Dedicado a RoJackson07
Cuando el cantante reúne el valor suficiente para mirar por la ventana y encarar al ser que le acecha este ha desaparecido causando un gran alivio en Michael.

—¿Qué clase de gente atraes, Mariliyn? No muy buena al parecer. ¿En qué lío andas metida? Gracias a Dios que no estás aquí. Solo así estarás a salvo.

En el hospital, las Marilyn de ambos mundos casi están a punto de tocarse y cuando lo hacen una extraña sensación las recorre el cuerpo. Aún no entienden lo que está ocurriendo, ni porque son tan, tan exactas físicamente. Van a intentar entablar conversación una vez más cuando una enfermera de ambas realidades, entra en la habitación y sorprende a la rubia actuando de manera extraña como si estuviera mirando a alguien que no está allí.

—Señorita, es la hora de su medicina. Acuestese. Es muy pronto para que esté levantada. —le recuerda la mujer de cabello negro, la misma al igual que el médico de los dos universos hijos, pero con más kilos y más canas en la década de la Marilyn morena que en la década de los ochenta.

Marilyn, en las dos realidades, obedece a la enfermera para quedarse a solas lo más pronto posible y hablar con esa misteriosa mujer idéntica a ella que está en su misma habitación pero a la que al parecer nadie puede ver.

Cuando la enfermera se marcha ambas vuelven acercarse la una a la otra con sumo cuidado y de manera lenta ya que ambas están convalecientes.

—¿Quién eres? —preguntan las dos Marilyn al mismo tiempo.

—¡Norma Jean Baker, más conocida como Marilyn Monroe! —vuelven a decir ambas la vez.

—Yo soy Marilyn Monroe.—dice la rubia.

—No, yo soy Marilyn Monroe. —responde la morena.

—Las dos no podemos ser Marilyn Monroe una de nosotras miente y no soy yo. —dice la Marilyn Monroe morena.

—Oh, sí eres tú quien miente. Marilyn Monroe es rubia y sexy. —responde la Marilyn rubia.

—La verdadera Marilyn es morena. —responde la chica de los noventa.

—No, la que tiene el cabello más oscuro es Norma Jean, Marilyn es rubia. —responde la artista rubia.

—Marilyn es el personaje, Norma la persona real. Pero discutiendo no vamos a solucionar nada. Esto es muy extraño, debe tener una explicación.

—¿Por qué parece que nos atiende el mismo médico pero con unos años de diferencia? Porque si no es el mismo es su hermano gemelo.

—Es muy extraño e inquietante. Incluso la enfermera que entró en habitación hace unos minutos parece la misma pero con unos años de diferencia. Esto da un poco miedo.

—Pero tiene que tener una explicación. —comenta la otra Marilyn. —A menos que...

—¿A menos que qué? —pregunta su clon.

—Quizá todo esto sea un sueño.

—Vamos a pellizcarnos el brazo, si no sentimos nada es que estamos soñando. —comenta la rubia.

—Mejor yo te pellizco a ti y tú a mi. —propone la morena.

–¿No te fías de mi? —pregunta la Marilyn de los ochenta.

—No mucho hasta que no sepamos que ocurre. responde la Marilyn de los noventa.

—Me parece bien, a mi me pasa lo mismo contigo.

En el momento que ambas se pellizcan de manera mutuamente se quejan de dolor.

—Vale. Esto cada vez da más miedo. —dice la Marilyn rubia. —Todo esto es muy extraño. Desde que conocí a Michael de esa manera tan extraña todo ha sido muy raro. —se sincera la Marilyn de los ochenta. —Incluso mi llegada aquí fue...extraña. Esta no es mi época.

—¿Michael? ¿Cómo llegaste a esta época? No entiendo. —pregunta intrigada la Marilyn morena.

—En realidad yo vivo en los cincuenta. Un día en Central Park encontré a un tal Michael Jackson, alguien que en mi época nadie sabe quien es pero que aquí, en los años ochenta, resulta que es un cantante muy famoso, el más famoso del mundo en realidad. Aunque ahora él no está conmigo. No sé dónde está. —se lamenta la rubia suspirando con tristeza. –Y me preocupa lo que le puede pasar porque si podemos ir de una época a otra... Si él por caprichos del destino ha vuelto a mi época puede estar en peligro, sobre todo si alguien llega a hacerse con mi diario rojo.

En ese momento su doble morena se sorprende y se lleva las manos a la boca como haría alguien que no quiere hablar.

—¿Di...diario rojo? —tartamudea la morena. —¿Cómo sabes lo del diario rojo? Nadie lo sabe.

—¿Cómo que cómo lo sé? Porque anoto de todo ahí y si alguien lo descubre...

—Yo tengo también un diario rojo en el que apunto cosas, seguro que Bobby y su hermano querrían saber que hay en él. —asegura la morena.

—Sí, los Kennedy, aunque hay gente con más poder que ellos. Nunca imaginé que ponerme en peligro de esta forma. Aunque yo tengo más gente que me puede traer problemas como Kevin MacAllister. Creen que es una estrella del cine pero en lo que sí es una estrella es en la mentira, el engaño y el acoso. —responde la rubia. —No entiende un no por respuesta.

—¿Y cómo llegaste a los años...ochenta? —pregunta la morena.

—A través del agua, como él llegó a la mía.

Eso intriga a la Marilyn morena y se dispone a escuchar. No va a burlarse porque después de todo la manera en la cual ella y Michael se conocieron, la forma en la que el llegó a su época tampoco es para irla pregonando por ahí. La tacharían de loca y bastante tiene ya con todas las falsedades y los ataques de la prensa. Maldad y ataques de los que por cierto también es víctima Michael. Desde que está en los noventa ha podido leer toda clase de barbaridades de la prensa contra el hombre que ama. Sobre ella han sido crueles pero con Michael están atravesando todos lo límites morales y humanos y presiente que esa situación se va a perpetuar en el tiempo. Es posible que, al igual que él sea un tanto ingenua, pero la maldad y el racismo se les ve en cada titular aunque intenten disfrazarlo de Libertad de Prensa incluso sus rostros los delatan a pesar de sus esfuerzos por aparentar.

—Cuéntame. —desea saber la morena.

—Michael Jackson llegó a mi vida a través del agua.

—¿A través del agua?

–Sí, cuando paseaba por Central Park vi a alguien salir del agua arrastrándose. Era Michael Jackson, el chico de la fuente.

—¿El chico de la fuente? —se sorprende la morena.

—Sí, días atrás, ambos nos vimos sin conocernos en el agua de la fuente Bethesda y luego Michael apareció en mi mundo.

En ese momento la morena hace callar a su clon.

—Alguien viene, rápido.

Las dos se meten en sus camas como buenamente pueden, una cojeando y la otra caminando despacio. Luego cierran los ojos y fingen estar dormidas.

En el mundo de Marilyn, alguien sigue a Jean con no muy buenas intenciones y cuando se encuentra sola y vulnerable se abalanza sobre ella. La joven grita pero nadie parece escucharla ni acudir en su ayuda. Michael por su parte descubre otro secreto que la rubia parece haber descubierto y le horroriza.

—No pueden pretender eso. ¡Esto no es un maldito juego! —se lamenta el joven artista.

En el hospital, cuando parece que ya ha pasado el peligro las dos Marilyn continúan su plática.

—Cuando vi a Michael me di cuenta que tenía un pie herido y le llevé a casa para que mi médico le atendiera. Allí él me confesó que morí pronto. Demasiado pronto. Pero no podía creerle. Cuando llegué acá días después huyendo de Kevin me di cuenta que Michael me había dicho la verdad. —se lamenta la rubia.

—¿Quieres mucho a Michael? —pregunta su doble morena.

—Sí, y más después de la apasionada noche que pasamos juntos. Pero ahora ha desaparecido y estoy muy angustiada. —se sincera la rubia. —¿Y tú como llegaste a..?

—Los años noventa. —dice su gemela. —Encontré un collar tirado en una fuente, en la misma fuente en la que que tú dices que viste a Michael Jackson. El collar estaba tirado allí, es realmente bonito. Tiene forma de corazón y con unas pequeñas piedras rodeandolo. Como no pareció ser de nadie lo tomé, y me lo guardé. Además tenía un nombre escrito ; Michael. Me fui a casa y estando allí sentí un golpe seco contra el suelo de mi habitación. Era Michael.

—¿Michael? —inquiere la rubia.

—Así es. Y también se llama Michael Jackson y es cantante. —dice la chica de rizos oscuros.

—Es demasiada casualidad todo esto.

—Cierto. Vine a parar aquí porque le insistí a él para que me trajera y descubrí que en este tiempo estoy muerta. A mi también me preocupa lo que alguien pueda hacer con mi diario rojo. Extraño a Michael pero es mejor que esté lejos de mí por su propia seguridad, además no pertenezco a este mundo y algún día tendré que regresar.

En ese momento la televisión de la habitación de ambas se enciende sin explicación alguna y las dos ven a Michael protagonizando una noticia, un escándalo en realidad. Una nueva mentira.

"A Michael Jackson le gusta pegar mujeres. "

—¡¡Michael!! —exclaman ambas a la vez.

En ese momento la dos chicas se miran pues se acaban de dar cuenta que están mirando al mismo hombre aunque se vea algo diferente. Eso hace que aumente más la intriga sobre lo que está pasando desde la primera vez que ambas se vieron. Luego la cadena anuncia la emisión en unos minutos de un reportaje especial en el que se hablará del tema de los universos hijos.

—Algunos defensores de esta teoría nos hablarán de como una persona puede vivir dos realidades diferentes en dos mundos distintos o bien cosas parecidas con algunas diferencias.

Las chicas se miran y luego vuelvan a mirar la la televisión.

Lejos de allí, el Michael Jackson de los ochenta llega a Central Park y para debajo del lugar en el que en Navidad se decora e ilumina el árbol tan típico e impresionante de aquellas fechas. En ese instante frente a él ve a alguien que le mira con cierto miedo y confusión.

—¿Cómo me puedo estar viendo a mi mismo como era en los años ochenta? —se pregunta Michael de los 90. —Esto tiene que ser algún truco de cámara oculta de la maldita prensa.

Cuando los dos Michael están a punto de tocarse algo los absorbe a los dos. Minutos después los Michael Jackson de las dos realidades alternativas se ven en 2019 perseguidos por la policía que los confundió con dos peligrosos delincuentes que suelen disfrazarse de famosos para cometer sus crímenes. Mientras huyen de la policía ven en un quiosco una noticia que les impacta.

"Hoy se cumplen diez años de la muerte de Michael Jackson,mas conocido como Jacko Wacko en medio de nuevas acusaciones de abuso infantil en un documental."