar del Amazonas, un lugar que la verdad es muy hermoso, incluso me hizo recordar un poco a los árboles de Río, pero en este caso, tenian algo diferente, no sabía como describirlo, pero se sentía mucho más salvaje que allá, pues aquí no había ninguna ciudad.

Nos estabamos quedando en una zona muy reconfortante mientras veiamos todos los de la tribu a los pequeños jugar entre sí, sacandome una pequeña sonrisa en mi rostro.

Mi padre los estaba observando con una gran alegría mientras Roberto se encontraba a su lado tambien inspeccionando y verificando que ningun niño saliera del lugar para evitar algún problema.

- ¿Querida?

La voz de mi tía Mimi hizo que volteara a verla, pues se encontraba ahora a mi lado.

- Hola tía ¿Sucede algo?

- No del todo, pero aún así me estoy preocupando.

Las palabras de mi tía sonaba tanto de tristeza como de seriedad.

- ¿Qué pasa tía?

- Fijate en Bia.

Al mencionar el nombre de mi hija hizo que rapidamente viera a donde se encontraba en estos momentos.

Pude ver como Tiago le lanzaba un poco de agua al rostro de Bia, haciendo que sonriera, pero pude visualizar que rapidamente su sonrisa desaparecia para dar paso a una mirada de tristeza.

- No me digas que otra vez.

- Si, al parecer otra vez se encuentra en ese estado.

No puede ser que nuevamente este triste en estos momentos, solamente han pasado 3 dias desde que viajamos y aún así ella tiene el rostro de no querer estar aquí.

- Bia...

- Querida, se nota que tu hija no está cómoda con este viaje.

- ¿Por qué no se une a los demás?

Mis preguntas salian a flote al ver a mi hija en ese estado que solo provocaba que mi corazon se sienta intranquilo al ver a mi pequeña de esa manera.

El suspiro de mi tía se hizo notar, haciendo que la volteara a ver con algo de preocupación

- Desde que llegamos aquí, no es la misma. La ausencia de Blu le pesa más de lo que parece. A veces, los niños llevan su tristeza en el corazón sin que nosotros lo notemos.

De nuevo con lo mismo, se que Blu no tenia que venir a este viaje, pero quiero olvidarme de todas esas discusiones que hemos tenido, solo quiero olvidar todo esto, pensé que almenos Bia y los niños lo comprenderían, pero solo Bia era la que estaba así conmigo.

- Pero está bien, ¿no? Solo necesita tiempo para adaptarse más y divertirse en este viaje. Siempre ha sido fuerte.

Esa era mi esperanza en todo esto, pero veo que mi tía me mira con tristeza y pude notar algo de seriedad en sus ojos.

- El tiempo no siempre cura las heridas, querida. A veces, es necesario actuar antes de que algo malo suceda. La tristeza puede convertirse en una sombra que la siga si no la abordamos ahora.

- ¿Qué quieres decir exactamente?

Mire a mi tía con ojos de molestia, no es que quiera ser alarmista, pero no entiendo a que quiera llegar mi tía con todo esto. Ella comenzo a suspirar mientras veia a Bia con mucha ternura.

- Ella necesita sentir que tiene a su padre cerca, aunque esté lejos. La tristeza puede ocultarse bajo una sonrisa, y si no la atendemos, podría convertirse en un peso demasiado grande para ella.

Las palabras de mi tía me dejaron pensativa por unos segundos, haciendo que mi mirada volviera a la de mi hija quien se encontraba mirando el suelo.

- No había pensado en eso. He estado tan ocupada tratando de hacer que este viaje sea especial para ella que olvidé lo que realmente necesita. Pero aún así...

- Lo importante es que tomes esto en serio. La felicidad de Bia depende de cómo manejemos esta situación. Es tu responsabilidad como madre cuidar de su corazón y ayudarla a navegar por sus emociones.

- ¿Tengo que escuchar lo que me pide ahora mismo? Quiero ayudar a mi hija, pero eso implicaria a que tiremos por la borda el viaje que era para relajarnos.

Las emociones se hacian presentes en mi, por un lado queria seguir con el viaje para poder pasar tiempo de calidad entre todos, pero tambien esta el hecho de que mi hija necesita de su padre, sin él parece que anda en un rumbo directo hacia la depresión. De repente sentí el ala de mi tía en mi hombro.

- Lo importante es que tomes esto en serio. La felicidad de Bia depende de cómo manejemos esta situación. Es tu responsabilidad como madre cuidar de su corazón y ayudarla a navegar por sus emociones.

Mire a mi hija nuevamente haciendo que pequeños recuerdos vinieran a mi cabeza al ver como ella se divertia más con Blu.

- No quiero que sufra ni un día más. Pero... ¿Por qué no puede simplemente dejar eso atrás y concertrarse por lo menos aquí? ¿Qué hago?

- La clave está en crear un espacio seguro para ella. Pregúntale cómo se siente y escúchala sin juzgar. A veces solo necesitan saber que estamos ahí para ellas, dispuestas a escuchar sin interrumpir ni tratar de resolver inmediatamente sus problemas.

Las palabras de mi tía tenían mucho peso en mí, pero aún me sentia intranquila, pues Bia demostró que no quería estar cerca de Roberto, antes se divertían pero ahora lo mira con seriedad, como si pensara algo más.

- No lo sé tía, tal vez ella no me quiere expresar esto nuevamente, no desde que le dije que no podiamos regresar a la tribu.

- Es natural tener miedo a abrirse, ella siente miedo de que no la escuches nuevamente, especialmente cuando hay tanto dolor involucrado. Puedes ayudarle mostrándole tus propias vulnerabilidades; compartir tus sentimientos puede hacerle sentir más cómoda al hacerlo también.

Mire a mi tía con mucha sorpresa al escuchar las palabras que ella me decía, siento que ella sabe como hacer que mis pensamientos se alineen.

- Nunca había considerado eso. Siempre he querido ser fuerte para ella.

- Ser fuerte no significa ocultar tus emociones; al contrario, ser vulnerable es una forma poderosa de conexión. Cuando compartes tus propios miedos y tristezas, le enseñas a Bia que está bien sentir lo mismo y hablar sobre ello.

Ante las palabras de mi tía vuelvo a ver a Bia con unos ojos de tristeza.

- Creo que entiendo lo que dices... Es como si estuviera construyendo un puente entre nosotras.

- Exactamente. Y recuerda, incluso si solo tiene cinco años, sus sentimientos son reales y válidos. A veces los adultos olvidamos eso; asumimos que los niños no entienden el dolor o la tristeza porque son pequeños.

La tristeza y la comprensión de las palabras de mi tía hicieron que me de un golpe en mi corazon

- Me duele pensar que Bia pueda estar sufriendo sola...

- Es normal sentirse así, Perla. Lo importante es actuar ahora antes de que ese sufrimiento se convierta en algo más profundo. A veces los niños solo necesitan un pequeño empujón para abrirse.

- Entonces haré eso. Hablaré con ella esta noche antes de dormir; crearé un ambiente tranquilo y seguro donde pueda expresarse sin miedo a ser juzgada.

La decisión ya estaba tomada, hablaría con ella en la noche para escucharla, y también para poder solucionar esto de una vez por todas, no quiero que mi hija sufra y se sienta triste en este viaje.

- Eso es maravilloso. Y recuerda también ser paciente; puede tomar tiempo antes de que esté lista para abrirse completamente.

- Lo sé... pero estoy dispuesta a esperar lo que sea necesario por su bienestar.

- Eso es lo más importante: tu disposición a estar presente para ella sin importar cuánto tiempo lleve el proceso. El amor incondicional crea un espacio donde los corazones pueden sanar.

Las palabras de mi tía hicieron que por fin pudiera comprender por lo menos lo que mi hija quería, así que debia de tener esa conversación con ella.

- Quiero ser esa madre para ella; quiero ser su refugio seguro.

- Y lo serás, Perla. Solo recuerda: cada pequeño paso cuenta y cada conversación importa. A veces las palabras más simples pueden tener el mayor impacto.

- Gracias por tu sabiduría, tía Mimi. Aprecio mucho tu apoyo en esto... Me siento más clara ahora sobre lo que debo hacer.

- Estoy aquí para ti siempre, querida. No dudes en buscarme si necesitas apoyo o simplemente alguien con quien hablar sobre tus propios sentimientos mientras navegas por esto.

Antes las palabras de mi tía ella comenzó a retirarse de donde yo me encontraba, mirando a Bia, sintiendo como una nueva resolución se forjaba en mi corazón.

Tengo que hablar con Bia esta noche. Crearé un ambiente tranquilo y seguro para ella, donde pueda abrirse sin miedo. Quiero que sepa que está bien sentirse triste y que sus sentimientos son válidos. No quiero que guarde todo eso dentro; no quiero que sienta que tiene que ser fuerte todo el tiempo.

Aunque tambien deberia hablar con... Blu... cuando regresemos... por ahora no pensaré en Blu en estos momentos, pensaré en Bia y su bienestar. No quiero arruinar este viaje por mi propia inseguridad o por las diferencias entre nosotros.

Hoy es el día en el que empiezo a sanar las heridas invisibles de mi hija. Hablaré con ella sobre sus sentimientos y le recordaré lo importante que es para mí. No quiero perderme ni un momento más de su felicidad ni dejar que la tristeza se apodere de su corazón.

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III

[Monologo de Blu]

Es increíble lo que ha pasado desde estuvimos asi durante mucho tiempo. Nunca imaginé que ayudar a otros animales podría ser tan gratificante. Después de la devastación causada por los taladores, sentí que había perdido algo importante, pero en realidad, encontré una nueva razón para seguir adelante.

Linda y Tulio han sido un verdadero refugio para todos estos animales heridos y asustados. Ellos abrieron su hogar y su corazón, brindando apoyo a cada criatura que llegó buscando ayuda. Ver cómo se han entregado a esta causa me hace admirarlos aún más. No solo son amigos, son verdaderos héroes en este mundo caótico.

A veces me pregunto cómo es posible que haya pasado tanto tiempo sin darme cuenta del impacto que puedo tener en el mundo. Antes cuando estabamos Linda y yo solos, estaba tan preocupado por mi propia comodidad y mi vida tranquila en la ciudad, que no veía más allá de mis propias preocupaciones. Pero ahora... ahora sé que hay un propósito más grande.

Y Esmeralda... ¡vaya! Nunca pensé que podría admirar a alguien así. Su valentía y determinación son contagiosas. La forma en que se enfrenta a cada situación con una sonrisa, incluso cuando las cosas se ponen difíciles, me inspira. Ella no solo ayuda a los animales; ella les da esperanza. Me he dado cuenta de lo mucho que su personalidad brilla en medio de la adversidad.

Pero hay algo reconfortante en tener a alguien como Esmeralda a mi lado. Su energía es revitalizante y me hace sentir que puedo ser parte de algo significativo.

Cada día aquí es una lección sobre la vida misma. He aprendido a valorar no solo la belleza del Amazonas, sino también la importancia de cuidar de aquellos que no pueden cuidarse a sí mismos. Cada animal rescatado es un pequeño triunfo; cada sonrisa en sus rostros me recuerda por qué estamos aquí.

A veces me preocupa cómo estarán Perla y los niños. Espero que estén disfrutando su viaje. No quiero arruinar su experiencia; quiero que tengan recuerdos felices y duraderos. Pero también sé que pronto regresaran a casa, a la tribu, donde podre verlos nuevamente, aunque recordar que Perla tambien estará con ellos hace que los recuerdos vuelvan a surgir en mi mente. Pero tal vez deberia dejar eso de lado, supongo que Perla tenia razón en la fosa de la perdición.

Cuando regrese con ellos, quiero ser un mejor padre y esposo. Quiero mostrarles cómo este viaje ha cambiado mi forma de ver el mundo. No solo somos guacamayos azules; somos parte de algo mucho más grande: una comunidad que necesita nuestra ayuda y protección.

Así que seguiré adelante, ayudando a estos animales mientras pueda. Linda y Tulio son un ejemplo brillante de lo que significa ser parte del cambio. Además, estoy agradecido por esta oportunidad de crecer y aprender junto a Esmeralda y todos los demás.

- Oye Blu, deberiamos de regresar a ver a tus amigos humanos.

La voz de Esmeralda hizo que saliera de mis pensamientos para verla con su linda sonrisa que me dejó cautivado en muchas ocasiones mientras ayudabamos.

- Claro, hay que ver como le va a Linda y a Tulio.

Con eso dicho, ambos salimos a buscar a Tulio y Linda, donde se encontraban en el refugio nuevo que es donde estaba antes la base de los taladores, solo que la convirtieron en un pequeño refugio para animales.

Volando junto a Esmeralda, pude apreciar a lo lejos a Linda y Tulio en el nuevo refugio de animales afectados, por lo que bajamos a verlos. Linda sintio mi presencia al mirar al cielo y me saludó muy enérgica.

- ¡Blu! ¡Esmeralda! Qué bueno verlos. ¡Bienvenidos al refugio!

Era la sonrisa de Linda al ver que habiamos llegado al refugio.

- Hemos estado trabajando duro aquí. Cada día es como un reto para nosotros.

Era la pequeña sonrisa de Tulio quien lo veia algo cansado, supongo que ha estado trabajando duro para cuidar a todos los animales. Al voltear pude ver a Esmeralda mirando alrededor mientras se asombraba por lo que veia ante sus ojos.

- No puedo creer lo que han hecho con este lugar. Es impresionante.

Yo asentí ante la respuesta de Esmeralda, para luego ir por un papel y lapiz y comenzar a escribir en él para preguntarle cosas a Linda, a veces a Esmeralda se le olvida que somos aves y que no pueden escucharnos con palabras, solo nos sale graznidos.

Al escribir el papel se lo mostré a Linda para que lo pueda leer.

"Sí, realmente han transformado este sitio. ¿Cómo va todo?"

- Hemos estado rescatando a muchos animales desde que empezamos. Algunos han llegado heridos, otros simplemente asustados. Pero cada uno tiene una historia diferente, aunque no los podamos entender, a simple vista se puede ver.

Antes de que Linda pudiera seguir, Tulio la interrumpió.

- Y lo mejor es que estamos creando un ambiente donde pueden recuperarse y sentirse seguros. Hemos construido áreas para diferentes especies, y estamos trabajando en programas de reconstrucción para poder sanar y recuperar sus hogares.

Al escuchar la iniciativa, me quede sorprendido, aunque una felicidad tremenda pude sentir, escribiendo nuevamente en el papel para mostrarle a Tulio.

"¡Eso suena maravilloso!"

- Verdad que si. Evaluamos a cada animal para asegurarnos de que estén listos para poder refugiarlos en una nueva habitat hecha por nosotros. Luego, estoy llamando a todo mi equipo de especialistas para que puedan venir con la reconstrucción de los hogares de estos pobres animales.

Tulio me mostró su computadora donde tenia todo el plan ahí registrado, haciendo que mis preocupaciones por estos animales disminuyeran, despues de todo estaban en buenas manos. Voltee a mirar a Esmeralda quien estaba igual de alegre que yo, con una sonrisa que me recuerda mucho a... Perla. Decidi dejar eso de lado para mirarla nuevamente.

- Es genial ver cómo están ayudando a estos animales para luego restaurar sus hogares ¿no?.

- Nunca imaginé que tus amigos humanos pudieran hacer algo tan significativo. Realmente son héroes.

Esas palabras de Esmeralda hicieron que pusiera mi ala en mi cuello mientras me reia nerviosamente, pues la verdad, sus palabras me alagaban y sonrojaban al mismo tiempo.

- Solo estamos haciendo lo que podemos. La verdadera heroína aquí es la naturaleza misma; nosotros solo somos sus cuidadores temporales.

Fueron las palabras de Tulio mientras admiraba su trabajo, yo observo a Esmeralda con una mezcla de admiración y respeto. La forma en que se interesa por el refugio y por los animales le hace sentir una conexión más fuerte con ella, una conexión que no podia explicar, pero seguramente es de una buena amistad, despues de conocernos un poco en las horas que pasamos juntos.

- Lo que Linda y Tulio están haciendo aquí es un ejemplo perfecto de cómo podemos marcar la diferencia. Cada animal rescatado es una victoria.

Al decir esto, Esmeralda me mira con sorpresa, pero con una sonrisa en su rostro asiente.

- Si, por lo que veo, ellos han trabajado muy duro.

Antes de que pudiera decir algo más, veo como Esmeralda se acerca a mi mientras toma mis alas y las aprieta suavemente.

- Me alegra de estar aqui contigo. Sin duda alguna eres un ave maravillosa Blu.

Ante las palabras de Esmeralda, no pude evitar sonrojarme, esta guacamaya sabe muy bien como hacer que mi rostro cambie a uno más avergonzado, sin embargo, no pude dejar de mirarla a los ojos, esos ojos tan cuativadores que hicieron que mi corazon comenzara a latir con fuerza, me recuerda mucho a cuando Perla me miraba así, pero Esmeralda es diferente.

Ninguno de los dos separó sus ojos del otro, no entendía porque no podia dejar de mirarla, sentía como los nervios se apoderaban de mi, ella se acercó un poco más a mi, siento como su pecho choca con el mio, pero antes de que me dijera algo, fuimos interrumpidos por Tulio.

- Blu, por cierto, entre todos los animales, pudimos encontrar un animal muy extraño, diria que nunca habiamos visto algo como esto, ¿quieres verlo?

Ante la pregunta de Tulio, asentí rapidamente alejandome un poco de Esmeralda luego del momento peculiar que estuvimos teniendo, me recordaba a cuando Perla me miraba con esos ojos... sus ojos... su mirada.

Ignoré esto por el momento para ver que clase de animal se referia Tulio, aunque no iba a ir solo, Esmeralda se puso a mi lado y me acompaño para observar de que animal se trataba.

Mientras nos adentrabamos al refugio pudimos notar a varios animales que se encontraban descansando, me sorprendio mucho y a la vez me entristeció de ver a varios animales afectados, no pensé que los taladores hayan extendido su desastre de tales proporciones.

Mi mirada se desvío en Esmeralda quien por algún motivo estaba más cerca de mi, la verdad es que tenerla tan cerca me ponia muy nerviosos, y es que no era para menos, he conocido a un ave tan atractiva que incluso si la veo bien, me doy cuenta de que puede ser incluso el doble de hermosa que Perla.

Al recordar nuevamente a Perla, sacudí la cabeza nuevamente mientras dejaba de pensar en ella, de seguro se está divirtiendo mucho con Roberto, lo que me causa mucha tristeza.

- ¿Pasa algo Blu?

Las dulces palabras de Esmeralda me sacaron rapidamente de mis pensamientos, volteando a verla mientras ella tenia una mirada de preocupación en su rostro.

- Tranquila, solo estaba pensando en algo, nada más.

- ¿No quieres contarme?

- N-No creo que sea el momento.

Dije rapidamente tratando de desviar la conversacion, aunque Esmeralda se me quedó mirando con algo de preocupación, pero por suerte lo dejo pasar.

- Bueno.

Al decir esto, un suspiro de alivio salio de mi pico, me alegra de que no insistiera sobre esto, la verdad, no queria recordar eso ahora.

- Ya llegamos.

Tulio nos señala la jaula en donde se encontraba el dichoso animal, y al mirar de cerca, me quede impresionado pero a la vez confundido, pues este animal era muy parecido a una araña, pero tenia la forma de una mano con garras, era pequeña y su cuerpo estaba cubierto de una viscocidad negra, era dificil describir lo que mis ojos estabam viendo.

- ¿Q-Qué es esa cosa?

Pregunté con mucha curiosidad, pero a la vez con cierta inquietud por su forma, ni siquiera tenia ojos, ni orificios donde pudiera respirar, y sobretodo, tenia 6 patas largas similares a las arañas, pero la viscocidad negra hacia que se vea espeluznante. Tulio solo pudo escuchar un graznido pero supongo que entendia a que queria llegar al mirar a ese animal extraño

- No lo sabemos, pero pudimos atraparlo cuando...

Tulio trago un poco de saliva, parece que recordo algo que no le agradaba del todo.

- La verdad es que lo encontramos cuando salio del cuerpo de un animal, quien se encontraba agonizando, y debo decir que fue de un animal muy grande.

Me quede sorprendido ante el comentario de Tulio, ¡esta pequeñes salio de un animal grande!

- No sabemos el nombre de este animal, pero ahora que lo tenemos en nuestro poder, haremos las respectivas examinaciones, claro, no perjudicaremos a otros animales, lo que sea este animal, es algo que no habia visto antes, es un insecto muy peculiar.

Al oir las palabras de Tulio, me acerque un poco a donde se encontraba encerrada este animal, haciendo que mi curiosidad sea grande antes que mi miedo. Pude ver que Esmeralda por un momento me tomo del ala para impedir que no me acercara, pero al ver a Tulio cerca se calmó un poco.

Me acerqué lo suficiente para notar de que el animal seguia despierto, porque de un momento a otro, se acerco a mi y puso sus patas en el cristal. No sabia si me estaba mirando fijamente o algo, porque no pude ver sus ojos, es más, ni siquiera sabia si tenia ojos.

- Es aterrador, de cualquier manera lo seguiremos investigando. Hasta podría decirse que es un descubrimiento historico, ya que seriamos los primeros en encontrar un animal de extrañeza.

Al oir las palabras de Tulio, nuevamente me di la vuelta para alejarme y ir con Esmeralda, para poder salir de aqui.

"Tal vez debes dejar de pensar en ti mismo y pensar en nosotros"

Escuché la voz de Perla, pero su voz era realmente perturbadora, haciendo que mirara a ambos lados para ver de donde provenia, la voz de Perla sonaba como si fuera un fantasma, incluso podia ser mi subsconsciente tratando de jugarme una mala broma, pero eso era imposible.

- ¿Sucede algo Blu?

Fueron las palabras de Esmeralda quien me miraba con curiosidad al ver que estuve mirando a ambos lados.

- No es nada, pensé escuchar una voz. Mejor vayamos con Felipe.

- Esta bien.

Queria ir a ver a Felipe y asegurarme de que él junto con su tribu esten bien, pero sobretodo, ver como están ayudando a los demás animales, ya que Felipe se ofreció a ayudarnos en este asunto.

Ella me tomo del ala por unos momentos mientras me sonreia y ambos salimos volando del refugio de Tulio, aunque aún me inquietaba esa voz de Perla, sonaba muy perturbadora. ¿Habrá sido una mala jugada de mi mente?

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IV

[Esmeralda]

Blu me habia propuesto ir a ver a Felipe y su tribu, a lo que accedí tranquilamente para poder verlos, despues de todo, Felipe quizó ayudarnos con los animales, dejandonos algo sorprendidos, pues nunca supe que Felipe tenia ese lado.

Sin embargo, mientras estabamos volando, seguia preguntandome que le habra pasado a Blu al ver a ese animal extraño, pues se sentia con mucho miedo y no podia reprocharselo, pues el animal si era de un aspecto extraño, y sus patas se parecian mucho a las de una criatura que lei una vez en un libro, creo que se llamaba "Slenderman" o algo así. 

De cualquier manera eso no era lo importante en estos momentos, lo que teniamos que hacer era verificar como iba Felipe con todo esto.

Mientras volabamos, pude notar como algunas hojas y flores reflejaban lo hermoso que era el Amazonas y sobretodo de que podia recuperarse despues de tanta destrucción.

- ¡Es impresionante! Nunca me canso de ver la belleza de esta selva. Siempre me deja maravillada.

Ante mi comentario, Blu me miró con una sonrisa.

- Sí, es un lugar mágico. Y me alegra que podamos ayudar a los animales afectados por los taladores. Felipe y su tribu han sido muy generosos en ayudarnos.

- Es cierto, quien diria que "El Gran Felipe" podria ser tan bondadoso.

Ante mi comentario, ambos nos reimos de molestar asi a Felipe, pues yo se que el nunca habia sido asi con los animales, incluso con los spix, y verlo convivir con Blu fue algo que me dejo sin palabras.

Luego de un rato volando pudimos visualizar a Felipe quien se encontraba en su tribu junto a sus compañeros. Aterrizamos y el rapidamente noto nuestra presencia.

-  ¡Blu! ¡Esmeralda! Qué bueno verlos de nuevo. ¡Bienvenidos!

- Gracias, Felipe. Es bueno estar aquí. Queríamos ver cómo va todo con los animales que están ayudando.

Fueron las palabras de Blu mientras saludaba con un apreton de alas a Felipe.

- Ha sido un desafío, pero hemos estado trabajando arduamente. Cada día rescatamos más animales y los enviamos al refugio que nos dijiste. Muchos han llegado heridos o asustados, pero estamos haciendo lo posible para ayudarles a recuperarse.

- Eso suena increíble. Estoy seguro de que esos animales están agradecidos por todo lo que hacen.

Era la alegria de Blu quien podia estar feliz de que muchos animales se encuentren a salvo en estos momentos.

- Así es, nunca pense que fuera tan bueno ayudar a otros animales.

- Vaya, ¿Acaso "El Gran Felipe" se volvio alguien modesto?

Dije mientras le daba un toque de diversion una sonrisa.

- Callate Esmeralda.

Nos reimos ante este divertido momento, pero luego de algunas risas, pude notar que Felipe paso a tener una actitud con un tono de mucha preocupación.

- ¿Qué sucede Felipe?

Pregunte al mirar como se encontraba serio y preocupado.

- Blu, la verdad es que necesitas ver esto.

Blu y yo nos miramos con algo de preocupación al escuchar a Felipe tan serio, él nos indicó para seguirlo por lo que lo seguimos, acompañado de 4 de su tribu.

Estuve al lado de Blu mientras volabamos, pues el al igual que yo estabamos confundidos por la actitud de Felipe. No sabiamos por que tenia esa actitud.

- Ya llegamos.

Al llegar al lugar, pude notar que se trataba de la tribu de los spix, de su santuario, pero lo que vi me dejo sin palabras, pues el santuario spix se encontraba totalmente destruido, pudimos notar varios arboles caidos, y no solo eso, algunas cosas de taladores estaban presentes allí.

Recuerdo que el lider fue tan eficaz en ocultar su tribu y su refugio para que no pudieran encontrarlos, pero creo que esa suerte se acabo, pues todo estaba destruido.

Voltee a mirar a Blu quien se encontraba en estado de shock, no podia creer lo que veia, todo el santuario estaba destruido.

- No... no puede ser. ¿Qué pasó aquí?

- Los taladores llegaron hasta este lugar y destruyeron todo. Fue devastador ver cómo destruyeron el hogar de los spix. Siendo sinceros, cuando Eddie se enteré, quedará muy devastado.

Ante las palabras dichas, pude notar como Blu perdia sus fuerzas y aterrizaba en un lugar en especifico, al verlo, lo segui hacia donde iba y pude notar que aterrizo en un arbol en especifico.

- No puede ser... el árbol... no...

Me acerque un poco a Blu, solo para notar que comenzo a golpear el suelo mientras gritaba con mucha ira y dolor, lo pude notar en su rostro. Sentí mucha pena por él, seguramente este era su árbol, y perderlo significa un golpe muy duro para él.

- Debería haber hecho más para protegerlo... No debí haberlo dejado.

Dijo en voz baja mientras podia escuchar su llanto ante la situación en la que se encontraba todo.

Me acerque a el mientras ponia mi ala en su hombro, haciendo que el volteara a ver con mucha tristeza.

- Blu, no es tu culpa. Nadie podía predecir que los taladores llegarían tan lejos.

- Pero aún así, deberia haberlo predicho, se supone que yo debia proteger este hogar, y mira como termino, todo destruido. Y lo peor, es que seguramente me echaran la culpa a mi.

Las palabras de Blu tenian mucho peso, estaba realmente triste mientras veia como sus ojos notaban que se encontraban apagados.

- Debería haber estado aquí para ayudar.

Ya no pude mas aguantar y escuchar como Blu se culpaba asi mismo por esto, por lo que no tuve de otra que acercarme a él y darle un abrazo. Él se sorprendio al principio, pero se quedo callado cuando me escuchó hablar.

- No te culpes por algo así. Tú no lo sabias, y no dejare que esas aves te echen la culpa por algo que no hiciste. Si es posible me enfrentare a su lider de la tribu para que no te meta en esto. No te culpes más. Tu eres un ave especial Blu, ayudaste a muchos y eso dice mucho de ti.

Con eso dicho acariciaba el pelaje de Blu con mi ala mientras dejaba que él se tranquilizara en mi hombro, haciendo que se calmará poco a poco.

- Vamos a solucionarlo Blu. Reconstruyamos el santuario de los spix.

Ante mis palabras, Blu me miró sorprendido, pero al calmarse un poco lo penso demasiado para luego mirarme con determinación.

- Claro, eso podemos hacer, podemos reconstruir el lugar, pero no se cuanto tomará.

- No te preocupes Blu, los escarlata te ayudaremos a reconstruir este lugar.

Blu y yo miramos a Felipe sorprendidos de que quiera ayudar en esto, sin embargo, una gran sonrisa se hizo presente en mi rostro, mientras asentía con la cabeza.

- ¿Estás seguro Felipe?

Preguntó Blu con cierto temor, seguramente piensa que Felipe tal vez lo diga de broma.

- Claro, es lo que podemos hacer, despues de todo nos ayudaste mucho a mandar a esos taladores por donde vinieron, asi que te debemos esta Blu.

Ante lo dicho por Felipe, una gran sonrisa se hizo presente en el rostro mientras la alegria volvia en Blu, siendo sincera, me gusta ver a Blu con esa sonrisa alegre, me da esa sensación de que las cosas van a salir muy bien. Blu volteo a verme mientras me mira con mucha alegria.

- Gracias, Esmeralda. Significa mucho para mí saber que puedo contar contigo en esto.

Dijo mientras me daba de esas miradas de mucha confianza.

- No te preocupes Blu.

- No se como podia agradecerte por ayudarme con esto.

- Bueno, como agradecimiento... ¿puedo darte un beso?

Ante la propuesta que le hice a Blu, me miró con una cara sorprendida y el rostro demasiado sonrojado, haciendo que yo tambien me diera cuenta de lo que acababa de decir. No puedo creer que haya dicho eso... ¿Un beso? ¿Qué me pasó?. El sonrojo se hizo presente en mi rostro mientras me ponia nerviosa.

- No...yo

No tenia las palabras para decir otra cosa en estos momentos, ese coqueteo me salio tan natural que no podia entenderlo. Ambos nos estabamos mirando con un sonrojo en nuestro rostro, no fue hasta que Felipe decidio romper ese momento.

- Bueno, eso fue inesperado. ¿Deberíamos dejarles privacidad?

Ante la broma que hizo Felipe mientras nos abrazaba con sus alas de manera amistosa con una sonrisa picara en su rostro, hizo que ambos nos pusieramos mas nerviosos que antes haciendo que Blu se separe rapidamente.

- No... no quise decir... ¡Lo siento!

Tartamudee con mucho nervios mientras Felipe miraba a Blu con una sonrisa.

- Vayan a ese árbol allá atrás si quieren tener su momento romántico... ¡y asegúrense de no hacer ruido!

- ¡Felipe!

Grite ante el comentario vergonzoso que hizo Felipe mientras el se reia a carcajadas. Blu se puso su ala en el cuello pero luego fue con nosotros.

- B-Bueno, los espero para decirles lo que podemos hacer, veré que tan dañado están los árboles.

Con lo dicho Blu se fue rapidamente volando a ver el desastre, mientras Felipe me mira con una sonrisa picara para luego seguir a Blu.

¿Por qué hice eso? Tal vez fue el momento... o la emoción de estar trabajando juntos para ayudar a esos animales. Me siento tan conectada a él, como si compartiéramos algo más que solo la misión de restaurar el santuario...

Pero eso no justifica lo que hice. ¡Fue tan atrevido!

Pero al mismo tiempo... me siento bien por haberlo dicho. Es como si hubiera dado un paso hacia algo nuevo en mi vida. Nunca antes había coqueteado con nadie, es decir, no despues de tanto tiempo y que fuera de esta manera. Pero aquí estoy, sintiéndome vulnerable y emocionada al mismo tiempo.

Ante lo dicho por mi, me toco mi rostro mientras miraba a Blu con un ligero sonrojo.

Me pregunto si él también siente algo por mí. No quiero hacerme ilusiones, pero hay algo en él que me atrae profundamente. Quizás sea su valentía o su pasión por ayudar a los demás.

Cada momento que paso con él me hace querer ser mejor, querer hacer más por los demás. Y ahora siento que tengo este nuevo deseo dentro de mí: ser más abierta, más expresiva. Tal vez esto es lo que significa realmente conocer a alguien despues de tanto tiempo de estar un poco... alejada de casi todo...

No puedo evitar sonreír al pensar en lo que podría significar todo esto. Un beso... ¡un beso! Es algo tan simple pero tan poderoso al mismo tiempo. Me gustaría saber cómo se sentiría tenerlo entre mis alas, compartir ese momento con él.

Ante los pensamientos que tengo en estos momentos, moví mi cabeza rapidamente, no quiero ir tan rapido con Blu, no de esta manera, si siento algo por él, debo ir de poco a poco, y ver si mi sentimiento es muy fuerte. Está calidez de mi corazon al estar con él la descubriré junto a él. Blu, tu eres un ave tan especial, espero y tomes la responsabilidad de hacer que mi corazon se sienta así y por hacerme decir coqueteos así.

Ante lo dicho, sonreí y fui con Felipe y Blu para poder solucionar todo esto.

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V

[Perla]

La noche ha caído sobre la selva, y el sonido de los insectos y el canto de las aves nocturnas llenan el aire. Me encuentro sentada en una rama baja de un árbol. La tribu de guacamayos azules se ha acomodado para descansar. En eso veo que mi hija Bia se me acerca.

- ¿De qué quieres hablar mamá?

Dijo Bia mientras me miraba con un poco de sueño.

- Quería saber cómo te sientes.

Dije mientras la miraba, pude ver que tenia algunas ojeras, de seguro porque la levante de su descanso.

- ¿Cómo crees que estoy? Extraño mucho a mi padre. No entiendo por qué no está aquí con nosotros.

El rostro de Bia se oscureció mientras mira el suelo con mucha tristeza al extrañar mucho a él

- Es difícil estar lejos de él. Pero estamos aquí para disfrutar y crear recuerdos con la familia Spix. Solo necesitamos un poco más de tiempo.

Dije mientras me acerco a mi hija mientras le acaricio su cabeza, aunque ella se alejo ante mi toque mientras me mira con el ceño fruncido.

- Pero... ¿por qué no podemos volver a casa? Quiero ver a papá ahora.

- Entiendo que quieras verlo. Pero este viaje es importante para nosotros como familia. Hay tantas cosas hermosas que podemos experimentar aquí juntos.

- Pero no entiendo... ¿Por qué es tan importante?

- Porque cada momento que pasamos aquí nos fortalece como familia. Y yo quiero que despues de este viaje, nuestro lazo sea aun más grande.

Ante las palabras dichas por mi, Bia seguia mirando el suelo, supongo que está pensando en mis palabras, creo que lo está entendiendo, extraña mucho a Blu... pero ahora no es el momento de volver, solo quiero un poco más de tiempo con mis niños. Un poco mas de tiempo con mi familia.

- Mamá... ¿Te puedo preguntar algo?

- Claro hija.

Dije con una sonrisa, pero esa sonrisa pronto desapareceria ante lo que me dijo Bia, me miró y no me esperaba lo que me preguntaría ahora.

- Mamá... ¿Tú amas a papá?

CONTINUARA...

Bueno, gracias por leer este nuevo capitulo, ahora si se preguntan porque me desapareci por un mes, es porque me olvide de la historia, literalmente hace dias recorde que tenia que actualizar. Los estudios y otros pendientes hacen que te olvides de algunas cosas. Pero bueno, nos vemos en el siguiente episodio, donde esto ya se puso bueno, nosotros vamos directo a lo que vinieron, a paso lento pero que muy pronto habra mas sorpresas. Nos vemos chicos :3