Capítulo 99: Ayuda.
Romeo desvió la mirada, sintiéndose incómodo por la mirada de pocos amigos que Valentino le estaba dando.
— ¿Esta todo bien? —preguntó el rubio, con una sonrisa nerviosa.
— Si...—sin embargo no dejo de mirarlo.
Entonces, el teléfono de Romeo vibró, el chico tomó el celular y comenzó a chatear.
‹ ¿Por qué le contesta a él y a mí no? › se preguntó Valentino, muy molesto porque Aylin le contestaba a Romeo y a él lo ignoraba.
Molestó, tomó los palillos y siguió tejiendo su manta. Cada vez que se aburria en casa, tenía un rato sin nada que hacer o no podía dormir por culpa de los medicamentos para dejar de fumar, tejía un poco de ella. Ya llevaba más o menos un 1 metro x 1 metro de manta, ya podía cubrirse las piernas, pero todavía no estaba conforme.
Se metió un chicle en la boca, sabor fresa, y comenzó a mascar mientras seguía tejiendo una corrida de su manta. Había oído que el chicle ayudaba a mejorar la concentración, pero no esperaba que fuera verdad.
‹ ¿Me cambie los parches de nicotina...? › se cuestionó, recordando que había cambiado a parches de 24 horas a 16 horas hacia muy poco, y ahora estaba algo confundido con las horas ‹No, me los cambie cuando salí de la ducha, y después me tome la vareniclina›
A decir verdad, estaba algo asustado. El tratamiento que el doctor le había dado era por 12 semanas, o sea, 84 días, por lo que el próximo mes dejaría todos los medicamentos que estaba tomando.
Cuando el tratamiento terminara ¿Volvería a fumar...?
Maldita sea, había pasado casi toda su adolescencia fumando, con el tratamiento había podido resistir contra su adicción al cigarrillo, pero-...
Su celular entonces sonó, rompiendo su hilo de pensamientos, y pudo ver la imagen de perfil de Aylin en la pantalla junto a la notificación de "nuevo mensaje".
De inmediato tomó el celular 「 Préstale atención a tus clases (;¬_¬) 」 le escribió Aylin.
‹ ¿Ah? › pensó, algo molesto. Le había ignorado hasta hace poco y le respondía sólo para decirle eso 「 Lo estaba haciendo hasta que respondiste 」
「 Entonces no te molesto más ✧٩(•́⌄•́๑) 」
「 ¿Me vas a dejar el visto otra vez? 」
✓✓ Leído a las 15:52.
Pues si lo hizo...
‹ ¿Esta molesta o algo? › se preguntó, intentando recordar si había hecho algo para que ella estuviera tan cortante con él...
Nada, no recordaba haber hecho algo o haber dicho algo que le hubiera hecho enojar aunque... Bueno, a Aylin se había empeorado el esguince ayer, era normal que estuviera de malas...
‹Si, debe ser eso› pensó, decidiendo que lo mejor sería no molestarla, al menos no hoy.
*Riiiiiiiing*
Suspiró, tomando sus cosas y metiéndolas a su mochila de manera descuidada, pero, por el contrario, tomó su tejido con mucho cuidado y lo dobló antes de guardarlo y ponerlo en el lugar que había asignado para el en su mochila.
— Hasta luego, Valentino —se despidió Romeo, con su celular en manos.
Esto último sólo empeoró su estado de ánimo ‹No me trates como si fuéramos amigos› pensó para sus adentros— Adiós.
Como el maestro había faltado y el maestro Barry había adelantado su clase podía irse a casa directamente. Tomó su celular y entró a la aplicación de Uber.
Por un momento pensó en París, pero rápidamente descartó ese pensamiento ‹Ese tipo tiene entrenamiento› y sin más, programó un viaje. Tenía tiempo, el conductor llegaría en 15 minutos, más que suficiente para-...
— ¡Valentino!
A pesar de que pensó que su humor no podía empeorar más mientras estuviera en la academia, llegó alguien que logró empeorarlo en tiempo récord— Aarón...
Aarón, sin siquiera pensárselo, lo alcanzó y puso su brazo alrededor de sus hombros— Amigo, tanto sin hablar.
— ¿Qué quieres? —cuestionó, apartándose del agarre de Aarón. No estaba de ánimo para lidiar con ese tipo.
— ¿Aun no puedes olvidar eso? —puso mala cara, viendo como Valentino simplemente seguía caminando y guardaba su celular en el bolsillo— Eres un rencoroso, ya te pedí perdón.
—...
— ¿Sabes? Quería pedirte ayuda —aunque intentó ignorarlo, no pudo porque lo estaba siguiendo— Hoy podemos ir a golpear al idiota que se metió con Bianca —se paró delante de él, impidiendo que pudiera seguir caminando y puso su dedo en su pecho— Así que podemos-...
Lo interrumpió— No me metas en tus mierdas, estoy ocupado —gruñó, apartándolo de su camino.
Aarón apretó los puños al ver como este tipo se iba y lo ignoraba— Si no me ayudas, lo haré yo solo...
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