Al instante Balto emergio de otro charco completamente diferente del que se había metido.

Por lo que parecieron unos varios minutos para el, Balto solo pudo sentir como todo su cuerpo se cambiaba por completo a su estado liquido, para Balto, esta era una sensacion, a la que ya se habia acostumbrado desde hace mucho tiempo.

Balto no tenia otra opcion, y era lo unico que se le ocurrio que podia hacer, si lo que queria, era escapar rapidamente del peligro, peligro tal, y como en el que el ya se habia metido anteriormente, aunque no estaba buscando problemas, de alguna u otra forma, siempre se encontraba con ellos, y cuando eso pasaba, sabia que era momento, de hacer todo cuando estuviera a su alcanze, para poder escapar sano y salvo, y en una sola pieza.

Es por estas razones, que a Balto, luego le esperaban regaños y reproches, por parte de los individuos, con quienes el vivia, y aquellos, que desde hace mucho tiempo, desde luego que eran conocedores de sus habilidades, y de lo que todo Balto era capaz de hacer.

Veran, la vida de Balto, era algo mas que complicada, de echo, muy dificil, si se lo preguntaban. Y por tal razon, lo mejor seria, que nunca se mostrara al mundo, tal y como el era, puesto que de hacerlo, eso podria significar la perdicion de Balto, y con ello, tambien pondria en grave peligro a todos los que el conocia, y Balto desde luego que no queria eso, sin embargo no podia evitarlo, pues usar sus "poderes", le hacia sentir tan vivo.

Una vez que su cuerpo, se habia reformado por completo, en aquel charco, Balto pudo ver que en efecto, a traves de dicho charco, logro llegar hasta un lugar cercano a su casa, y por supuesto completamente lejos del peligro, sin mas, Balto no perdio el tiempo y rapidamente corrio en direccion a donde vivia.

Y es que Balto habia aparecido en un pequeño bosque, a las afueras de un pueblo conocido como Nome, una pequeña poblacion, perdida entre las heladas tierras de Alaska, y al que el por su parte se comenzo a dirigir, buscando a toda costa, una forma de poder ingresar sin ser notado en lo mas minimo.

Sin embargo, a cada momento que se acercaba mas al pueblo, mas nervioso comenzaba a ponerse, pues sabia, que en cuanto llegara, iba ser recibido con solo unos regaños y todo se convertiria en nada mas que un mar de gritos, Balto ya no sabia que mas hacer para complacerlos a "ellos" y tenerlos contentos, ni mucho menos, por que los seguia soportando, eso era la ultima de las cosas con las que a el le gustaria tener que estar lidiando en su vida.

Pero no tenía mayor opción ni mejor, sabía al final de cuentas, que no tenía de otra, y triste, molesto y resignado, Balto solamente comenzó a dirigirse al pueblo, aunque eso sí, con una dirección en especial.

Balto tenia sus razones para ser como era, y eso no tenía nada de malo, nunca le hacía daño a nadie, pero todos los que conocían su pequeño "secreto" le repetían constantemente que de no tener cuidado, entonces ahora sí podría terminar por herir a todos los que le importaban.

Y era justamente por eso, que Balto, aunque no quisiera y no le gustaba, iba al lugar donde se dirigía.

Se trataba de una vivienda, que resaltaba bastante en el pueblo, muy grande, colorida, llamativa y atractiva, era solo una casa, su tamaño no era tanto como para llegar al punto, de confundirse con una mansión, pero de igual modo, su apariencia si que era más que suficiente, para ser fácilmente confundida, con la de alguna persona adinerada, y así era.

Y sorprendentemente, aun con lo bonita que sería tanto por fuera como por dentro, Balto por mucho, siempre iba a preferir dormir en su viejo barco pesquero a las afueras del pueblo, que vivir ahí.

¿Y por que se preguntaran?

Veran, la vida de Balto, se puede plantera de esta forma. Pongamonos en contexto.

Balto era alguien especial, bueno, realmente especial, mas de lo que el podria imaginar, y mas de lo que todos los demas podrian haber imaginado, pero bueno, ¿porque era especial?, muy sencillo, por la simple y sencilla razon, de que Balto no era en definitiva, como ningun otro ser que haya existido antes sobre la faz de la tierra.

Balto siempre fue asi, o bueno, desde que el tenia memoria, ya era mas que capaz, de hacer las cosas que ahora podia hacer.

¿Y que cosas podia hacer?

Pues veran, Balto resulto, que desde cachorro, era poseedor, de ciertas habilidades, que facilmente entrarian en la categoria de "poderes magicos", los cuales consistian, en que Balto parecia tener un control absoluto, sobre los tres estados del algua, hielo y vapor, solo que mas principalmente con el hielo, las habilidades de Balto, consistian en poder controlar y materializar de la nada, y a voluntad los tres elementos del agua, podia hacer cosas, como disparar rayos de agua, viento helado, y hielo, crear tornados de viento congelado, provocar lluvias, caminar sobre el agua, y respirar debajo de ella, como ya lo habia echo hace tan solo unos momentos, tambien poseia la capacidad de congelar todo tipo de cosas hasta ser capaz de destruirlas, ademas, de claro, poder usar cualquier pequeño o grande cuerpo de agua, para teletransportarse por asi decirlo, puesto que Balto, podia modificar por completo la estructura de su cuerpo, hasta ser capaz, de fusionarse con todo lo que tuviera agua, es decir, Balto podia manifestarse, en todo lo que tuviera agua, vapor, hielo, nieve, y aire.

Pero eso no era todo, con estos dones, Balto habia echo pensar a otros, que aun le quedaban todavia mas habilidades por descubrir, y que aun no habia liberado todo su potencial. Y era por eso mismo, que Balto habia llegado hasta este lugar, ya que ahi, por asi decirlo y a falta de mejores palabras, "lo estaban instruyendo para aprender a usar sus poderes".

Cuando al fin se encontro frente a la casa, Balto suspiro, y gimio un poco por los nervios, esperando porque nada malo le estuviera esperando adentro. Ingreso a la vivienda, a traves, de una puerta que siempre estaba abierta para el, y que el tenia que usar si o si, una gran lastima, que nunca pudiera usar la puerta principal, como el demas resto de la gente que vivia en la casa.

Una gran lastima, que al final, si le pillaron.

Balto trato de caminar discretamente, hizo el intento de escabullirse por la casa, hasta que por desgracia, al final, no pudo evitar ser visto, y lamentablemente, no pudo llegar en silencio a la habitacion en la que luego el dormia.

??: ¿Donde has estado Balto?

??: ¿De donde viene jovencito?

Cuanta mala suerte debia de tener Balto, que nunca lograba burlar la seguridad de ellos. Se volvio empezando a sentir sus cuatro patas comenzar a temblar, y fue entonces que los vio.

Se trataba, de una pareja mayor de perros, que durante varios años, siempre habian actuado, como si quisieran hacer de sus padres, de los padres de Balto, de alguna u otra forma, Balto aun no comprendia en lo absoluto, como era posible, que los haya llegado a querer. Considerando que ellos se distinguian, por ser temperamentales, estrictos, rigurosos, mandones, y con muy poca paciencia y tolerancia, ante las cosas que Balto hacia.

Asi es, Balto los conocia desde hace varios años, y nunca en su vida, se le paso por la cabeza, la pregunta de ¿por que los tenia a ellos por sus padres?, hasta que tuvo la edad suficiente como para razonar.

Cuando Balto nacio, y mostro sus poderes, sus dones, sus habilidades, se metio sin quererlo, en muchisimos problemas, poco luego de su nacimiento, su madre biologica, una loba blanca de nombre Aniu, murio desgraciadamente, por lo que durante un tiempo, una pareja de gansos originalmente rusos, que se habian quedado ahora en vivir en Nome, decidieron, hacerse cargo de ellos, sus nombres eran Boris y Stella, y durante un tiempo, fue facil, hasta que conocieron mas acerca de los poderes de Balto, de todos modos, ellos nunca pensaron, en abandonarlo solo por eso, sino que incluso, consideraron, que por eso, con mas razon deberian ayudarlo, y asi lo hicieron, al menos por un par de años. Ya que luego, esta actual pareja de perros, se harian cnocedores de la existencia de Balto, y lo que el podia hacer, de modo, que una vez que lo comprendieron, no se les ocurrio nada mejor, que exigirle a Boris y a Stella, que le entregaran a Balto, segun ellos, para poder enseñarles a usar sus poderes, argumentando, que tarde o temprano, podrian terminar siendo muy peligrosos para el, y todos los que lo rodeen.

Ese fue, sin lugar a dudas, un momento mas que crucial en la vida de Balto, y por lo consiguiente, este tambien llego a volver un tiempo muy costoso, fueron dias dificiles para Balto, el e habia apegado tanto a Boris y Stella, que incluso les suplico porque no lo dejaran con ellos, pues se veian muy crueles, pero ellos por su parte, le tranquilizaron diciendole, que en primer lugar, esto no era para siempre, en segundo lugar, era por su propio bien, y en tercer lugar, igual aun asi, el podria seguirlos viendo.

Si no hubiese sido, porque ellos se lo pidieron, Balto no habria aceptado, pues fue solo por este par de gansos, a quien Balto veia como verdaderas figuras paternas, que accedio a irse a vivir con ese par de perros, que en efecto, resultaron ser personas de temer, pero tampoco para preocuparse, es decir, ellos no le llenaron con traumas, ni tampoco con maltratos, ni mucho menos, pero si que se hicieron respetar ante Balto, a medida que el iba creciendo con ellos, adopto muchos habitos y adquirio una forma caracterisica de ser.

Por supuesto, todo habia sido causa, de las cosas, que ellos le habian inculcado, pero jamas, en todos esos años, dejo de producirle a el, una sensacion de extrañeza, ni el, ni Boris, ni Stella, ni nadie, que los haya visto, comprendieron jamas, el porque ellos se habian mostrado tan interesados en la vida de Balto, ni mucho menos, en como fue que ellos sabian de sus poderes, o porque ese deseo de supuestamente "ayudarlo a controlarlos", pero nunca habian echo algo para dañarlo a el, ni a los suyos, y esperaba que no lo hicieran nunca.