Espero que les guste~

Nota: Branch funciona como una especie de Santa Claus, repartiendo regalos una vez al año, en una sola noche

Nota-2: Se suponía que esto era para Navidad pero me desvíe y lo olvidé, aunque decidí terminarlo de cualquier manera

Nota-3: ¡Feliz año nuevo, mi gente!

Hay mucha emoción en el pueblo, los trolls del pop lucen más animados de lo usual mientras decoran y organizan, llamando la atención de las demás tribus, quienes lucen curiosas y confundidas, aunque ayudan en lo que pueden de igual manera.

La reina les habla de alguien al que llaman "El Generoso", un troll desconocido y misterioso que recorrió el pueblo en años anteriores, dejando obsequios para todos. Luce preocupada mientras habla, comentando que en ese año son muchos más trolls que antes, pidiendo paciencia por si los regalos no llegan esa misma noche.

Eso emociona a muchos, en especial a los de otras tribus, quienes parecen más entusiastas a la hora de decorar sus hogares.

-¿Un troll qué entrega regalos a todos?- John Dory no puede negar que esta un poco curioso ante el concepto. -Eso es nuevo- tarareo.

-¡Y en una sola noche!- Bruce, que había logrado llegar a un acuerdo con su esposa para estar de visita, hizo una mueca. -No puedo imaginar como va a quedar el pobre troll que hace algo así- se sentía mal, podía imaginar las grandes y marcadas ojeras que tendría "El Generoso".

-Yo digo que es imposible- Clay de cruza de brazos, haciendo cálculos mentales. -Hay demasiados trolls aquí, todos diferentes, en lugares demasiado alejados entre sí. Podía tardar mucho más que una sola noche entregar tantos obsequios-

-Imposible o no, creo que es muy noble que alguien se tome el tiempo de escoger regalos y entregarlos- Floyd no puede negar que esta enternecido ante la idea.

En la mañana siguiente, Floyd se despierta, sorprendido ante el regalo que lo espera en suelo de su cuarto, envuelto en papel rojo y con lazo verde, su nombre escrito en una nota con letra pulcra y elegante.

-Oh...- lo abre y se encuentra con pendientes, todos de diferente color y modelo, uno incluso tiene una cara sonriente dibujada y por alguna razón, lo hace sonreír. Se quita el suyo y toma uno de ellos, de color azul perlado, para colocarlo en su lugar. Se mira en el espejo del baño, sonriendo con encanto, moviendo apenas la oreja. Es ligero, mucho más que el suyo habitual. -¡Branch!- sale de su cuarto apenas se cepilla los dientes, demasiado emocionado como para cambiarse la pijama. -¿Recibiste un regalo tu también?- se sorprende al ver la sala vacía y va a la cocina, frunciendo el ceño con ligera confusión al ver que ni siquiera la cafetera esta encendida. Es raro, su hermano es un madrugador. -¿Branch?- se acerca a la puerta del cuarto ajeno, dudando un poco en tocar, solo para voltearse ante el sonido del ascensor.

Se sorprende al ver a sus hermanos allí.

-¡Mira esto, hermano!- John Dory se adelanta con entusiasmo infantil, dándole la espalda para mostrar la parte trasera de su nuevo chaleco. Ahí esta la imagen de Rhonda, con una gran sonrisa animada, acompañada de las palabras "gran viajero" escritas con letras grandes y llamativas.

-Es encantadora- el menor entre ellos ríe, divertido. Quien sea "El Generoso" había tomado una gran decisión al regalarle algo al mayor con Rhonda allí, él la adoraba.

-¡Es asombrosa!- rio, volteandose con orgullo. -Sea quien sea este troll raro, debo decir que le debo algo de respeto...- su sonrisa es grande y no parece que nada pudiera bajar su ánimo. -...hasta Rhonda recibió un regalo- una gran caja con diversidad de frutas que ella estaba disfrutando en ese momento.

-Eso es fantástico- se mueven para acomodarse en la sala, sentados cómodamente. -¿Y a ti?- mira al segundo mayor.

-Productos para mi cabello- Bruce se acaricia una parte de su larga cabellera, luciendo encantado, casi soñador. -Debo decir que "El Generoso" tiene un gran gusto- los presentes bufan con cierta diversión pero no comentan.

-¿Y a ti?- miran al último hermano, quien tiembla de emoción apenas contenida.

-Es el último libro de la saga que estoy leyendo- los ojos de Clay brillan, aferrándose al libro que se negaba a soltar desde que lo saco dea caja. -No puedo esperar para poder leerlo- lo abraza contra su pecho, entusiasmado.

-Bonito arete, hermano- John decide comentar apenas lo nota, contento de verlo animarse.

-¡Gracias!- esta encantado.

-¿Y Branch?- el de cabello violeta llama la atención sobre la falta de uno de sus hermanos, curioso. -Me gustaría saber que le regalaron- en espacial para tener referencias para el futuro.

-Oh, iba a ir a verlo, creo que aun no se levantó- el de cabello rosa se levanta, volviendo a la puerta del menor, con los demás siguiéndolo de cerca. Toca pero no obtiene respuesta y cuando abre, se encuentra con la habitación limpia, la cama ordenada y sin rastros de su hermanos.

Se miran entre ellos, con múltiples ideas corriendo por sus mentes, solo para voltearse ante el sonido del ascensor y correr, su esperanza muriendo al ver a la reina en vez de a quien buscaban.

-¡Hola chicos!- Poppy luce tan animada y feliz como siempre pero hay algo en ella que hace sospechar a los hermanos que hay algo mal. -Espero no molestarlos, solo...vine a ver a Branch- su sonrisa flaquea, con algo nervioso y ansioso en su postura.

-Él no está- negó Bruce con una mueca.

-Oh...- ella acarició su vestido. No luce en pánico, aunque aun hay preocupación.

-¿Qué esta pasando?- JD decide preguntar, frunciendo el ceño, algo desconfiado. Su instinto dice que la reina les está ocultando algo, algo relacionado con su hermano desaparecido. -¿Sabes algo que nosotros no?- los demás lucen confundidos pero se voltean a verla, la troll encogiendose un poco ante la atención por primera vez en su vida.

-Yo...- hace una mueca, retorciendose en su lugar, luciendo como si estuviera a punto de explotar. -...¡No pueden decirle a nadie!- termina por chillar. -Le prometí a Branch que no le diría a nadie pero ustedes son sus hermanos...- los señalo. -...y yo estoy super preocupada porque todos los trolls recibieron sus regalos...- sigue divagando pero habla tan rápido que es difícil entenderla.

-¡Poppy!- Clay es quien decide acercarse, tomándola por los hombros como lo haría con Viva, mirándola con seriedad. -Necesitas respirar- ordena con amabilidad y ella no le queda otra que obedecer, dejando entrar una gran bocanada de aire, él retrocediendo cuando empieza a respirar con normalidad.

-Cierto, cierto- acarició su vestido, en un gesto nervioso, y levanto la vista para mirarlos. -No pueden decirle de esto a nadie- es suplicante pero sería al mismo tiempo. -¿Lo prometen?- sus ojos brillan con esperanza.

-Lo prometemos- ellos no dudan, con la curiosidad inundandolos queriendo cual podría ser el secreto que su hermano querría ocultar de todos.

-Branch es "El Generoso"- suelta antes de poder arrepentirse, sintiendo una punzada de culpa. Su mejor amigo estaría muy enojado con ella. Mientras tanto, los hermanos parpadean, sorprendidos ante eso. -Él hace esto cada año, me dijo que era una forma para sentirse parte del pueblo mientras era gris y nunca pudo detenerse porque todos están tan felices con este día...- hace grandes gesto, apenas notando como ellos comparten una mirada preocupados y culpables por igual. -...pero estoy preocupada- admitió. -Le entrego un regalo a todos los trolls de Trollstopia, a cada uno de ellos, y temo que haya ido más haya de su límite- hizo una mueca.

-Oh...- Clay acaricia la portada de su libro con dedos cuidadosos, encantado, iba a tener que agradecerle en cuanto lo viera.

-Oh, Branch...- el de cabello rosa acaricia suavemente el pendiente azulado que se puso, con un nuevo significado detrás, sintiendo su corazón estremecerse con encanto.

-Debi imaginarlo- Bruce sonrió, suave y cariñoso, queriendo abrazar a su hermano en ese mismo momento.

-¿Sabes dónde esta?- JD se siente ansioso, queriendo abrazar al bebé con fuerza y no soltarlo por un tiempo.

-Sip- camina con decisión. Los guía hasta una puerta usualmente cerrada con llave pero que en ese momento se abre, mostrando lo que parece ser un cuarto de trabajo, con una colección de herramientas colgadas en la pared y el mismo papel de los regalos esparcido por el suelo, con Branch sentado en la silla, la cabeza apoyada en sus brazos cruzados sobre la mesa y roncando. -¡Branch!- llama y la reacción es instantánea.

-¡Estoy despierto!- él se endereza de golpe, solo para perder el equilibrio y caer entre el montón de papel para envolver que esta esparcido por todo el suelo. Los presentes hacen una mueca al escucharlo quejarse, con Clay y Floyd acercándose para ayudarlo a levantarse, preocupados ante su estado. Se ve agotado, un poco pálido y despeinado, luciendo como pudiera quedarse dormido de pie en cualquier segundo. -...estoy...despierto...- bostezo ampliamente, parpadeando lento y pausado.

-¿Hace cuanto no duermes?- John Dory se acerca, acunando la mejilla ajena para hacerlo alzar la vista, frunciendo el ceño apenas ante los ojos cansados y adormilados que le devuelven la mirada.

-¿Qué día es hoy?- bufo, perdido, ignorante de la preocupación ajena. Sus ojos recorren a su alrededor hasta detenerse en uno de sus hermanos por unos segundos, una lenta y tonta sonrisa dibujandose en su rostro. -Floyd~- se inclina hacia él, sin darle otra opción al mayor que sostenerlo lo mejor posible. -¿Te gustaron?- sus dedos torpes rozan el arete azulado que el otro tiene puesto.

-Los amo- sonrió con cariño, acortando la distancia para dejar un ligero beso en la frente ajena, escuchándolo reír apenas.

-Hola bebé Branch- el tercer mayor se mueve para estar frente a los ojos azules, sonriendo con diversión ante la expresión ajena.

-Clay~- tararea, bajando la vista apenas cuando la pulsera en su muñeca se ilumina. -¡Es hora de abrazar!- extiende sus manos hacia el mayor en una clara petición que el mayor no desaprovecha. Lo toma entre sus brazos y lo dejo apoyarse en su hombro, escuchándolo tararear una melodia al azar, cerrando lentamente los ojos.

-¿Quieres dormir, Bitty B?- Bruce se inclina para ver, recibiendo un murmullo difícil de entender, sonriendo con cariño mientras pasa una de sus manos por su cabello oscuro. -Puedo hacer un nido para que duerma más cómodo- parece ya estar planeado hacerlo.

-Oh, esa es una gran idea- JD se anima ante eso, queriendo un turno para sujetar al menor.

-Branch se pone algo...pegajoso cuando esta muy cansado- Poppy los mira con curiosidad. -¿Ustedes se encargan o quieren que traiga a Cooper? Él siempre está dispuesto a acurrucarse- les da la oportunidad de elegir.

-Nosotros nos encargamos- ella sonríe ante eso, contenta de irse, dejando a su mejor amigo en las manos de sus hermanos para cuidarlo.