Capitulo 4: Vida Previa al Cambio
-Abe-Buchou, hemos terminado de limpiar y ordenar el recinto, no hay nada fuera de lugar que amerite atención.
-Buen trabajo a todos ustedes, ahora pueden retirarse, nos veremos en la siguiente actividad del club.
-¡Hai!
Todas las chicas del Club de Tenis asintieron ante lo dicho por su bella presidenta de largo cabello castaño bien claro que a veces parece rubio y de ojos azulados.
Ya era la tarde un día más en Kuoh, las clases habían terminado hace tiempo en la academia donde solo se quedaron aquellos que tenían actividades del club por el resto de la tarde.
Una vez hecho su trabajo, la chica tomaría sus cosas para luego irse, no sin antes mandar un mensaje a alguien en especial para verse. Ella podría perfectamente pedir que la pasen a buscar en un vehículo para irse a su casa; su familia tiene el poder adquisitivo para hacerlo, pero se había acostumbrado a cierta rutina en ciertos días especiales cuando no estaba ocupada con los deberes de su familia.
Tras salir de la academia, camino un poco por las calles hasta encontrar a quien ya la estaba esperando con una moto...
-¿Cómo estuvo tu día Kiyome?
-Monótono, como siempre, Ise...*Sonriendo, ella se acercó a su querido castaño que la recibió con un escueto beso.
Primero algo de historia... Abe Kiyome es una chica perteneciente a una familia de Domadores de Bestia, de una de esas familias de alta clase del mundo humano que saben de lo sobrenatural, pero que mayormente no están en bandos fijos y solo tienen relaciones de negocios con aquellos como los Clanes Sintoístas, los Gobiernos, los Demonios, ect. De manera similar a las organizaciones de magos.
Ella e Issei se conocieron hace años durante la época cuando el castaño entrenaba por su cuenta su poder de Sekiryuutei antes de unirse a los Dioses Shintos. Fue en un bosque donde una pequeña e inexperta Kiyome estaba buscando bestias que domar por la zona.
El encuentro fue algo cómico por como ella descubrió su identidad como el actual Sekiryuutei, pero al menos no hubo riesgos de que se filtrara su existencia a pesar de que ella compartió aquello con su familia.
Desde ese entonces, solo se veían en ocasiones y durante su entrenamiento con los Shintos, Issei volvió a reunirse con Kiyome tras que ella lo llamara para saber porque no había vuelto a Kuoh y, tras enterarse de lo que hacía, también se unió a dicho entrenamiento y de cierta forma su familia también se unió a los Shintos por la relación de ambos... que escalo con las demás.
-¿A dónde quieres ir antes de hacer las compras para la cena y reorganizar tu apartamento?
-Donde sea, sabes que solo quiero estar contigo.
Con sonrisas claras, se subieron a la moto para empezar su merecida cita...
A veces odian sus trabajos que les impiden estar juntos cuando quieran, pero es el precio de las posiciones que tienen ahora.
----------------------------------------
Por otro lado, en el bosque detrás de la Academia Kuoh...
-¿Eso es todo?*Sayumi detuvo sin problemas varios golpes y patadas de Nimura Ruruko, la segunda Pawn de Sona, de cabello castaño en coletas y la menor de su grupo*¡No basta!*Le asestaría a ella un par de golpes que la hicieron retroceder.
Tras eso, sin voltear, alzo uno de sus brazos con el que detuvo un fuerte golpe que resonó al impactar y que solo la hizo posicionarse un poco mientras ponía algo más de fuerza en su centro de gravedad para no verse afectada por ello.
-Tsk. Pensé que podría darte...*Tsubasa Yura, Rook de Sona, de cabello azul corto y aspecto de marimacho, chasqueo la lengua algo lamentada por el resultado*. Ese Senjutsu es de envidiar.
-Ya dominan mejor la percepción, pero les falta ocultar mejor su presencia con este arte...*Al decir eso, Sayumi detuvo con dos dedos de su otra mano el corte de una espada desde la punta*. Pero tú si has mejorado más, Tomoe-san.
-Ufufufu. Algo bueno viene de ser una desterrada de mi clan...*Fue lo que dijo riendo la chica de cabello castaño-rojizo corto, Meguri Tomoe, Knight de Sona*. Pero esto es otro nivel de lo que normalmente nos enseñan.
-Cada clan, según su jerarquía, tiene diferentes dominios del Ki, pero estos igual siguen siendo inferiores al de los Youkais, que para ellos esto es una segunda naturaleza.
Al decir eso, Sayumi haría fuerza en sus agarres y haría que ambas chicas chocaran entre sí de cara mientras salía de allí con un salto, evitando a tiempo los ataques demoníacos y elementales del par de Bishops Sitri que terminaron impactaron en dos de sus combatientes más capaces que caerían al suelo.
-¡Agh...! ¡Oigan, con cuidado...!*Reclamo Yura.
-¡Lo sentimos!*Fue lo que dijo la chica de largo cabello castaño, Kusaka Reya. La mejor usuaria de magia del grupo Sitri después de Sona en cuanto a ofensiva gracias a su herencia.
-Mejoren más su precisión y el poder redirigir sus ataques a voluntad, antes que su potencia.
Dicho eso, la otra Bishop, Hanakai Momo, de largo cabello blanco y ojos azulados, alzaría un circulo defensivo que lograría bloquear el gran shuriken de viento que les lanzo Sayumi en ese momento. A ella se le da mejor la magia de apoyo que la ofensiva, a pesar de no tener el talento de su amiga.
Ellas eran las siervas de Sona que mayormente entrenan con la hermana mayor del Sekiryuutei; mayormente elegidas por las piezas de la misma Sona que por esta misma, que decidió tener fe en ese extraño fenómeno de las Evil Pieces, y aun ahora les sorprendía lo fuerte que era ella aun siendo humana, ni la hacían sudar. Solo Tsubaki, que cuando podía también se les unía, podía darle mejor pelea y aun así no la ha hecho esforzarse hasta ahora.
Era un poco humillante y a la vez algo motivador el ver como jóvenes de su misma edad o en su rango de edad ser tan fuertes, que sin duda deben de estar en la clase suprema, mientras que el Sekiryuutei actual es de otra liga. Eso solo las hacía ver que no debían conformarse con lo que tienen y que aun ahora, son débiles. El mundo sobrenatural es más peligroso de lo que creyeron y deben estar bien preparadas si quieren proteger a su ama que les dio un mejor sentido a sus vidas.
-¡Ah...! ¡Suficiente...!*Ya algo indignada, Ruruko se recompondría y...*¡Iré con todo! ¡Promotion Queen!
Tras sentirse el cambio en su aura, se vería como la pequeña chica cargo sus puños y pies con aura demoníaca, para así ir al ataque de nuevo a gran velocidad contra Sayumi, quien ahora la bloqueaba y esquivaba con un poco más de esfuerzo que antes, pero aun así no era suficiente para ponerla en aprietos.
-Veo que has mejorado, pero aun no basta...*Detendría a la chica tras atrapar sus puños y hacer fuerza contra ella*. Aun no dominas bien esa promoción y se ve que tu mayor fuerte es la velocidad y los ataques rápidos que parecen superar a los de Tomoe-san, antes que la fuerza, pero... se ve que tu velocidad es menor a cuando solo te promocionas a Knight, aun no logras un equilibrio con la pieza más poderosa que solo te desgasta más. Mejor usa un combo de promociones.
-¿Oh? ¿Cómo no se me ocurrió? ¡Ah...!
Sayumi habría pateado a Ruruko en ese preciso momento para así esquivar los ataques mágicos de Momo y Reya saltando alto... Sin embargo, Yura aparecería de repente frente a ella, lista para golpearla con su puño bien cargado en su aura...
Pero ella detendría aquel golpe con su mano cargada en Touki sin esfuerzo, sin embargo...
-¡Ahora!*Grito la peliazul con una sonrisa.
Sayumi notaria como Tomoe y Ruruko la atacarían por la espalda, pero... Sonrió ante ello. Nada mal, pero...
-¡No basta!*Con fuerza y girando en el aire, ella haría que Yura quedara en medio del ataque de sus compañeras.
Estas últimas al ver ello se alarmaron y cesaron sus ataques, cosa que aprovecho Sayumi para golpear a Ruruko y Tomoe con Yura, manda a estrellar a las tres chicas al suelo. Además de lanzar dos pequeñas y rápidas ráfagas Touki que impactaron a Momo y Reya, antes de que pudieran siquiera hacer nada, mandándolas al suelo.
-Game Over...*Sayumi sonrió de medio lado de manera casi imperceptible.
Se ve que las chicas de Sitri han aprendido a sincronizarse mejor en la batalla y que el trabajo en equipo es su mayor fortaleza para compensar su falta de poder, cosa contraria al grupo Gremory...
Pero igual les falta para estar en un nivel decente para ella.
-------------------------------------
Más tarde...
-Siento un poco el desorden de la casa.
-No te preocupes, empezamos cuando tú quieras.
Tras concluir su cita donde fueron al parque de atracciones de la ciudad y de hacer las compras, Issei y Kiyome fueron al departamento de esta última que estaba algo avergonzada por el estado del mismo, el cual tenía todavía varias cajas sin ordenar y que debían estar en sus respectivos armarios.
Aun así, el apartamento era perfectamente habitable para una o incluso dos personas. Estaba equipado con una cocina, un pequeño baño, una habitación y una sala, bastante simple pero confortable.
-Pues entonces empecemos por deshacer esta caja y ordenar en ese armario.
-Bueno, cuanto más pronto mejor.
Issei seguiría las indicaciones de Kiyome que fue primero a dejar las compras en la cocina mientras su amado castaño comenzaba a sacar cosas de dichas cajas y ordenarlas poco a poco.
Así fue por un par de horas, todo iba bien hasta que de una de las cajas que había repartidas por la sala el castaño sacó lo que recordaba que era la falda que pertenecía al uniforme del club de tenis de la academia Kuoh de su amada domadora, que en esos momentos estaba ordenando algunos libros en su estantería hasta que se giró y vio como Issei sostenía en alto la falda que usaba cuando jugaba al tenis.
Su reacción más rápida fue sonrojarse levemente de la vergüenza, pero eso cambió cuando dio paso a una sonrisa de lado en su boca. Sin duda Kiyome aprovecharía para avergonzar un poco a su novio compartido.
-Ise... ¿Podrías dejar de observar mi falda tan intensamente?*Su pregunta saco de su ensoñación al castaño, haciendo que este se altere un poco.
-... ¿Me culpas?*Tras guardar la prenda, intento buscar cualquier otra cosa*. Los viejos hábitos no mueren... y sabes que me gusta verte con esa falda.
-... Ero-Dragón...
Issei bajo la cabeza algo apenado ante lo dicho por una algo ruborizada Kiyome que rió ante aquello... a veces su honestidad podía sacar a una de cuadra, pero no se quejaba... Es bueno ver que aun ahora, sigue siendo hermosa para él.
Luego de ese pequeño momento, la chica tomaría un puñado de libros y se dispuso a situarlos en la estantería, aunque ahora necesitaba una pequeña escalera para ordenarlos.
Fue en ese momento donde se le ocurrió algo antes de llamar a Issei, por lo que se estiro de más para colocar bien un libro y acabó resbalándose y cayendo de la pequeña escalera.
Issei, quién estaba al lado, pudo escuchar el grito que dejó salir Kiyome, por lo que no tardó en evitar que esta se hiciera daño, poniéndose entre ella y el suelo para sostenerla.
Unos pocos segundos tras la caída, podía oírse leves quejidos de dolor que venían de Issei y Kiyome.
-Lo hiciste apropósito ¿No?*Al decir ello, él apretaba cierta parte muy suave de su amada domadora.
-¡Kya...! ¿Quién sabe?*Fue lo único que ella dijo con una risa divertida al sentir el leve apretón que ejercía la mano de su amado castaño sobre su pecho izquierdo.
Entonces, Issei y Kiyome juntarían sus labios en otro escueto y más intenso beso, que solo duro unos segundos antes de separarse por aire.
-Creo que... la reorganización puede esperar...*El Sekiryuutei gruñiría un poco al sentir como ella besaba su cuello y apretaba su cuerpo contra él.
-Eso es un hecho...*Siendo más audaz, la domadora se deshizo de la camiseta que llevaba, dejando al aire su busto, el cual estaba bastante apretado por el sostén de color gris que llevaba.
Donde tras desvestirse y acordar como comenzar...
-Grrr...K-Kiyome...*Gemía Issei al sentir como la domadora comenzaba a lamer su miembro.
Por lo que este inmediatamente correspondió a su novia y también empezó a atender la intimidad de esta.
-Hmmmm... Aaah... Ise...*Ella gemía ahora al sentir la lengua del castaño en su interior.
Así estuvieron en esta posición por varios minutos, en los cuáles, ninguno de los dos se dejaba dominar tan fácil.
Por parte de Issei, este cada vez intentaba hundir más su lengua entre los pliegues de la castaña sin ninguna pausa. Siguió así hasta que decidió atacar el clítoris de Kiyome con sus dedos mientras continuaba usando su lengua, disfrutando de los gemidos de su novia domadora.
Kiyome tampoco se quedaba atrás, la chica comenzó con lentas lamidas por todo el largo del miembro de su novio compartido. Con cada gruñido que él hacía, ella se veía más confiada y valiente, por lo que comenzó chupar y tragar con más ímpetu el miembro del castaño.
Eso hasta que sintió como Issei usaba una de sus manos, la cual había dejado de apretar su trasero, y la llevó hasta su clítoris. Esto provocó que ella soltara un gemido que fue inaudible, ya que en ese momento tenía la erección del joven castaño.
Por lo que ella decidió subir también un nivel de intensidad, así que conociendo los gustos de su novio la domadora puso el miembro entre sus dos grandes pechos y comenzó a darle una paizuri.
-Guuuuh. Kiyome... eso se siente... estupendo...*Gemía Issei dejando de atender por unos segundos la intimidad de su novia castaña.
-Me alegro de que... Aaah... Te guste... Hmmm... Ise...*Hablaba ella entre gemidos cuando sintió como él movía su lengua y sus dedos con más ferocidad.
La chica sentía que su clímax estaba por llegar. Ella no quería terminar sola por lo que comenzó a chupar la punta del miembro de Issei cuando esta se asomaba de entre sus pechos.
Con un último grito, ambos se corrieron en la boca del otro. Issei llenó la boca de Kiyome con su semilla y ella también vació sus jugos en la boca de él.
Tras llegar al clímax, la pareja se recompuso por unos segundos hasta que Issei vio como Kiyome se movía un poco y quedaba en cuatro, con su bien formado trasero apuntando hacia él.
-Vamos~... ven Ise~...*Hablaba ella mirando por sobre su hombro con una mirada tierna y de enamorada a su amado.
El castaño no pudiendo resistirse al pedido de su novia se posicionó detrás de esta, alineando su miembro con la entrada de ella.
-¿Sabes? Siento que nunca tengo suficiente de ustedes.
-Je. Ni nosotras...
Tras darse otro beso, Issei le dio una fuerte estocada que la haría gemir fuertemente, seguidamente de más de lo mismo.
Con el pasar de los minutos, Issei comenzó a tomar más velocidad en sus estocadas, lo cual producía un sonido húmedo cuando su cadera chocaba contra Kiyome.
-I-Ise... mas... por favor...
-Grr...
Aun gruñendo y gimiendo, Issei acato lo dicho por Kiyome mientras se inclinaba hacia delante y capturaba con sus manos los grandes pechos de la tenista.
La chica no pudo evitar que más gemidos salieran de ella al sentir los fuertes apretones del castaño en sus pechos, o el cómo este jugaba con sus pezones.
-¿Lista para ser domada?
-Ara... quiero verte intentarlo...
Ambos comenzaron a mover sus caderas en perfecta sincronización para resolver quién sería el domador y quién el domado... Así se divertían...
Así fue como durante unas horas lo único que se escuchaba salir del apartamento de Kiyome son los gemidos y gruñidos de la joven pareja.
-------------------------------------
Unos días después...
Ya era un nuevo día en la ciudad de Kuoh, varias semanas después desde que Asia se unió a la academia y se integró completamente a la vida sobrenatural con Issei y su grupo.
Y actualmente, Issei caminaba a la escuela, solo como de costumbre. Donde al llegar a la academia, empezó a recibir las miradas de un buen número de los estudiantes, tanto chicos como chicas, cosa que no lo sorprendía tanto. Desde que se supo que tenía novia, siendo esta la prima de Akeno, ha tenido más atención que nunca, pero al menos el tema ya se está enfriando y a la vez causo que él y Kiyome tengan que limitarse en la academia. Aunque... siente que las miradas de algunos son por otra razón...
Al llegar a su salón, inmediatamente recibió las miradas de todos los estudiantes del salón, cosa que comenzó a incomodar un poco a Issei, quien fue a su asiento y Asia estaba en su respectivo lugar.
-Hola, Ise-san.
-Hola...*Le saludo sin ánimos, sentándose en su lugar.
Todo eso mientras los chicos se burlaban de Issei, ya que ellos sabían algo. Se preguntaran ¿Qué saben? Bueno...
-Jajajaja. Tal parece que los rumores que infundamos sobre ese imbécil de Hyoudou abusando de las chicas del Club y del Consejo han surtido efecto...*Dijo el chico calvo regocijándose.
-Tienes razón... Fue una buena idea decir que a pesar de tener novia, él había descubierto un secreto de las cuatro Onee-samas y que con eso él las estaba chantajeando y obligándolas a hacer cosas pervertidas al no tener suficiente... que sus garras incluso se habían clavado en Koneko-chan, la mascota de la escuela y la obligo a tener relaciones sexuales con él a pesar de tener un cuerpo pequeño sin escuchar sus suplicas...*Dijo el chico de gafas en igual estado.
-Por último, ataco a la nueva ángel que había llegado a la escuela, entrenando su cuerpo para darse un festín variado... Pufff. Jajajajaja ¡Como disfruto ver que sufra!*Dijo nuevamente el calvo.
Issei ignoraba los supuestos chismes que se decían entre todos, aunque se le hacía un poco sospechoso que las chicas lo estén mirando ahora con cierto cuidado y susurraban entre ellas, cosa un poco rara. Pero en lugar de ser incomodo, era un poco molesto.
Pero dejando eso de lado, se puso a repasar sobre el progreso de los jóvenes demonios, los que si entrenaban. Y van por buen camino para al menos responder al ataque de seres más fuertes y mejorar sus capacidades perceptivas. Incluso vio que aun siendo más débiles que él, cada uno tenía talentos que él no tenía, como Kiba que es el mejor con la espada y no duda que un día lo superara, pero lo que más lo retiene es que no tiene un arma de calidad como su Shusui, por lo que el entrenamiento para que alcance el Balance Breaker es cada vez más intenso, al igual que mejorar su capacidad de creación para la calidad de sus espadas.
A Saji siente que solo debe presionarlo aún más mientras que Asia está mejorando en el uso de su Sacred Gear gracias a la información que Rias pidió de Grigori de parte de su hermano, que sigue negociando con los líderes del Cielo y Grigori. Algo que la propia pelirroja desaprobaba en algo, demostrando un poco su inmadurez de no ver a los del Cielo y Grigori como enemigos a pesar de que no tiene prejuicios ni discrimina, eso es más por preocupación de que todo salga mal y que se reanude la guerra. Algo que desean muchos en la nobleza y que los Maous tratan de cambiar. Lo mismo en las otras dos facciones.
Pero en fin, dejando de lado que no ha podido hablar con Akeno del tema de su relación con Suzaku junto con otras chicas, de la cual también se enteraron Rias y Sona por alguna razón que no paraban de verlo feo; hoy solo era otro día mas en su monótona vida y... de repente, una fuerte pulsación se hizo presente en su brazo izquierdo, un fuerte ardor lo azotó, nunca había sentido algo como esto.
Issei entonces se levantó estrepitosamente de su asiento, preocupando un poco a Asia.
-¿Te encuentras bien, Ise-san?*Ella le pregunto aquello nerviosa y preocupada, pues se había tomado con gran fuerza su brazo izquierdo.
-Sí...*Le respondió incómodo por el dolor*. No te preocupes Asia. Iré a descansar un poco en la habitación del club.
Salió apresuradamente del salón de clases ante la risa de los chicos y la intriga de las chicas. No se sentía del todo bien. La mejor opción era ir a descansar a la enfermería, pero no le apetecía ir. Siguió su camino hasta salir del edificio de la Academia y dirigirse al antiguo edificio, el cual es la sede del club de Rias, que dijo que podía ir cuando quisiera.
-Ddraig, dime que me pasa ¿Por qué siento este dolor?
-[Eso es debido a tus instintos de dragón, o mejor dicho los míos. Esto pasa cuando el blanco y el rojo establecen una conexión, ambos dragones se llaman entre ellos mismos con el fin de luchar nuevamente. Lo que tú sientes es mi deseo de vencer a Albion]
-Idiota, suprime ese deseo por ahora.
-[Aunque quisiera hacerlo no puedo, no puedes reprimir el deseo de un dragón]*Ddraig fue bien claro en eso mientras Issei entraba en el edificio*[Sabes bien la oportunidad que tenemos y... ¿Quién sabe? Tal vez Albion y su poseedor nos estén vigilando desde lejos, y por eso de esto. Ya deben de saber que sabemos que están con Grigori]
Sí, eso puede ser cierto. Sabían eso gracias a Suzaku, que hace años tuvo un encuentro que un primo suyo que ella desconocía hasta hace poco que estuvo involucrado en una situación con varios miembros exiliados de las Cinco Grandes Familias y una extraña organización. Dicho primo de ella estaba también con Grigori y era poseedor de una Longinus, además que este le revelo a ella que el actual Hakuryuukou estaba con ellos. Y ella aun hasta ahora no le ha dicho que su lado tiene al actual Sekiryuutei.
Pero parece que ya lo saben, no duda que por Raynare y esas caídas a las que ayudo hace un par de meses. No puede recriminarles nada por seguir órdenes, pero... a este paso, solo falta el Cielo para que todo el lado bíblico sepa que el Sekiryuutei está con los Dioses Shintos, la segunda facción más poderosa y a la vez la más grande de todo el mundo. Toda una potencia de temer.
Pero bueno... entro rápidamente y se dirigió al sillón para poder descansar un poco. Cerro sus ojos con pesadez mientras debatía un poco de si matar o no al actual Hakuryuukou, hasta que el ruido de la ducha capto toda su atención. Alguien está aquí.
Su curiosidad fue grande, por lo que rápidamente se dirigió a la ducha para poder visualizar mejor a su acompañante. Fue ahí que todo su mundo se detuvo. Akeno se encontraba dentro, podía apreciar claramente su figura desnuda siendo cubierta levemente por el vapor del agua caliente.
Rápidamente intento irse de allí, pero...
-Puedes entrar, Ise-kun...*Ella corrió la puerta del baño, revelando su espléndida desnudez*. Entra, no muerdo...*Su mirada lujuriosa lo envolvió.
Hipnotizada por la figura de ella que sin duda se veía igual a la de Suzaku, el Sekiryuutei acato lo dicho por la chica y entro a la ducha tras quitarse sus zapatos y que Akeno cerrara la llave. Ella con su cuerpo mojado se posicionó detrás de él, empezando así a retirar sus prendas, el saco, la camiseta blanca y la roja que llevaba puestas fueron retiradas, dejándolo con su abdomen y brazos libres.
Luego, se posicionó frente a él, que sentiría el tacto de sus grandes y hermosos senos en su pecho, ella fue bajando sus manos hasta llegar al cierre de su pantalón, lo soltó y fue bajando dicha prenda junto con su boxer, dejándolo totalmente desnudo como ella.
Rayos, solo espera que Suzaku nunca se entere de esto, ya que siente una gran ansiedad por todo esto.
Akeno entonces abrió de nuevo la llave, dejando caer el agua sobre ambos. La sensación de tomar un baño junto a una hermosa chica no era ajena para Issei, pero igual indescriptible al tratarse en esta ocasión de una chica que no es de su harem.
La prima de Suzaku entonces lo abrazo fuertemente por la espalda mientras iba dejándole besos en su cuello, hasta llegar al lóbulo de su oreja izquierda, para luego susurrarle...
-Ise-kun, eres muy cruel...*Su tono seductor lo derretía lentamente*¿Por cuánto tiempo me estuviste viendo la cara y cuando pensabas decirme lo de Suzaku-nee? Incluso Rias sigue algo molesta por eso.
-... No preguntaron...*Fue lo único que dijo a duras penas, ya que su cuerpo estaba cediendo a sus deseos. Cosa que no pasaría si la prima de Suzaku no fuera de esas mujeres fuera de su harem que le llaman la atención y que puede decir que quiere agregarlas, pero...
-¿Ara? ¿Esto es...?*Al presentir que fue lo que sintió, Akeno lo abrazo nuevamente, haciéndole sentir el tacto de su busto en su pecho y la opresión de sus entrepiernas*. No me molestaría entregarme a Ise-kun en este mismo baño. Si lo pienso más detenidamente, es muy excitante la idea de que nos atrapen en el acto, esto despierta a la masoquista que hay en mí.
-... Suzaku y las demás me matarían... no sin antes castrarme.
-Ara ¿Y crees que puedes ignorar el problema? Además, creo que tú te estas frotando contra mí.
-... ¿Y-Y que asegura que no eres tú?*Issei en verdad trataba de no ceder, pero su cuerpo lo traicionaba.
-Tú eres el que tiene la erección.
-Esa es una reacción biológica ¿Quieres decirme que no debería estar reaccionando así ante una mujer hermosa y sexy?*Sus palabras habrían generado un tenso silencio entre él y Akeno, que...*. Oh no ¿Por qué dije eso?
-[Eres un idiota, por eso]*Ddraig parecía divertirse con su dilema, como siempre.
-Oh... eso no es un cumplido que esperaba escuchar en estas circunstancias, pero aun así gracias.
-Sería bienvenido si detuviéramos esto. En este punto, se está volviendo demasiado embarazoso.
-Ufufufu. No lo creo...*Akeno reiría un poco*. De hecho, creo que sería una mentira decir que no queremos ir más allá de esta escena tonta que estamos haciendo juntos.
-No.
-Mentiroso~.
-¡No!
-Entonces dime que no me quieres.
-... ¿Qué?*Okey, no espero esas palabras ¿Acaso ella vio que la deseaba?
-Te amo, Ise-kun. Amo tu fuerte personalidad, amo tu torpeza con algunas de mis peculiaridades, amo lo feroz y poderoso que te sientes cuando me agarras y... te deseo...*Proclamó Akeno sin dudarlo, su rostro enrojecido en el gran paso, pero todavía parecía segura de su forma de pensar*. Si no quieres seguir adelante, entonces dime ahora que no me quieres. Solo dame una respuesta y terminaremos con esta farsa.
-... Aken-...
-Admito que puedo ser particularmente agresiva, y que en este momento mi mente está influenciada por el hecho de que quiero algo largo y grueso para llenar mi interior...*Interrumpió la joven*. Pero he estado pensando en esto por un tiempo, y creo que es hora de que me des una respuesta ¿Me amas o no?
Podría decirle que no y... luego ser un idiota porque la razón por la que no iba a hacer esto es porque Suzaku lo mataría, cuando ella le dio vía libre para tener más mujeres siempre que les avisara primero, y...
-Suzaku, ella...
-Compartiría. No me importaría que llevaras amantes y... ciertamente me encantaría tener a alguien como ella con quien compartir la cama. Cuantas más, mejor.
-No sé si lo aceptaría.
-Tú... subestimas severamente su determinación y amor por ti...*Akeno desacreditó con confianza*. Definitivamente estaría abierta a eso.
-¿Y tú...simplemente...aceptarías eso?
-Ise -kun, podrías dudar de mi resolución en este momento debido a las circunstancias, pero...*Ella se inclinó, su cálido aliento en su oído rápidamente lo hizo temblar un poco*. Realmente quiero que me domines ahora mismo. Quiero que pongas tu jugosa y gorda polla dentro de mí y rasgues mi pureza. Ahora mismo, dentro de este baño o en la habitación para dormir del club, quiero que me conviertas en tu puta. Quiero esto bien ahora...
Vale, eso sí que lo dejo sin palabras, y... gruño al ahogar un gemido tras sentir como ella lo acariciaba allí abajo y frotaba su cuerpo contra el suyo. Aun luchaba por no ceder, pero...
-[¿Un consejo cachorro?]*Esa voz que no era la de Ddraig... la reconoció...*[¡No seas idiota y tómala de una vez!]
-¿¡Pero qué cosas dices Belzard...!?
-[Ella te dejó en una situación en la que si te niegas ahora, serías el mayor idiota. También tiene razón al decir que a Suzaku no le molestaría esto. Hasta puedo decir que ella ya se esperaba esto y solo espera que se lo digas]
Bien, no tiene forma de contradecirlo, y... al diablo, si muere, que sea a lo grande. Pero igual a veces odia ser un dragón joven.
-Akeno...
-¿Hai?
Issei suspiro, sabiendo que seguramente sería incómodo manejar esto desde este punto en adelante.
Entonces fue y capturo los labios de ella en un poderoso beso. Akeno pareció brevemente sorprendida por la respuesta directa, sonriendo rápidamente ante la fuerte respuesta a su pregunta. Su lengua luchó felizmente contra la de ella mientras profundizaba en su boca, saboreando su saliva mientras ella hacía lo mismo con él.
Akeno gimió, ansiosa y deseando más que ese beso humeante. Con sus manos soltando sus brazos, sus palmas vagaron arriba y abajo, con la derecha tanteó un poco el miembro de Issei, midiendo su tamaño.
El castaño no se quedó inactivo, con sus propias manos apretando sus abundantes pechos, enviándola a un estado puro de felicidad con lo rudo que estaba siendo. Sabía lo suficientemente bien que Akeno era una masoquista, no una completa, pero aun así era capaz de sentir placer a través de la aspereza. Sus gemidos hicieron que todo el beso fuera más dulce para que él lo disfrutara.
Muy pronto, la respiración de la chica se hizo más pesada mientras se preparaba para ser atravesada por él.
-Ise-kun. Quiero que... seas gentil al principio... ¡Pero luego puedes follarme tan fuerte como puedas~!
Podía imaginarla diciendo eso, o tal vez si lo hizo, pero en su mente. No importa. Issei asintió con la cabeza y se alineo con ella. Estaba bien lubricada por la humedad, por lo que entrar al interior resultó ser increíblemente fácil. Hizo una pausa mientras se adentraba, esperando que ella se tensara de dolor y le pidiera que se detuviera. Pero para su sorpresa, Akeno realmente hizo algo inesperado.
En lugar de retroceder de dolor por haber sido desflorada, en el mismo instante en que hizo una pausa para permitir que se 'recuperara', Akeno tomó la iniciativa y golpeó todo el miembro profundamente dentro de ella. Ella se tensó y de repente Issei se sintió abrumado por lo apretada que estaba realmente.
-E -Eso se sintió bien~...*Riendo, ella lo miraba con un brillo travieso.
Oh cierto, masoquista. No esperaba su capacidad para sentir placer a través de ese primer paso tan desagradable, pero su entusiasmo finalmente lo sacó de su desgana por el hecho. Akeno gritó de alegría cuando Issei comenzó a embestirla sin descanso. No trato de acelerar el paso lentamente para que ella pudiera acostumbrarse a la sensación, decidiendo ser lo más rudo que pudiera. Y por la reacción que estaba obteniendo de ella, la chica seguro que se estaba divirtiendo con su patrón.
Golpeando su ingle con la suya, Issei sentía que su interior se apretaba por el calor y la humedad que había dentro de su abertura. Se sentía tan claro que estaba tratando de ordeñarlo lo más fuerte que podía, por lo que hizo un plan para que ella terminara antes que él.
Fue una carrera difícil que estuvo a punto de perder teniendo en cuenta lo resistente que parecía ser Akeno en su duro arado, pero pronto sintió como ella llego al clímax antes que él.
No le tomó mucho tiempo para que él hiciera lo mismo y la llenara. Sus gemidos se triplicaron mientras seguía dándole mientras cambiaban de posición.
Pronto la sostuvo para que se inclinara a un lado, así que tenía las palmas libres de agarrar su delicioso trasero. Le dio solo un apretón... y una bofetada. Una poderosa en eso. Su boca se abrió y su lengua apareció a través de sus labios mientras Akeno mostraba lo mareada que estaba ante la idea de que la azotaran durante la sesión, igual a Suzaku que era la que más disfrutaba eso. Parece que las primas tienen las mismas zonas erógenas.
Así que eso hizo y siguió haciéndolo hasta que le hizo un creampie por segunda vez. Se estaba entregando a la actividad tanto como podía en este punto, sintiéndose particularmente más preparado con cuánto había estado trabajando en su resistencia y podría alardear de eso dándole a Akeno la mejor primera vez que podía pedir.
Entonces, cambio de posición una vez más, adoptando una versión más dura del estilo perrito. Sosteniéndola por las muñecas, la hizo seguir el ritmo mientras golpeaba sin piedad su hambrienta intimidad que le exigía aún más.
Y antes de que se diera cuenta, sucedió algo increíblemente extraño. Su mente se volvió un poco mareada mientras aumentaba su intensidad, sintiéndose como un reo libre después de tanto tiempo, buscando disfrutar de una buena mujer.
Akeno estaba tan fascinada por el placer que le estaba dando Issei, que soltó sus muñecas y la levanto con cuidado, levantándola por encima del suelo y en el aire. Acababa de ver un par de veces cómo se hacía un Congreso Suspendido, pero el resultado fue... divino. Su lengua estaba tratando desesperadamente de encontrar seguridad en su boca en el momento en que sus caras se acercaron una vez más, y mientras se besaban locamente como dos amantes traviesos, Issei comenzó a follarla sin sentido mientras ella colgaba en el aire gracias a su propia fuerza.
Todo esto se estaba volviendo más complicado de lo que se esperaba, ya que la sesión era tan intensa y prolongada.
Para cuando terminaron con esto, Akeno estaba teniendo dificultades para formular palabras, simplemente mirando a Issei que noto que ella ya no podía más. Normal para la primera vez, pero no duda que después ella será tan salvaje como Suzaku.
Le dedico a ella una sonrisa mientras respiraba con dificultad mientras trataba de calmarse después de los poderosos golpes a los que fue sometida. Perdió la cuenta de cuántas rondas habían pasado, pero...
-I-Ise-kun...*Llamó Akeno en voz baja*¿Vamos al otro cuarto? Quiero descansar contigo mientras me abrazas.
La invitación fue recibida con un asentimiento, por lo que salieron tras cerrar la llave y que el agua los limpiara, con Issei cargando a Akeno al estilo nupcial. Vio rápido la hora antes de entrar a la habitación, al menos terminaron antes de que culminaran las clases y alguien viniera.
Sabía que tendría que poner muchas excusas para encubrir lo que sucedió hoy y llamar a Suzaku después. Le había dado un día salvaje a la pobre Akeno y la dejo completamente querida por él. Si antes tenía dudas, ahora no había espacio para eso.
Ahora era el momento de encontrar una manera adecuada de manejar el cambio de la mejor manera posible.
---------------------------------
Al día siguiente
Ya después de clases, en el Club del Ocultismo...
-Supongo que podemos comenzar con la reunión.
La nobleza de Rias estaría detrás de ella que estaba sentada en uno de los muebles del lugar, con Sona sentada frente a ella en el otro mueble y su nobleza detrás de ella... Issei y Sayumi estaban un poco apartados viendo todo lo que pasaba.
-Así es...*La Sitri tomaría la palabra, comenzando a leer un papel que le había entregado su Queen*. Debido al incidente anterior, la barrera alrededor de la ciudad ha sido fortalecida y se aumentó el personal de seguridad de los sirvientes leales a las casas Gremory y Sitri en las fronteras de dicha barrera, que vivirán allí... Y los Shintos también piensan mandar personal de Youkais como precaución.
Es normal que se piense en aumentar la seguridad de la ciudad, ya que por aquellos caídos renegados, hubieron varias víctimas. Hasta parece que Grigori recibió una demanda, no es sorpresa.
-Bien, creo que eso sería todo. Ahora...*Rias ahora llevaría la situación*¿Qué tal que Asia se presente al grupo Sitri? Es un buen momento.
-Estoy de acuerdo...*Asintió Sona*. Asia-san, mi nombre es Sona Sitri, heredera del Clan Sitri y una Demonio de Clase Alta, igual que Rias, que es mi amiga de la infancia por cierto.
-Es un placer conocerlos...*La Ex-Monja saludaría con una leve reverencia*. Onee-sama me había hablado de ustedes y los había visto por ahí, pero es bueno conocerlos. Llevémonos bien.
-Igualmente...*Las chicas asintieron ante lo dicho por Saji que le alzo el pulgar con una media sonrisa*. También puedes contar con nosotros para lo que sea. Soy Saji Genshirou, por cierto.
-Asia Argento, un gusto.
-En fin, como sabrán, amo la vida que llevo en esta escuela y el trabajo que hago en el Consejo Estudiantil también...*Sona miraría tanto a Issei como a Saji y a Kiba*. Por lo tanto, no voy a perdonar a nadie que se atreva a perturbar la paz de esta escuela ¿Esta claro?*Dijo lo último con voz firme.
Los chicos asintieron ante lo dicho por ella, un poco incómodos por su actitud. El Sekiryuutei aun ahora se pregunta porque ahora las chicas demonios podían llegar a intimidarlo, cuando antes no era así ¿Sera por qué ya los acepto como parte de su círculo social? Puede ser.
-Bueno, hasta la reunión oficial entre clanes demoníacos, Sona.
-Lo mismo digo, Rias...*Si, normalmente el par de hermanos no se meten en esas reuniones que son más asuntos del lado demoníaco. Esta fue más una que involucro a todos los que cuidaban esta ciudad*. Y siendo que ya hemos hecho lo que veníamos a hacer, pasamos a retirarnos.
Al decir eso, Sona se daría la vuelta y comenzó a caminar hacia la salida, siendo seguida por sus siervos, que también se despedirían de ellos.
-Bien, entonces.... Asia, debes llevarte bien con tus otros compañeros Demonios del Clan Sitri ¿Entiendes?*Dijo Rias.
-E-Entiendo...*Respondió Asia.
-Por cierto Ise, Sayumi ¿Puedo pedirles un favor?*Les pregunto Rias.
-¿Y ese sería...?*La joven mujer alzo una ceja en duda.
-Es que mandare a remodelar el club y necesito un sitio para reunirme y dar el informe del mes.
-En parte lo considero una excusa para que vayas a nuestra casa, cuando puedes hacer esto en la tuya...*Al ver a Rias hacer un puchero, Issei soltó una risita*. Je. Está bien, tampoco es que tenga problemas.
-Conociendo a mama, le gustara que allá más visitas aparte de las de tus novias.
Sayumi rió un poco divertida al ver las reacciones de las chicas al igual que Kiba, mientras que Issei suspiraba derrotado...
Siente que sus problemas con las mujeres nunca cesaran.
----------------------------------
-Entren y siéntense como en su casa.
-Okaa-san, ya llegamos.
Eso fue lo que dijeron Issei y Sayumi que eran seguidos por el grupo Gremory, entre los cuales Akeno se mostraba algo ansiosa y trataba de no sonreír tanto, cosa que extraño a Rias, Asia y Koneko, mientras que el castaño entendió un poco el porqué.
Pero lo que pasó al entrar es que había visitas en la casa, una persona que nadie conocía aparte de Issei y Sayumi.
Lo primero que vieron fue a una pequeña chica rubia que iba corriendo hacia donde Issei.
-¡Chichiue!*Exclamo ella mientras lo tacleaba.
El grupo Gremory se quedó mudo a lo que dijo la chica, nadie podía decir una palabra ante la impresión.
-Kunou, contrólate...*Fue la voz de una mujer que llegaría con ellos*¿Cómo estas anata?
-Bien, no te preocupes Yasaka.
Rias y su sequito aún estaban mudos por esto y más al ver a Issei besar con cariño a la mujer rubia con características de zorro llamada Yasaka, que al verlos los reconoció y rió un poco burlona al verlos aun mudos.
-Un gusto conocerlos, grupo Gremory. Mi nombre es Yasaka, líder la facción de los Youkais de Kyoto y una de las mujeres de Ise...*Lo decía con orgullo y una sonrisa.
-¿¡Queeeeeeeeeeeeeeeee!?
Si, si antes les sorprendió saber que el Sekiryuutei tenía un harem y que al parecer la principal era Suzaku, la prima de Akeno... ahora si estaban completamente en shock de saber que él hasta tiene a la líder de toda una facción como una de sus parejas.
Issei solo suspiro, parece que tendrá que contar demasiadas cosas.
-Juu. Bueno, como oyeron, les presento a mi querida Yasaka. Y esta es Kunou, la princesa de Kyoto...*Acariciaría la cabeza de la mencionada*. Ella sería mi hija en ley.
-¿Hay algo más de lo que nos tengamos que enterar?*Algo rara y un poco celosa, Rias pregunto aquello.
-¿Quién sabe?*Issei miro para otro lado con una risita*. Oh, por cierto Yasaka, es raro que vengas en días como hoy, ya que tiendes a venir los fines de semana ¿Estas libre?
-Por supuesto anata...*Mientras hundía su brazo en sus grande pechos, ella le daría otro beso que este correspondería*. Ahora ¿Qué tal si salimos?
-Nunca me negare a eso. Vamos de una vez...
Dicho eso, Issei y Yasaka se irían del lugar sujetados del brazo, ante la mirada aun incrédula del grupo Gremory y la divertida de la familia del castaño.
-Con eso pueden darse una idea de que mi Otouto no tiene límites en su rango de mujeres...*Si es cierto lo que dijo Sayumi, no quieren imaginarse quien más estaba con él.
-Sniff. Algo de lo que estar orgulloso...*Gorou, como siempre, lloraba de la envidia, pero feliz de que sus hijos hayan logrado lo que él no pudo*¡Ay!*Cayo al suelo por el golpe de su esposa.
-Bueno ¿Qué tal si nos presentamos?*Asintieron de acuerdo ante lo dicho por Miki.
Sin duda, la vida del actual Sekiryuutei era más interesante de lo que esperaban.
----------------------------------
En otro lado...
-Padre Abraham ¿No cree que es muy extraño que no haya nadie vigilando la entrada?
-Justo pensaba eso Hermana Mirana.
En una de las sedes de la Iglesia que contenía una bóveda especial, un Sacerdote ya en sus treintaitantos y una joven Monja en sus 15-16 años miraban los alrededores alertas al notar algo fuera de lugar.
No es nada normal que no haya guardias en las bóvedas especiales de las Iglesias. De hecho, tampoco fueron recibidos por nadie cuando llegaron. Pensaron que los estarían esperando en la bóveda para darles lo que vinieron a buscar, pero...
Seguirían avanzando hacia donde debían ir con la guardia en alto, uno con su espada y la otra con su magia sagrada lista.
Cuando ambos llegaron a la zona de la bóveda, notaron que una de las paredes estaba manchada y... al acercarse, encontraron algo que nunca esperarían...
Enfrente de ellos se encontraba una verdadera masacre, exorcistas de los mejor entrenados, completamente asesinados. Las paredes manchadas con la sangre de aquellos infortunados guardias, algunos con partes faltantes de su cuerpo, otros abiertos en canal y uno que otro con un simple corte en el cuello, lo mismo para las monjas que veían.
Este era el trabajo de un experto que rayaba en la locura; eso era lo que dedujeron ante tan dantesco escenario.
El Sacerdote le indico a su acompañante que se mantuviera en guardia mientras revisaban la bóveda, y...
-La espada no está...*Fue lo único que dijo la chica al ver que esta misma no estaba en su pedestal*¿L-La robaron?
-Así parece niña... así parece...
Sentían que algo malo estaba por pasar o que algo podría cambiar pronto...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro