No sabía que hacer, no podía respirar, mi propio aire me ahogaba dentro de mi.

Mire mis nudillos que estaban blancos y mascullados, tenían restos de gotas de sangre de Sirius.

No debí haber hecho eso....

Me lance al suelo mientras abrazaba mis piernas con mis manos, apolle la cara en mis rodillas que estas estaban enterradas en mi tórax.

Respire tratando de no llorar pero....

No pude resistir.

Empecé a sollorar mientras miles de lágrimas caían de mis ojos pesados para morir en mis rodillas, me acomode la falda al escuchar pasos y pare de llorar.

Levante la mirada encontrándome a James, solo seguí mirando en suelo mientras lágrimas rebeldes caían por mis mejillas de forma irregular, note a la mirada de James.

Pude notar como se agachó delante mía y yo me heche para atrás para no recibir su ayuda, el volvió a acercarse y yo me volví a alejar.

El bufo cansado de mis juegos y se acerco una tercera vez, yo al intentar alejarme choque con la espalda la fría pared.

-Que quieres? -dije cabreada, levante más la mirada para verlo y pude notar como sus ojos se encojieron al ver como lloraba porque aún tenía muchas lágrimas rebeldes callendo por mis mejillas.

-Hablar...-contestó de manera simple, yo mire hacia el lado izquierdo no queriendo hablar de ese tema, con su mano me cojio del mentón obligándome al mirarlo-...Contigo.

- Pues yo no quiero -conteste rápida, con su mano libre me seco las lágrimas de mís párpados y mejillas.

-Por favor -suplico él, yo suspiré para luego mirarlo.

-Que quieres saber? -dije comprensiva -Ya lo sabes casi todo.

-Quiero saber porque os costaba tanto decir la verdad-declaró el, yo respire ondo para poder continuar.

-Buena pregunta, difícil contestación.
Mira, si tubieras una hermana, tu no la cuidarias?

-Que clase de pregunta es esa? Claro que si! -contestó sin pensárselo dos veces.

-¿Y en la adolescencia? Cuando cae el amor, ¿que arias si tu amigo no quiere tener una relación y tu hermana lo quiere? ¿Serias capaz de decirle la verdad? ¿De romperle el corazón? ¿De mentirle? ¿De engañarle? O.... ¿No hacer nada y mirar como sufre por un amor imposible? -pregunte sabiendo que tenía razón, el callo de golpe sin casi poder respirar, sabía que el no se esperaba eso ni mucho menos.

-Mmmm.... -dijo entre labios, parecía que el gato se le había comido la lengua.

-Lo sabia-dije segura, me levante alejandome del lugar pero su voz hizo que parará de golpe.

-Pediría consejo a mi madre -susurro muy audible, gire sobre mis talones y pude ver como estaba levantadose de donde estábamos antes.

Al escuchar su repuesta hizo que una gran sonrisa apareciera en mi rostro, el de pie me miró extrañado pero corrí hacia el y le di un beso en la mellija.

-Gracias -dije a centímetros de su cara, me fui de ahí dejando a un James por las nubes, con una sonrisa boba, casi desmallado, con brillantes ojos y la cara roja como un tomate maduro.

Ahora sabía que debía hacer.

.................................................................

Corrí con mi alma hasta la lucheceria, pero al entrar vi como Sirius estaba en la puerta.

Mi corazón se encojio al ver las marcas de la cara y cuerpo de Sirius hechas por mís manos, inconscientemente toque mis nudillos.

Sirius tenía un gran vendaje cubriendo su nariz, tenía una gran mancha roja en la tela, sus ojos estaban apagados y vacíos, al mirarme no tenía ninguna expresión.

-Evans-dijo en modo en saludo mientras asentía en la cabeza, me tense de pies a cabeza, jamas me llamaba por mi apellido y muy pocas veces mi nombre.

-Black-conteste mientras mis ojos ardían por la intensidad de las lagrimas acumuladas en mis ojos.

Yo por lo contrario no llegué a la enfermería y mi ojo seguía morado pero cada vez se hacía más oscuro.

El antes de darme cuenta ya se había ido de en medio de la puerta, mire hacia atrás por el rabillo del ojo y pude ver como bajaba las escaleras sin expresión con las manos metías en el pantalón.

Una lagrima callo de mis párpados mientras rondaba por mi redonda mejilla, callo al suelo al llegar a la mandíbula.

Ahora era la mala de la película.

Con mi puño seque el rastro de agua que dejó mi lagrima, entre a dentro recordado la razón de estar ahí.

-Neusra-la llame entre todas las lechuzas mientras extendía mi mano izquierda, una lechuza de color casi avellana se apollo en mi brazo y con mi mano acaricié su cabeza, ella hizo un ruido de gusto.

La deje comiendo un poco de migas de pan que tenía en mis bolsillo, coji un poco de pergamino y una pluma del lugar, y en el borde de la ventana empeze a escribir.

Hola mama,
Me dijiste que te escribiera.... Pero no traigo buenas noticias.
Lily esta enfadada conmigo, y tiene derecho a estarlo porque yo decidí sobre su vida amorosa.
Hoy he tenido una pelea con mi amigo Sirius, le ropi la nariz porque lo grito en todo pulmón en el comedor, pero yo también dije algo malo suyo terrible y por ende me dejó un ojo Morado. No fue mi intención y se que la de él tampoco, no debía haber planeado algo de mi hermana si ella, lo siento mamá. Debi haberte escrito, no pude abrir mis ojos tubo que hacerlo James para que yo pudiera ver la luz.
No se que hacer, porfavor necesito tus consejos.

_____.

Deje caer una lagrima en el pergamino sin querer, Respire ondo y enrolle el pergamino en la pata de mi lechuza.

-A Julia Evans porfavor-indique, ella hizo un ruido de aceptación para luego exterber sus alas y desaparecer en el cielo.

Hice una mueca de dolor mientras bajaba los peldaños, el cuerpo me dolía a horrores.

Llegue al castillo con pasos lentos, me di cuenta que por el dolor de mi corazón no había notado el exterior, llegué a la enfermería y ella sin hacer preguntas me curo, me dio una poción mientras me ponía un parche en mi ojo izquierdo, ahora solo podía ver con uno.

-No te quietes eso hasta dentro de una semana-ordenó Pomfret, yo hice una mueca de agonía para después ponerme de pie y cgocra con una pared.

-¡Estoy bien! -le grite levantándome del suelo, volví a chocar e pero no cai le regale una sonrisa a la medimaga y salí de ahí por patas.

Llegue a la sala común y con mi único ojo bueno pude ver como todos me miraban como si tuviera dos cabezas, agaché la mirada y empeze a caminar a mi habitación.

Llegue a la puerta la cual contenía mi nombre entre muchos otros, la Abrí y vi como Lily al verme se levantó de la cama y se fue por la puerta.

Suspiré dólida, si no hubiera hecho eso jamas me tratarían como basura.

Entre en la habitación y puede ver a Alice y Marlen, las amigas de Lily, sentadas en sus respectivas camas mirándome yo solo aparte la mirada aún sin poder creer lo que había hecho.

–No podemos creer de la palabra de Black–dijo Marlane haciendo que la mire desde el humbral de la puerta.

–Pues os mentiría menos que yo. –confesé haciendo que ambas no cambiaran su expresión.

–Cuéntanos–dijo Alice dando palmas en la cama para que me sentará a su lado, suspiré para después obedecer.

–La verdad que no lo hice con mala intención, pero eso no cambia todo el daño causado.... –empecé a narrar toda la historia de dos largos días, esos días en donde nos jugábamos una expulsión pero nos importaba más esas personas que interpretan que les hemos herido.

Al terminar se instalo un silencio incómodo, yo despacio me levante de su cama para irme a la mía pero lo que continuo a continuación no me lo esperaba, me abrazaron con fuerza ambas haciendo que casi me asfixie.

Al separarnos Alice hablo –Menuda aventura en dos días, _____.

–Demasiada adrenalina –declaró Marlene –Jamás nos hemos presentado, yo soy Marlene McKinnon. –dijo extendiendo su mano que acepte gustosamente.

–______ Evans– dije con una sonrisa, al separar nuestras manos Alice nos miró.

–¿Qué vas ha hacer ahora ____?–me pregunto Alice, me quedé congelada pensando una solución para después mirarlas.

–Lo correcto. –decidí mientras salía de la habitación dejándolas con las palabras en la boca.

Esta vez lo aria bien.

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Un capítulo cargado de tensión,
El próximo será tenso y violentamente verbal.
Espero que os guste este capítulo.

Saludos,
Diana ❤️