—No quiero —dijo con cierta inquietud contenida en su voz. 
Alzó rápido los ojos hacia él. —¿No quieres qué?
—Que ésta sea la última vez.
—¿Y eso significa…? —preguntó expectante.
—Que no quiero que me dejes.
(Nut) ❤

* * *

[Día 33]

POV ALEC

Pasamos todavía un rato más sólo abrazados y se siente tan bien. Creí que era mentira eso de encajar perfectamente con alguien, que sus cuerpos se acoplen como si fueran uno solo. Pero con Magnus compruebo que es verdad, es posible.

Me sorprende cómo alguien que aparentemente es tan fuerte, lo sé por su voz, por las líneas de su rostro, por su cuerpo que puedo sentir en momentos como éste, pueda derrumbarse tan fácilmente.

Y aun más sorprendente que yo pueda ser quien lo sostenga.

En vez de entrar a comer o cualquier otra cosa, lo guío, sin soltarlo, hasta sentarnos frente a la casa, recibiendo el sol directamente.

Espero que así como calienta nuestros cuerpos, pueda calentar nuestras almas. O al menos la suya.

Al sentarnos, es difícil seguir abrazados, pero el se aferra a uno de mis brazos y recarga su cabeza en mi hombro.

-¿Quieres hablar? He escuchado treinta días sobre tu corazón roto, tu esposo, tus hijos... Pero dime de ti, háblame de Magnus Bane, a qué le teme un ser inmortal, un brujo como tú.

Y cómo ha cambiado todo, que ya no dudo de su palabra, ni me parece extraño estar hablando del tema.

POV MAGNUS

¿A qué le teme Magnus Bane, Gran Brujo de Brooklyn, un ser inmortal?

A la muerte.

A la muerte que me arrebata lo que más quiero. Ragnor. Raphael. Rafa...

A ti.

-No me gusta parecer tan frágil ante ti -en parte es verdad, en parte sólo trato de eludir la pregunta.

-¿No se trata de eso? A mí tampoco me gusta parecer alguien dañado que necesita apoyarse en ti a cada momento, más una carga que una compañía. Pero tú me hablas de enfrentar miedos juntos, de conocernos y aceptarnos. Yo lo estoy intentando tanto como puedo. Pero si tú no puedes contar conmigo, si crees que no soy suficiente...

-¡Eres suficiente! -me aferro a su brazo, tal vez demasiado fuerte-, eres todo lo que yo necesito para poder ponerme de pie y enfrentar al mundo. Eres lo que necesité todo este tiempo. Alexander, tú eres...

El pasa su brazo sobre mis hombros y me atrae hacia él. -Sshh.

Tú eres mi único. Lo único que siempre voy a necesitar para poder seguir.

Tú eres de quién siempre hablo.

POV ALEC

Tengo que pararlo porque no, no puedo ser yo lo que él dice. Un...ciego, como yo, no puede ser lo que Magnus necesita para ser fuerte.

-No lo soy. Tú puedes solo. Has podido solo un largo, largo tiempo durante el cual yo no estuve. Y si no estuviéramos aquí ahora, todavía podrías. Encontrarlas la forma.

-No. No podría. Estuve a punto de rendirme, mi vida era un desastre deprimente antes de encontrarte. Sé que si no te hubiera encontrado... Tal vez...lo habría intentado de nuevo...

-No digas eso. Ya te dije, ahora estamos aquí, vamos a vivirlo sin pensar en lo que pudo ser.

-¿Por qué lo dices tan fácil cuando te ha costado tanto aceptar intentarlo conmigo?

No puedo evitar reír. -Es más fácil decirlo que hacerlo. Es como dar esos consejos que tú mismo nunca sigues.

Él también ríe, pero no dice nada.

-Me gustó pasar la noche contigo, pero no debiste mantenerte despierto. Si estás cansado, podemos dejarlo para mañana...

-Yo nunca estaré muy cansado para ti, Alexander. Adoré cada segundo hablando contigo o escuchando tu respiración, sólo saber que estabas ahí. Tal vez eso es lo que me asusta, que un día decidas no estar. Tú me has dicho que tienes miedo de que un día me canse de lo difícil de esta situación, lo mismo va para ti. Por favor, déjame ser egoísta y prómeteme que, pase lo que pase, no vas a dejarme, no te vas a alejar si sucede algo que no entiendas...

-¿Qué podría suceder que me haga alejarme?

CONTINUARÁ...

qué podría? 🙊