Capítulo II

-Hoseok, ya pasaron dos días desde entonces y no hay señales del cachorro -pronunció el alfa apenas entró a la oficina del cobrizo -Debes llamarlo.

-Nam, creme, sé que es importante -respondió, ya se encontraba lo bastante frustrado como para ir a molestar al alfa -Si voy a verlo ahora, Min me arrancara la cabeza.

-Yo te la voy a arrancar si no lo buscas -atacó el pelinegro -Además, sabes cómo es, si no le dices que hay un cachorro perdido del territorio norte no solo se desquitara contigo, sino también conmigo, y yo valoro mi vida.

-Aun no entiendo cómo es que no lo han encontrado, tengo a dos tropas de lobos buscándolo y pareciese como si se lo hubiera tragado la tierra, ¿Por qué mierda me pasa esto a mí? -lloriqueó el cobrizo, permitiéndose patalear y hacer el berrinche que había estado reteniendo desde ayer frente a su amigo.

-Concuerdo contigo, estas salado -se burló Namjoon acostumbrado a sus rabietas de niño de cuatro años -Pero ya enserio, si no le decimos que pasa, se va a enojar.

-Se enojara de todas formas -bufó con disgusto, desparramándose sobre el escritorio.

-Cierto.

El pelinegro le dio una mala mirada a su amigo para que comprendiera lo que tenían que hacer, tenían que buscar al alfa. Hoseok se levantó de su asiento a regañadientes saliendo del lugar.

Sabía que tenía que hacerlo aunque no le gustara la idea de ser regañado por Min por no cumplir con su trabajo.

El alfa que no sabía absolutamente nada de lo que había ocurrido en los últimos tres días de su celo se encontraba dormido aun lado de un pequeño omega que se hallaba exhausto junto a él.

Ahora las consecuencias de haberse metido con un alfa de rango le estaban cobrando factura sin duda.

Un ruido del exterior logró llamar su atención haciendo que levantara su cabeza y moviera sus orejitas tratando de identificar que producía el ruido y de donde venía.

Hizo el amago de levantarse pero el dolor en sus patas traseras lo hizo devolverse al suelo casi de inmediato, con enojo y sin cuidado alguno, el de pelaje blanco tiró de una de las orejas del alfa hasta sacarle un gemido adolorido seguido de un gruñido que no lo intimido en lo absoluto.

-No me gruña, Alfa -le regañó -Alguien viene.

Eso llamó la atención del alfa, despertándolo por completo, ¿Quién se atrevía a buscarlo?, Sabiendo que nadie debía molestarlo.

Se levantó al sentir un aroma a naranjas ya muy conocido para él por lo que no se preocupó, pero si se imaginó lo peor, pues si Hoseok lo buscaba en su celo era porque algo malo había pasado y él aún estaba en el último día de su celo y quería dormir.

Salió aun en su forma lobuna para encontrarse con su mano derecha.

-Más te vale que sea importante o te arrancare la lengua.

Hoseok frunció el ceño al sentir el aroma del alfa.

-Apestas a omega

-Que novedad -ironizó sentándose en sus patas traseras - ¿Qué pasa?

- ¿Por qué hueles a omega?

-De que te sorprende, tú lo enviaste.

-Amm...no -respondió dudoso el cobrizo -Yo no te envié nada, la última vez que quise ayudarte con eso me mandaste a la mierda y me dejaste haciendo guardia en la frontera por tres semanas, créeme yo no te envié nada.

Min frunció el ceño al escuchar su respuesta, y chasqueó la lengua con molestia.

-Como sea, ¿Qué paso?

- ¿Por qué asumes que algo pasa? -preguntó nervioso.

-Porque si no pasara nada no estarías aquí -respondió con obviedad -Y más te vale que lo sea o volverás a la frontera.

-Quisiera hablar de esto en privado -pidió el cobrizo -Sé que aún falta un día para que regreses pero sabes que no te molestaría si no fuera importante.

Rendido, el alfa tomo con su hocico la ropa que el alfa menor le tendió y se dirigió a la cueva nuevamente.

-Oye, tú...-Sus palabras quedaron a medias al notar que la cueva estaba vacía.

Decidió no darle mucha importancia, posiblemente había escuchado la conversación y se había ido, así que simplemente cambio a su forma humana y se colocó la ropa para salir del lugar.

-Enserio, te juro que si no es importante-

-Lo es, en serio, es muy importante -le cortó su amigo.

Yoongi suspiró mientras asentía con la cabeza, lo sabía, sabía que era importante si Hoseok había accedido a buscarlo y lo entendía pero aun no quería volver.

Ambos se dirigieron a la casa del mayor para poder hablar con tranquilidad, Hoseok comenzó a dar el informe de las cosas irrelevantes que habían sucedido mientras caminaban, la casa de Yoongi estaba alejada del pueblo, casi en medio del bosque por lo que no tardaron mucho en llegar al lugar.

- ¿A dónde vas? -preguntó al ver que Yoongi se dirigía a su habitación en vez de la oficina.

-A darme un baño, estoy asqueroso.

-Pero...yo, es decir, lo que te tengo que decir -balbuceó Hoseok intentando detenerlo.

- ¿Alguien se muere?

- ¿No? -respondió con duda

-Entonces puedes esperar a que me dé un baño, no tardare.

El mayor cerró la puerta de su recamara sin darle oportunidad a Hoseok de responder.

El cobrizo resopló frustrado dejándose caer en el sillón para esperar a Yoongi. Tal y como lo prometió, no pasó mucho tiempo para que el mayor saliera de su habitación completamente limpio y aseado con una sudadera negra y unos pantalones de chándal del mismo color.

Basto solo una señal de parte del mayor para que Hoseok le siguiera a su oficina.

-Bien, ya puedes decirme que eso tan importante -pronunció sentándose en su silla para escuchar la mala noticia.

-Paso algo hace unos días.

- ¿Cuántos?

-Dos días.

- ¿Donde?

-En la frontera.

-Habla, Hoseok.

-Alguiencruzó -soltó tan rápido que Yoongi ni siquiera fue capaz de entenderlo.

- ¿Qué?

-Dije, que... alguiencruzólafrontera.

-Vuelve a decirlo así de rápido y haré que lo deletrees mientras te ahorco -Amenazó, volviendo sus ojos dorados puesto que su lobo aún se encontraba inestable por el celo.

-Alguien cruzó la frontera -respondió por fin.

-Debo haber escuchado mal, ¿Puedes repetirme lo que dijiste? -pidió perplejo y aturdido.

-Alguien del territorio del norte cruzó la frontera hace dos días, mientras estaban en guardia.

- ¿Y cómo mierda paso eso? -Cuestionó pellizcando el puente de su nariz en un inútil intento de calmarse, si seguí así su lobo se saldría de control -Creí haberte dejado a cargo, ¿Cómo es que desaparezco dos días y esto pasa?

-Ni siquiera yo lo sé, la guardia estaba haciendo su vigilancia como de costumbre y escucharon un aullido en la frontera norte y una de mis tropas fue a revisar, al parecer un cachorro cruzó, aunque realmente nadie lo vio.

- ¿Un cachorro?, ¿Es jodidamente enserio? -Preguntó con burla y desconcierto -No me digas que te creíste esa estupidez.

-No me lo hubiera creído si no fuera el mismo Seung Hyun quien me lo dijo.

Ese comentario desvaneció la sonrisa burlona del alfa casi tan rápido como si le hubiera soltado una cachetada.

-Espera, Espera, ¿SeungRi estuvo en la frontera?

-Así es, estuvo en persona y me dijo que quería una reunión contigo para que le devolvieras al cachorro.

- ¿Qué él que? -Yoongi no podía creer lo que sus oídos estaban escuchando es esos momentos - ¿Y le dijiste...?

-Que no.

-Correcto -premió el alfa mientras se concentra en leer la pila de papales que había sobre su escritorio - ¿Y dónde está?

En ese momento Hoseok no pudo sostenerle la mirada por lo que la desvió a una ventana manteniéndose en silencio.

-Ese es el problema -murmuró el cobrizo -No lo hemos encontrado.

En ese momento Yoongi dejo caer la hoja que estaba leyendo para mirar a Hoseok totalmente incrédulo.

-Entonces, déjame ver si entendí -el mayor tomó una bocanada de aire, poniendo toda la información en orden en su cabeza - ¿Me dices que hay un cachorro perdido desde hace dos días y que ninguno de tus grupos de búsqueda ha podido encontrarlo?

-Correcto.

- ¿Y cómo es eso posible?

Hoseok sabía que Yoongi se estaba conteniendo al máximo para no gritarle y sacarlo a patadas, o tal vez solo tenía mucho sueño como para golpearlo.

-No sé porque no lo hemos encontrado, lo han buscado día y noche, tengo lobos en cada frontera y rastreadores pero pareciera como si se lo hubiese tragado la tierra.

-Si es un cachorro tal vez nunca salió del rio, la corriente es muy fuerte incluso para un lobo adulto -Opinó el Alfa.

-También lo pensé pero mandé una tropa entera a revisar el rio y no había rastro de él -Reveló con una mueca disconforme.

-Sea lo que sea, han pasado dos días -mencionó el peligris -Posiblemente ya esté muerto o en realidad no existió tal cachorro y solo es alguna trampa de SeungRi.

-Si es así, encontraremos su cadáver o seguiremos buscando de todas formas -Aseguró Hoseok pero Yoongi ni siquiera estaba prestando demasiada atención, solo se restregaba los ojos continuamente para no dormirse ahí mismo y el cobrizo arrugó la nariz al sentir nuevamente el olor en el alfa -Sigues oliendo a omega.

-Desaparecerá pronto -respondió monótono y talvez uno poco decepcionado.

- ¿Crees que el consejo lo envió? -preguntó refiriéndose al omega.

-Lo pensé, pero tenía un collar y no le veo sentido que le pongan un collar si lo que quieren es emparejarme -explicó el mayor -Tal vez Namjoon.

-No creo, él fue el que me insistió para que fuera a buscarte, si él hubiera sabido que estabas con un omega no habría insistido -el alfa menor llevo una de sus manos a su barbilla pensando en otra posibilidad - ¿Seokjin?

El mayor soltó una risa nasal al escuchar eso, sabía que Hoseok solo lo decía en broma, puesto que su hermano se cortaría una oreja antes de enviarle a un omega, siendo consciente de que Jin es uno de los que estaba encontrar de su emparejamiento a la fuerza.

-Lo dudo mucho, Seokjin es quien se encarga de rechazar a cualquier omega que proponga el consejo -revelo el mayor soltando un largo bostezo, quería echar a Hoseok para irse a dormir de una vez.

-Tu hermano te quiere soltero -se burló el cobrizo.

-Cumple muy bien la tarea que le di.

-Pero gracias a eso tienes al consejo haciendo junta cada semana para hablar de tu pareja -bufó con irritación - ¿Qué tal si ellos lo enviaron pero le pusieron el collar para que no sospecharas de ellos?

-No le veo sentido, no me dijo ni una palabra, más de las necesarias, si hubiera sido plan del consejo hubiera hablado hasta por los codos -respondió encogiéndose de hombros -Además, era un chico, nadie del consejo tiene hijos omegas.

-No hay muchos omegas tampoco, dudo que un consejo tan conservador se haya dado a la tarea de buscar un chico omega para ser tu pareja -concordó Hoseok - ¿Deseas que busque quien lo envió?

-No, déjalo estar, si el consejo lo envió hablaran de él en la próxima reunión -Min frunció un poco el ceño al notar que efectivamente aun olía a frambuesa - ¿Puedes sentir su olor?

-Claro que no, solo siento que hueles a omega, pero no puede sentir su olor, ¿Tú sí? -Cuestionó confundido por la pregunta del alfa -Pero, si dices que tenía collar entonces es normal no sentir su olor.

Yoongi se ahorró el de decir que si, él efectivamente podía sentir el olor del omega sin ningún problema, como si el collar no estuviera ahí.

- ¿Algún otro asunto del que me deba enterar? -Cambió de tema, evitando la pregunta del cobrizo.

-Nada, eso era lo más importante por ahora, y me preocupa que SeungRi intente algo o algún otro lobo intente cruzar.

-SeungRi sabe las consecuencias si intenta cruzar el territorio, no creo que sea tan estúpido.

-Realmente insistió, y aun no me puedo creer que haya ido hasta la frontera por un cachorro, aunque sea el suyo -reveló con preocupación.

- ¿Es su cachorro?

-Eso fue lo que dijo, no estoy seguro si sea verdad, pero lo veo ilógico de todas formas, no iría personalmente por un cachorro ajeno y él puede tener más hijos ¿Por qué molestarse?

-No tengo ni la menor idea -respondió cansado, soltando otro bostezo -Pero por si acaso refuerza la vigilancia en la frontera y que haya turnos rotatorios.

-Lo hare -aseguró el cobrizo - ¿Algo más?

-Nada, iré a dormir, sigues a cargo -Declaró poniéndose de pie y caminar a tientas a su habitación -Y no quiero más sorpresas, Hoseok.

El mencionado asintió seguido de una reverencia para por fin salir de la casa del alfa.

Yoongi tan solo entró a su habitación dispuesto a dormir, pero algo seguía rondando en su cabeza y era un pequeño omega con olor a frambuesas.

El alfa no le había podido sacar ni el nombre, cada que el intentaba hablar el omega se las arreglaba para no responder nada o dar respuestas cortas, no sabía quién era, ni como se llamaba o algo por el estilo, tan solo lo había visto en su forma animal, y no era suficiente para él.

Rodó en la cama tratando de conciliar el sueño pero este parecía no venir a él a pesar de que su cuerpo se lo exigía, sus pensamientos seguían dirigidos al pequeño lobo de pelaje blanco.

Min hizo una promesa con su lobo ese día, encontraría quien era esa persona, necesitaba saberlo, casi como una necesidad, quería seguir oliendo la dulce fragancia que este deprendía, quería seguir acurrucado junto a él, era sencillo de hablar, porque a pesar de que no respondía sus preguntas hacia su persona, si le seguía el hilo de alguna conversación trivial, se sentía como si pudieran hablar de todo y la vez de nada, no había silencios incomodos, al contrario, podían estar ambos en silencio, tan solo haciéndose compañía el uno al otro sin que el ambiente se tornara pesado.

En el fondo pensó que si se hubieran conocido mejor o desde antes, hubieran sido cercanos o quizá algo más, era el primero que no lo buscaba solo por su cargo, ni lo hostigaba hablando de temas personales, el chico no preguntó ni tocó temas de su vida personal, algo que agradecía.

Siempre lo buscaban por la posición de líder, si alguna omega se acercaba a él mayormente era porque le atraía el título de "omega del líder".

Gracias a eso su vida y su entorno habían sido envueltos en una cruel y profunda soledad, se alejaba de las personas y prefería quedarse en casa a ir al pueblo donde solo lo hostigaban con la típica pregunta de si ya había encontrado una pareja a lo que el respondía que aún no era tiempo, se cansaba de que siempre era lo mismo, tanto que ya ni salía del bosque, si el pueblo necesitaba algo o había algún problema, era Hoseok o algunos de los lobos de su tropa los que se encargaban de hacérselo saber, y él se hacía cargo desde casa o en la lejanía de los territorios.

Ya se había olvidado de formar una familia feliz y encontrar a una persona por su cuenta, ya no lo dejaban hacerlo, el consejo se encargaba de buscar una pareja "digna" del líder, algunas veces sus hijas otras veces eran chicas que ellos se encargaba de buscar y que según ellos eran perfecta para ser su pareja y cumplir con las demandas del pueblo.

Se suponía que la pareja del líder también tenía obligaciones y tareas que debía cumplir al pie de la letra para ser aceptada.

Menuda mierda.

Él lo odiaba, porque no quería obligar a alguien a estar a su lado para cumplir caprichos y tareas que le correspondían a él como alfa.

No creía que los omegas fueran débiles, claro que no, pero no quería que la persona con la que se supondría debería ser el amor de su vida tenga que cargar con responsabilidades solo por ser su pareja.

Eso era algo que el consejo no aceptaba, tampoco quería que la gente viera a su pareja solo como adorno porque claro que no lo era, solo que no quería a obligar a alguien hacer eso.

El consejo había aceptado que mientras estuviera soltero alguien más se encargaría de esas tareas, así que las dividió en varios de sus mejores alfas y betas.

Y él pensaba que estaba bien, pero ellos no, cuando se emparejara con alguien esas tareas se le pasarían a su pareja, y ella o él tendrían que cargar con todo eso.

El solo quería a alguien con quien se sintiera cómodo, alguien a quien cuidar y proteger, alguien que fuera su lugar, su persona, alguien para quien estar y que esa persona también estuviera para él.

Lo deseaba, deseaba una familia y un hogar al que regresar todos los días y saber que había alguien que lo esperaba, o al revés, esperar a alguien que sabe que al llegar a casa él estaría ahí para escucharlo y abrazarlo.

Pero tal vez solo estaba soñando demasiado.

Con un poco de tristeza en sus ojos y un hueco en su pecho se durmió sobre su cama, rodeado de su ya tan acostumbrada soledad.

-Por última vez, Jung Hoseok, que yo no envié ni una mierda -Vociferó ya un enojado Seokjin por décima vez esa noche -Y te advierto que si sigues jodiendo te sacare el ojo con una jeringa.

El cobrizo había estado desde ayer molestándolo acerca del dichoso omega, y por muchas veces que lo hubiera negado pareciera como si le entrase por una oreja y le saliese por la otra, Hoseok estaba a punto de ser cruelmente asesinado por un Seokjin muy enojado.

- ¿Pero por qué la agresión? -Preguntó con fingida inocencia recibiendo una mirada asesina en respuesta del castaño -Está bien, está bien, te creo.

-Más te vale hacerlo -reprochó volviendo a guardar la jeringa que estuvo a punto de lanzarle al cobrizo.

-Pero, si no fuiste tú, ¿Entonces quién? -Preguntó al aire mientras se deformaba en el sillón -Ya le pregunte a tu alfa, y el baboso no sabe, tu tampoco, el consejo no enviaría a un chico y-

-Espera, ¿Dijiste chico? -preguntó perplejo el omega, ignorando el hecho de qué llamó baboso a su alfa.

-Yoongi dijo que era un chico omega -respondió Hoseok sentándose correctamente.

-Con menor razón culparía al consejo -respondió con obviedad Jin, rodando los ojos -No enviarían a un chico ni porque les pagaran.

-Es por eso que me parece extraño -murmuró mirando al doctor frente a él.

- ¿Yoongi te dijo que lo buscaras?

-Me dijo que lo dejara pasar, pero sé que estaba interesado en saber quién era el omega -aseguró -Y yo lo descubriré.

-Solo no te metas en problemas -suspiró el mayor -Y que nadie sepa de esto, si el consejo se entera que esta buscando a un chico empezaran a insistir más con las omegas y puedes perjudicarlo.

-Seré cuidadoso -prometió, señalando el trabajo que Jin estaba haciendo - ¿Ya terminaste?

-Sí, solo tenía que acomodar los paquetes de algodón -respondió colocándose de pie -Iré por pay de limón.

-Yo creo que no -una tercera voz se unió a la conversación, Jin miro a su alfa entrar a la habitación con una mirada severa en dirección a Hoseok -Necesito que traigas un botiquín rápido.

Jin se alarmó al ver la ropa de su pareja cubierta de sangre, se acercó a él intentando revisarlo y saber de dónde venía tanta sangre.

Namjoon tomó sus manos, asegurándole que no era su sangre.

- ¿Qué sucedió? ¿Te encuentras bien? -preguntó Hoseok poniéndose de pie.

-Lo encontraron -fue lo único que dijo, dejando Hoseok con un mal sabor de boca.

- ¿Esta herido?

-Estuvo a punto de cruzar al territorio este, hacia la montaña caribú, le habían perdido el rastro pero Chanyeol lo encontró al pie de la montaña, no se dio cuenta de que estaba herido y lo lastimo -informó Namjoon -Necesita un doctor, había mucha sangre.

-Bien, nadie sabe que cruzó, solo las tropas de rastreo y con eso basta, nadie más debe saber esto hasta que Yoongi decida que hacer, mientras tanto, Jin hyung necesito que lo atiendas, Namjoon te encargaras de llevarlo, Yoongi debe estar en junta con el consejo así que iré a avisarle que pasa, nos reuniremos en su cabaña -declaró severo, tomando el papel de segundo al mando que le daba su lugar como el segundo alfa de la manada y la mano derecha de Yoongi.

La pareja asintió a las órdenes del cobrizo desapareciendo por la puerta, Hoseok por su parte salió corriendo en dirección a la sala de reunión donde debería estar un malhumorado Yoongi junto al consejo.

Al llegar al lugar ni siquiera tocó la puerta, tan solo abrió bruscamente interrumpiendo a uno de los integrantes del círculo, recibió varias miradas de desaprobación por la forma tan indebida en la que había entrado.

-Señor Jung ¿Cómo se atreve a entrar de tal forma-

-Mis disculpas, pero es una emergencia -respondió aun con la mirada fija en el alfa.

Yoongi suspiró cansado poniéndose de pie, tal parecía que su día no quisiera dar fin.

-Alfa Min, la reunión aún no termi-

-Estoy seguro que temas tan triviales como la próxima pareja del líder puede esperar a que atienda una emergencia, sus hijas no se aburrirán de esperar la oportunidad -cortó con voz dura y una mirada de advertencia sobre los lobos que estaban en la sala, logrando que un silencio incomodo se formara -Me retiro.

Sin mirar atrás el peligris salió de la habitación en compañía de Hoseok.

-Por favor, dime que era mentira lo de la emergencia y solo querías sacarme de ahí como el gran amigo que eres -pidió o más bien suplicó Yoongi, no queriendo nada con la vida.

Hoseok se sintió horrible al ver el aspecto tan demacrado de su amigo, sabía que el consejo tenía la culpa de que se sintiera tan agobiado, llenándolo de preocupaciones insignificantes o sacando problemas de debajo de las rocas solo para fastidiarlo y hostigarlo.

Ese no era su amigo de hace tantos años, el alfa con el que creció había desaparecido casi por completo, esos orbes ámbar que lucieron en sus ojos alguna vez ya casi habían sido opacados en su totalidad por esa mirada cansina y la depresión, las ojeras adornado su rostro haciendo contraste con la pálida, casi grisácea piel sin vida, y el cabello tan bonito que alguna vez había portado ahora era casi de un tono blanco por lo descuidado que estaba.

Ahora parecía más un cascaron sin vida que un ser humano.

-Me encantaría decirte que así es pero en realidad es una emergencia.

El alfa tan solo suspiró cerrando los ojos y continuando su camino, una vez afuera Hoseok se aseguró de que nadie los estuviera siguiendo para hablar.

-Encontramos al cachorro -informó moviendo la cabeza para asegurarse de que no había nadie a la redonda.

-Ya era hora -respondió con desanimo, siguiendo su camino como si nada, por la mirada de Hoseok se obligó a sí mismo a interesarse - ¿Dónde lo encontraron?

-Lo capturaron al pie de la montaña caribú, al parecer no se dieron cuenta de que estaba herido y lo lastimaron, Seokjin debe estarlo atendiendo ahora mismo, lo llevaron a tu cabaña.

Yoongi solo asintió, debían encargarse de ese asunto sin que el consejo se enterara, o al menos no por ahora.

Sintió una fuerte punzada en la cabeza al imaginarse el problema que ocasionaría si alguien se enterara que había un cachorro del territorio norte en la manada.

Movió su cabeza intentando o pensar en esa posibilidad, si le iba bien el cachorro no sobreviviría y se olvidarían de este asunto como si nada hubiera ocurrido.

Ambos se adentraron al bosque en silencio, debido a que ya era de noche la oscuridad fue la primera en darles la bienvenida, y no fue una molestia ya que a pesar de estar oscuro, ellos tenían la capacidad de ver en la oscuridad sin ningún problema.

Al llegar a la casa el primero en entrar fue Yoongi seguido de Hoseok, ambos se detuvieron en la entrada de la sala al ver la enorme mancha de sangre que había en el suelo.

Eso le dio esperanza de librarse del problema de la forma fácil.

-Veo que si fue grave, siendo un cachorro dudo mucho que sobreviva -murmuró Yoongi, pasando de largo.

-Ya debe de estar muerto -comentó Hoseok al no ver a nadie en la casa más que ellos.

Al entrar en la cocina se encontraron a Namjoon con un cubo de agua en la mano y un trapeador.

-Al fin llegas, voy a limpiar el desastre -informó pasándolos de largo -Jin logro suturar la herida, debe estar arriba.

- ¿Sobrevivió? -cuestionó Yoongi, apenas alzando sus cejas pero sin quitar su mirada inexpresiva.

-Por suerte sí, pero perdió mucha sangre como podrán ver -señaló el moreno.

Yoongi miró su alfombra llena de sangre y soltó otro suspiro lleno de cansancio. No quería lidiar con nada ahora, tan solo quería dormir.

Amaba sus celos por esa razón, a pesar del dolor y el calor incontrolable, eran los únicos días en los que podía dormir sin preocuparse por nada más que no sea dormir y descansar en paz.

-Tira la alfombra y trae una nueva, la sangre no saldrá con facilidad.

-Claro, pero aún tengo que limpiar la barandilla de la escalera y el piso -respondió el moreno.

- ¿Cómo es que ese cachorro pudo sobrevivir después de perder tanta sangre? -Murmuró Hoseok siguiendo el rastro de sangre.

-Hablando de eso, no es un cachorro -reveló Namjoon enrollando la alfombra.

Yoongi frunció el ceño y miro a Hoseok esperando una explicación pero este se encontraba tan sorprendido como él.

- ¿Que? -fue lo único que pudo articular el cobrizo.

-Es pequeño, pero es un omega adulto sin duda -explicó el moreno, dirigiéndose a las escaleras.

- ¿Es omega? ¿Por que no pudimos rastrearlo entonces? -cuestionó Hoseok.

-Tenia puesto un collar, Jin no pudo quitárselo y eso complico un poco las suturas, pero las terminó.

Yoongi sintió un escalofrió horrible recorrerle toda la columna vertebral y explotar en su nuca con fuerza.

No será...

- ¿Qué color era? -fue lo único que pudo pronunciar.

- ¿Color? -se confundió Namjoon.

-Su pelaje -Pidió con desespero, confundiendo a los presentes.

-Blanco por-

En ese momento no supo ni porque o cuando sintió el impulso de correr escaleras arriba, ni siquiera notó que estaba corriendo hasta que ya estuvo frente a la puerta.

Sus manos temblaban pero cuando entró, sintió que el corazón se le saldría por la boca.

El piso seguía manchado de sangre y un cansado Seokjin se encontraba sentado en unos de los sillones acariciando la cabeza del pequeño animal sobre la camilla.

-Lamento lo de tu cama -murmuró Jin señalando con la cabeza las sabanas manchadas.

-Descuida -Pronuncio distraído, adentrándose en la habitación con lentitud, casi con miedo - ¿Él está bien?

Seokjin asintió aunque con un poco de tristeza-Por ahora, pero me preocupa la sangre que perdió, es muy pequeño, no sé si pase la noche.

Aquello se sintió como si le hubiera perforando el estómago y le hubieran arrojado una cubeta de agua fría.

- ¿Tiene esperanza? -se atrevió a preguntar.

-Muy pocas, pero sabes que me gusta ser positivo -respondió sonriente, aunque fue una sonrisa que no llegó a sus ojos.

Así de mal estaba.

-Lo sé, tú vez el sol aunque estemos en un huracán

Jin río ante lo dicho, era verdad, al ser doctor siempre buscaba la forma de ser positivo y ver el vaso medio lleno.

-Este chico está en un huracán, espero que vea el sol -murmuró, acariciando el pelaje del omega.

-También lo espero -Soltó, mucho antes de que pudiera detener sus palabras, estas ya habían salido de su boca sin pedir permiso.

Jin dirigió su vista al alfa frente a él, Yoongi se mantenía con la mirada perdida sobre el cuerpo del pequeño lobito.

- ¿Por qué sigue en su forma de lobo? -volvió a hablar.

-Cuando lo encontré ya estaba inconsciente y no puede cambiar dormido, lo hará cuando despierte.

Yoongi seguía con la mirada sobre el cuerpo blanco manchado de sangre.

- ¿Es él no es así? -se animó a preguntar Jin.

Yoongi no supo que responder ante aquello, solo se mantuvo en silencio y con la mirada perdida. Con mucho pesar negó con la cabeza, haciéndose el desentendido.

Jin bufó, blanqueando los ojos por lo iluso que su hermano era si creía que podía engañarlo.

-Soy tu hermano, sé que es él -reprochó indignado.

-Tal vez deba contarle la lengua a Hoseok para que deje de ser tan bocón -refunfuñó el alfa cruzándose de brazos.

-No puedes culparlo, solo quería ayudarte.

-No se lo pedí -respondió. Arrepintiéndose cuando vio que la sonrisa de su hermano fue suplantada por un ceño fruncido.

-Vuelves a decir esa estupidez y seré yo quien te corte la lengua Min Yoongi -amenazó con severidad.

-Sé que no lo hizo con mala intención pero sabes los problemas que traerá si se enteran-

-Al diablo con el consejo -bramó Jin, aunque Yoongi ni siquiera se inmuto -Si es lo que quieres no te debe preocupar un montón de viejos que se esmera en profesar ideologías de hace 90 años.

-Sabes que no es tan fácil -Respondió con la calma con la que se le caracterizaba, a diferencia de su hermano claro estaba.

-Lo sé -se señaló de pies a cabeza -Soy un omega emparejado con otro hombre, créeme, se lo que es que ese montón de vejestorios te acose y traten de evitar tu felicidad por sus estúpidas tradiciones.

-Pero la diferencia está en que tú si los puedes mandar a la mierda y te dejaran en paz, yo no.

-No lo has intentado, eres el alfa, ¿Por qué te dejas intimidar de esa manera? -Regañó su hermano -Nuestro padre se debe estar revolcando en su tumba.

Yoongi no pudo evitar soltar una risa nasal al escuchar las palabras de su hermano, dejando una sonrisa suave en sus labios.

Jin sabía que era lo máximo que iba a conseguir de las expresiones de Yoongi.

- ¿Tan malo es? -Murmuró el menor de los hermanos.

Aunque Jin sea el mayor, era un omega, así que la responsabilidad le caía a él y solo él. No había día en el que no maldecía a sus padres por no tener otro hijo al que le pudiera dejar el cargo.

- ¿Cómo es que no lo ves? -Preguntó incrédulo el doctor -Mírate, esto es ridículo, ¿Quién eres tú y a donde te llevaste a mi hermano?, El Min Yoongi que yo conocí y con el que crecí no se reprimiría ni cambiaría su propia felicidad porque unos viejos se la pasan jodiendo día y noche, eres el alfa, toma tus decisiones, no dejes que ellos ganen.

Dicho eso, el doctor se puso de pie para dar unas palmaditas en la espalda de su hermano antes de salir.

-La abuela decía: "El que no oye consejo no llega a viejo" Y yo no soy quien para meterme en tu vida, así que tú decides si tomas mi consejo o no -habló su hermano con voz seria, dejando atrás el momento de diversión -No renuncies a algo que desees si luego vas a quererlo de regreso, porque no volverá.

Dicho eso, el mayor salió de la habitación dejando a un pensativo alfa que hacia el inútil intento de ordenar sus pensamientos.

Su vista se dirigió nuevamente al peludo cuerpo que descansaba en la camilla, ¿Cómo habían cambiado las cosas así?

Ni siquiera lo conocía pero se sentía como si fuera lo más preciado que había en su vida, que si es pequeño lobito sobre la camilla se iba su vida acabaría perdiendo todo sentido.

Sentía que si se iba, lo perdería todo.

-No renunciare -le habló en un susurro, a pesar de que sabía que le omega no lo escuchaba -No voy a renunciar a ti.

Y esa era una promesaque se había jurado así mismo no romper, no dejaría que le quitaran esto, enespecial, porque no sabía que era lo que tenía.