- Y solo se trató de eso toda la noche - Le conté a Karla suspirando.

- Amiga... esa familia no es para ti - Dice y yo me quejé.

- Puede que su mamá sea tan diferente a como estoy acostumbrada a ser, se quedó en el sigo pasado -

Ella asiente.

- ¿Y Matías? ¿No dijo nada para detener a su madre? -

Negué.

- Él estaba con su celular, ni siquiera prestaba atención a la conversación -

Ella resopla de manera larga y pesada.

- Creo que... Matías no es lo que buscas... -

- ¿Huh? -

- Si... tú estás intentando cambiar para él, lo he notado, pero... él no ha intentado cambiar por ti... -

- Yo no estoy intentando cambiar por nadie... -

Ya no... ya no soy así...

Ella vuelve a resoplar pero en ese momento nos llaman a lugares diferentes para hacer nuestro trabajo.

Nosotras terminamos la conversación hasta allí y cada una se fue a su área, yo intenté no pensar demasiado en eso, mis días de cambiar para satisfacer a otros terminaron.

Siento como mi celular comienza a sonar y yo lo reviso, era un número desconocido.

- ¿Hola? - Dije al contestar.

- Am... Z..Zaira... -

Fruncí el ceño al reconocer la voz.

- Sé que estás en hora de trabajo y que... no debería hablarte... ¡P..Pero! No sabía a quién más llamar... y yo... -

- Tesha, espera un poco ¿Qué sucede? No importa, solo dilo - Dije.

Escuché una voz ronca de fondo que que parecía decirle a Tesha que colgara pero se escuchaban gruñidos de dolor.

- Es... Hunter, parece que le duele... y no sé que hacer... ¿Qué le doy? ¿Algún remedio? -

- Okey, Tesha, no te preocupes, dale un analgésico, cuando se lo des en unos minutos se le pasará el dolor -

Ella me indica que espere mientras camina rápidamente y busca el remedio, me pregunta si el que tiene sirve y al darle luz verde corre hacia Hunter y se lo da, yo solo escuchaba de fondo como sucedían las cosas.

Unos minutos después Tesha regresa hacia el teléfono.

- Gracias... - Murmura casi inahidinle.

- No es nada... Tengo que colgar -

- Si... lo entiendo - Dice.

Yo me mordí la lengua un segundo.

- Llámame... si necesitan algo más -

- Está bien, gracias, adiós -

- Adiós -

Allí fue cuando colgué la llamada y me quedé mirando mi celular.

¿Cómo consiguió mi número?

***

***

Suspiré cansada y miré la hora, ya podía irme, fui a cambiarme y luego hasta el estacionamiento, esta vez Matías no me esperaba y eso me extrañó pero luego pensé que podía estar ocupado así que llamé a Louis y él vino a buscarme.

Con solo llegar a mi habitación me tiré en mi cama pero solo fueron segundos cuando mi teléfono comienza a sonar y sin mirar quién era contesté.

- ¿Hola? - Dije cansada.

- Zaira ¿Dónde estás? - La voz de Matías me hace sentarme.

- En casa - Respondí.

- ¿En casa? Te has ido sola... ¿No? -

- En realidad, me trajo Louis - Respondí.

No escuché nada de su parte por un buen tiempo.

- Está bien, adiós -

- ¿Eh? Bueno... adi... - Me cuelga sin más y yo miré mi teléfono un segundo.

Le resté importancia por el cansancio, no iba a ponerme a pensar en estos momentos, ya estaba muerta, necesito dormir.